Ansioso por arribar a nuestro hogar, repentinamente me dispongo incoherente y con una rara sensación entre la multitud de cambia formas que me flanquean. ¿Y si no le agrada? ¿Y si le parece demasiado? ¿O desmesuradamente súbito?

Perdido entre los recónditos rincones de mi psique traicionera, que por un lado me alienta desesperadamente a implorar al Omega que sanó mis aflicciones por una vida eterna, y por el otro, me devuelve realidades juzgando mi escasa paciencia. Y eso, sumado a mi inquieto y desesperado lobo que no me deja meditar en paz.

Llevamos viviendo juntos algo más de un mes. Y cada día de mi vida a su lado es como un ensueño... y estoy casi seguro que el sentimiento es mutuo.

"Tan malditamente perfecto, que aterra"

Asusta no poder ser lo suficiente cada día. Pero mi coraje es tal, que contra todo pronóstico me dictamino idóneo, capaz y competente.

Al final de cuentas, la vida es esto ¿no?

Morar aunque el miedo te domine. Porque es mejor vivir una vida con miedo a perder, que nunca haberse atrevido a vivirla...

Anterior a recoger mi encargo, me encontré con mis padres. Mi Omega madre, asfixiante con sus abrazos, me envolvió como un gran cachorro al guardarme (según ella) "tan bien". Llorando a lágrima viva delante de todos los licántropos en el café. Y el Alfa impoluto de mi padre, consolando a su manera, aunque de soslayo pude observarle más de unas lágrimas correr.

Y es muy gratificante ser portador de buenas nuevas, porque entre tanta mierda que habité... Yo sobreviví.

Resguardo mi fascinación en el fondo del bolsillo de mi chaqueta, rumbo hacia mi motocicleta y en dirección, a mi hogar.

Ajustando mi casco, mi móvil comienza a vibrar incesantemente. Y rebuscando dentro de mi pantalón, lo tomo observando el destinatario de mi llamado: "Mi eterno cachorro" Y sonrío para mis adentros al meditar su cara cuando se percate de como lo he agendado.

Así que desajustando el casco, procedo a retirarlo con el fin de responder <¿Extrañándome, cariño?>

<N-no soy Jimin, Jungkook. Soy Jin, no te alteres pero... >

<¡Dime ya que pasó, Jin!>

<Jimin está internado en el hospi... >

Finalizó la llamada sin esperar ni un segundo más. Y a toda velocidad -como un desaforado- me dirijo al hospital.

Una vez que arribo, me encuentro en la puerta con mi amigo Nam que de inmediato procede a tratar de calmarme sin ninguna eficacia.

—¡Maldición Nam! No me jodas, necesito ver ahora a mi Omega —dicho esto, me abro paso hasta la habitación en que se encuentra.

Mi lobo está actuando como un maldito vesánico, en vez de estar angustiado parece gozoso...

—¡Amor! —comenta mi pálido Omega, con sus orbes denotando el borde de un incipiente llanto y con Jin a su costado.

—¡Cariño! Aquí estoy, ¿cómo no vas a llamarme si no te sentías bien? —anuncio envolviéndolo entre mis brazos al llegar a su lado, mientras susurra bajito: "Lo lamento amor, no te quería preocupar... "

—¿Qué tienes? ¿Estás bien? ¿Qué sucedió? —desesperado consulto a lo cual, mi Omega, me dice que me tranquilice, que ahora se siente bien.

—Los dejo solos, luego regreso —comunica su amigo y entonces aprovecho y lo observo más detenidamente, notando de que están colocándole suero.

—Dime que pasó cariño —seriamente encaro a mi Omega. Preciso saber.

—Estaba en la emisora y de repente, comencé con vómitos que no cesaron y -aparentemente- me deshidrate.

—¡Pero no dijiste nada cariño! Supuestamente, te habías intoxicado con la mescolanza de comidas raras que haces. Pero estabas bien, o eso me manifestaste ayer —indignado le confieso mientras acaricio sus cabellos —¿Te han sacado sangre? —consulto.

—Sí Alfa, para analizar por si no hay alguna enfermedad de base. También me preguntaron por mi historial y Jin les habló de mi reciente celo. Así que me están hidratando con suero, en fin, eso nomas —comunica con total liviandad y no puedo creerlo.

—¿Omega?

—Dime Alfa...

—Sea lo que sea, estamos juntos en esto ¿sí? Eso, tenlo por seguro. Te amo cariño... —acuno su hermoso rostro entre mis manos y lo beso apaciguadamente.

Él, repentinamente solloza, estrujando mi sensible corazón y entonces lo abrazo, firmemente, transmitiendo todo lo que puedo de mi magno amor hacia él.

—¿Mejor cariño? —pregunto acariciando con suma suavidad sobre su espalda, entre tanto descanso efímeros roces con mis labios en sus cabellos.

—Algo amor, pero dime... ¿Cómo resultó el encuentro con tus padres? —eleva su rostro prestándome total atención.

—¡Mucho mejor de lo que esperaba! Mi hermoso Omega.

Comienzo a redactar el suceso desde el principio, detallando los ademanes de mis padres entre ellos, también sobre la fortuita ración de abrazos exagerados de mi madre. Observando, con deleite, cómo su amplia sonrisa ilumina la habitación perdiéndose sus ojitos en dos finas líneas.

Y me invade un confort inesperado llenando, velozmente, mi corazón de calidez. Sintiéndome, sorpresivamente, sobrepasado de sensaciones...

"Estoy completamente enamorado de ti, mi Omega"

Vicioso en cada uno de los movimientos de su bello rostro, me percato de que me observa con un brillo especial en sus ojos.

Y capturado en mi estado de total plenitud y dicha (y furiosamente sonrojado) procedo a retirarme la chaqueta con el fin de disminuir mi incipiente sofoco. Apoyando la campera sobre el respaldo de la silla contigua a la cama...

Pero, entonces, se escucha un sonido y posterior ruedo de un estuche sobre el piso...

Mi Omega, direcciona su mirada y extendiendo sus orbes anhelantes me observa enmudecido en un principio...

—¿E-eso... es... lo que creo que es? —susurra levitando sus pequeñas manos hacia su pálido rostro, completamente sorprendido.

Entre cavilaciones y sin escapatoria ante mis hechos (y totalmente congelado en mi sitio) Maldigo una y mil veces por mi torpe descuido. No era este el momento. Debía ser un momento espec...

—¿Alfa? ¿Me vas a proponer matrimonio?

Despejando mis pensamientos de mi mente, lo atisbo con su rostro levemente enrojecido y sus labios temblorosos. Sus ojos transmiten tanto... que presiento naufragar en ellos.

Y reaccionando en mi letargo, me inclino a coger mi supuesta fallida sorpresa. E incorporándome a su lado y con mi corazón en ofrenda, le proclamo:

—No debía ser así... Y mucho menos en estas circunstancias... Pero te amo más que a nada en el mundo, y si me concedes el honor de vivir conmigo, a tu lado, y como tu esposo, me harías el Alfa más esplendoroso del mundo, mi hermoso Omega —confieso desplegando el estuche frente a él y conteniendo mis incipientes sollozos.

Él, me abraza con firmeza pero un incesante llanto. A lo cual, inmediatamente, respondo aferrándome a su torso con sumo cuidado.

—T-te amo... t-te amo t-tanto mi Alfa —murmura entre venturosos lamentos —Nada me haría más feliz que tener la dicha de ser tu esposo —confiesa mirándome directamente a mis ojos.

Y con mis orbes rebosantemente acuosas, nos fundimos en un beso apasionado de entrega mutua compartida, donde sus lágrimas de regocijo se mesclan con las gozosas mías.

Pero en un momento, el acceso a la habitación es abierto. Y sin desearlo, nos distanciamos.

—¡Oh! Ya veo que están al tanto —comenta el sonriente Doctor.

—¿Cómo? —pregunto sorprendido.

—¿Acaso, usted... ya sabe? —cuestiona mi Omega, igualmente sorprendido.

—¡Por supuesto que lo sé! Pero debo reprender tu comportamiento Jimin, no debes dejar pasar un cuadro así, no es bueno en tu estado. Pero en fin. ¡Felicitaciones papis! en un par de meses, tendrás tu intoxicación entre tus brazos.

RECUERDEN QUE ESTO UN FIC, PERO EN LA VIDA REAL, SUELEN HABER MILAGROS ¿NO?🥺😍

HABEMUS CACHORRO😭😭😭😭❤

Y SE NOS CASAN🥺😭😭❤❤❤❤

HAW ME MORÍ DE AMOR UNA Y OTRA VEZ🥺😭❤

GRACIAS INMENSAS POR ESTAR, POR APOYAR, COMENTAR Y ESPERO QUE NO SEAN SOLOS PALABRAS VACÍAS LO QUE SE LLEVAN DE ACÁ.❤

ESTAMOS A PASITOS DEL FINAL🥺❤

LOS AMITO MUCHO❤