Después de toda la tormenta que ambos pasaron, fueron la noticia en todas partes de Seúl y en el mundo. Pues nadie podría creer que el Cisne negro pasó por un gran maltrato físico y sicológico por culpa de su madre y ex novio.

A Kang Joon le dieron 70 años de prisión y no solo por lo que le hizo a Jimin, sino que hacía empresas falsas para sacar más dinero y luego desaparecer con ello, claro que Jungkook les dijo a los jueces que no le dejaran libertad condicional, ya que podría volver hacerle daño a su prometido. Kang Joon había confesado que al salir de prisión intentaría hacerle algo más que las fotografías y abusar de él.

El juez con ese testimonio de parte del condenado dejó en claro que una persona como él jamás podría salir en libertad bajo fianza y le negó la libertad condicional. La señora Park Taeyeon, fue sentenciada a 50 años de prisión, la policía descubrió que la mujer tenía problemas mentales así como una esquizofrenia, pero como no la trato como era debido pues terminó llevándola a hacer lo que hizo. La llevarían al manicomio, ya que gritaba como loca que se vengaría de su propio hijo. Lo cual a muchos se le hizo horrible que esa mujer dijera todas esas cosas a su único hijo.

Para Jimin nada fue fácil, toda su vida fue criado por esa mujer, la cual ahora entendía el porqué lo trataba mal cuando niño, obligándolo a cosas que no quería. En cuanto a su padre pues él fue un hombre derecho, se dejó manipular por su ex mujer, pero nada grave hizo el señor Park para dañar a su hijo. Aun así el hombre se siguió disculpando con su hijo, pero Jimin lo perdonó pues por una parte ambos se vieron envueltos en todo esto por culpa de esa mujer.

Ya habían pasado 8 meses, Jimin ya tenía su pancita grande con muchos cuidados y besitos de su aún prometido. Decidieron esperar a que su hija, «porque es niña» naciera y así poder casarse en la presencia de su hija. Tenían una vida tranquila llena de amor, rodeados de todos sus amigos quienes estaban felices de saber que ya pronto la pequeña Minji pronto nacería.

Jimin....ՙ 𓄼

Me miraba por el espejo con mi ya enorme pancita, estoy tan contento de saber que mi pequeña está a punto de nacer a solo un mes de tenerla en mis brazos; a mi nena Jeon Minji. Fue el nombre que le dio mi novio, ya que así se llamaba su madre, me pareció una gran idea ponerle ese nombre.

Suspire porque me sentía que vivía un cuento de hadas, ya que mi infancia y vida no fue para nada agradable. Ya todo lo malo pasó, solo quería enfocarme en mi bebé y mi futuro esposo.

Salí de la habitación. Jungkook y yo decidimos vivir en una casa propia, él la diseñó y le quedó hermosa más la habitación de nuestro bebé. Tenía peluches rosas, las paredes blancas con estrellas color azules para darle forma de cielo, para que la bebe pueda estar tranquila mirando las nubes, que su papi Kook le pintó con mucho amor y esfuerzo.

Baje las escaleras mirando que en la sala estaba Jungkook con todos los chicos más Joy y Jackson, quienes le habían dicho a mí prometido que tenían una relación y que ambos querían vivir juntos después. Claro que mi Kookie se agarró a Jackson a palabras amenazándolo que si hacía llorar a su hermanita lo quemaría vivo.

Jackson estaba más pálido que un muerto, las amenazas de su ahora cuñado lo dejaron petrificado. Pero al final todo resultó bien, ya tenían mucho tiempo juntos creo que unos 7 meses para ser exactos. Namjoon y Jin también esperan un bebé, apenas se enteraron hace una semana y Namjoon no pudo estar más que feliz, Eunwoo, Jaebum estaban trabajando como modelos les iba muy bien a ambos chicos.

Al final todos tuvieron su final feliz.

─Hola ¿Qué hacen aquí chicos? ─les pregunté llamando su atención.

Ellos me miraron sonriéndome.

─¡Hey! Jimin, pero mira nada más que gran pancita tienes ya, cuando nace la pequeña sobrina.

─Falta un mes, ya casi ─me senté mirando que tenían boletos para el juego de hoy, claro que yo podría ir por mi panza grande─ ¿Qué pasa?

─Pues estamos venciendo a tu prometido que vaya con nosotros al partido de hockey, dice que no quiere dejarte solo ─musita Jaebum.

Miró a mi prometido arqueando una ceja.

─Ve con ellos Jungkook, estaré bien.

─Pero que tal y si te sientes mal, o te pasa algo, no quiero ni imaginarlo ─acaricie su mejilla dándole un besito.

─Vendrá Jin, quiere ayudarme con la ropita de la bebe para cuando vayamos al hospital, no estaré solo así que ve con los chicos.

─Anda hermanito Jin vendrá no estará solo ─Insiste Joy a su hermano, ya que ella también irá.

Me sonrió levantándose del sofá para besarme, lo cual correspondí de inmediato ignorando que los chicos seguían aquí.

─Iré por mi chaqueta, ya vuelo ─dejó otro besito y se fue corriendo, sonreí con ternura.

─Pórtense bien, no quiero que lo traigan ebrio otra vez que casi no podía caminar ─los señale a ambos amenazandolos.

─Lo traeremos sano y salvo ─Aseguró Eunwoo.

─Más les vale a los dos.

Tragaron grueso, pero luego reí por sus caras. Mi prometido bajó con sus cosas después.

─Nos vemos amor, llegaré temprano ─besó mis labios.

─Adiós, diviértete ─lo despedí agitando mi mano.

En cuanto salió me fui a comer un poco. La pequeña Minji se movía mucho sacándome pequeños quejidos cuando se movía, pero a la vez amaba que lo hiciera, pues sobre mi estómago sobresalía sus movimientos y era algo totalmente hermoso, algo que me reconfortaba el corazón.

Mi corazón.

El nacimiento de Minji....ՙ 𓄼

Todos estaban reunidos en el hospital, ya que durante la madrugada Jimin empezó a quejarse de un gran dolor. Jeon todo adormilado corrió por las cosas ayudó a Jimin para llevarlo al hospital donde ya tenían prevista su cita del parto. Como pudo lo llevó y ahora aquí estaba junto a sus amigos en pijama, eran las 3 mañana.

Esperaban a que alguien les dijera algo porque durante todo el camino los gritos desgarradores de Jimin lo preocupaban, tenía miedo de que algo malo pasara, pero se dijo así mismo que dejaría la negatividad y se concentraría en solo en su cisne y su pequeña bebe la cual esperaba con ansias de que ya naciera, para tenerla en sus brazos y besarla saber cómo era, si se parecería a él o a Jimin.

Mordía su uña para tranquilizarse, en serio moría de los nervios.

─Vamos Kook relájate que solo me pones más nervioso a mí ─le dice Namjoon.

─Cuando tu hijo nazca estarás igual o peor que yo, me siento jodidamente impaciente de no saber nada de mi cisne.

─Sólo cálmate un poco si, pronto te darán las buenas noticias.

─Vamos hermanito todo saldrá bien y en lo que canta un gallo ya tendrás a tu hija contigo y a Jimin por supuesto ─Su hermana lo sentó en una de las sillas para que tomara todo esto con calma─ Iré por café para todos bien, espera aquí y deja de temblar Jungkook ─Lo regaña.

Jungkook bufa. Joy se fue con Jackson por los cafés para todos en lo que salía el doctor. Pasaron dos horas exactamente cuando al fin el doctor dio su aparición donde todos estaban presentes. Jeon rápidamente se paró para preguntar por su esposo.

─El señor Jeon Jungkook ─dijo el doctor.

─Yo, dígame ¿Cómo están mi esposo y mi hija?

El hombre suspiró sonriendo y algo cansado.

─El joven Jeon Jimin está bien señor, ya está con su hija puede pasar a verlo si quiere.

─Gracias, gracias ─sonrió feliz de saber que su cisne y su hija ya estaban bien.

Sin pensarlo mucho fue con el doctor para ver a su esposo e hija, abrió con cuidado la puerta girando la perilla. Entró en la habitación mirando a su esposo con su hija en los brazos, ese pequeño bultito entre sus brazos, joder, fue la imagen más hermosa que Jungkook presenció en su vida.

─Amor ─se acercó a él con las lágrimas apunto de salirse.

─Kookie ─susurro cansado pues sabía que no fue fácil dar a luz un bebé─ Mira a nuestra hija, al fin está aquí con nosotros Kookie.

─Si mi amor al fin está con nuestra hija ─No aguanto más, empezó a llorar, contagiando a su prometido.

Su hija se parecía mucho a Jimin, tenía sus labios sus cachetes regordetes, pero también tenía facciones de él, sus ojos grandes y su nariz, a decir verdad tenía rasgos de ambos.

─Cárgala Kookie anda.

─Me da miedo amor, es tan pequeña que tengo algo de miedo de hacerle daño ─No es que no quisiera cargar a su hija, tenía miedo por lo frágil que se veía su pequeña princesa.

─Vamos amor cárgala no pasará nada, la enfermera vendrá por ella en unos minutos para llevársela a la incubadora, vamos cárgala ella espera que su papá la cargue.

Jeon asintió tomando con sumo cuidado a su hija, cuando al fin la tuvo en sus brazos derramó más lágrimas de felicidad. Acaricio su mejilla color carmesí, ella abrió sus ojitos negros iguales a los de él, la bebe sonrió tomando su dedo grande asiendo que el corazón se le agitara mirando a su pequeña.

─Están hermosa, Cisne, se parece mucho a ti, no puedo creer que sea nuestra.

─Pues créelo Kookie, es nuestra hija, nuestra pequeña Minji, que nació de nuestro amor Kookie. ─Jimin también derramó lágrimas de felicidad por sus palabras.

Al fin ya eran una familia, la familia Jeon, con la llegada de su primera hija toda felicidad emanaba de ellos, de ahora en adelante todo sería para bien y no para mal.

Tres años después....ՙ 𓄼

La pequeña Minji cumplía sus tres añitos, hubo una gran fiesta en la gran mansión de los esposos Jeon. Todo adornado de Sailor Moon, el personaje favorito de su hija.

Jimin cambió a su hija con su vestido blanco totalmente hermoso.

─Te miras hermosa mi amor, tu papá se morirá cuando te mire ─halaga a su hija mientras le daba los últimos toques a su gran vestido.

Julie sonrió.

─Papi Kook se desmayará ─La pequeña era muy inteligente para ser apenas una niña de 3 años, ya hablaba bien aunque a veces no tanto, pero era lista siempre la número uno en cualquier cosa que le pusieran hacer sus padres, dibujaba sin pasarse de la raya y sabía combinar colores sin que se mire feo. Dio sus primeros pasos antes del año haciendo sentir totalmente orgullosos a sus padres.

─Seguro que si princesa hermosa, así que vamos porque tus invitados están esperando por ti, al igual que cierto niño que no deja de preguntar por ti.

La pequeña Minji se sonrojó en cuanto su padre le mencionó aquello. Sabía un niño en el jardín de niños que siempre jugaba con ella, también la defendía de los más grandes que quisieran lastimarla, por eso la pequeña lo quería, era su mejor amigo y quien sabe más adelante cuando ambos crezcan.

─Papi Kook se pondrá celoso papi minmin.

─Lo sé, pero tranquila yo lo controlo ─besó su frente. ─¿Lista, amor?

─Si, Papi.

Tomó su pequeña mano para salir de la habitación e ir al primer piso, todos estaban afuera en el jardín junto con los niños de la guardería de su hija.

Cuando llegaron abajo, Jungkook volteo mirando a su princesa vestida de esa manera, se miraba totalmente hermosa con ese vestido, sentía que no podría con tanto al verla ahí parada con su esposo sonriendoles ambos.

─Pero mira nada más mi pequeña Minji, estás más hermosa de lo que ya eres ─Jungkook se agachó para quedar a su altura─. Te tengo un regalo, lo compré pensando en ti mi amor, espero que te guste mucho ─Sacó de su saco una cajita de terciopelo color rojo, la abrió dejando ver un collar de cisne dorado con diamantes incrustados. Miró como su hija abrió su boquita admirando el collar tan hermoso igual a de su papá minmin, lo tomó abrazando a su padre.

─¡Gracias, papi, gracias! ─Jeon le sonrió y se lo colocó en su hermoso cuellito.

─Sé que quieres ser una gran bailarina al igual que tu papá Jimin, así que te regale uno igual al que tiene él ─Jimin miró con ternura a su esposo y él como su hija besaba sin parar la mejilla de su padre─ Anda que hay muchos invitados que te esperan.

─Si, Papi.

Los dos tomaron la manita de su hija saliendo de la mansión hacia jardín donde todos los esperaban con ansias para ver a la festejada. Todos quedaron impresionados al ver a la hermosa hija de la familia más cotizada de Corea, la hermosa heredera lucía totalmente hermosa apocando a cualquier niña que había ahí; bueno menos a su prima, la hija de Jin; la cual también es muy bonita como ella, aunque la castaña aún tenía dos años quería mucho a su prima y mejor amiga Minji.

Los aplausos no se hicieron esperar y la fiesta dio comienzo. La música favorita de Minji, sonaba con una canción de Sailor Moon de fondo, ella bailaba con su mejor amigo Beomgyu, quien estaba vestido de Tuxedo Mask juntos combinaban bien.

Pero cierto papá celoso tenía su lengua contra su mejilla mientras veía a su hija bailar con su amigo. Jimin lo miró y llamó su atención, negando con la cabeza demasiado divertido.

─Vamos amor no estés celoso, solo es su amigo nada más, se miran bien juntos ¿no crees? ─le pregunta, pero su esposo frunció el ceño─ Ay Kookie, ni ami me celas así.

Jeon tomó la cintura de su esposo acercándose a su cuerpo.

─Claro que sí, odio que te miren de más, tú solo eres mío y te amo, eres mi esposo y eso me da el derecho.

─Si solo soy tuyo, hasta viejitos ─acercó sus labios a los de su esposo, a punto de besarlo.

─Y siempre serás mío, te amaré incluso si somos ángeles en el cielo incluso más allá. Te amo Jeon Jimin no sabes cuanto. Iluminaste mi vida cuando pensé que jamás alguien podría iluminarme, me diste una hija tan maravillosa y hermosa. No sabes lo muy afortunado que soy al tenerte conmigo y vivir esté gran sueño conmigo.

─No es un sueño amor, es la realidad. También me alegro de que estés en mi vida amor, después de todo lo que pase me alegro de que tú me hayas salvado de esa oscuridad para sí volar contigo a esta vida tan feliz que tengo ahora contigo. Nunca habrá palabras para expresarte lo mucho que me haces feliz amor, siempre juntos hasta viejitos.

─Siempre juntos hasta viejitos mi Cisne.

Cortaron la distancia para darse un gran beso, uno lleno de amor con muchos sentimientos de por medio. Al separarse todos aplaudieron cuando su hija terminó de bailar, la fiesta continuó hasta la hora del pastel. Todos se reunieron para cantarle feliz cumpleaños a Minji.

Cuando repartieron el pastel y los dulces, se pusieron a jugar como locos. Fue una fiesta hermosa y magnífica.

Después que terminó todo, los esposo Jeon fueron a dormir a su pequeña hija la cual estaba muy cansada ya después de correr, Jugar con sus amigos.

Ya estaba en su cama siendo abrigada por su papá Kook mientras Jimin conectaba su luz de noche, ya que su pequeña le tenía miedo a la oscuridad.

─Es hora de dormir cariño, ya es tarde ─ le dice Jungkook a su hija.

La pequeña bostezo con sus ojitos apuntó de cerrarse.

─Puedes cantarme esa canción Papi, para dormir mejor ─pidió con un leve puchero.

Algo que Jungkook no negó porque era débil a los pucheros de su hija y esposo.

Jungkook asintió.

─Está bien cariño, pero te duermes ─La pequeña asintió.

Jungkook empezó a cantar una hermosa canción para que su hija durmiera, Jimin lo miraba parado en el marco de la puerta esperando a que su hija se durmiera. Cuando al fin cerró sus ojitos Jungkook paró de cantar, besó la frente de su hija para salir de la habitación e ir con su esposo.

Ya en su habitación ambos se acostaron agotados por toda la fiesta de su hija, Jeon besaba a su esposo con tanto amor sacándole a Jimin suspiros por los sutiles toques de su esposo en su cintura.

─Basta Kookie, estoy muy cansado ─le dice cuando su esposo ya se estaba comiendo a besos su cuello.

─Yo también, pero amo besarte de esta manera amor ─sacó su rostro del cuello de su esposo para luego besar esos esponjosos labios rojizos, amaba estar así con su cisne mientras este suspiraba por cada toque sutil que él le hacía.

─Mañana nuestra hija se irá a quedar en la casa de tu hermana, ya que quiere convivir con ella por no llegar a tiempo para su cumpleaños, y mi papá vendrá por ella el domingo para llevarla a comprar todo lo que ella quiera junto a su nueva novia, también quiere compensar el no poder llegar a tiempo. Así que tenemos dos días para ti y para mi a solas amor, podremos aprovechar el estar solitos los dos.

Jungkook sonrió amplio al oír eso. Con su hija ocupando todo el tiempo del mundo, no podían tener intimidad. Ya que su hija suele escabullirse a su habitación para interrumpir sus momentos entre esposos.

─Eso sería totalmente genial, te haré el amor por todos lados que no sentirás las piernas en un par de días.

─Jungkook por favor eres un ninfómano ─La idea solo lo excitó a Jimin, no podría negar que también era un pervertido y la idea de no poder caminar por las penetraciones que le llegara a dar su esposo lo hizo sentir una corriente eléctrica en todo su cuerpo.

─Pero solo tú ninfómano.

─Sí, solo mío.

Se fundieron en beso, ahora si ambos tendrían un momento para ellos solos, pues tener que cuidar a su hija aún con sus agendas tan ocupadas era todo un reto para ellos dos.

Así que aprovecharán cada minuto de esos dos días.

🦢🌹Quería subir este hermoso capítulo, espero que les haya gustado.