El mayor Lan Wangji era realmente el hombre más hermoso que Wei Wuxian había visto, así como el más sabio y virtuoso.

En su humilde opinión, merecía ocupar el puesto número uno en la lista de jóvenes maestros elegibles. Ciertamente ejemplificó todas las buenas virtudes de un cultivador Gusu Lan elegante, refinado y recto  y estuvo a la altura de su reputación como Jade Lan.

Wei Wuxian una vez pensó que su Lan Er-gege era el modelo de tal cultivador, pero ahora era obvio que Er-gege todavía tenía espacio para crecer.

No es la primera vez, pensó Wei Wuxian, así es como será Lan Zhan en el futuro...

Este pensamiento lo hizo suspirar soñadoramente, imaginando ser capaz de ser testigo de cómo Lan Wangji crecería para ser tan alto y varonil, para ver cómo su mandíbula se agudizaba, sus hombros se ensanchaban, sus brazos se ensanchaban...

Una vez había visto los brazos de Hanguang-jun cuando los había enrollado para entrenar. Descubiertos, tenían músculos abultados, perfectamente esculpidos y parecían muy gruesos. Y luego Hanguang-jun lo levantó con tanta facilidad con un brazo, que una vez un perro se le acercó en la ciudad.

Incluso Wei Wuxian podría haberse permitido sentir un poco de celos por el estado físico del cuerpo de Lan Wangji y su poderoso cultivo en el futuro, pero... de alguna manera, ¿lo hizo sentir un poco caliente y hormigueante?

Fue un sentimiento extraño, Wei Wuxian no estaba seguro de qué pensar de eso, ¡pero...! ¡No estuvo nada mal! Claro, su corazón podría latir un poco más rápido y sudaría un poco más, pero los curanderos lo habían revisado y habían confirmado que no se estaba muriendo.

Además, no era una persona celosa por naturaleza, y solo podía sentir emoción por el actual Lan Wangji. Después de todo, ¿no fue asombroso poder vislumbrar en qué se convertiría en el futuro?

Una vez le había preguntado a Hanguang-jun cómo era el futuro Wei Wuxian, simplemente había recibido un parpadeo lento y pensativo y una vaga respuesta.—Fácil de intimidar, fácil de sostener. Suave, pero firme como un melocotón.

Es cierto que, incluso con todo su conocimiento literario, Wei Wuxian todavía no entendía lo que eso significaba. Pero Hanguang-jun lo había dicho de manera tan poética y sabia que realmente no le importaba porque la voz de Hanguang-jun era así de suave, Wei Wuxian le había preguntado tímidamente si el laoshi por favor le recitaría algo de poesía.

Un segundo suspiro escapó de la boca de Wei Wuxian. Se estaba distrayendo de nuevo, prolongando su detención. Su periódico estaba lleno de nada más que garabatos en las dos horas que había estado en la biblioteca.

Echó un vistazo al adolescente Lan Wangji sentado en su propio escritorio debajo de la ventana, haciendo su tarea en silencio como de costumbre. La ventana de la biblioteca acentuaba su elegancia y la luz del sol parecía proyectarlo en un delicado resplandor.

Wei Wuxian había visto una vez el cuerpo desnudo de Lan Wangji en la Primavera Fría. Ah, pensar que había estado escondiendo una forma tan engañosamente fuerte bajo todas esas capas. Estaba impresionado entonces, pero su admiración solo podía continuar aumentando después de conocer a Hanguang-jun.

¡Hanguang-jun era tan genial! ¡El hombre más genial que Wei Wuxian haya conocido! ¡El más bonito también!

Le agradó inmensamente a Wei Wuxian saber que en el futuro, él y Lan Wangji se volverían tan cercanos. ¡Podría ver esa evolución de la frialdad!

Otro suspiro soñador escapó de su boca mientras su rostro se calentaba.

Estaba intentando con todas sus fuerzas ser amigo de Lan Wangji. Fue satisfactorio saber que sus esfuerzos eventualmente valdrían la pena al final, y no solo eso, sino que Lan Wangji sería tan bueno con él en el futuro.

Apenas reprimió un chillido que amenazaba con estallar y la extraña sensación de querer rodar por el suelo. ¿Su yo futuro también se sentía así, cada vez que Hanguang-jun lo miraba?

—Wei Ying, no estás escribiendo.—la voz severa del actual Lan Wangji lo sacó de sus pensamientos. Wei Wuxian hizo un puchero y dejó su cepillo con un bufido, en comparación, este Lan Wangji adolescente era muy reticente, pero a su manera, eso también era encantador.

Ignoró su mirada de advertencia y se acercó más a él, justo a su lado hasta que sus hombros se tocaron. Se inclinó más cerca y refunfuñó cuando Lan Wangji obstinadamente apartó la cabeza de él. 

Hanguang-jun siempre le daría una palmada en la cabeza si hacía eso.

—Eres tan malo conmigo.—se quejó Wei Wuxian.—Finalmente me estás llamando por mi nombre, lo que significa que ahora somos amigos. ¿Por qué no puedes ser más amable?

Mira lo suave y esponjoso que es este cabello. Ven a tocar , pensó simultáneamente. El sol de la tarde le estaba haciendo pensar cosas extrañas, haciéndolo sentir perezoso y ansioso por ser acariciado como un gato indolente.

Las manos de Lan Wangji se apretaron blancas alrededor de su propio cepillo. Manchas de tinta gotearon de su punta, manchando el papel frente a él.

—¿Por qué no puedes hablar en serio?—replicó él.

—¡Lo digo en serio! Realmente quiero ser tu amigo, Er-gege. Mírame, no mentiría ni burlaría de ti sobre este tipo de asuntos.

Finalmente, Lan Wangji volvió la cabeza hacia atrás para mirarlo. Wei Wuxian miró hacia arriba detrás de sus pestañas, inclinó la cabeza de manera adorable y le dio la sonrisa más dulce que tenía, la que siempre hacía que la gente quisiera darle comida gratis.

Pero realmente estaba siendo sincero, tratando de mostrar esa honestidad a través de su cuerpo. Ciertamente funcionó en Hanguang-jun de todos modos, haciéndolo estirar la mano para golpearse la nariz ligeramente antes de sucumbir a sus caprichos.

Sin embargo, no pareció tener un efecto positivo en Lan Wangji. En cambio, pareció molestarlo un poco más porque el cepillo en su mano se rompió y un destello de rabia cruzó sus rasgos.

El sonido de la maleza rompiéndose sacó a Wei Wuxian de su extraño aturdimiento y su sonrisa cayó lentamente.

El papel estaba realmente arruinado ahora, la tinta salpicó por todas partes desde la mitad caída del pincel, Lan Wangji dejó con cuidado la otra mitad rota, tomando una respiración profunda y uniforme, como para calmarse. La punta de sus orejas estaba extremadamente roja.

Wei Wuxian preguntó con vacilación.—¿Lan Zhan? ¿Wangji-xiong? ¿Estás bien?

Lan Wangji volvió los ojos un poco hacia un lado, irradiando un tenso silencio.

Eso era correcto, mentir estaba en contra de las reglas.

En este momento, un sentimiento de vergüenza se apoderó de todo el estado de ser de Wei Wuxian. No había pasado mucho tiempo solo con Lan Wangji en un tiempo, y se había acostumbrado demasiado a la apertura de Hanguang-jun hacia él. Había olvidado que con este maestro más joven, todavía tenían que llegar a buenos términos entre ellos.

Acosarlo así era algo intolerable, ¿no?

Luego estaba que...

...Lan Wangji realmente lo odiaba, ¿no?

Un sentimiento agrio y amargo brotó de su corazón, adormeciendo su mente hasta el punto que casi se sintió mareado. Se echó hacia atrás, silencioso y entumecido, sin saber qué hacer para mejorar la situación para ambos.

¿Qué podría decir Wei Wuxian? Tal vez la línea de tiempo de donde era Hanguang-jun, algo fue diferente. Tal vez solo hubo un camino tomado que cambió el curso de la historia. Quizás Wei Wuxian hizo algo mal. Quizás... quizás, Hanguang-jun simplemente lo estaba complaciendo.

La profundidad de este dolor sorprendió incluso a él mismo.

Después de todo, no fue hace mucho tiempo que habría podido ignorar este tipo de sentimientos y reírse de ellos, pero de alguna manera, Lan Wangji se había convertido en una persona importante en su corazón., ya no podía hacer eso. Hanguang-jun también era alguien a quien Wei Wuxian admiraba inmensamente. No podía soportar la idea de que un hombre así lo compadeciera como un niño pequeño.

Wei Wuxian miró el cepillo roto una vez más y sonrió débilmente.

—Lo siento.—dijo.—No tienes que creerme. Ni siquiera tengo que agradarte. Yo solo... no, no importa. Lo siento.

Se puso de pie, con la intención de volver a su asiento y sin atreverse a mirar a Lan Wangji por pura vergüenza. Terminaría su trabajo con diligencia y no lo molestaría más.

Pero mientras se movía, la mano de Lan Wangji se disparó para agarrar su muñeca, tirando de él hacia abajo con un fuerte tirón.

—¡¿Eh?!

Wei Wuxian cayó sobre su regazo, una posición incómoda que lo dejó gateando hasta que terminó demasiado cerca del rostro de Lan Wangji, con los brazos atrapados entre sus cuerpos. Un pensamiento repentino vino a su mente, que esta posición se sentía demasiado íntima.

Con eso, se volvió demasiado consciente de cómo sus piernas habían caído alrededor de la cintura de Lan Wangji y cómo su frente estaba tan cerca del de Lan Wangji. Si movía la cara solo un poco, sus labios rozarían los de Lan Wangji, parecían suaves al tacto. Lan Wangji también lo estaba mirando con demasiada atención, lo que le hizo querer esconderse.

La cara de Wei Wuxian se puso roja.

—¡Esto es demasiado!—dijo, retorciéndose, tratando de apartarse.—Lan Er-gege, ¿estás tratando de intimidarme? ¿No crees que has tenido suficiente? Lo entiendo, está bien, realmente no necesitas hacer esto.

Lan Wangji respiró hondo de nuevo, su agarre pareció hacerse más fuerte y su otra mano descansaba firmemente en las caderas de Wei Wuxian, conectándolo a tierra.

—No... no me desagradas.—dijo Lan Wangji.—Te creo.

Había un pequeño ceño fruncido, tirando de sus labios hacia abajo. Un surco comenzaba a formarse entre sus cejas. ¿Estaba frustrado?

Wei Wuxian se rio nerviosamente.—Lan Zhan, no tienes que mentir para evitar mis tontos sentimientos. Prefiero que seas honesto conmigo, ¿no es parte de tus reglas de todos modos?

Wei Wuxian palmeó ligeramente el rostro de Lan Wangji con su mano libre. Se sintió sorprendentemente cálido. Pensó que sería genial tocarlo, como el hielo.

Trató de levantarse una vez más, pero Lan Wangji tiró de él de nuevo.

Su rostro se estaba volviendo demasiado caliente, y era una sensación que se volvía más familiar cuanto más interactuaba con Lan Wangji o su yo futuro.

Lan Wangji dijo.—Está prohibido mentir.

—Lo sé.—prácticamente se lamentó Wei Wuxian.—Está bien, ¡te creo ahora! Lan Zhan, estás siendo tan extraño estos días. No se que quieres de mí.

Lan Wangji.—Quiero que responda a mi pregunta.

—¿Pregunta?

Lan Wangji frunció el ceño.—¿Por qué a Wei Ying le gusta tanto Hanguang-jun?

Wei Wuxian.—¿Qué quieres decir?

Lan Wangji dijo hoscamente.—Wei Ying siempre se aferra a él descaradamente. Wei Ying siempre está buscando su atención. Wei Ying siempre está pensando en él.

Wei Wuxian se sintió ofendido de alguna manera, como si Lan Wangji lo estuviera acusando de algo.—¡No me aferro! ¡Y-y Hanguang-jun es simplemente bueno conmigo! ¡Es una persona genial! ¡¿Cómo puedo no querer verlo?!

—¿Cómo es genial?—Lan Wangji insistió.—¿Cómo es que es bueno?—Su rostro estaba aún más cerca ahora, si era posible, con los ojos entrecerrados de una manera feroz. Estaban a milímetros el uno del otro.

Wei Wuxian tartamudeó y tartamudeó. No pudo evitar seguir mirando los labios fruncidos de Lan Wangji. Parecía como si el aire que respiraba lo estuviera dando Lan Wangji, él mismo, y la proximidad lo mareaba tanto que sentía que se iba a desmayar, allí mismo, en los brazos de Lan Wangji.

Para evitar perder la cabeza, solo podía abrir la boca y dejar que las palabras salieran de su lengua:

—¿Cómo- cómo que el es bueno? Bueno. Bueno, quiero decir- bueno. ¡ Quiero decir! Porque- porque él es genial- bueno, quiero decir. Tú, en el futuro, ese es nuestro mayor Lan. Hanguang-jun, yo me deja hablar todo el día, y no se queja cuando... cuando le pregunto si puede cargarme, y. ¡Y! ¡Me compra cosas! ¡Y me cocina comida deliciosa y me compra baratijas! de los mercados, y me acaricia la cabeza amablemente, y él...

—¡Me llamo fácil y me tiró por la ventana!—Wei Wuxian estaba tan indignado que estaba jadeando por el esfuerzo cuando terminó de contar su historia. Había estado paseando y agitando los brazos, sin duda pareciendo tonto a cualquiera que pasara por su pequeño lugar en la cima de una pequeña colina.

Sentado en la hierba suave estaba su audiencia, Jiang Cheng, que tenía una mirada extraña y nerviosa en su rostro.

—Lan Wangji te sostenía en su regazo.—repitió finalmente.

Un sonrojo rosado cubrió las mejillas de Wei Wuxian, pero volvió la cabeza con una hrmph.

—Sí, ya repasé esa parte.—dijo Wei Wuxian en voz alta, moviendo los pies. Cruzó los brazos a la defensiva.—Pero lo más importante, de alguna manera lo ofendí de nuevo y no sé qué hice esta vez.

—El segundo maestro Lan te estaba sosteniendo... así.—La cara de Jiang Cheng parecía como si se hubiera dado cuenta de algo horrible. Algo tan terrible que su mundo entero estaba cambiando.—A ese tipo ni siquiera le gusta tocar a la gente. No le gusta la gente.

Wei Wuxian se mordió los labios, sintiendo que él también estaba al borde de una nueva revelación. Sin embargo, todavía no estaba de humor para investigar eso.

—¡Detente.—él chasqueó.—¡¿No estabas escuchando mi historia?! ¿Por qué no estás enojado también?

Jiang Cheng le agitó la mano y dijo en un tono débil.—No, cállate, definitivamente estaba escuchando. Permítanme decir esto, que he estado pensando en muchas cosas estos últimos días.

Wei Wuxian sospechó de inmediato.—¿Cómo que?

—Como el hecho de que Hanguang-jun, ese es el yo futuro de Lan Wangji, te mima inmensamente. Al principio, pensé que ese tipo finalmente aprendió a ser más paciente. Pero Wei Wuxian, lo tienes envuelto alrededor de tu dedo meñique.

Wei Wuxian.—¿Sí?

Jiang Cheng negó con la cabeza, mientras chasqueaba.—Estamos hablando de Lan Wangji, que es un pez tan frío. Sin embargo, su yo futuro te adora, no se enfada contigo, incluso te sonríe y está demasiado familiarizado con tus pensamientos y hábitos.

—Es bueno conmigo.—dijo Wei Wuxian, groseramente mientras se negaba a mirar a Jiang Cheng a los ojos.—Te dije que Lan Wangji y yo somos amigos cercanos.

Jiang Cheng se puso de pie de un salto, las venas rojas subieron a sus ojos. Ya estaba cayendo en la histeria.

—¡Wei Wuxian! ¡Escucha! Te considero mi hermano jurado y quiero que estés a mi lado cuando me convierta en Líder de Secta, y te juro que si piensas en mudarte a la Secta Gusu Lan, te romperé las piernas. aquí y ahora!

—¡Me niego! ¡Me niego a llamar a Lan Wangji mi cuñado ! ¡No puedes obligarme! ¡Esto es ilegal ahora, contra la ley de Yunmeng! No puedes casarte con él...

Wei Wuxian gritó, saltando sobre Jiang Cheng para cubrirse la boca y procedió a derribarlos accidentalmente al suelo, donde ambos rodaron varios pasos colina abajo y directamente hacia un desafortunado grupo de discípulos Lan que pasaban y los envió a todos a un lugar desafortunadamente estancado.

Wei Wuxian se había golpeado particularmente la cabeza lo suficiente como para dejarse inconsciente, por lo que cuando lo enviaron a los curanderos, a Jiang Cheng se le asignó realizar tareas laboriosas y copiar tres veces el libro de Moralidad y juicio .

Mientras Jiang Cheng limpiaba los pisos, pensó amargamente que Wei Wuxian se golpeó la cabeza a propósito para poder escapar del castigo.

Estaba equivocado, por supuesto. Wei Wuxian tenía como objetivo sacar los recuerdos del día directamente de su cerebro, un intento fallido, pero la falta de castigo fue una ventaja.

Cuando Wei Wuxian se despertó en las salas de curación ante la tranquilizadora presencia de Hanguang-jun, se alegro. Hanguang-jun lo miró como siempre, con abierta calidez y cariño escrito en cada una de las apenas visibles líneas de su rostro, casi se sintió como devoción. Wei Wuxian se preguntaba si era devoción.

Continuó preguntándose cuando Lan Wangji llegó en los siguientes minutos, rígido mientras saludaba respetuosamente a su yo mayor. Pero sus ojos eran duros y pedernales, y visiblemente frunció el ceño ante cómo Wei Wuxian inconscientemente ya había comenzado a aferrarse al brazo de Hanguang-jun. Hanguang-jun no se veía tan suave cuando saludó a su yo más joven, pero había una especie de diversión helada en la forma en que lo miraba.

Honestamente, estos dos... realmente eran la misma persona, ¿no es así? ¿Cómo podría Wei Wuxian seguir olvidándose?

Mientras que los Lan, del presente y del futuro, se miraban el uno al otro en un frío silencio, Wei Wuxian se envolvió más con la manta y se dio la vuelta para mirar al otro lado. Su rostro estaba completamente enrojecido de un rosa super rosado, y tenía demasiado miedo para considerar cómo se vería su expresión.

No pudo evitar recordar, estar sostenido en el regazo de Lan Wangji, estar tan cerca de esa cara de jade, y que en ese momento, había sentido que estaban conectados por una sola respiración.

Se sonrojó de un rojo más intenso.

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NOTA DE LA AUTORA:

Lo que mucha gente olvida es que ... Lan Wangji realmente se muestra como un tipo enojado, 'Odio a todos los que rompen las reglas' antes de que ocurrieran todas las cosas de la guerra. Literalmente, todos pensaron que odiaba a Wei Wuxian.

Este niño realmente no sabía cómo manejar bien sus asquerosas hormonas adolescentes lol

También sí, mi sesgo de torsión de tamaño podría estar brillando en este capítulo 👀

** También solo para aclarar, en caso de que alguien lo tome de la manera incorrecta, en realidad no creo que ser un adolescente sea asqueroso, pero estoy seguro de que todos recuerdan lo asqueroso que se sintió ser un adolescente. ¡O era sólo yo?