♥︎ 𝐊𝐚𝐭𝐬𝐮𝐤𝐢 𝐌𝐮𝐫𝐚𝐤𝐚𝐦𝐢 シ︎

Salí de la habitación de vigilancía con el rostro lleno de lágrimas, no podía creer lo que estaba sucediendo, Niragi, aquél que prometío serme fiel, amarme y protegerme con su propía vida me engañaba con otra chica.

Mientras caminaba hacia mi habitación perdí el equilibrio y caí al suelo de rodillas dejando que el llanto dentro de mi creciera y se hiciera presente en el exterior.

- Por Dios Katsuki ¿Qué sucede? - Escuché la voz de Kuina para luego sentir sus manos en mis hombros.

Yo no decía ni una sola palabra, solo la abrazaba dejando que el llanto aumentara.

- Vamos a tu habitación.

Me ayudó a levantarme del suelo para llevarme a mi habitación.

- ¿Puedes decirme qué pasa? - Preguntó cuando me encontraba más tranquila.

- Niragi me engaña. - Intenté controlar el llanto.

Kuina me miró con una expresión de tristeza, compasión y ¿Culpa?

- Katsuki. - Se sentó a mi lado para abrazarme. - ¿Estás segura?

- Chishiya me mostró una grabación, en uno de los pasillos estaba él besando a otra chica.

- ¿Y qué harás? - Preguntó secando mis lágrimas.

- Chishiya me aconsejó no decirle nada hasta que llegue el momento en el que no pueda negarlo.

- ¿Seguirás quedandote en su habitación?

- Intentaré aunque no creo lograrlo.

- Yo estaré para ayudarte en todo lo que necesites, puedes ir a mi habitación cuando gustes.

Yo sonreí en agradecimiento.

Era de noche y me encontraba sola en mi habitación, estaba recostada en el sofá que estaba junto a la ventana mirando el cielo estrellado a través de esta.

- ¿Katsuki? - Escuché la voz de Niragi luego de que la puerta de mi habitación se abriera. - Lamento nuestra discusión de hoy, no quería gritarte. - Escuché sus pasos avanzar hacía mi.

- ...

- De verdad no quiero discutir contigo Katsuki. - Se recostó a mi lado en el sofá abrazandome por la cintura. - Te amo como no tienes idea y detesto estar distanciados, no quiero perderte por algo tan insignificante como lo es Chishiya.

Al escuchar sus palabras solo sentí un fuerte estrujón en mi pecho. Quería decirle todo, quería gritarle cuanto lo odiaba por engañarme mientras me prometía su vida entera.

- Lo sé - Dije tratando de disimular mi voz quebrada.

- No quiero que llores por mi culpa. - Besó mi cabeza. - Por favor, perdoname. - Hizo que me diera medía vuelta para verlo. - No sabes cuanto me odio por hacerte llorar, por haberte gritado. - Acaricio mis mejillas mientras con sus pulgares limpiaba los restos de las lágrimas.

- Yo te amo Niragi. - Levanté la vista para verlo diractamente a los ojos.

- Yo te amo Katsuki. - Besó mis labios por lo que no pude evitar soltar más lágrimas.

Deja de metir.

- Te amo y no dejaré de hacerlo Katsuki, te amo y siempre lo hice, incluso antes de conocerte, siempre pensaba cuál era tú comida favorita, tú gesto favorito, tú canción favoria, como era tú forma de ser y de vestir, como erán tús ojos y tú cabello. Siempre te amé, siempre te amo y siempre te amaré.

Ya basta por favor, deja de lastimarme.

No sabía que decir, solo podía recordar aquella imagén de él y esa chica, solo podía pensar en cuantas cosas que me dijo a mi le habrá dicho a ella.

✿𝐍𝐢𝐫𝐚𝐠𝐢 𝐒𝐮𝐠𝐮𝐫𝐮ツ

- Niragi. - Sentí como tocarón mi hombro.

- ¿Qué pasa? - Pregunté para ver a Jefe final.

- Sigues distrayendote. - Me miró tratando de decifrar que erá lo que me desconcentraba. - ¿Es tú chica?

Yo negué, no me gustaba comentar cosas de mi relación con nadie, mucho menos ahora que las cosas estaban cambiando, ahora ella era distante, la conocía y sabia que fingía su cercanía, sabía que ella no estaba bien, pero tampoco me daba señales de querer contarme.

- No es nada, solo recordaba algunas cosas, mejor sigamos con las rondas.

- ¿Seguro? - Me miró poco confiado.

- Sí, continuemos.

Jefe final no menciono ni una palabra más por lo que seguimos con nuestro trayecto, ibamos por uno de los pasillos que intercectaba con otros dos, estábamos llegando a la intercección cuando ví a Katsuki salir de una de las habitaciones mientras sonreia y acomodaba su chaqueta, la habitación de la cuál salía era la de Chishiya, no me detuve para no levantar sospechas por parte de Jefe final, por lo que seguí caminando logrando ver como ella lo abrazaba con una sonrisa.

¿Es por él que ella se comporta distante?

Pasó el día y no podía dejar de pensar en Katsuki y Chishiya. Llegué a mi habitación luego de un último recorrido viendo a Katsuki acostada en su lado de la cama, al parecer dormida ya que solo la luz de mi lampará estaba encendida y ella se encontraba debajo de las cobijas de la cama. Con sumo cuidado de no hacer ruido dejé mi arma en su lugar, al igual que mis zapatos y me cambie de ropa, apagué la luz de mi lampara y me acoste en la cama con cuidado para acercarme a Katsuki y abrazarla acercandola a mi cuerpo.

Con cuidado comencé a acariciar su cabello mientras escuchaba su respiración, lenta y tranquila.

- Hoy te ví - Dije en un tono suave intentando ser silencioso - Estaba haciendo rondas cuando te ví, igual o más hermosa que siempre, aun debato cual de las dos.

Decidí no mencionar a Chishiya queriendo olvidarme de él.

- Te amo Katsuki, y aunque nuestras discusiones cesaron ahora eres distante, no entiendo el porque si solo te he demostrado mi amor y devoción hacia ti. - Dejé un beso en su hombro. - Solo quiero que seas honesta conmigo como yo lo he sido contigo.

Sentí como se removio un poco en la cama para luego girarse quedando frente a mi, sus ojos estaban cerrados, sus labios formaban una pequeña sonrisa, su respiración seguía siendo lenta y calmada.

- Yo también te amo Niragi. - Susurró entre sus sueños, yo sonreí.

Acaricié con delicadeza su mejilla para acercarme a sus labios y besarlos delicadamente.

- Descansa preciosa. - Susurré cerca a sus labios.

Durante el resto de la noche me dediqué a abrazarla y darle pequeñas caricias que no fueran a despertarla.

De verdad te amo Katsuki, y lucharé por ti con mí propia vida.

𝐀𝐊𝐉𝐌

Normalmente nos dejamos cergar por lo que vemos primero, pero no siempre es la historia completa, por lo que hay que ser detallistas o solo iremos juzgando por la vida sin saber.

Los amo.