Dedicaciones:
[Perdón si no puse a todas las persona que han votado en cada episodio, pero estas son las que más lo han hecho, gracias ♡]
(Episodio de +4000 palabras)
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CAPITULO 12
"(SILENCIO)"
HOLMES CHAPEL-REINO UNIDO
-:20
Harry estaba en su escuela, la maestra al frente explicando algo sobre sumas de dos cifras, el pequeño rizado ya sabia como hacerlas, Louis le habia enseñado en las ultimas semanas de vacaciones, hablando de su alfa, recordó que ese fin de semana iba a visitarlo a su casa por lo que estaba pensando en hacerle una carta, sintió un codazo en su brazo, miró mal a Zayn pero este miró al frente intentando que el tambien lo haga, Harry lo hizo.
Y ahi estaba su maestra, mirándolo fijamente con una ceja alzada y las manos en las caderas, el omega suspiró y sonrió un poco hacia la mujer.
-Harry, ¿te gustaría pasar al frente a resolver la ecuación?- preguntó la maestra, el rizado obviamente no quería hacerlo pero tenía que, así que asintió y se paró de un saltito avanzando a pasos seguros hacia la pizarra.
Era fácil para Harry, sumó en su cabeza cinco para dos y después ocho para tres, anotó en la pizarra con números un poco chuecos porque, Dios, su maestra sabia a la perfección que el pequeño de ojos verdes iba a ir a un año más alto al correspondiente a su edad el próximo año, por algo será, ¿No, miss Pau?.
-Listo- finalizó el menor con una sonrisa de hoyuelos, totalmente falsa, cabe aclarar, hacia su maestra, la cual le devolvió una sonrisa igual a la suya.
Harry esperaba con ansias el momento para irse de esa aula y dejarle de ver la cara a su maestra.
-Gracias, Harry- agradeció la mujer rubia y lo mandó a sentar.
Después de unos minutos más en la clase a la que el rizado no prestó atención en ningún momento terminó, dando paso al recreo, Zayn y Harry salieron juntos con loncheras en mano buscando un lugar donde acomodarse para comer tranquilamente, lo encontraron rápidamente junto a un gran árbol de alguna cosa que ni el ojiverde o su amigo sabían.
-¿Cómo entendiste la suma?- preguntó el morocho.
-Era facil- respondió simplemente y continuó comiendo saboreando su sándwich.
-Yo aún no las entiendo- dijo Zayn arrebatandole el sándwich para darle un mordisco, el omega menor hizo una mueca pero no dijo nada. -¿En qué tanto piensas, rizos?- volvió a cuestionar.
-En Lou- dijo
-No se ni por qué pregunto- el rizado rió y le quitó el sándwich negando un poco.
-Nope, es que le quiero hacer una cartita pero no se como- habló con vergüenza.
-Hacer cartas es fácil- respondió -¿Nunca le hiciste una a tu mami?- interrogó
El rizado se sonrojó furiosamente -Si, pero siempre le decía que era una cabeza de popo o para disculparme por decirle cabeza de popo- dijo con vergüenza ganándose una carcajada de su mejor amigo.
-¿Y entonces que le hacías cuando era su cumpleaños o asi?- preguntó por milésima vez y el ojiverde resopló con un puchero.
-Un postre de lodo- recibió otra carcajada, le dió un manotazo.
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Ahora los dos niños estaban en casa de los Styles.
Mientras Zayn guiaba los movimientos del rizado para poder hacer una carta a su alfa, Harry escuchaba y buscaba cosas en sus cajones para poder hacerla.
-Ya tengo todo- mencionó con emoción sentándose en el suelo.
-Tienes un escritorio- le recordó su amigo.
-Acá es mejor- afirmó el ojiverde tomando entre sus manitas una cartulina de color celeste claro, era un color suave y lindo.
Comenzó diviendo la cartulina en dos partes mientras su mejor amigo le comentaba acerca de Liam y lo lindo que eran sus ojos.
Después, pegó en el filo de ambas cartulina un pedazo de papel, no sabía lo que hacía pero le gustaba hacer cosas así, sin pensar y usando su creatividad y no su inteligencia.
-¡Mira Zee!- exclamó con emoción después de haber doblado un poco la hoja para que quedara algo así como un acordeón
-¡Esta hermoso Hazz!- animó y el mencionado se sonrojó sin dejar su gran sonrisa.
-Gracias- murmuró.
El morocho seguía contándole acerca de Liam o a veces cambiaba del tema comenzando a hablar sobre el mismo de la nada haciendo al más bajo reir.
Ahora su carta tenía un texto un poco largo en la hoja del medio y dos corazones en los filos contrarios de la cartulina, también tenía un dibujo que Harry hizo hecho en otra hoja y había pegado justo a un lado del corazón.
Se lo volvió a indicar a Zayn el cual sonrió en grande al ver a su amigo contento y decidió bajar de la cama y ayudarlo a hacer más dibujos para que los pudiera pegar.
Eiden llamó a ambos niños para que bajaran a cenar, los dos bajaron corriendo las escaleras y se sentaron uno a lado del otro mientras se reían de sus propios chistes, Jake les miraba con ternura mientras intervenía una que otra vez en la charla al igual que Eiden, Leyva solamente comía escuchando todo con atención pateando bajo la mesa a Harry quien después de tantos años se había acostumbrado a su molesta hermana.
Su madre había hecho chocolate caliente, todos pidieron un poco.
Harry se estaba llevando la taza a los labios pero la voz de su hermana lo interrumpió.
-Sopla, te vas a quemar- dijo mirándolo preocupada, Harry asintió y le agradeció ganándose una diminuta sonrisa.
-Ya me voy- dijo Zayn después de comer, despidiéndose de todos con un beso en la mejilla, salió de su casa para encontrarse con su mamá la cual se despidió con la mano de los Styles.
-¿Qué hicieron todo el día?- preguntó Jake con sus hijos en su regazo mientras veía la televisión.
-Una carta- respondió sin interés soltando una risa cuando una persona en la televisión se resbaló.
-¿Para mí?- preguntó Jake con un brillo de esperanza en sus ojos verdes.
-Nop- respondió Harry y Ley rió con ganas acariciando su estomago que dolía.
-¿Para quien?- volvió a preguntar ignorando a su hija que seguía riendo ahora desde el suelo.
-Para Lou- rió Harry al ver a su hermana.
-Oh-
-Sip- asintió y bostezó -Papi, tengo sueño, ¿me acuestas?- preguntó con sus parpadoss caidos.
-Claro cachorro- afirmó y preguntó segundos después -¿Vienes, Ley?-
La niña rió con menos ganas sobandose la quijada y asintió parándose con ayuda de su papá.
Jake acostó a ambos en sus respectivas camas y les dió un beso en la frente apagando sus luces para despues bajar para acompañar a su esposa.
-Cariño, el alfita nos esta robando a nuestro pequeño- dijo con tono asustado.
-Se sabía- le respondió Eiden comiendo un puñado de palomitas.
-¡Le hizo una carta!-
-A mi también- se burló la mujer
-Te decía cabeza de popo- regresó Jake
-Pero se disculpaba-
-Para que le des galletas-
-Por lo menos me dió algo- respondió y ambos se quedaron en silencio por unos minutos.
-Fue mucho- habló por fin el hombre.
-Si, lo siento, ¿Tregua?- preguntó.
-Solo si aceptas mi apuesta- manipuló Jake.
-Okey- respondió con emoción mirando a su esposo.
-Si la carta que le dará a Louis es mejor de las que te daba a ti, me dejarás comprar frituras todos los días por una semana- alzó su mano.
-Y si no lo és, me dejarás preparar ensalada por una semana entera- alzó su mano de igual manera.
Ambos lo pensaron un poco antes de juntar sus manos.
Después de eso, Harry bajó las escaleras corriendo con un puchero en sus labios y el reloj despertador en sus manos, Jake lo miró.
-¿Qué sucede, cahorro?- preguntó viendo al ojiverde caminar de un lado a otro, al final se sentó en uno de los grandes sillones.
-¿Por qué no llegan aún?- preguntó el menor jugando ansiosamente con sus manitas.
-Tal vez se retrasaron un poco, sabes como son- dijo su padre comiendo papas de una bolsa, Harry lo miró mal y Jake siguió comiendo sin prestar atención a las miradas de su hijo.
-Solo son muchos, por eso son asi- defendió Harry y su padre rió con la boca llena.
-¡Mami!- gritó el omega, Eiden bajó rápidamente con algo verde en su cara.
-¿Si, peque?- preguntó alterada.
-Papi habló con la boca llena- se quejó levantándose de su asiento.
Jake lo miró con la boca abierta, Eiden frunció el ceño.
-¿Cuantas veces tengo que decirte que no se habla con la boca llena?- preguntó la mujer exasperada.
Harry le arrebató la funda de papitas y caminó hacia su habitación chocando las Palmas con su madre.
-¡Los vi!- gritó Jake.
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El auto estaba en silencio, no había música ni risas ni canto, todo en completo silencio.
-Ehm, que emoción volver a ver a Hazzie, ¿verdad?- preguntó Anna, intentando hacer el ambiente menos tenso.
Anna no sabía que había pasado, ella simplemente había llegado a su casa a la hora acordada y se había encontrado a su omega y a su cachorro, Louis, discutiendo.
-Si lo somos- habló finalmente Louis.
-No dije eso, Lou- respondió la mayor con una mirada de preocupación, Louis bufó ganándose una mala mirada por parte de ambas madres.
Anna se volteó para ver a sus hijas -¿Qué ha pasado?- preguntó con interés y Vale le respondió segundos después.
-Mamá le ha dicho a Boo que no sabe si él y Hazzie son destinados o no- dijo y June le dió una mirada que le insinuaba que hiciera todo menos hablar de ello, Anna miró a su esposa pero se mantuvo callada, quería hablarlo a solas con los dos involucrados y evitarles conflictos a las niñas.
Después de eso, Anna, Vale, Zoe y Jennet comenzaron a jugar veo veo mientras los dos tercos permanecían callados.
Cuando por fin llegaron a la casa de los Styles, todos se bajaron del auto familiar y Louis se apresuró a llamar a la puerta, habían demorado un poco debido a la pelea.
Un Jake con delantal abrió la puerta y sonrió inmediatamente, haciendo pasar a la numerosa familia, no dejó pasar de lado la mandíbula apretada de ciertos integrantes.
Un pequeño de rulos bajó las escaleras corriendo, tropezando con la alfombra y levantándose inmediatamente mientras corría hacia su alfa.
-¡Alfa!- chilló separándose un poco mirando a los ojos del otro niño, sonrió más al percatarse que no era algo de su imaginación y lo abrazó con más fuerza.
Puede parecer totalmente raro pero su lobito castaño de ojos azules estaba feliz de tener a su lado a un lindo omega de pelaje color negro con ojos verdes, Louis lo apretujó más al ser consciente que por primera vez eb su vida había visto a su lobo y al de Harry.
-Lou- llamó el rizado tomando toda su atención -Tengo un regalo para ti- finalizó jalandolo de la mano y llevándolo a su habitación para entregarle la tan anhelada carta.
-Es muy linda Hazzie- halagó el castaño mirando el regalo.
-Abrelo- ordenó el omega y Louis rió un poco antes de obedecer lentamente, el pequeño de ojos verdes se desesperó y le arrebató la carta abriendola el mismo.
-Ya, ahora lee-
-¿Un poco más impaciente?- dijo con sarcasmo y Harry se apegó un poco más a él riendo y dándole un pequeño golpecito.
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Lou, Zee me dijo como hacer esto así que si algo no te gusta es su culpa.
Mami me contó la primera vez que nos vimos, dijo que yo estaba chiquito y parecía una bolita y tu le parecías gracioso porque estabas vestido como adulto pero también me dijo que cuando Entraste dijiste que era tu omega, me siento lindo en mi pancita cuando mami me dijo eso y creo que me siento más lindo cuando tu lo dices porque te quiero mucho, creo que tanto como a mi mami y a mi papi, espero que tu también a mi porque si no me sentiría muy triste :(, Zee dijo que lo hice muy largo pero tengo pereza de borrar así que lo dejo ahí.
Con amor del lindo, Harry ♡
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Louis leyó todo con atención intentando no perderse ni una sola palabra escrita con esa letra delicada que tanto cuidaba su omega de que se viera perfecta.
Sus ojitos azules se empaparon un poco en lágrimas, limpió rápidamente estas y se abalanzó contra su omega, respirando su aroma y toqueteando sus rizos chocolates con delicadeza.
El ojiverde se separó un poco de su cuerpo pata poder ver su rostro -¡Ay no!, estas llorando, ¿No te gustó? Pensé que quedó lindo pero está bien, no te preocupes, no tienes que llorar- se lamentó apartando su mirada pata intentar sacar las lágrimas de sus ojos sin ser tan obvio, Louis se rió un poco y lo abrazó más.
-Estuvo hermoso, Hazza- dijo caminando hacia la cama, acostandose ahí junto a Harry.
-¿Si?- preguntó con incredulidad.
-Sip, hermoso- y Harry no pudo hacer otra cosa que sonrojarse y esconder su rostro entre el cuello de su alfa inhalando todo su olor.
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Ambos niños bajaron cuando el menor despertó de la pequeña siesta que había tomado después de la lectura de Louis.
El enojo de el alfa aún no disminuía, Harry, que estaba ajeno a todo lo ocurrido abrazó a las madres de su alfa con un beso en la mejilla y continuó su recorrido hacía las niñas, Louis lo siguió tomando su mano.
Las hermanas Tomlinson y Harry estaban jugando con maquillaje de Leyva, el cuál venía en una cajita con forma de corazón, los párpados de el omega se encontraban pintados de lila con un delineado chueco y perlitas falsas debajo.
Louis sonrió inconscientemente al verlo, Anna le sacó una foto disimuladamente.
Eiden entró a la sala siendo recibida por los brazos de el pequeño alfita de su hijo alrededor de su cuello, sonrió y le devolvió el saludo, pasó su mirada a Harry y sus ojos se agrandaron un poco.
-Está lindo ¿verdad?- Eiden asintió mirando fijamente ka ropa que Harry llevaba puesto en ese preciso momento, toda manchada de pintalabios y sombras para ojos.
-Harry, cielo, vamos a cambiarte de ropa- el omega asintió y caminó junto a su mamá hacia el segundo piso dejando a los Tomlinson a solas.
Pasaron unos cuantos minutos de silencio completamente incómodos hasta que June decidió hablar.
-Lou, cariño, quiero que me entiendas, no puedes estar seguro de que Hazz es tu omega destinado, tal vez sea algo pasajero o tal vez no pero tienen que tomarse un momento cuando sean más grandes para descubrir más... cosas, si, y, si no funciona podrán regresar y ya, cariño.- dijo sonando convencida a lo que Louis soltó un bufido y dejó pasar otros minutos para calmarse y poder hablar.
-Sé que somos destinados y si hacemos cosas nuevas las haremos juntos y eso cambiará solo si Hazz no lo quiere o- - Fue interrumpido por June.
-Pero no sabes si son destinados o no- habló alzando la voz.
Unos pequeños pasos se escucharon.
-¡Sé que lo somos mamá, el es mío, mi omega y yo soy de él, su alfa, y si en algún momento eso ya no, será solo porque Harry o yo lo querremos así, no porque tú lo digas!- Gritó llamando la atención de Jake que estaba en la cocina lavando un poco de platos, se acercó rápidamente a la puerta.
-¡¿Y si se dan cuenta muy tarde?!- gritó esta vez June.
Los ojos de Louis se aguaron.
-¡Eso no pasará porque lo amo como tu amas a mamá o como Jake ama a Eiden, Harry es mi omega y lo siento desde que llegué aquí por primera vez!- gritó comenzando a sollozar, no entiende por qué su mamá no quiere que esté con Harry, no entiende porque quiso discutir con él sobre esto ahora, ¿porque no en unos años? Cuando tal vez pueda comprenderla al menos un poco.
Harry se acercó a su mamá, acurrucandose un poco mientras unas lágrimas se hacían presentes en sus ojitos.
-¿No le agrado a June, mami?- preguntó soltando unas cuentas lágrimas, el aroma a tristeza salía de su cuerpecito.
-No, no es eso amor, claro que le agradas, eres una gran personas- dijo poniéndose en cuclillas para acariciarle las mejillas.
El aroma a tristeza se hizo cada vez más presente en las fosas nasales de Louis, el castaño corrió rápidamente hacia su omega y se acurrucó contra él comenzando a sollozar, ambos inundados en tristeza.
¿Por qué no le agrado? ¿Qué hice? ¿Está mal que me guste Lou? El lobito negro se preguntaba mientras oía a su alfa sollozar.
¿Por qué no acepta que me gusta Harry? ¿Ellas no tendrían que entenderlo? ¿Está bien que me guste Hazzie? Sollozaba el pequeño lobo castaño intentando encontrar los sollozos provenientes de su omega.
Ninguno de los dos niño querían separarse, Louis creando una barrera para que nadie pueda acercarse a su omega en ese estado vulnerable y de momento, tampoco a él.
Las palabras de su mamá retumbaban en su mente infantil intentando encontrar el sentido, ¿Será verdad?.
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Jake, con ayuda de Anna lograron cargar a ambos pequeños a pesar de los gruñidos de Louis hasta la cama del rizado después de un rato.
Ambos niños en la cama con cobertores color celeste mientras sus pequeños brazos se enredaban entre si intentando consolarse.
Anna bajó rápidamente y jaló delicadamente la mano de su esposa a la habitación más cercana.
-¿Qué fue eso, June?- preguntó un tanto enojada, sin cambiar su tono de voz normal.
-Perdón, perdón- se disculpó acercándose un poco con sus ojos llenos de lágrimas.
-Amor, se por lo que pasaste pero aún son niños y nos tienen a nosotras, a Eiden y al idiota de Jake- acarició el pelo castaño de su omega con cuidado mientras esta sollozaba.
-Lo educamos bien pero no quiero que les pase nada a ninguno si alguno de los dos no se controla, Anna, no quiero eso- murmuró comenzando a cerrar sus ojos por el olor tranquilizador de su alfa.
-No les pasará nada, los educamos bien, en especial al que si es nuestro hijo- June rió un poco -Nos tienen confianza, hablarán con nosotras- habló con seguridad. -Ahora, es hora de que te disculpes con Hazz, Lou, Jake y Eiden, en especial el pequeño omega- dijo Anna.
-Si, tienes razón, tendré que contarles a Eiden y a Jake, ¿verdad?-
-Seguramente-
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June miraba profundamente a los ojos verdes fulminantes que la miraban diciendo "Hiciste llorar a mi cachorro, más vale que tengas una buena excusa", y bueno, se podría decir que no era una excusa y no podía justificarse pero era algo en lo que dejó de trabajar cuando no tenía que hacerlo.
-Lo lamento mucho, lo que hice fue inmaduro e irrespetuoso, pero, si me dejan explicarme, aún así no me perdonen después de esto, juro que sé lo que hice y en este momento muero de vergüenza por tener que disculparme por algo como lo es esto- exclamó sin una pizca de inseguridad, manteniendo su mirada firme, sin embargo, Eiden podía notar sus manos temblando y pellizcandose.
-Tranquila, te escucharemos- respondió la omega, intentando sonar tranquila y no con ganas de cachetear a la persona frente a ella.
-B-bueno, ehm, yo, cuando tenía 14 años, conocí a un chico, cuando lo miré sentí una chispa, algo que me decía que yo era de él, le hablé y nos hicimos amigos, después de unos meses el me dijo que éramos destinados, todos lo decian- tomó un poco de aire intentando no llorar y correr a su nido en busca de consuelo.
Eiden la analizó un poco antes de seguir escuchando.
-Nos hicimos novios, más que todo porque nos repetían que éramos destinados y que era muy obvio, después de eso las cosas pasaron como con una pareja normal, la primera vez que tuvimos sexo se sintió bien hasta que me embarazé a los 16, cuando se lo conté el me dijo que el bebé no era suyo, yo le respondí que sí lo era porque era su destinada y no hubiera podido engañarlo a lo que el me dijo, como si nada, que yo no era su destinada- las lágrimas recorrían sus mejillas recordando todo -Pensé en las veces que vi a otros alfas, hombres y mujeres, en las que sentí algo pero el hecho de estar amarrada a esa persona que me impedía incluso acercarme, después, les comenté a mis padres que esperaba a Vale, ellos me dijeron que era una puta- sus ojos ardían mientras recordaba las caras de decepción de sus padres
Jake la miraba con tristeza mientras sus ojos ardían un poco intentando contener las lágrimas al ver a una de las mejores personas que ha conocido destruida.
-Me dijeron que soy una egoísta con ellos y me tiraron de la casa, literalmente, hicieron una maleta con ropa y cuando estaba lista me empujaron a la calle y me tiraron la maleta encima y cayó sobre mi vientre, me arrastré por el piso porque no podía nisiquiera levantarme y caminar hacia la puerta de mi vecino, el abrió con una sonrisa tan amable y le rogué que me lleve al hospital, me levantó con tanto cuidado y me llevó al mejor hospital que encontró y pagó todo- murmuró como si le diera vergüenza -En ese hospital conocí a Anna, con 17 años, estuvimos tanteando por mi culpa, tenía miedo de que en algún momento me vuelvan a hacer lo mismo- respiró profundamente sacando las lágrimas de sus ojos con la palma de su mano -Sé que fui una idiota al dejarme convencer por alguien y también sé que lo que hice no tiene ningún tipo de justificación pero quiero que sepan que me avergüenzo y les juro que si tengo que hacerle un altar al pequeño lo haré y si tengo que ir al espacio y traerle un pedazo de Luna lo haré porque es la felicidad de mi hijo y no quiero comprometer eso por una estupidez que hice yo- finalizó bajando un poco la mirada.
Unos brazos cálidos se sintieron alrededor de su cuello y June se aferró a ellos intentando calmar sus sollozos.
--Dios, June, lo lamento tanto, cielo- dijo Jake acariciando su pelo delicadamente.
-Cariño, debes hablar con un psicólogo sobre eso- dijo Eiden a un lado de su silla mientras acariciaba su pelo también.
-Estaba con uno antes de que muchas cosas pasaran, me sentía bien y dejé de ir- sonrió recordando lo maravillosa que fue su vida en esa época.
-Soy psicologa, tengo amigos que te pueden ayudar, si así lo quieres- sugirió Eiden, Jake asintió.
-Claro, si, ehm, ¿me permiten ir con los cachorros? Necesito disculparme- pidió June.
-Están en la habitación de Harry- indicó Anna mirando a su esposa con orgullo, no había hablado de el tema con nadie en mas de 5 años.
-Gracias, alfa-
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June entró cuidadosamente en la habitación del rizado, mirando a los dos pequeños acurrucados juntos, esperó sentada en un sillón cerca hasta que los cachorros despertaran, y así lo hicieron después de media hora.
-¿Mami?- preguntó Louis viendo a su madre, su cuerpo inmediatamente se puso a la defensiva mientras su lobo le decía que era su madre y no tenía que preocuparse.
Harry se levantó segundos después y se acurrucó más en su alfa al ver a June frente a él, la quería mucho pero se sentía mal.
-Niños, vengo a disculparme con ambos- informó y el cuerpo de el pequeño alfa se relajó un tanto, la cabeza rulosa se asomó un poco.
-Okey- asintió su hijo.
-Yo, tengo algo que hará que me puedan entender mejor pero será mejor hablarlo cuando sean mayores- dijo avergonzada, Louis rodó los ojos.
-¿Ahora si hay que esperar a que seamos mayores?- el pequeño ojiverde se removió nervioso.
-Lou, entiende amor, lo que dije salió de mi y no pude controlarlo, no sabes cuanto me arrepiento y lo inmadura que actúe que hasta tú mismo de diste cuenta- Harry se sentó.
-Hola- saludó el omega, June sonrió un poco.
-Hola cariño- el rizado se sonrojó un poco jugando con sus manitas
-Mami de Lou, ¿Tú me quieres?- preguntó con sus ojitos aguados y June juró nunca más volver a mencionar el nombre del pequeño junto a un adjetivo que califique algo malo.
-Claro que te quiero, haces feliz a mi niño y eres una gran persona, lamento si hice parecer lo contrario pero yo te admiro tanto, no sabes lo que daría por tener esa fuerza que tu tienes y el don de hacerte repetar tan rápido, además, ¿cómo me caería mal un ángel como tú?, eres una bella persona, tanto física como mentalmente- dijo con sinceridad pensando en todo el rizado y el conjunto pequeñito de cosas buenas que habían en él.
-¿Sí?- cuestionó son sus mejillas demasiado calientes.
-Si- afirmó June viendo a Harry acercarse a la oreja de Louis y murmurarle algo.
-Te perdono mami- respondió Louis con una sonrisa, aún estaba un poco confundido pero prefería hablar con su mamá a sola en un rato y disfrutar del momento que tenía frente a él, su mamá y Harry se abrazaban mientras el menor prácticamente extorsionaba a Louis con la mirada para que abrazara a su madre, y así lo hizo ganándose una gran sonrisa de Jule.
-Me tienes que explicar todo- exigió Louis después de un rato del abrazo.
June rió un poco y asintió.
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Hola♡, perdón por tardar tanto actualizando, he estado cansada de no hacer nada (¿?) Pero bueno, es un cap largo porque así lo prometí.
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