Jisung resopló con frustración por quinta vez, su uniforme se sentía incómodo y ni siquiera sabía si su corbata estaba bien puesta. No quiso aceptar la ayuda de Chan, su orgullo no se lo permitía, no podía dejar de hacer algo tan básico como vestirse, pero le estaba costando más de lo esperado y ya se estaba hartando.

Cuando creyó estar listo, caminó a paso lento hacia su puerta, extendió sus manos frente a él para alcanzarla, siendo esa su primera vez movilizándose por su propia cuenta ya que siempre estaba Félix para ayudarlo. Salió de su habitación con éxito, sintiendo el temor recorrer su cuerpo, conocía perfectamente su hogar, así que cerró sus ojos con fuerza y empezó a caminar lentamente haciéndose una imagen mental del lugar. Luego de unos muy largos minutos, por fin llegó al último escalón, dejando salir el aire que no sabía que estaba reteniendo, lo había logrado.

ㅡ¿Sunggie?ㅡllamó Chan desde la cocina al escucharlo bajarㅡ¡Jisung!ㅡexclamó, corriendo hacia su hermano, revisando por todas partes para cerciorarse que no estuviera lastimado.

ㅡChan, estoy bienㅡsuspiró con cansancio el menor.

ㅡ¿Cómo rayos bajaste? ¿No pensaste en que podías caer y lastimarte? ¡Papá me mataría!

ㅡNo te pongas asíㅡhizo un pucheroㅡConozco la casa perfectamente, puedo cuidarme.

Chan no dijo nada más, mirando con atención el uniforme de Jisung, sintiendo una punzada de tristeza.

ㅡVen aquí, terminaré de arreglarteㅡdijo suavemente al menor, empezando a ordenar sus ropas y su cabello que no estaban de la manera adecuada.

ㅡSoy un inútilㅡsusurró con molestia, dejando que su hermano por primera vez tocara su cabello como quisiera, al fin y al cabo no podía hacerlo por sí mismo y no le quedaba de otra.

ㅡMocoso, no digas eso, no es la gran cosaㅡhabló con comprensiónㅡY... Ya está. Ahora si, podemos irnos.

ㅡ¿Papá ya se fue?ㅡpreguntó Jisung acomodando la mochila en su hombro.

ㅡSi, hace ratoㅡsoltó, tomando las llaves de su auto y tomando la mano de su hermano para guiarlo.

ㅡCreo que papá no quiere vermeㅡdijo con amargura el menorㅡHace días que ni siquiera llega a mi habitación a saludarme.

ㅡTiene muchas cosas que hacer, sabes que no es eso, Sunggie.

Jisung guardó silencio, no creía en las palabras de Chan, sabía que su padre no podía ni verlo después de lo que pasó, a lo mejor solo quería ignorar el hecho de que estaba ciego.

En el asiento trasero, Jisung estaba terriblemente ansioso, quería escapar, sabía que no sería fácil y que lloverían muchas preguntas, y claro que no las iba a responder, solo esperaba ser lo suficientemente fuerte para afrontarlo.

ㅡEstamos aquíㅡavisó Chan, sintiéndose temeroso, no quería que su pequeño hermano fuera discriminadoㅡ¿Quieres que te acompañe hasta tu salón de clases?ㅡpreguntó, desabrochando su cinturón de seguridad.

ㅡNo, no. Dijiste que Félix me ayudaría.

ㅡPero Félix aún no viene, dijo que pasaría a desayunar algo rápido antes de venirㅡexplicó el mayor.

Jisung se resignó, tendría que ser escoltado por su hermano mayor hasta su salón o tendría que irse solo con el riesgo de caerse frente a toda la escuela.

ㅡHey, Jisungㅡescuchó una voz demasiado familiar afuera del autoㅡNo sabía que regresarías hoy.

El menor no respondió, pensando en por qué la vida era tan injusta con él.

ㅡ¡Hey, hola!ㅡsaludó Chan con una enorme sonrisaㅡ¿Eres amigo de Jisung?

ㅡSomos compañerosㅡrespondió el castaño, abriendo la puerta de JisungㅡYo puedo acompañarlo a su salón.

ㅡTu cara se me hace muy familiar... En fin, me harías un enorme favor, ¿conoces a Felix? Se supone que estaría aquí, pero ese niño no aparece, y pues parece que a este tonto le da vergüenza que yo lo vaya a dejar.

ㅡ¡Chan, no me dejes ir con él!ㅡsusurró desesperado el menor hacia su hermano.

ㅡTe estoy escuchando Jisung, mejor vamos que es tarde, no seas orgullosoㅡdijo Minho, tomando el brazo de Jisung y sacándolo con cuidado del auto.

ㅡEstarás bien, Sung. Felix te llevará a casaㅡavisó Chan, poniendo su cinturón nuevamente.

ㅡ¡Ten cuidado!ㅡgritó Jisung con preocupación. Desde el accidente siempre tenía el temor de que su hermano o su padre no regresaran a casa, estaba traumado.

ㅡClaro, Jisung, te veré esta nocheㅡse despidió, el mayor, alejándose en su auto.

ㅡBien, déjame aquí, esperaré a Felixㅡdijo con seriedad, tratando de zafarse del agarre de Minho.

ㅡNo seas idiota, no vas a quedarte aquí, vamosㅡhabló Minho, casi arrastrándolo hacia le interior de la escuela.

Con resignación, Jisung hizo caso. Se imaginaba las miradas de los demás juzgándolo, escuchaba sus risas burlonas y los murmullos con cada paso que daba en el pasillo. Era obvio, el gran Han Jisung había regresado a la escuela con su brazo roto, su cara con pequeñas cicatrices por los vidrios que lo hirieron y para empeorar todo, siendo guiado y ayudado por Lee Minho, su eterno enemigo.

Definitivamente sería una mierda de día.

ㅡ¿Entonces decidiste ayudarlo?ㅡpreguntó con asombro ChangbinㅡEse chico no dejará que lo hagas.

ㅡLo séㅡsuspiró el castañoㅡPero no puedo solo dejarlo así. Es cierto que tiene a Felix, pero ahora en la mañana no apareció.

ㅡEres todo un príncipe azulㅡsuspiró Changbin mientras pestañeaba hacia su mejor amigo como si fuera una chiquilla enamorada.

ㅡNo seas estúpidoㅡempujó al más bajo, haciéndolo reírㅡVete a casa, yo me quedaré más tiempo, tengo que ensayar.

Al momento de girarse para irse, Changbin se encontró con un muy agitado Felix que iba corriendo hacia ellos con demasiada preocupación en su rostro.

ㅡ¡Chicos! ¿Han visto a Jisung? No lo encuentro por ninguna parteㅡdijo Felix, tratando de estabilizar su respiración por lo cansado que estaba.

ㅡEspera, ¿perdiste a Jisung?ㅡcuestionó Minho.

ㅡA mitad de la clase dijo que iría al baño y no dejó que lo acompañara así que sólo se fue, y ahora no sé en donde está.

ㅡ¿¡Cómo se te ocurre solo dejarlo ir así!?ㅡexclamó Minho con desesperaciónㅡChan va a matarte.

ㅡSolo ayúdenme a encontrarloㅡpidió Felix con súplica y ganas de llorar, estaba asustado.

Minho se dirigió a toda prisa hacia el área de salones de ensayo, sintiendo el vago presentimiento de que podría estar ahí. Entró al salón al que Jisung solía ir, pero estaba vacío, buscó en los demás salones y nada. ¿Cómo podía perderse alguien ciego? Lo normal es que alguien mínimo lo reporte con algún profesor o algo así, pero no había rastros de él.

Abrió la última puerta de salones de ensayo, siendo esa la de baile. Asomó su cabeza para buscarlo con la mirada, hasta que por fin lo encontró en una esquina del enorme salón. Sintió que su alma regresó al cuerpo, escribió un texto a su mejor amigo, indicándole que lo había encontrado y que él lo llevaría a casa.

ㅡOye...ㅡhabló Minho, adentrándose al salón y cerrándolo a sus espaldas.

Jisung dio un leve respingo por el susto, limpiando rápidamente sus lágrimas y moviendo su cabeza a diferentes direcciones tratando de saber de donde provenía la voz del mayor.

ㅡJoder, Jisung, no puedes solo desaparecer así, Felix está que se muere de la preocupación, tu hermano iba a matarlo yㅡ

ㅡLo sientoㅡinterrumpió el menor, tratando de ponerse de pie, lo cual se le hacía un poco difícil por su brazo rotoㅡYo ya iba para allá.

ㅡ¿Y cómo pensabas hacerlo? ¿Al menos sabes en donde estás?

Jisung guardó silencio, de verdad no sabía en donde estaba, nada a su alrededor le parecía familiar, pensó que estaría ahí encerrado por mucho más tiempo.

Minho estaba molesto hasta que se detuvo a observar al menor. Su ropa estaba desarreglada y su cabello estaba muy desordenado y húmedo. Algo le había pasado.

ㅡ¿Qué fue lo que te pasó?ㅡpreguntó Minho con más calma, acercándose al contrario, tocando su cabello con duda, a lo que el menor se encogió por el contacto repentino.

ㅡYo... No lo sé muy bienㅡsu voz salió temblorosaㅡYo fui al baño y me encerraron aquíㅡlas lágrimas habían empezado a salir.

ㅡ¿Sabes quiénes fueron?ㅡMinho estaba empezando a molestarse, Jisung estaba tan indefenso y temeroso que una fuerte sensación de protegerlo invadió su pecho.

Jisung negó, solo sabía que lo habían empujado varias veces entre varias personas dentro del baño, haciéndolo caer unas cuantas veces porque no sabía de donde agarrarse o cómo defenderse, luego habían tirado de su cabello y le habían echado agua, para al final arrastrarlo hasta quien sabe donde y lo dejaron encerrado.

Minho no sabía cómo comportarse, Jisung no estaba siendo irritante ni molesto con él, solo estaba parado con la mirada perdida y con un leve temblor en su cuerpo. Totalmente indefenso.

Extendió su brazo hasta que sus dedos tocaron las mejillas del menor, limpiando las lágrimas que habían caído, viendo como Jisung seguía temblando ante el toque, cerrando sus ojos con fuerza. Y de un momento a otro, ya tenía a Jisung entre sus brazos, sobando su espalda en señal de apoyo, tratando de tranquilizarlo. Era primera vez que lo tenía tan cerca y que lo tocaba por tanto tiempo.

Segundos después, Jisung reaccionó, alejándose de golpe del cuerpo de Minho, sintiendo sus mejillas arder, la persona que se supone que odia lo estaba abrazando de esa manera, haciéndolo sentir un poco confundido y molesto.

ㅡE-Eso no es necesario, no lo hagasㅡdijo Jisung con su voz seria de nuevo, esa voz que siempre usaba para hablar con Minho.

ㅡLo sientoㅡrespondió Minho, retrocediendo varios pasosㅡYo tengo que ensayar. Felix ya se ha ido porque sabe que estás conmigo, así que tendrás que esperar a que termine de ensayar para llevarte a casa.

ㅡ¿Y qué esperas que haga? ¿Que me siente a ver como bailas?ㅡahí estaba de nuevo su sarcasmo y su voz dura.

ㅡSolo quédate sentadoㅡdijo Minho también con seriedad, tomando del brazo sano al menor para acercarlo a un cómodo y pequeño sillón del salónㅡNo tardaré.

Jisung suspiró derrotado, no le quedaba de otra, no podía irse. Minho encendió el reproductor de música, dejando sonar una melodía calmada y relajante. Jisung sabía que estaba bailando algo lírico, esa era la especialidad del mayor a pesar de saber otros tipos de baile.

Mientras más canciones sonaban, Jisung se adentraba más en su mente, imaginando a Minho haciendo todo tipo de pasos con esa música, sintiéndose un poco perdido en esa escena que su cabeza creaba. No podía verlo, pero sabía que estaba haciendo majestuosos movimientos tal y como siempre lo había visto sobre el escenario.

Cuando la música se detuvo, sintió la realidad aparecer de repente, sintiéndose increíblemente estúpido por tales pensamientos, ¿por qué estaba fantaseando con Minho bailando? Era realmente estúpido, siempre odió la manera en la que bailaba y creía ser el mejor. Alejó cualquier pensamiento de su mente, sintiéndose abrumado de nuevo por el silencio del lugar.

ㅡ¿Sigues aquí?ㅡpreguntó el menor con preocupación, no quería estar solo en ese lugar de nuevo.

ㅡEs hora de irnosㅡdijo Minho de nuevo con seriedad, tomando sus cosas y agarrando suavemente a Jisung para salir de ahí.

Fueron en silencio, a Minho lo llenaba una extraña sensación, una sensación que nunca había sentido estando cerca de Jisung, y eso no le estaba gustando.

¿Por qué se le había quedado viendo por tanto tiempo en silencio deseando poder abrazarlo de nuevo?

💫Espero que les esté gustando💫