𝘊𝘢𝘱𝘪́𝘵𝘶𝘭𝘰 𝟣𝟥

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

One Direction | They don't know about Us
Sólo una caricia y ya era un creyente,
cada beso se vuelve un poco más dulce.
Se vuelve mejor...
sigue volviéndose mejor todo el tiempo, cariño

⚠️ pequeño uso de insultos ⚠️

La cita de Doble D había sido un completo fiasco.

Al principio pensó que con Kevin las cosas funcionarían más rápido de lo normal, pero dos meses antes había hablado con su hermano (dos días después del repentino beso y la hermosa confesión) sobre él.

ㅡQuiero hablarte de Kevin ㅡdijo, pensándose lo que diría a continuación.

ㅡYo también quiero hablarte de él ㅡdijo su hermano, dejando de lado su lata de cerveza, haciéndole lugar en el sofá a un lado suyoㅡ. Por favor, siéntate.

Tomó asiento más rápido que una bala, pero seguía confundido e incómodo. ¿Acaso su hermano sabía lo que había ocurrido cuando él se fue? No, de ser así, hubiese vuelto antes por obvias razones... aunque fuesen obvias razones muy tontas, claro está.

ㅡ¿Qué sucede con Kevin? ¿Te has dado cuenta que no es el culpable y que debes perdonarle? ㅡEddy negó con la cabeza gachaㅡ, ¿qué es, entonces?

ㅡSé cómo aclarar las cosas entre él y yo.

ㅡ¿Ah, sí? ㅡde pronto, se sintió algo aliviadoㅡ, ¿cómo? Si necesitas ayuda, estoy dispuesto a darla.

Eddy le miró atentamente con una ceja alzada, Eddward borró su sonrisa rápidamente y agachó su cabeza.

ㅡBueno, ya que lo mencionas... aquella Cruel nunca te ha conocido, y no creo que lo haya hecho tampoco en éstos dos últimos días, así que está bien ㅡse encogió de hombrosㅡ. Necesito tu ayuda.

A fin de mes, Marie Cruel recibió un nuevo seguidor en Nstagram; un jóven muchacho de unos veintitrés que tenía fotos de comida o paisajes y muy pocas fotografías junto a personas o mostrando su rostro. Hablaron por dos días y tuvieron una cita en el tercero.

En el cuarto día fueron al cine y a comer a un restaurante al aire libre.

En el quinto día se juntaron, por la tarde, a beber un café en una de las cafeterías que quedaba cerca del centro.

ㅡ¡Dios, odio a los hombres! ㅡgruñó Marie, siendo sobreoída por Kevin.

El pelirrojo le había cortado el teléfono a Doble D y, después de encontrarse con los niños en su habitación, ambos les dijeron que su "tía apestosa" estaba volviéndose loca cómo cuando los niños se transformaban en burros, en "Pinocho". Una escena que los tres recordaban con miedo.

"Quédense aquí, iré a ver que no se tranforme en burro"; les había dicho, antes de caminar delicadamente escaleras abajo.

ㅡPero, ¿qué ocurrió? Si habías dicho que todo estaba bien ㅡdijo su hermana, con un tono preocupado.

ㅡSi, ¡hasta hoy! ㅡsus tacos resonaron por el suelo y, después de ello, se le oyó caer en el sofá.

ㅡ¿Qué sucede aquí? ㅡpreguntó Ed, sobre el oído de Kevin.

ㅡEstán discutiendo sobre la cita de Marie... parece que todo fue malo.

ㅡDéjame averiguar ㅡmurmuró, haciendo algo de ruido en los escalones antes de aparecer por el umbral de la salaㅡ, hey, ¿qué sucede? ¿Por qué están gritando?

ㅡ¡Mi cita fue asquerosa! ㅡgruñó, enojada, nuevamente.

ㅡ¿Y por eso gritas? Asustas a mis niños, Marie. Relájate.

ㅡ¡Éste hijo de puta me ha dicho que no siente nada por mi realmente! ㅡEd estaba a punto de explotar, nadie podía insultar en su casa a menos que lo dijera bajito, y ella lo había gritadoㅡ. Primero, dijo que no le gustaba su nombre, así que técnicamente me obligó a llamarlo por su apodo.

May aclaró su garganta; ㅡ¿No dijiste que le llamabas "pastelito"?

ㅡAhá, si, ¡pero dijo que odiaba ésos sobrenombres! ㅡsuspiró, enderezándoseㅡ. Hoy, hablando por teléfono, recibió un mensaje que su celular leyo en voz alta, uno de sus contactos le había dicho "cariño".

Le pregunté por qué le llamaba así, si me había dicho que no le gustaba; entonces dijo que el único que podía decirle ésas cosas era su hermano mayor. Lo entendí y respeté, pues yo no dejo a nadie llamarme "Mimi" porque sólo May me llama así. Luego lo invité a pasear para hablar más y me dijo que no quería, que era demasiado para él y que ya no se sentía tan atraído a mi.

Pregunté por qué y él me dijo que sólo necesitaba saber un par de cosas sobre chicas para ayudar a su hermano. Me enojé y me levanté de la mesa, cuando me quiso detener, le pregunté si yo realmente le gustaba o sólo hablaba conmigo por su hermano y él me dijo que sí y ¡que realmente le gustaban los hombres!

ㅡ¿Y qué hiciste? ㅡpreguntó Ed, cruzado de beazos.

ㅡ¡Le tiré un vaso de agua en la cara y me marché!

Kevin abrió los ojos en grande, y luego de hacerle señas a Ed, subió corriendo a su habitación. Revisó por la ventana y salió corriendo al ver a Edd salir de la habitación con su pijama puesto. Se puso sus zapatos en la puerta y corrió a la parte trasera de la casa, cruzando el patio trasero hasta el patio de los vecinos.

ㅡ¡Barr! ㅡgritó alguien, cuando subía los escalones del porche del vecino, al levantar la vista se encontró con un hombre de baja estatura y un poco de... barrigaㅡ, ¡mi viejo amigo Barr!

Frunció el ceño y miró hacia su casa, nadie le estaba observando. Bueno, sólo su hermano, a quién le había dicho que iba de visita a comer pizza a la casa de sus vecinos. Levantó la mano y, cuando volvió su vista al hombre con barriga, éste estaba saludando a su hermano.

ㅡSoy yo, Eddy. Digo, por si no me ves por la luz ㅡse hizo a un lado y cubrió la luz con su cabezaㅡ, ¿me ves ahora? ㅡhizo ademanes con su mano y, después de unos segundos, bajó un par de escalones para tomar su brazo e incitarlo a subir.

ㅡHey, hey ㅡse hizo a un lado, una vez sobre el porche, mirándole con el ceño fruncidoㅡ, ¿no recuerdas que me habías echado de tu casa hace unos meses?

ㅡTsk, ¡pasado, pisado! ㅡsonrió, palmeándole la espalda, y luego suspiróㅡ. Lo lamento, lo siento y quiero que me disculpes y perdones. Fui un imbécil y hasta ahora me doy cuenta. Tenías razón, nunca quisiste meternos en el medio a mi y a los demás chicos, sólo querías perjudicar a Marie ㅡrió bajitoㅡ. A decir verdad, me alegra mucho que nuestro pequeño Edd haya ayudado mucho a sacar todo ésto a la luz.

Y sus dudas fueron respondidas.

Dentro de la casa se juntaban los cuatro ex alumnos de la escuela secundaria Cerise Aita* número 87 (más conocida cómo la Secundaria Principal Cul-de-Sac); Eddy Skipper McGee, Kevin Barr, Eddward Marion y Rolf Vincent.

Eddward y Kevin intercambiaron miradas antes de que Rolf y Eddy llegaran con las pizzas que habían ordenado hace un par de minutos.

ㅡ¡Llegó la pizza, guacho! ㅡgritó Rolf, con ése asento que a todos hacía reír y ésas palabras que nadie entendíaㅡ, ¿no hay nada más para tomar que no sea... ésto? ㅡseñaló.

ㅡSi buscas lo que tú llamas "birra", van a tener que ir a comprar ㅡsuspiró Eddward, reordenando las cajas cuadradas en la mesa de madera.

ㅡUh, qué bronca ㅡgruñó, haciendo reír a Eddyㅡ. Dale, boludo, lévantate y vamos a comprar unas latitas.

ㅡ¿Enserio?

ㅡ¡Sí, dale, qué me estoy muriendo de hambre!

Rolf venía de Argentina, de un lugar algo alejado de Buenos Aires. Se cambió el nombre antes de entrar en los Estados Unidos y se hizo pasar por falso inglés para ingresar en la escuela secundaria. Eddy, quién tenía desendencia española, pudo comunicarse (más o menos) con él.

Él decía que su inglés era mejor que las mentiras de los políticos del gobierno de su país, y aunque no muchos entendían éste dicho tan propio de extranjero que nadie (pero todos) conoce, todos le decían que tenía razón.

Su inglés era una mezcla del inglés común (cómo decía él) y el inglés de los británicos. Cabello oscuro, ojos verdes oscuros y piel tostada ("típico del cordobés que llevo dentro", decía). Tal vez tenía un metro con ochenta y dos y siempre le gustó jugar al fútbol.

Mientras los dos se iban fuera a comprar lo que Rolf tanto quería, Kevin interceptó a Doble D en la cocina.

ㅡNo sabía que tu cita de ésta noche era la mismísima Marie Cruel ㅡescupió, de pie en el umbral de la cocina.

ㅡDetalles, detalles ㅡhizo un ademán con su mano, de espaldas a su acompañante.

ㅡ¿Qué se supone que estabas haciendo ahí, eh? ㅡmurmuró, atrapándolo entre el borde de la encimera de madera de la cocina, y su cuerpoㅡ, ¿no te advertimos Eddy y yo sobre Marie?

ㅡ¿Qué es ésto? ㅡrió bajito, mirándole por su hombroㅡ, ¿acaso es una escena de película romántica?

ㅡBueno, no voy a desperdiciar mi oportunidad ㅡdijo, canturreando.

Para cuando Eddward se dió vuelta, viéndole con el rostro completamente en confusión, se sonrojó. ¿Acaso lo había hecho muy obvio? La última vez que estuvo navegando por Sotify lo encontró, uno de sus artístas favoritos había hecho tres personajes en Broadway.

Por su cabeza pasó la imagen de Anthony Ramos sonriendo y diciendo "puede que no llegue a ver la gloria" y se imaginó a si mismo perdiendo un duelo entre su corazón y su vergüenza. Casi envuelto en rojo, Kevin se alejó un poco de Edd y éste le miró con una sonrisa formándosele en los labios.

ㅡ¿Acabas...? ㅡno tenía palabras, se volteó completamenteㅡ. Oye, tú ㅡrió bajito, frunciendo el ceñoㅡ... entendí ésa referencia, señor Barr.

ㅡTengo que preguntar ㅡlevantó un dedoㅡ, y también entendí ésa referencia.

ㅡCuando era pequeño entré a clases de teatro en la primaria, justo cuando "Hamilton" alcanzaba fama en Broadway ㅡse señaló de pies a cabezaㅡ. Así como me ves, fui John Laurens y Thomas Jefferson.

ㅡCreí que Jefferson y Laurens eran dos actores diferentes.

ㅡEl niño que tenía que hacer de Jefferson se enfermó, así que ㅡlo señaló con pistolitas en sus dedosㅡ, ¡no iba a desperdiciar mi oportunidad! ㅡambos rieronㅡ. Vamos, mi personaje estaba muerto y yo fuera de escena, ¡quería salir de nuevo!

ㅡDe todas formas, aún no puedo creer que hayas hecho ésa referencia al Capitán América.

ㅡ¡Primero Quicksilver, ahora el capitán! ㅡse cruzó de brazos, apoyándose en la encimeraㅡ, ¿qué falta ahora? ¿Te enojarás conmigo cuando diga que ㅡlevantó sus manos, haciendo muecasㅡ "traiganme a Thanos"?

ㅡAh ㅡabrió la boca, retrocediendo para golpear su espalda baja con la encimera de atrásㅡ, ¡éso fue demasiado!

ㅡ¡Oh, vamos! ㅡrió, caminando hacia él para aferrarse a sus brazos.

Apoyó su cabeza en uno de sus hombros, intentando contener su sonrisa. Kevin pasó sus manos sobre sus brazos, acariciando su espalda a la vez que lo atraía más a su pecho, besando su cabello repetidas veces.

ㅡNada pasó entre Marie y yo, ¿sabes?

ㅡEstá bien, no necesitas explicármelo ㅡmientras daba su última ración de besos, sentía sobre su brazo la sonrisa de Eddward desaparecerㅡ, cariño...

ㅡTe quiero ㅡmurmuró, bajito.

El tiempo se detuvo. Los ruidos dejaron de oírse. No había nada más que dos almas atadas a un destino algo incierto, dos cuerpos que se aferraban el uno con el otro y el rápido latido de dos corazones encendidos.

ㅡTe quiero, mucho, Kev ㅡvolvió a murmurar, alejándose un poco de élㅡ; y no quiero que pienses que no te quiero lo suficiente cómo para estar con alguien más sin sentirme culpable ㅡlevantó sus ojos, las brillantes orbes verdes del pelirrojo le admiraban cómo si fuera la ciudad perdida de Atlantisㅡ. Por más estúpido que pueda sonar, lloraba un poquito cada noche después de cada cita, porque mi corazón pesaba demasiado.

ㅡ¿Me extrañabas?

ㅡCómo jamás había extrañado a alguien antes ㅡmurmuró, acariciando suavemente su nariz con la contrariaㅡ. Lo siento, sueno tan estúpido...

ㅡNo suenas estúpido, suenas lindo ㅡinclinó la cabeza a un lado, besando sus labios rápidamenteㅡ, lindo ㅡotro besoㅡ, lindo ㅡotro besoㅡ; muy, muy lindo.

Eddward rió, cubriendo sus labios con sus dedos.

ㅡOye, oye ㅡmurmuró, nervioso.

ㅡNo hay nadie aquí, bonito ㅡsonrió, levantándole la vista con dos dedos sobre la barbillaㅡ; bésame.

ㅡ¿Y si no quiero?

ㅡHe esperado dos meses. Te tengo entre mis brazos ahora, lo único que quiero es besarte... mucho ㅡmurmuró, bajito, aunque nadie más pudiera oírlos.

ㅡSe nota que me has extrañado.

ㅡCómo jamás extrañé a alguien antes ㅡse acercó, sus labios rozando los contrariosㅡ, te quiero, Edd. Te quiero y te quiero a ti.

Sus labios se unieron en un suave beso que fue intesificándose cada vez más. Las manos de Doble D deshicieron su nudo detrás de su espalda y volvió a engancharse detrás de su cuello.

Los labios de Kevin osaban con formar una sonrisa, al mismo tiempo que se tomaba fuerte de las caderas de Eddward y besaba sus labios, cada vez con más fuerza. El sonido obseno de ambas bocas inundó el silencioso lugar, llenando de color rojo las mejillas de ambos jóvenes.

Doble D se alejó por unos segundos, intentando mantener su respiración a línea, agudizando el oído al escuchar el motor de un auto en las afueras. El pelirrojo buscaba desesperado sus labios, y llegó a engancharlos por un par de minutos más, hasta que las risas y gritos se intensificaron fuera.

Eddward se alejó; ㅡDéjame ir.

ㅡ¿Y si no quiero? ㅡsus ojos directos en sus labios.

ㅡKevin ㅡmurmuró, al sentir besos en su cuelloㅡ, estás... llevando ésto demasiado lejos, Eddy está en la puerta.

ㅡSubamos, entonces.

ㅡPor Dios, Kev, déjame ir.

Se removió en su lugar, dejando a Kevin helado por unos segundos. Un último beso pasó por sus labios mientras salía corriendo escaleras arriba.

¿Había sido su imaginación o el más puro de los ángeles tenía una erección?

「📍」 Una cosa- siempre quise hacer una historia
con un extranjero jfjsjjd y aunque parezca menos
argentina que el resto de nosotros, leS JURO QUE
VOY A DAR LO MEJOR DE MI. Also... saben que me
gusta jugar con las referencias y también con cosas
cómo los nombres de ciertas cosas. Cambié el
nombre de las aplicaciones porque me pareció
divertido hacerlo así, y el nombre de la escuela (en
honor a una mujer que, también, es uno de mis OC);

Cerise significa; "una brillante sombra rosa"
y Aita significa, literalmente; "jardín"。

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro