02// "Corazón Borrado"

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¡Suéltame pedazo de mierda!... Juro que cuando me libere otra vez no dejaré a nadie vivo—  Una voz llena de odio y amargura se podía escuchar por todo el hospital.

Llamó la atención de todos y también de Min Yoongi quien caminó hacia su ventana viendo un carro de policía con dos oficiales y tres enfermeros sujetar con fuerza a un hombre de cabello azul quien tenía una expresión de frustración y odio en el rostro, aunque llevase una camisa de fuerza todos lo miraban con temor.

El pálido al igual que ellos también se sumergió en el miedo y pena al sentir que conocía a ese paciente porque su corazón de pronto latía muy fuerte, ese peculiar color azul le recordó al momento más hermoso de su vida en Daegu, aunque todo estuviera fragmentado sabía que en su infancia fue feliz.

Ese azul grisáceo había hecho que Yoongi vuelva a sentir y que querer más de eso era lo que ansiaba ahora mismo poco a poco su corazón se sentía completo al punto de que no importara si se quedaba en ese hospital toda la vida o si ese paciente le hiciera daño.

El paciente 2414, diagnosticado con trastorno de identidad disociativo había despertado algo en Yoongi y su afición hacia las cosas rotas.

Cuando V salía a la luz era una bestia descontrolada, totalmente sádica con un instinto asesino, mataba por simple placer aun así para Min Yoongi él lucia como alguien a quien debía reparar, sentía una gran responsabilidad, aunque no recuerde de quien se tratase.

—¿Quién es él? — Park Jimin negó rápido con algo de miedo ante la pregunta de Yoongi.

Ambos habían resultado ser compañeros de habitación.

—No lo haré.

—¿Por qué? — Preguntó frustrado Yoongi.

—No es ético... sabes Min Yoongi deberías preocuparte en salir de aquí que ni luces enfermo — Exclamó molesto Park Jimin para luego recostarse en su cama.

—Eso es mi superpoder— Dijo tranquilo, pero a los segundos Jimin se sentó rápidamente en su cama y lo miró atónito.

—¡Por un demonio deja de actuar así!— Gritó molesto.

El anuncio de la cena y la hora de tomar la medicina se hizo presente el pálido fue hacia el salón recibiendo dos pastillas una azul y otra verde supo que estas probablemente le darían un dulce sueño.

Mientras estaba aún en la sala alguien se acercó, se trataba de un adolescente pelirrojo demasiado alegre y con una barra de snickers en la mano. Min Yoongi tuvo un déjà-vu con ese chico, pero cerró los ojos rápidamente.

—¿Eres mi Hyung? — Preguntó ese pelirrojo hacia Yoongi quien algo confundido respondió.

—Tengo veinte años.

—Entonces eres mi Hyung— Respondió muy feliz y Yoongi pensó que quizá él no sabía dónde estaba.

El menor actuaba como un niño de diez años que disfrutaba estar en un parque de diversiones.

—Toma es tuyo ya no lo quiero— Anunció algo triste el pelirrojo.

Yoongi algo nervioso y sin entender mucho la actitud de ese chico tomo el chocolate dándole una falsa sonrisa al chico.

—Mi nombre es Hoseok— Dijo animado.

—Un gusto Hoseok— Habló Yoongi un poco más sincero.

Descubrió que ese pelirrojo llevaba más de cinco años en ese hospital también se enteró de Tata, un niño de once años quien era el amigo de Hoseok.

Min Yoongi supo que se trataba del mismo hombre a quien quería reparar por la forma en la que ese pelirrojo lo describió tanto en el color de su cabello y ojos.

—Es demasiado peligroso Hyung... — Advirtió el menor al escuchar a Yoongi preguntar por el paciente más sádico del hospital.

—¿Alguna vez estuvo aquí?

—Si cuando es Tata o Vante, pero ahora volvió siendo V lo que significa que podría sacarse una uña con tal de cortarte la yugular— Anunció con temor y algo tembloroso.

A todos les aterraba hablar de V, Min Yoongi frunció el ceño y se puso celoso al escuchar como Hoseok narraba de sus momentos junto a Tata.

La muerte incluso sería mucho mejor para todo el dolor que Kim Taehyung había recibido, un sentimiento totalmente sofocante tanto físicamente como psicológica.

Hacía falta gritarle al coraje que te enseñe a ser valiente así resulta más fácil salir de aquel abismo y que mejor manera si la forma de liberarse es volando con tus propias alas.

Kim Taehyung tenía sus alas llenas de sangre, mucha sangre, el corazón partido en dos, su alma estaba perdida él no podía encontrarla al menos de que se tratara de alguien más. Así que eso fue lo que hizo fragmento su mente en tres partes iguales, todos ellos equilibrados y con un único sentimiento que los unía.

Los tres odiaban tanto a Kim Taehyung que lo sepultaron en el abismo en lo más profundo de su mente, no había rastros de ese niño risueño, nunca más existirá para Vante, ni para V mucho menos para Tata quien era el más parecido a Taehyung solo que más inteligente.

El primero en aparecer fue Tata quien cumplía con todo lo que le ordenaban, era complaciente, el segundo en manifestarse fue Vante un ser completamente manipulador, inteligente que no le importaba los sentimientos de otros mucho menos si los lastimaba y finalmente V, la bestia que les permitió escapar de aquel monstruo que los maltrató durante años.

La magnífica y deslumbrante bestia, V era el asesino perfecto, sediento de sangre consumido por el odio y por sus venas solo corría ira.
Días después del escape el peliazul paso una semana en el bosque cazando uno que otro animal, no le importaba solo arrasaba con todo en su camino.

¡Cállate! — Exclamó tan fuerte que le dolió la garganta.

Esa bestia de dieciséis años gritaba con furia ya había matado a su captor de hace siete años, acabó con los animales de aquella granja y con algunos habitantes del pueblo más cercano.

Físicamente él andaba con el torso desnudo, unos pantalones grises el cabello azul demasiado largo y con rulos, pero sus ojos eran rojos totales.
No se necesitaba ser un psiquiatra experto en trastornos de la personalidad para saber que ese chico tenía un grave problema, pero tuvo mucha suerte al encontrarse con uno, el más amable de todos los psiquiatras.

—¡Qué carajos es eso! — Gritó completamente asustado la pareja de aquel doctor.

Se trataba de un estudiante de artes escénicas, alto de hombros anchos y piel blanca, estaba aterrado al ver a ese joven con las manos y dientes llenos de sangre, era como ver a un caníbal o simplemente un hombre lobo.

La piel se erizó al ser atacado, rápidamente cayó a la tierra fría del bosque y retrocedió hasta llegar al tronco del árbol.

—¡Aléjate! —Exclamó ya con la voz quebrada y con mucho miedo.

Los gruñidos de ese paliazul eran fuertes y llenos de furia, así que tomo del cabello a de ese joven para después azotar su cabeza contra el tronco unas cinco veces hasta ser interrumpido por la pareja de la víctima.

Un fuerte quejido de dolor se hizo presente, estos salían de la boca de ese chico, sin embargo, no fue atacado por ningún arma sino que solo se trataba de una potente luz ultravioleta.

—Cubre tu cabeza con esto Jin— Anunció el doctor Namjoon y le extendió unas vendas a su novio.
Él rápidamente fue a verificar hacia el joven quien se quedó en la superficie llena de hojas secas y rocas puntiagudas, estaba en posición fetal abrazando sus piernas mientras lloraba de forma desconsolada.

—Tranquilo estas a salvo— Habló de una forma calmada sin intentar asustar más al joven.

Este negó con la cabeza sin verlo, Kim Namjoon suspiro con el corazón hecho en dos le dolía el pecho al verlo, tan frágil y con algunas heridas expuestas, así como múltiples cicatrices.

Con un aura que transmitía paz el doctor se inclinó hacia el menor, el peliazul se alejó rápidamente chocando contra una roca.

—No te haré daño lo prometo— Su voz airada y serena tranquilizaba a cualquiera.

Tata con la respiración agitada miraba a todas partes en busca de algún escondite, pero al encontrarse con los ojos marrones de ese hombre se sintió más calmado, se sintió en paz y pensó en que quizá había ascendido a algún paraíso.

—¿No me mientes? — Preguntó con mucha duda y la voz temblorosa.
Rápidamente el mayor negó para después presentarse.

—Mi nombre es Kim Namjoon, ayudo a las personas con cualquier problema soy doctor y puedo curar esa herida que tienes en el brazo— Anunció de forma literal, ya que no quería incomodar al joven.

—No duele mucho... más me duele aquí— Apuntó triste hacia su corazón y no porque haya tenido algún problema cardíaco.

Así que Kim Namjoon lo supo y se juró a sí mismo poder curar cualquier dolor de ese joven, ese día el moreno junto a su novio rescataron al pequeño aunque psicológicamente hablando pues su edad real era de dieciséis años.

Pasaron tres años que el psiquiatra Kim Namjoon estudio a ese joven ahora con diecinueve años diagnosticando con trastorno disociativo de la personalidad y tal como los profesionales sabían no se podía curar una enfermedad mental, pero si otorgarle una vida plena libre de cualquier ambiente, recuerdo o persona que haya sido parte de su dolor.

El doctor sabía que nombrarlo como Kim Taehyung lo haría comportarse como la bestia llamada V, también la luz ultravioleta mayor a 52 W hacía que el paciente cambie de personalidad, pero sin revelar al auténtico Taehyung.

Expediente N.° 2414
Reseña: El paciente cuenta con todos los rasgos y características que ponen en riesgo la vida de cualquier persona cercana a él, en el área cognitiva ha sido afectada por sucesos traumáticos en su infancia y parte de su adolescencia, esto afecto su perspectiva al punto de desarrollar personalidades alternas a la auténtica.
Carece de un área afectiva óptima, es incapaz de sentir empatía y remordimiento por otros, así como de sus propias acciones, sin embargo, sí responde a los estímulos provocados por factores externos, pero rápidamente los rechaza, V es de carácter depredador, Vante un auténtico sociópata e inteligente y Tata un hiperactivo, pero temeroso niño.

Nombre: Kim Taehyung
Edad: 19 años
Rasgos físicos
Color de ojos: Azules
Color de cabello: Azul
Estatura: 180 cm
Peso: 52 kg
Análisis médicos: Cuenta con múltiples cicatrices provocadas por quemaduras de cigarrillos entre otros metales, cortes mayores a cinco centímetros en las piernas y muñecas causados por un objeto filoso.

Facturas en el hombro, lección en la cabeza, los órganos sexuales cuentan con lecciones tanto antiguas como recientes, desgarre y cortes.

Medicina:

Antidepresivos, dos pastillas al día de 500 mg.
Neurolépticos, tres pastillas al día de 500 mg.
Ansiolíticos, cuatro pastillas al día de 500 mg.
Inyecciones de sedantes de 15 ml cada que el paciente muestre carácter agresivo.

Psicoterapia: Baños en hielo.

Actividades distractoras: Pintar al aire libre, tocar el saxofón, cantar al alba.
Todas estas acciones la realizan Vante.
Causa del internado: Asesinato en primer grado de Kim Seokjin y siete personas más.

Nota: El paciente 2414 me quito lo que más amaba en el mundo, pero no por eso lo condenaré a que sufra más, él se alteró cuando escuchó el nombre de mi nuevo paciente Min Yoongi, creo que ambos tiene algo que ver con el trastorno del otro.

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