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—Tranquilo Jimin, solo es un alfa que hace ejercicio y nada más. No hay nada que no hayas visto en alguien más. —Se dice así mismo pues el solo verlo le dejo con un lobo alterado por el alfa— Mochi, no es momento para tus cosas de omega, así que ni se te ocurra. Recuerda nuestro objetivo.

Su lobo parecía no hacerle caso quería que fuera con el alfa, pero Jimin se negó, eso debió ser un error. Al tranquilizarse, pudo salir de su habitación e ir a la cocina donde preparó algo rico de almorzar, hizo algo sano, ya que por su salud y por lo que ya se acostumbro tener que seguir una dieta.

Obvio no tan exagerado como ensaladas como las que tiene el alfa en su refri, wakala, eso jamás.

Hizo lo que tenía que hacer y espero a que estuviera todo, mientras preparaba un simple cereal. En eso llega el alfa con su impecable traje de trabajo, Jimin frunció sus ceño al verlo usar como unos guantes en sus manos.

¿Para qué eran esas cosas?

—Buenos días —saluda él para ir al refrigerador y tomar una botella de agua.

—Buenos días. —le contesta el omega mirándolo un poco. Aún seguían esas imágenes en su mente del alfa sin camisa.

—Veo que estás cocinando algo. —le dice el alfa.

—Me diste permiso ¿o ya no lo tengo? —cuestiono.

El alfa se encogió de hombros.

—Puedes hacer con tal que limpies. —Empieza a comer su ensalada.

Jimin hace una mueca.

—Oye, prepara una rica comida saludable ¿por qué sigues comiendo eso?

—Tengo prisa, no me malentiendas. Tendré una junta para tu ingreso como mi asistente, pero antes tengo que ver algunos empresarios —le dice Jungkook.

Jimin comía un poco de cereal, aunque haciendo muecas pues no sabía nada bien. Era de esos saludables también.

—Creí que iría con usted hoy.

—Ese era el plan, pero hay cosas que necesito arreglar primero. Además, mis trajes te quedarán flojos, soy más grande que tú, toma — Le entrega una tarjeta de crédito negra y Jimin abre sus ojos de par en par— Te llevaré al centro comercial ya que mi junta será un restaurante cerca de ahí.

—¿Me iré de compras con tu Black card? Woo... De verdad que tiene mucho dinero, no a cualquiera le dan estás tarjetas. —Estaba sorprendido.

—Soy millonario, tengo que tener una. Manejo varias empresas casi al rededor del mundo. —lo dice con una voz presumida, o eso le pareció a Jimin— Termina lo que haces antes ir nos, tengo que ser puntual.

—Vale, de todos modos ya está la comida.

—No quiero, solo comeré esto. Puedes comerlo tú.

Se sentó para comer esa cosa que él llama comida, Jimin bufo, por suerte entre más comida para él mejor. Cuando terminaron ambos tomaron sus cosas para salir, Jimin bajó del gran elevador junto al alfa quien acapara miradas de omegas interesadas. Se nota que solo lo buscan por su dinero, se ve. Por suerte el alfa no parecía percatarse de su mirada de depredadoras.

Luego por culpa de esas omegas tachan a todos los de su raza por interesados.

Fueron al estacionamiento donde le entregarón su auto Mercedes Benz negro, subieron a él y Jimin de quedó con la boca abierta. Mierda, este tipo si que era un pijo rico, aunque ya se lo dijo, la verdad que se da sus lujos de millonario.

—Oye está muy lindo tu Mercedes Benz. —Pasas sus manos en la orilla de ese elegante auto.

—Gracias, fue un regalo de cumpleaños para mi.

—¿Quién te regaló algo así? No parece nada barato.

—Yo... Un regalo para mí. Nadie de mi círculo tendría el dinero para comprar algo así.

El omega torna los ojos en blanco, parece que es su cosas favoritas cuando el alfa se soltaba de arrogante. En fin, durante el camino el alfa se puso música clásica, a Jimin no le desagrada del todo, pero era extraño escuchar algo así de alguien que tiene 30 años.

Al llegar al centro comercial se dio cuenta que era de esos sitios donde los ricos van a comprar como si compraran en ofertas, se mordió el labio, estos lugares eran exclusivos y muy vigilados, temía que los discriminaran.

—Llegamos. —Le dice Jungkook.

—Muy lindo lugar, pero con un centro comercial más económico sería mejor.

—Aquí hacen los trajes más elegantes y de buena calidad, es mi sitio favorito. Ve adentro y busca la tienda de ropa llamada Golden, les dices que vas de mi parte para atenderte, te recibirán. Compra ocho trajes de los cuales te gusten o puedes consultar con ellas que te queda mejor. Hay corbatas, zapatos y todo lo necesario. Compra también ropa informal, hay otras tiendas por ahí que te puedan gustar.

Jimin se quita el cinturón para salir, de verdad que odia estos lugares de pijos. Abre la puerta, pero el alfa lo detiene.

—Antes de que te vayas, cuando termines de comprar por favor llámame. Te mandaré un Uber para que te lleve a casa.

—Bien, gracias.

—Te veo en el apartamento.

Jimin cierra la puerta para ir se, ve al alfa desaparecer de su vista. No es por nada pero hubiera estado mejor que el alfa lo acompañara, odia estos lugares porque son unos hijos de puta que lo van a mirar por su forma de ser. En fin, entre más rápido mejor sale de esta mierda.

Camino adentro y tal como pensó lo miraban, pero no decían nada, él solo los ignoró como siempre, total, no era la primera vez. Busco la dichosa tienda de ropa llamada Golden, subió a la parte de arriba y fue ahí donde la miró. Tenía todo el gusto de ese alfa, muy minimalista todo. Fue y entró, había poca gente en el lugar, seguro es por el mal gusto de la decoración.

Silbó ante los elegantes trajes había, fue una sección de trajes negros elegantes, esos serían más su tipo, no le gustaba algún otro color que ese. También había azules casi llegando a ese tono oscuro, podría llevar algunos. El lugar tenía relojes de marca y bolsos, tal vez compré algunos.

Una de las mujeres del lugar se percata del omega.

—Karina, ve con ese omega de allá. No me da buen presentimiento. —dice la mujer mirando con molestia a Jimin.

—Si, madán.

La beta va con el chico y le sonríe amable.

—Hola, buenos días. ¿En qué te puedo ayudar?

Jimin carraspeó.

—Buenos días. O... Viene a comprar algunos trajes para mí.

—Que bien. ¿Podría decirme cuales son sus gustos o que busca específicamente?

Jimin no estaba seguro.

—No tengo mucha idea, pero creo que busco algo así como estos trajes.

—Muy bien, deje que nuestro sastre tome sus medidas para que le traiga un traje perfecto para usted, venga conmigo por favor solo tomará unos minutos, ya que tenemos otros clientes.

Jimin siguió la beta, por lo menos lo estaban tratando bien.

—Tome asiento, en seguida vuelvo con usted.

—Gracias.

La beta se aleja para ir por un vaso de agua para ofrecerle al omega, es como cortesía de la casa en lo que esperan su turno. La omega que es gerente del lugar le daba mala espina ese omega maloliente, pensó que a lo mejor quería robarle, los conoce muy bien.

Se acerca el y Jimin le mira algo intrigado por cómo lo ve.

—Buenos días, me permite saber con qué pagará algunos de estos trajes. —Su voz llena de arrogancia hizo que Jimin se pusiera alerta.

—Pagaré con una con esto —le muestra la tarjeta lo que sorprendió a la omega.

—Una Black card, puedo preguntar ¿es suya? —cuestiono dudosa.

Jimin frunció el ceño.

—No, no es mía. Es de mi jefe, él me pidió venir aquí. ¿Hay algún problema?

—Por supuesto que no. ¿Dígame, de quién viene?

Jimin bufa poniéndose de pie, quedando cara a cara con la omega. Esta se alejó un poco e hizo una mueca de desagradó.

—Vengo por parte del alfa Jeon Jungkook. Él me mandó aquí.

La mujer se ríe ante lo que dijo, Jimin no entendió que le dio gracia.

—Disculpe ¿Dijo Jeon Jungkook?

—Acaso está sorda? Si, Jeon Jungkook.

—Pues no le creo nada, es muy extraño que el alfa más solitario mande a alguien como usted aquí. Además com su tarjeta personal.

Jimin ya se estaba cabreando.

—¿Qué pretende decir?

—Lo digo con sinceridad, usted no puede estar aquí, le da mala imagen a mi preciada boutique. Además es extraño que tenga la tarjeta de alguien más, quién me asegura que no la robo.

—Menuda mierda. Yo no robe nada, él me mandó aquí. —alzó la voz un poco.

—Pues lo dudo mucho, llamaré a la policía por esto. Es demasiado extraño, el señor Jeon jamás estaría implicado con alguien como tú.

—¡¿Qué?! Me debe estar jodiendo. —La beta le quitó la tarjeta de crédito, Jimin se abalanzó sobre ella para quitársela. —¡Deme eso!

—Por dios, ¡Ayuda! —grita la mujer quien intenta alejar al omega de ella, claro que eso se veía mal, solo que a Jimin no le importa.

—¡Dame eso maldita bruja antes que te arranque las malditas extensiones!

—¡Ayuda, seguridad!

Unos hombres llegaron y sostuvieron a Jimin contra su voluntad, todos estaban asustados, fueron en ayuda de la mujer. Mirando mal a Jimin, como si fuera un demente.

—¡Sueltenme! —Exigió Jimin mientras lo sacaban a rastras del lugar.

—¡Saquen lo de aquí y llamen a la policía! Vieron como me atacó, quería robar aquí.

Lo acusa la mujer.

—¡Claro que no! ¡Usted miente!

—Todos vieron como me atacaste. Eres un salvaje.

—Vamos niño, te llevaremos a seguridad en lo que la policía viene.

—Pero...

—Andando, maldito ladrón. Los omegas como tú son tan predecibles.

—¡Hijo de puta! —Escupió Jimin intentando zafarse.

—Maldito omega, debiste quedarte en tu ratonera, maldito ladrón.

Le dice el guardia llevándolo al centro de seguridad del centro comercial. Jimin maldijo por debajo, sabía que no era buena idea venir aquí porque todos son unos hijos de puta que se creen la gran cosa por solo tener un poco más de estatus que los demás.

Maldita sea. Tenía ganas de llorar, esto le recordó a ese maldito día, le pasó lo mismo y joder, moría por matar alguien ( literalmente )

La mujer aquella llamó a la policía quien ya venía por el omega, Jimin al menos quería llamar al alfa para que aclare todo. Lo dejaron en una pequeña sala mientras lo esposan, esto era humillante.

—Tendrás una llamada, solo hasta que la policía venga por ti.

—Yo no hice nada, esa mujer me quitó mi tarjeta. —Les dice pero ellos se ríen.

—Si aja, y yo como cambiar todos los días.

Se mofan de él, como los odiaba. Espero a que la policía llegue, esto no se quedaría así.

Mientras tanto, el alfa Jeon salía de su junta con los socios. El elegante lugar lo trato bien ya que lo conocían por quién era, un alfa de algo rango en su linaje y en el mundo. El trato le fue bien, estaba contento. Al fin podría arreglar ese sitio especial para él.

Con una sonrisa bajo de la parte de arriba del restaurante, giro por el pasillo cuando una voz lo detuvo.

—¿Jungkook?

El pelinegro se quedó congelado en su sitio, esa voz, ese aroma. Se giró lentamente y ahí estaba ella, su ex novia, la que le rompió el corazón y humillo. ¿Qué demonios hacía ella aquí?

Se acerca a él con una sonrisa en su rostro, Jungkook se quedó estático y con la mente divagando, su lobo gruñó ante la omega pues el lobo la odiaba.

—¿Huh Yunjin? —Susurro el alfa.

—La misma de siempre. Me impresiona lo mucho que has cambiado, pero sigues usando esos guantes.

—No me gusta venir sin ellos, lo sabes.

—Si lo sé. ¿A qué se debe que estés en este lugar? —le pregunta con una socarrona sonrisa.

Jungkook estaba demasiado pasmado de verla, hace tres años que lo suyo terminó debido que ella era más un alma libre y él un amargado alfa que quería tener todo a su control. Hubo muchas cosas por las que ella quería estar con él, aunque bueno, al final ella fue quien lo dejó, lo humilló y se marchó del país. Seguía igual de hermosa, su hermoso cabello rojo, sus ojos verdes y su esbelto cuerpo.

Su lobo le ladró por estar recordando cuando les hizo daño.

—Viene a hacer negocios. Estaba por irme.

—Siempre con los negocios. ¿Acaso no tienes algo más que trabajar? Siempre tan metido en tu mundo. —dice ella.

—Mis empresas requieren mucho de mi tiempo. Tengo que trabajar para mí gente. —habla lo más neutral que puede.

Yunjin le sonríe, maldita sea, odiaba que hiciera eso. Luce tan bonita para él.

—Vamos, porque no te quedas a comer conmigo, será divertido recordar viejos tiempos.

—Gracias por la invitación, pero tengo cosas que hacer.

—Por favor —ella lo toma del abrazo, cosas que hizo que el alfa la alejara— Lo siento, olvide que no te gusta que te toquen. Aunque pensé que estarías impuesto a mi, ya sabes.

Jungkook se acomoda sus gafas con molestia e incomodidad.

—Es pasado. —Contestó serio.

—Lo siento de verdad. Supongo que el tiempo ha sido quien te volvió como al principio como cuando nos conocimos.

—Fueron tres años, ya eres una extraña para mí.

—¿Así? —No creyó eso la omega.

—¡Cariño! —habló un hombre quien venía hacia la pelirroja, está sonrió gustosa abrazándolo y besando sus labios frente al alfa.

Jungkook quería irse.

—Hola amor, te espero un buen rato. ¿Dónde estabas? —Le pregunta ella haciendo pucheros exageradamente cursis.

—Lo siento cariño, es que el tráfico estaba horrible. Pero ya estoy aquí. ¿Quién eres tú? —pregunta mirando al alfa que los veía.

Yunjin sonrió maliciosa.

—Cariño, te presento a Jeon Jungkook. Él fue mi pareja hace tiempo.

El hombre lo barrió con la mirada, claro que Jeon no dejó tener ese porte intimidante, eso le daba ventaja ya que era más alto, daba miedo.

—Creo que he escuchado sobre usted. ¿No es dueño de las empresas Golden de autopartes y algunas tiendas de ropa de marca?

El alfa asintió.

—Soy el dueño, un placer.

—Me llamo Kyungso. Kang Kyungso. Soy empresario de joyas Kang. Tal vez debe conocerme.

—La verdad no, pero un gusto.

A pesar de lo in como que esto es, Yunjin parecía estar estar divertida con la situación.

—No sabía que salían, jamás me lo dijiste cariño.

—Es que no importaba mucho, fue algo pasajero. De seguro Jungkook ya tiene alguien especial en su vida ¿No es así?

Jungkook se puso tieso, joder, claro que no ha tenido a nadie porque desde que ella se fue, jamás quiso creer en el amor otra vez, se le hacía una perdida de tiempo. Yunjin abrió y cerró la boca sorprendida.

—No puede ser... —suelta una risa golpeando el hombro de su novio— ¿no me digas que no tienes omega?, ¿o sea que no me has superado?

Jungkook ve como ella se mofaba de él como siempre lo hacía cuando salían.

—Ay que lindo, jamás me has olvidado, ¿es eso? Woo, jamás creí que sería tan inolvidable para ti.

Su lobo estaba demasiado molesto incluso él lo estaba, joder. Al no dar respuesta, ¿que decía? No tenía a nadie porque ni tiempo tenía. Verla son esa sonrisa le daba rabia, no dejaría que lo vuelva humillar, así que dijo lo primero que se le vino a la mente.

—De hecho, tengo a alguien.

Le responde con toda seguridad y ella se calla al escuchar aquello.

—¿Enserio? Ja, no te creo.

—¿Por qué no has de creerme? —inquiere.

—Facial, jamás he visto algún artículo donde te mencionan con alguien. —dice segura de ella misma.

Jungkook vuelve a ajustar sus lentes otra vez con más confianza.

—Creí que era yo quien no te supera, ¿por qué estás pendiente de con quién salgo?

El alfa la hizo callar y Kyungso no estaba muy contento con lo que había insinuado. Yunjin hizo una mueca.

—Vamos, eres un alfa famoso, no es que esté pendiente de ti. Si salieras con alguien probablemente lo sabría todo el mundo.

—Pues creas o no salgo con alguien, tenemos una relación privada.

—Así ¿cómo se llama? Tengo curiosidad.

Ahora sí Jeon tenía que parar con la mentira que sabe que se hará más grande una vez que diga lo que tiene en mente, pero fue demasiado tarde cuando Jungkook dijo su nombre.

—Te lo diré solo porque no quiere que pienses algo erróneo, él se llama Park Jimin. —Dijo con total seguridad— Y no solo es mi novio, es mi destinado.


Se puso buena la cosa.
A ver qué pasa. Si les gustó no se olviden de apoyarme con su comentario y si estrellita, gracias.


Nuestra Yunjin será la ex novia, la verdad yo la amo es mi bias. <3



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