Jimin al fin salió de su aula para caminar hasta la cafetería de la universidad. Las personas que cruzaban a su lado le sonreían, algunos se frenaban para regalarle paletitas sabor fresa o alguna cosa bonita para él. El joven se los agradecía con su bonita sonrisa, removiendo los corazones de aquellas personas.

Se podía decir que Jimin era popular, pero de los buenos, de los que si necesitaban ser populares. Todos en la universidad lo conocían, era el angelito de la carrera de veterinaria. Había elegido bien, un chico de buen corazón, iba de acuerdo a su carrera, tan gentil y humilde, era muy querido por todos, incluso era demasiado guapo, mujeres y hombres caían enamorados por aquel chico, no sabían cómo, pero Jimin lograba enamorarte con solo mirarte a los ojos. Su inocencia era tanta, que, incluso lo habían intentado corromper, pero eso nunca funcionaba, gracias al cielo las personas de la universidad lo querían y cuando lo notaban en problemas lo ayudaban a salir ileso.

Pero Jimin no podría ser salvado de todos los males en el mundo, estaba en peligro y él no lo sabía.

Su sonrisa iluminó el lugar, las miradas cayeron sobre él. Los chicos que se encontraban en la cafetería le ofrecían comida, sus lugares y también los mejores postres que se vendían en el lugar. Logró llegar a su mesa, sus mejores amigos lo esperaban.

Jeon Jungkook era bueno para todo, era un chico brillante, lograba todo lo que se proponía, incluso lo hacía aún mejor de lo que se establecía. Sabía pelear, había tomado clases de taekwondo y de boxeo, pero no lo ponía en práctica, era muy paciente y nadie se metía con él. Su cuerpo era un regalo para los ojos humanos, sus increíbles y hermosas orbes cafés eran como echarle un vistazo a la galaxia, y su sonrisa era tan preciosa, algunos le decían que era similar a la de un lindo conejo, no le molestaba, pero tampoco lo amaba, aunque no se podía resistir cuando Jimin le recordaba lo similar que era, con aquellas sonrisas angelicales y preciosas.

Jung Hoseok era un chico tranquilo, un alma infantil, no necesitaba de mucho para ser feliz, simplemente no te podías aburrir estando en su compañía. Sus ruiditos eran parte de su vida diaria, era como su propia cajita musical, era bueno bailando, todos sabían lo impresionante y talentoso que él era. Su rostro era hermoso, su forma de vestir era única y a la moda. Tenía el apodo de 'Sol' o 'Solecito'. Era un chico que valía la pena en todos los sentidos posibles. Pero cuando se trataba de defender a sus personas, el solecito desaparecía y la noche llegaba. Podía ser tan serio y dominante, incluso podría ir a los golpes si se trataba de defender a su hermana mayor o a sus mejores amigos.

—¿Ya compraron su comida? —preguntó para sus amigos.

—Sí, compramos la tuya también, sabemos que te quedas hasta el final de las clases para agradecerle al profesor por su trabajo duro a la hora de dar las enseñanzas y también que te quedas para limpiar el aula para que esté más limpia para cuando las clases comiencen. Así que sí, compramos tu comida.

Jimin sonrió agradecido. Ambos chicos sintieron sus corazones agitarse en sus pechos y esa felicidad que solo él lograba en ellos.

—Muchas gracias.

Dijo feliz para comenzar a comer a la par de sus amigos.

[🖤]

Taehyung lanzó su mochila en la mesa que tenía enfrente. Los chicos que comían tranquilos lo miraron con molestia, pero al notar de quien se trataba se pusieron de pie rápidamente, corriendo del peligro. El castaño oscuro se rio mientras tomaba su nuevo lugar en la mesa. Los otros terminaron de llegar, chocando los cinco con el chico.

—Es la primera vez que pasas dos días con ella —dijo Namjoon, refiriéndose a la chica de Yoongi.

El pelinegro hizo un ruido con su boca para seguir comiendo mientras sonreía con ironía.

—Queremos saber qué tiene ella que no la has dejado —Seokjin habló ahora, llevando sus rubios cabellos hacia atrás.

—Folla bien.

Fue lo único que soltó. Los tres chicos se miraron cómplices para después reír.

—¿Dejarás que la pruebe cuando la botes? —preguntó el rubio. Yoongi lo miró serio.

Seokjin apartó la mirada de la oscura de Min para seguir comiendo.

—Claro que sí, sabes que no tengo ningún problema, pero solo cuando yo la bote, no lo puedes hacer ahora.

Y siguió comiendo despreocupado hasta que Taehyung comenzó otro tema.

—Saben, me gustaría ver hasta dónde llega Yoongi con ella —limpió su nariz con el dorso de su mano mientras reía.

—Olvídalo, la follaré y después le diré que no se vuelva a acercar.

—Eres malo —Namjoon dijo mientras llevaba de su comida a su boca.

—¿Alguno de nosotros es bueno? ¿Quieres que te recuerde lo que le hiciste a...? Jisoo, creo que se llamaba —se rio un poco.

Namjoon lo miró con molestia, aunque era cierto, todos ellos estaban jodidos así que no tendría por qué hablar sobre moral cuando él también había hecho cosas malas y crueles.

—Estoy seguro de que no duras ni un mes con alguien... Lo sé, ya dijiste que hoy la botas, pero quiero saber si eres capaz... —Taehyung se rio mientras pensaba en cómo hacer que aceptara.

—¿Me estás retando? —y todo comenzaba a salir como Taehyung había planeado.

—Lo estoy haciendo —asintió burlón—.  Un mes, nosotros escogeremos con quien. Tienes que ser buena persona con ella, enamórala y cuando el mes esté por terminar debes de romper con ella de la peor forma. Pero la apuesta no la ganas si cuando termine el mes no te la hayas follado.

—Todos quieren follar con Yoongi, es una estupidez, Taehyung —Seokjin intervino ahora.

—No, hay chicas que lo odian, no caerán a la primera, así que sí es un reto de verdad.

—¿Y yo que gano? —preguntó interesado, Yoongi no podía perder y menos una apuesta con ese idiota.

—Una buena follada y cuantos wones me pidas. Si tú ganas, te daré el dinero y dejaré que folles con mi prima, sé que te la quieres follar, así que es una muy buena recompensa —Taehyung estrechó su mano hacía él, en espera de que Yoongi lo tomara y aceptara la apuesta.

—Creo que están llegando demasiado lejos, dejen sus estúpidos retos. La última vez ambos terminaron en la cárcel, ya basta —Namjoon les advirtió.

—Y logramos salir como si nada hubiera pasado —su pálida mano tomó la de Taehyung, cerrando así el trato.

Seokjin y Taehyung festejaron. La puesta comenzaba, ahora Taehyung tenía que buscar a la mujer más aburrida y virgen de toda la universidad.

¡Hola!

¿Cómo están?

¿Qué les pareció?

Ahora sabemos sobre Jungkook y Hoseok y también aquí comenzó todo

Dejen aquí todo lo que le quieran decir a Namjoon ⬇

Dejen aquí todo lo que le quieran decir a Seokjin ⬇

Dejen aquí todo lo que le quieran decir a Yoongi ⬇

Dejen aquí todo lo que le quieran decir a Taehyung ⬇

Espero que les guste mucho ❤

¡Adiós!