El lunes dio comienzo y con ellos otra vez retomar las tutorías con Jungkook. Pensar en él pelinegro le dolía mucho a Jimin, no había hablado con el día sábado y domingo. Sus amigos fueron el último día a verlo, ya que mirarían ahora sí aquella película.

Invitaron a Jimin junto con su primo, pero el rubio decidió no ir porque le dolía un poco el estómago; claro que todo mentira, no quería verlo y que su pobre corazón doliera. Aunque no le dolía tanto como llegó a creer. Había hablado con Yeonjun y le dijo que al menos lo dio con el chico que le gustaba, peor si fuera con alguien que no.

A veces no terminamos de conocer a la personas, estaba seguro el rubio de que Jungkook sufrió mucho y por eso su comportamiento se debía a que tal vez alguien le rompió el corazón y por eso actuaba de esa forma. Aunque era un poco tonto pensar aquello, no sabía casi nada de su vida y no justifica lo que el pelinegro le dijo he hizo sentir.

Nada justificaba lo que le hizo, se sentía tonto ahora mismo.

Cierra su casillero y al darse la vuelta choca con alguien haciendo tirar sus libros.

─Lo siento, no me fijé que venías.

Se disculpa Jimin rápidamente.

─Fue mi culpa, estaba distraído buscando a Park Jimin. Me dijeron que estaba por aquí.

El rubio alza su mirada y queda bastante sorprendido al ver a el guapo pelinegro frente a él. Tenía el cabello algo largo, un piercing en la mejilla y uno en la nariz, era alto y le estaba sonriendo ¿Quién era él?

─Yo-yo soy Park Jimin. ¿Para que me buscabas?

Tartamudea un poco. Le puso un poco nervioso.

─Que bueno que te encontré, es que el director Nicolás me comentó que eres el presidente del concejo estudiantil y quería saber si podrías darme un Tour por el instituto. Soy nuevo y me llamo Lim Jae-beom. Solo dime Jaebum.

Estira su mano y Jimin sale de su trance para tomarla y saludarlo.

-Cla-claro. Mucho gusto y, bienvenido a la preparatoria Moont. Bueno, ya sabes mi nombre, soy Park Jimin.

Jaebum le sonríe, le parecía lindo su sonrojo.

─Bueno, las clases empiezan en 10 minutos, no creo que nos alcance con esos 10 minutos, pero podremos retomarlo en el descanso ¿te parece?

Le propone tratando de no sonrojarse de lo que ya estaba, jura por dios que ya lo noto. Era muy guapo, no era su culpa que chicos guapos le hablen cuando antes no era de esa manera.

─Claro por supuesto. Pero antes, me dirás ¿dónde está la clase de geografía?

─Voy justo a esa clase, vamos te diré dónde es y de paso te mostraste los demás salones y te diré sobre los clubes que tenemos, nos quedan de camino.

─Vamos.

Le sonrió levemente.

Jimin le enseñó los salones mientras le contaba cada cosa y actividad que había en la preparatoria. Jaebum era muy agradable, hizo reír a Jimin un par de veces, además que cuando terminaron las primeras clases Jimin le dio aquel recorrido con lujo de detalle, realmente le caía bien el rubio, era agradable y lindo.

Eso bajó la mirada de los chicos quienes le tomaban fotografías a Jimin con aquel chico nuevo.

─Estoy seguro de que a Jk no le gustará eso.

Musita Jackson.

─¿Para que de las mandas si sabes cómo se pondrá? ─cuestiona, Jaehyung.

─Es verdad, además ese chico está guapísimo.

Eunwoo se ganó las miradas de sus amigos quienes lo miraron raro.

─¡¿Qué?!, no digo mentiras, está bueno ─se encoge de hombros.

─Como sea. Solo espero que a Jk no le revienten la última vena que tiene en la cabeza, estoy seguro de que ver eso no le gustará.

Volvió a repetir Jackson.

─¿Y qué tiene de malo que Pequitas esté con otro? No es como que fuera de su propiedad.

Dijo, Jaehyung.

─Si, pero el menso de Jungkook le gusta, lo puedo ver en sus ojos y créanme, no es solo por follarlo.

─¿Cómo estás tan seguro? ─cuestiona, Young-Jae.

─Pues, estos ojos que todo lo miran, saben que a JK le gusta mucho Jimin. Si no fuera eso, créanme que no se hubiera molestado en hacer todo ese show de tutorías. Si él quiere un polvo, lo tiene y con park se esfuerza mucho.

Todos se miran entre sí con esa duda en sus cabezas. Si bien Jungkook siempre conseguía lo que quería, nadie le decía un no y menos Jimin. ¿Por qué hacía todo eso solo por un polvo?

Las respuestas estaban claras, a Jungkook le gusta Jimin, pero el tonto no se daba cuenta.

Se marcharon de ahí a su guarida, mientras tanto alguien no la pasaba del todo bien.

Jungkook estaba molesto con su madre, porque ella no fue capaz de llamarlo para saber cómo estaba, solo un miserable mensaje de «Espero que estés bien» se sentía como la mierda, si bien siempre le dio problemas a su madre desde la muerte de su padre, no era para que lo ignorara y menos con algo tan delicado como un atentado en su contra.

Le hacía falta su padre, él sí sabía entenderlo más que nadie en el mundo. Cada día que pasaba lo extrañaba más y el recuerdo de cómo lo miro morir aún estaba presente en su cabeza. Le dolía porque era la única persona que lo comprendía, lo dejó solo. Alejó aquellos pensamientos y fue con Bam.

Le mandaron las fotografías a Jungkook, quien le estaba dando de comer y cepillado los dientes a Bam. Su tía no estaba porque fue a ver casas y su primero Soobin fue a su primer día de secundaria. De pronto su móvil suena con los mensajes de Jackson en la pantalla, los abrió y para su sorpresa eran fotos de Jimin con otro chico.

─¿Pero qué mierda?

El rubio parecía feliz con aquel chico, no sabía quién rayos era, pero sentía mucha molestia ahora mismo «Por no decir celos» apagó el móvil y marcó el número de Jimin varias veces, pero no le contestaba.

Estaba furioso, más bien sentía celos aunque él no le reconocía. Ni siquiera sabía el porqué tanto enojo, total Jimin no era nada de él y no significaba absolutamente nada; sin embargo sentía el fuego recorrer su cuerpo, dejó a Bam y entró a su casa, tomó la botella de Jack Daniels y empezó a beber la como loco.

Esto se tornaba cada vez peor, estaba en una de sus crisis y cuando eso pasaba terminaba con todo lo que podía o se le atravesaba. Se dejó cegar por el dolor y el recuerdo de su padre, su madre ignorándolo y ahora Jimin con otro. ¿Sería de esta forma que el destino le castigaba?, ¿le quitaría las personas que amaba siempre?

Volvió a empinarse la botella hasta casi dejar la vacía, lloraba en silencio, maldecía y se ahogaba en su dolor. Ni él mismo tenía ganas de seguir viviendo.

⫘⫘⫘⫘⫘⫘

Jackson corría por todo el campus, la clases terminaron y la mayoría de los estudiantes ya se habían ido, y él solo quería encontrar a Jimin. Este venía riendo con el chico nuevo, ni siquiera lo pensó dos veces y le gritó.

─¡Jimin!

El rubio lo voltea a ver.

─Me esperas, Jaebum.

─Claro.

Jackson llegó con él y Jimin estaba preocupado.

─¿Qué pasa?, ¿por qué tienes esa cara?

Jackson trataba de recuperar la respiración, y después de que lo hizo dijo:

─Es... Jungkook. Su primo llegó de la secundaria y me dijo que JK está mal, está tomado y había sangre por el pasillo de su habitación, no quiere hablar con nadie, no sé qué mierda le pasa, pero creo que tiene otra de sus crisis.

En cuanto salió eso de la boca de Jackson, Jimin se alteró imaginando las peores cosas.

─No- nos vemos luego Jaebum.

─Sí...

Iba decir algo más, pero Jimin quería llegar lo más pronto posible, no sabía qué le pasaba a Jungkook, pero quería estar con él. La verdad a pesar de lo malo que fue con él ese día, no podía evitar preocuparse por él.

Subió al bus con Jackson, estaba desesperado por llegar, qué movía su pie y pellizcaba sus palmas con desesperación. Cuando al fin llegó, salió corriendo del autobús llegando a la casa de Jungkook. La puerta estaba abierta así que entró y miró el desastre en la sala, había un jarrón roto y muchas cosas tiradas.

─¡¿Dónde está Jungkook, Soobin?!

─Está arriba, dejó de gritar hace unos minutos, no sé qué le pasa.

─¡Mierda JK! ─gritó Jackson.

─Iré con él, si pasa algo más llamen a la policía o algo.

Los dos asintieron y Jimin subió las escaleras llegando a la habitación del pelinegro, miro un poco de sangre en el piso y eso lo asustó aún más. No quería imaginar otra cosa, pero era justo lo que pasaba.

─¡Jungkook! Ábreme soy Jimin ─No hubo respuesta─ ¡Jungkook por favor abre!

No le abría y no había respuesta, no sabía qué más hacer, la puerta estaba cerrada con seguro. Hasta que se le ocurrió una idea. Quitó un pasador de su cabello rubio, ya que lo usaba por emergencia, ya que Wonho solía encerrarlo en los casilleros del corredor, aprendió abrir cerraduras para salir y correr.

Rápido empezó abrirla con el pasador, esperó unos minutos y después hizo "clic" y la puerta se abrió. Y con temor se adentra ella, miró el desastre de su alcoba y busco a Jungkook por todos lados, pero lo que miro lo dejo un poco estático.

─¡Jungkook!

Corrió hacia él, ya que estaba tirado al lado de su cama.

─¡Jungkook, por favor despierta, que tienes! ─Lo sostuvo entre sus brazos, estaba inconsciente con sangre en su nariz y el rubio empezó a derramar lágrimas de angustia─ ¡Jackson! ¡Jackson, ven rápido!

Escucho los pasos venir y en eso entró Jackson con Soobin.

─¿Mierda que le pasó?

─Llamen a la ambulancia ¡rápido! Tiene mucha fiebre y no responde ─pidió con las lágrimas saliendo de sus mejillas.

Jackson se apresuró a llamar una ambulancia, Soobin llamó a su madre para que llegara pronto, y Jimin sostenía el cuerpo grande de Jungkook entre sus brazos. Se sentía mal, le dolía verlo de esa manera, a pesar de sus crueles palabras le dolía mucho.

Quería saber todo de él, más allá de sus gustos y personalidad. Quería saber todo, absolutamente todo de él, el que le atormentaba, su pasado y que lo llevo hacer como es. Está completamente enamorado de su conejito, y quería que su amor fuera correspondido.

Todo era tan complicado para él, son tantas emociones que no sabe cuál dejar fluir, la preocupación, la angustia, el enojo por lo que le hizo por él besó. Pero al final le ganó el amor y se quedó a su lado.

La ambulancia llegó junto con las patrullas de la policía, debido a que no puede salir de su casa, lo atendieron aquí en su habitación. Jimin no se movió ni un segundo de su lado, Yeonjun llegó después y estuvo con Soobin a su lado en lo que explicaba a la policía que pasó.

Dos horas después todo estaba en calma, la tía de Jungkook dijo que tuvo un ataque de ira combinado con el de pánico, que al final lo hizo colapsar. Le dieron medicamentos y lo dejaron descansar. Jimin ayudó a limpiar todo el desastre, estaba en la habitación de su conejito limpiando todo mirándolo ahí acostado en su cama totalmente dormido.

Dejo las bolsas de basura aún lado tomando asiento juntos él, acaricio su cabello negro mirando esa tranquilidad en él.

─Espero que te recuperes, no sé qué porque tuviste esa crisis, pero sabes que puedes contar conmigo, no me importa si solo me utilizas para contar tus penas como si fuera una especie de diario para ti, yo solo quiero entenderte a pesar de todo. Eres importante para mí, me gustas desde que llegué aquí y... ─suelta un suspiro con una pequeña lágrima, sentía un nudo en su garganta queriendo decir todo─ Olvídalo, no importa eso, recupérate pronto los chicos están preocupados por ti, nos diste un buen susto ─ríe un poco─. Eres especial Jungkook, solamente quiero que sepas eso, eres... Mi dulce Criminal.

Dejo un besito en su frente y se puso de pie para seguir con su labor, pero su mano fue tomada por el pelinegro quien estaba totalmente despierto, Jimin tiño sus mejillas y fue tumbado a la cama que por un rápido movimiento, Jungkook, lo apresó entre sus brazos.

─Jung-Jungkook... ─su corazón latía con rapidez.

─Solo quédate conmigo, no me dejes, tú no.

Pidió con voz profunda y ronca. Lo acercó más a su cuerpo y Jimin sin negarse, él fue quien abrazó a Jungkook y este escondió su rostro en cuello. Le gustaba el olor de Jimin, olía a fresa con moras. El rubio lo abrazó sintiendo las mariposas en su estómago revoloteando otra vez, y aunque no quisiera caer de nuevo, no podía resistirse a ello.

Se quedaron dormidos unos con el otro bajó la mirada de Yeonjun y Soobin, quienes cerraron la puerta con cuidado chocando puños.

Maratón 1/3.... Espero que les guste.