JiMin, había logrado alcanzar el bus por lo cual iba bastante cómodo en los asientos de este. A su lado, se encontraba una joven mujer de cabello castaño. Esta leía un libro que al parecer era muy interesante ya que JiMin leía también de reojo.

Estaba tan concentrado en la lectura que la mujer cerró el libro con fuerza haciendo que este se exaltara.

—Espero y te haya gustado la lectura. —dijo ella sonriendo.

—Ah... —JiMin se rascó la nuca. —Lo siento, de verdad es muy interesante. ¿Puedo saber cómo se llama el libro?

—The quiet boy. El autor es Nick Antosca. —respondió ella haciendo que JiMin asistiera.

El autobús frenó y sonó la campana para avisar que había llegado a una parada.

—Aquí me bajo yo. —se levantó de la silla. —Ojalá nos encontremos otro día y hablemos del libro.

JiMin sonrió amigablemente y se percató que estaba frente a la universidad. También se levantó de la silla.

—Yo también me bajo aquí. —dijo él.

—Oh, entonces vamos juntos. —invitó amigablemente.  —Nunca te había visto tomando el autobús o en la universidad. —dijo ella.

Los dos bajaron del autobús y se dirigieron a la universidad.

—Es mi primer día aquí y ya voy tarde a mi primera clase. —dijo el pelinegro.

—Yo también voy tarde. —sonrió. —¿Qué clase es?

—Anatomía. Soy de la facultad de medicina.

Ella asintió.

—Bien, si sigues derecho y entras al edificio. En el piso 3 queda la facultad de medicina y anatomía sea da en el salón 302.

—Muchas gracias de verdad. —dijo JiMin. —Tal vez no veamos luego, adiós. —se despidió con la mano y corrió tomando las indicaciones que ella le había dado.

JiMin, entró por las grandes puertas del edificio y sintió un nerviosismo devorarle el cuerpo. No era la primera vez que iba a una universidad, pero se sentía diferente. Había abandonado la carrera hace cuatro años atrás y hasta ahora que quiso retomarla.

Aceleró el paso caminando dentro del edificio y buscó tal vez un ascensor que lo llevara al tercer piso como la mujer le había indicado. Para su suerte, encontró uno cerca de las grandes escaleras que se encontraban en el edificio. JiMin, se apresuró y corrió hacia este para llegar más rápido a su salón.

Apretó el botón y esperó a que este bajara. Sintió su teléfono vibrar en su bolsillo, pero cuando lo iba a sacar para mirarlo, la campana del ascensor llamó su atención.  JiMin, levantó la mirada a las puertas del ascensor las cuales se abrieron dándole paso a este.

Entró y vio los botones con número del 1 al 6. JiMin, oprimió el 3 y las puertas se cerraron automáticamente. Soltó un suspiro algo nervioso y sintió su corazón golpear sus costillas. ¿Por qué estaba tan nervioso? Quizás debía ser porque tenía bastante rato que no estudiaba e iba a la universidad.

Las puertas se abrieron al llegar al tercer piso. El pelinegro salió de este encontrándose con bastantes estudiantes merodeando y charlando por el edificio. Quería ver más de la universidad, pero no había tiempo suficiente, tenía que encontrar el salón 302.

Se puso en marcha y se acercó al pasillo de salones observando los pequeños letreros que estaban pegados en cada puerta con los números de salón. JiMin, observó tres puertas y al llegar a la cuarta, vio el número 302 en le letrero. Había llegado a al lugar.

La puerta estaba cerrada, así que él la abrió despacio y asomó su cabeza para observar su interior. Varios estudiantes ahí dentro notaron la presencia de JiMin y lo miraron haciéndolo sentir incómodo. El pelinegro tragó duro y abrió del todo la puerta para entrar y se dio cuenta que no había ningún profesor, así que aprovechó y entró al salón cerrando la puerta —aún con las miradas de muchos puestas en él —y se acercó al primer asiento vacío que encontró. Este estaba al final del salón.

JiMin, dejó el bolso en el suelo y se acomodó en su pupitre mirando hacia el frente tratando también de ignorar las miradas inquietantes de los demás estudiantes.

—¿Eres nuevo? —preguntó a su lado un chico de voz algo gruesa. —Nunca te había visto por aquí.

—Oh, hola. Sí, estoy de intercambio. —dijo JiMin.

El chico de cabellos oscuros asintió y le sonrió.

—Soy TaeHyung, un placer. —le extendió la mano a JiMin.

—JiMin. —la estrechó este y la soltó. —¿Siempre llega tarde el profesor?

—Por lo general sí. —dijo TaeHyung. —Debe llegar en 5 minutos más o menos.

El pelinegro asintió y sacó su teléfono de su bolsillo para revisarlo.

+82 678 568 0309

↪Oye JiMin. ¿Te acuerdas que seguimos con el juego de ganarme tu confianza?

JiMin, arrugó el ceño al ver el mensaje de un desconocido.

¿Quién eres? ↩

↪Ahora te haces el que no sabes.

Se asustó por la respuesta rápida.

↪¿No agendaste mi número.

Lo siento, no sé quien me habla. ↩

↪YoonGi.

¿Desde cuándo tienes mi número? Nunca te lo di. ↩

↪Bueno, digamos que cuando te quité el teléfono ayer. Me llamé y guardé tu número para alguna emergencia.

¿Y esa emergencia es? ↩

↪Que me tengo que ganar tu confianza como sea. Hasta por mensaje si hace falta.

Voy a entrar a clases. ↩

↪¿No quieres contarme algo?

¿Cómo qué? ↩

↪No sé... Tal vez una historia de ti... De tu pasado.

¿Para qué? ↩

↪Estás de grosero ya. Solo estoy diciendo.

No entiendo el motivo de tu mensaje, YoonGi. ↩

↪Pienso que no deberías juzgarme a mí a otros por lo que aparentamos. Apuesto que aún no te analizas en el espejo.

A JiMin se le erizó el vello al leer eso.

¿De qué estás hablando? Ni te conozco bien y estás diciendo locuras. ↩

↪

Eso también me lo pregunto yo. ¿Con quién estaré hablando? ¿Quién eres tú?

JiMin, se lamió los labios nervioso.

↪¿Sabes? Solo ha pasado un día de tu llegada  y siento que no encajamos. Creo que debemos poner reglas.

Estoy ocupado ahora. Tal vez te dirija la palabra cuando llegue la casa. ↩

↪Como sea. De igual, recuerda que me deber es ganarme tu confianza y espero que tu también quieras ganarte la mía para hablar profundamente de nuestras historias. Muy ocultas... Muy en el fondo.

JiMin, bloqueó el teléfono y pasó saliva. ¿Por qué YoonGi estaba tan insistente? Apenas se conocían y ya estaba insistiendo en ganarse la confianza de JiMin. Era muy extraño.

—¡Siento el retraso, chicos! —la puerta del salón se abrió dejando ver a una mujer rubia. JiMin quedó boquiabierto al ver que la mujer que era su profesora, era la misma con la que había ido en el bus. —Tenemos un alumno de intercambio hoy. ¿Dónde estás?

JiMin, se levantó de la silla incómodo mirando a la profesora.

—Él es Park JiMin. —señaló. —Espero y te lleves bien con todos. —ella dejó algunos libros en su escritorio.  —Como tenemos 10 minutos perdidos de clase, empezaré con lo básico de la materia...

JiMin, volvió a sentarse y se frotó el rostro apenado. Abrió  su bolso que estaba en el suelo y sacó una libreta junto con un lapicero para empezar a anotar lo que la mujer empezaba a escribir en el tablero.

El teléfono de JiMin volvió a vibrar, pero  esta vez en la mesa del pupitre haciéndo que su corazón diera un vuelco. La pantalla  se encendió dejando ver un mensaje de YoonGi. El mundo se le cayó a los pies al leer lo que decía.

+82 678 568 0309

↪Clyon, ¿Eh? Lindo apodo. Ni yo sospecharía de ti con el nombre que tienes ahora.

↪O... ¿También es falso?

C - Catafilia
L - Leptosadismo
Y - Voyeurismo
O - Omolagnia
N - Nafefilia

El por qué del "Clyon" 🍭

Y sí, amix, HoSeok si tenía razón con el JiMin uwu.

3/3

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ACLARO: Las filias mencionadas son gustos o atracciones que puede llegar a tener el personaje a medida que avanza la historia.