ㅡSung, Minho parece molestoㅡdijo entre risas el pelirrojo.

ㅡNo estoy molestoㅡhabló MinhoㅡAdemás, ¿estás ebrio?

ㅡSolo un poquito, no es mucho, en serio estoy bien.

ㅡAjá, si.

Changbin se acercó, mirando con extrañeza a Félix que se miraba un poco ido, agarró su muñeca con la intención de llevarlo a dormir, pero el menor se soltó rápidamente.

ㅡNo quiero dormir contigo, eres un tonto, el chico más tonto y feo que he visto, así que déjame en pazㅡhizo un pucheroㅡIré a tu habitación, Sung.

ㅡ¿Ahora qué hice?ㅡpreguntó viendo al otro par mientras Félix subía las escaleras al segundo piso.

ㅡEstá triste porque tú eres un idiota con élㅡrespondió Jisung, soltando un fuerte suspiro.

ㅡ¿Tiene que ver con los chicos con los que venían coqueteando?ㅡsoltó Minho, viendo la expresión de sorpresa en el rostro de Jisung.

ㅡ¿De qué hablas?

ㅡEl chico que venía contigo te estaba coqueteando, ¡Incluso se atrevió a tocar tus mejillas!

Jisung empezó a reír un poco divertido, Minho estaba celoso y era entendible, tal vez desde su punto de vista las cosas se podían malinterpretar, solo debía explicarle para que todo estuviera bien.

ㅡNo me estaba coqueteando, era muy agradable.

ㅡEres demasiado lindo para andar solo por ahí, los chicos se te pegan y eso no me gustaㅡse cruzó de brazos, haciendo un puchero.

ㅡHey, mejor ven aquí y dame un besitoㅡextendió sus brazos, esperando a que Minho le hiciera casoㅡRápido.

Minho sonrió ante la ternura de Jisung e hizo lo que le pidió. Le dio un corto beso y lo abrazó con fuerzas, dejando pequeños besos en su frente.

ㅡChicos... Sigo aquíㅡinterrumpió el rubioㅡMuy lindos y todo, pero sigo sin saber por qué Félix está enojado conmigo desde la tarde y aparece de repente borracho y con otro chico.

ㅡEres tonto, Changbinㅡdijo Jisung, aún abrazado a su novioㅡFélix está molesto porque lo lastimaste.

ㅡ¿Cuándo hice eso?

ㅡPor Dios, es por lo que me dijiste esta tarde, ¿no lo recuerdas? Deberías de arreglar todo esto antes de perderloㅡregañó Minho un poco desesperado con la situación.

Esa misma tarde, cuando Félix se fue, Changbin le dijo a Minho que estaba asustado, que una relación con Félix lo asustaba por miedo a arruinarlo todo y romperle el corazón, estaba inseguro en cuanto a todo eso, no negaba que le gustaba el pelirrojo, pero quería estar seguro antes de dar otro paso.

Estaba siendo realmente idiota.

ㅡ¡Jisung!ㅡllamó el pelirrojo desde el segundo pisoㅡ¡Ven aquí que no quiero estar solito!

ㅡ¡Ya subo!ㅡrespondió con una sonrisaㅡBien, debo ir y hacer que duerma antes de que empiece a hacer destrozos.

ㅡPero... Es nuestra habitación, Sung, no se puede quedar ahí.

ㅡLo siento, Min, no puedo echarloㅡse encogió de hombros.

ㅡTodo es tu culpa, Changbin, eres un mal amigoㅡle reclamó al rubio que solo se indignó.

Jisung rió.

ㅡ¿En dónde está Chan?ㅡpreguntó Jisung antes de empezar a subir.

ㅡSigue afuera con Jeongin haciendo quien sabe qué.

Jisung simplemente asintió y subió las escaleras. Logró llegar a la habitación del fondo con un poco de dificultad, pero Félix lo ayudó a acomodarse en la amplia cama.

ㅡEstoy muy triste, quiero dormir por mucho tiempoㅡFélix hizo un pucheroㅡ¿Es porque soy feo o algo así?

El pelinegro delineó el rostro de su mejor amigo y negó.

ㅡEres muy lindo.

Félix sintió las lágrimas acumularse en sus ojos, a lo mejor era por el alcohol que estaba tan sensible, pero tenía muchas ganas de llorar.

ㅡEntonces que se jodas si no quiere estar conmigoㅡsorbió su narizㅡÉl se lo pierde.

ㅡExactamente, así que mejor duerme antes de que venga Chan y se entere de que has estado tomando alcohol.

Félix asintió y se pegó a Jisung, subió su pierna y su brazo al pelinegro para poder dormir más mas a gusto. Jisung simplemente se dejó abrazar, su amigo nunca había demostrado estar mal con algo, y saber que estaba tan triste lo hacía sentir mal.

Una hora más tarde, Félix había caído totalmente dormido, no se movía, parecía inerte. Trató de hacerse a un lado, pero era imposible, él solo no podría salir de ahí.

ㅡJisung, ¿sigues despierto?ㅡse asomó por la puerta el castaño.

ㅡSi, pero no hagas ruidoㅡsusurró.

Minho entró a la habitación siendo seguido por Changbin, miraron al par que estaban enredados de una extraña forma, más que todo por Félix que estaba casi encima del pelinegro. Changbin rió al ver lo pacífico que se veía Félix, de verdad le gustaba y estaba siendo muy estúpido, debía aclarar todo con él.

ㅡMe llevaré a Félixㅡdijo Changbin, acercándose hacia el mencionado.

ㅡNo creo que puedas moverlo, es un tronco.

Changbin empezó a mover con suavidad a Félix, tratando de despertarlo para que se hiciera a un lado, pero la boca del menor solo emitía quejidos.

ㅡ¿Binnie?ㅡmedio reaccionó sin abrir totalmente los ojos el pelirrojoㅡBinnie tonto.

ㅡVen, vamos a nuestra habitación, no puedes quedarte aquí.

Félix estaba más dormido que despierto, por lo que sin estar muy consciente, se sentó y extendió sus brazos en espera de ser cargado. Changbin entendió rápidamente la indirecta y lo cargó modo de que el menor pudiera apoyar su cabeza en su hombro, cayendo dormido nuevamente.

ㅡHablaré con él en la mañana, lo prometoㅡle dijo al otro par antes de salir de la habitación.

Jisung se quedó en silencio un momento, escuchando como Minho rebuscada entre sus cosas, supuso que algo para dormir, pero le parecía extraño que estuviera tan callado. Jugueteó con sus dedos un momento hasta que sintió a su novio sentarse en la orilla de su cama.

ㅡVen, te ayudaré a ponerte cómodoㅡhabló Minho, tomando el brazo del pelinegro para que se acercara, ya había preparado la ropa que el menor usaría.

ㅡ¿Por qué estás tan callado? ¿Te pasa algo?ㅡcuestionó, dejando que Minho lo desvistiera, para segundos después, ser vestido con su ropa de dormir.

ㅡEse chico te estaba coqueteandoㅡsuspiró, tratando de no sonar celoso.

ㅡPensé que habíamos dejado eso hace un rato.

ㅡMe convenciste con un besoㅡrió por lo bajoㅡPero no me explicaste.

Jisung suspiró, dejándose caer en la cama.

ㅡLos conocimos en el comedor del club de playa, le dieron cerveza a Félix, uno de ellos quiso bailar con él, yo no quería porque me sentía incómodo así que le pedí regresar. En el camino hacia acá el chico que venía conmigo fue muy agradable, hablamos de cosas muy superficiales y es todo, ni siquiera sé su nombre.

ㅡEra un chico guapoㅡadmitió Minho, recostándose junto al menor.

ㅡSi, bueno, no lo séㅡrió.

ㅡTocó tus mejillas.

ㅡTodos lo hacenㅡhizo un pucheroㅡAdemás, le dije que tengo novio, así que se disculpó por hacer eso.

Minho se sintió verdaderamente estúpido, no quería ser un novio posesivo, estaba seguro de que Jisung lo quería, aún no sabía si lo amaba, pero él si estaba muy enamorado. No quería arruinar las cosas con algo tan tonto como los celos, haría las cosas bien.

ㅡLo sientoㅡsusurró, tomando la mano de Jisung para dejarle un pequeño besoㅡEstoy actuando como un tonto.

ㅡEstá bien, lamento sin las cosas se malinterpretaron, no quería que se viera de esa manera.

ㅡLo séㅡMinho sonrió para sí mismo.

Estar junto a Jisung se sentía siempre tan nuevo, el cariño que tenía por él era tan diferente al que sintió algún día por alguien más, no quería soltarlo, y el hecho de que pronto entrarían a la universidad lo estaba empezando a preocupar, ¿Qué tal si tenían que mudarse? ¿Qué tal si debían viajar incluso a otro país? Era imposible que con las calificaciones que ambos tenían y su talento, no les ofrecieran alguna beca. Minho no quería ni pensar en tener que terminar con su lindo y adorado novio, no cuando se sentía tan enamorado por primera vez.

ㅡOye, Min, ¿tienes sueño?

La voz del pelinegro lo sacó de sus pensamientos, haciendo que pusiera su atención en él, y al verlo no pudo sentirse más feliz.

ㅡNo, creo que es temprano todavíaㅡrespondió, aún perdido en los detalles del rostro de Jisung.

ㅡCreo... Creo que deberíamos aprovechar esta enorme cama, ¿no lo crees?

Y ahí estaba de nuevo ese Jisung que no era tímido. Minho podía jurar que habían cambiado a su lindo novio por otra persona. Sin embargo, Jisung trataba de no ser tan cohibido en cuanto a eso, sabía que Minho no iba a negarse, y después de todo, ¿por qué debería tener vergüenza? Había estado privado de tantas cosas hasta que besó por primera vez al castaño, entrando a un mundo de nuevas sensaciones que no hacían nada más que volverlo más adicto, sentía que cada día necesitaba a Minho con él, y no iba a desaprovechar cualquier oportunidad.

ㅡMenos mal lo dices porque estaba a punto de volverme locoㅡdijo con voz suave mientras tomaba puesto sobre él.

Jisung rió, metiendo sus manos dentro de la camiseta del castaño, enviándole una indirecta muy directa sobre que no quería que siguiera estorbando, por lo que hizo caso y pasó la prenda sobre su cabeza, quedando con el torso descubierto.

Minho tomó las manos de Jisung y las puso en su pecho, dejando que lo tocara como quisiera. Sonrió ante lo agitado que el menor se veía, estaba inquieto, dejando escapar suaves suspiros por la cercanía. Empezó dejando un camino de suaves besos desde su mandíbulas hasta sus clavículas, causando estragos en él pelinegro. Se detuvo un momento para verlo de nuevo, viendo la mueca de urgencia en el menor.

ㅡ¿Por qué te detienes? ¿Qué pasó?ㅡpreguntó, pasando sus manos en los brazos del mayor.

La respiración de Minho se detuvo por un momento, su corazón latía más rápido.

Estaba enamorado de Han Jisung, y moría por decírselo, deseaba escuchar lo mismo por parte de él, deseaba que su amor fuera recíproco, y aunque sabía que Jisung lo quería mucho, no era lo mismo que amar.

Él quería ser amado, tanto como él lo estaba amando.

ㅡ¿Minho?

ㅡJisung... Yo...ㅡdebía decirle, necesitaba hacerlo, y si no lo amaba, haría que lo hicieraㅡJisung, te amoㅡconfesó con voz firme, no había vuelta atrás con eso, solo podía terminar con un corazón roto, pero lo valía totalmente si del pelinegro se tratabaㅡTe amo tanto que no puedo seguir guardándoloㅡapartó los mechones que caían desordenados en su frente, sobando su rostro en el procesoㅡNo importa si aún no me amas, sé que un día lo harás, y estaré esperando para cuando estés seguro de lo que sientes por mi. Sé que te gusto, que me quieres, pero quisiera escucharte un día decir que me amas. Comprendo totalmente si es muy pronto, es solo que me terminé enamorando más de lo que imaginé, y estoy feliz por sentir esto por ti.

Las manos de Jisung se quedaron estáticas en los brazos de Minho, los sonidos de su corazón palpitando con fuerza se escuchaban perfectamente, nunca había escuchado esas palabras de alguien que no fuera su familia, ser amado por alguien más que no tenía ninguna obligación de hacerlo, lo hacían sentir demasiado impresionado. La confesión de Minho había calado en lo más profundo de su ser, recorriendo cada parte de él, y al escucharlo, sabía perfectamente lo que sentía, no necesitaba más tiempo para dar una respuesta.

Tomó el rostro de Minho entre sus manos, se elevó un poco para poder alcanzarlo y lo besó, lo besó con tanto amor y cariño que fuera posible, la mezcla de sentimientos era casi palpable, la intensidad era notoria, tanto que Minho pudo sentir la respuesta con solo ese beso.

ㅡTambién te amo, Minhoㅡsusurró sobre sus labios, dejando pequeños picos cariñosos sobre la sonrisa que el mayor acababa de dibujar en su rostroㅡTe amo mucho, quiero que te quedes conmigo siempreㅡlo volvió a besar.

Minho tenía ganas de ir por toda la casa gritando que Jisung lo amaba, no entendía cómo es que esas palabras lo habían llenado tanto, era una sensación tan nueva para él. Nunca pensó que un día caería totalmente rendido a Jisung, el chico con el que vivió discutiendo por años, el chico que ese mismo año había saboteado su presentación frente a toda la escuela. Pero ese Jisung era el mismo que se ponía tímido, que deseaba tener amigos aunque no lo admitiera, era el mismo chico que podía ser amable y cariñoso, y Minho se sentía tan afortunado por tener todas las facetas del gran Han Jisung.

Las traviesas manos de Jisung en toda su espalda lo hicieron recordar que estaban en medio de algo muy importante, regresándolo a ese íntimo momento en el que sería libre de decirle lo mucho que lo amaba con cada toque, con cada beso, con cada roce obsceno, porque todo él le pertenecía al pelinegro que gemía su nombre bajo su cuerpo.

Y no había nada más que lo hiciera sentir mejor que eso.

Changbin no logró quedarse dormido después de despertarse gracias a que Félix había puesto todo su brazo en su cara, el reloj a su lado marcaban un poco más de las siete de la mañana, miró al lindo chico a su lado, sus pecas eran más notorias con la luz de la mañana, su cabello rojo demasiado desordenado, pero brillante, y sus labios entreabiertos de los que salían balbuceos incoherentes. Se levantó luego de un rato, lavó sus dientes, se remojó la cara y se recostó de nuevo, sintiéndose totalmente incapaz de seguir descansando, su estómago se revolvía con solo la idea de hablar sobre sus sentimientos con Félix. Estaba consciente de que había sido muy idiota al decirle lo que le dijo el día anterior, sus palabras fueron tan incorrectas que no podía perdonarse por haberlo lastimado. Félix había demostrado serㅡliteralmenteㅡun sol con él, todo él brillaba y también todo a su alrededor, ni siquiera sabía cómo es que tenía la suerte de tenerlo.

Pero lo había arruinado.

Félix abrió sus ojos luego de un rato, una horrible sensación se alojó en su estómago y garganta, las náuseas se juntaron a su mareo, por lo que rápidamente salió de la cama en dirección al baño del pasillo. Changbin se quedó esperando a fuera ya que el menor se había encerrado con llave, minutos después, Félix salió aún con sus ojos no del todo abiertos, había remojado su cara y lavó sus dientes para quitarse el horrible sabor en su boca. Entró de nuevo a la habitación siendo seguido por el más bajo, talló sus ojos y reconoció su alrededor, sintiéndose confundido.

ㅡ¿Qué hago aquí? Yo me había quedado con Jisungㅡfrunció el ceño.

ㅡYo te traje porque Minho quería quedarse con Jisungㅡrespondió casi en voz baja, sintiéndose un poco intimidado por la mirada del pelirrojo sobre él.

La habitación se sumió en un repentino e incómodo silencio, Changbin sin saber cómo empezar, y Félix con un punzante, pero leve dolor en su pecho al recordar el día anterior, su desánimo se hizo notorio. Caminó hacia su maleta, buscando algo para cambiarse, ignorando al rubio, solo quería irse.

ㅡLix, necesito que hablemos.

ㅡ¿Hablar de qué?ㅡse hizo el desentendido sin dejar lo que estaba haciendo.

ㅡNosotros.

Félix se detuvo de golpe, lanzando un resoplido sarcástico. No quería seguir siendo rechazado.

ㅡBin, tengo que ir a bañarme.

ㅡLamento haber actuado indiferente en cuanto a tus sentimientosㅡse sentó en la orilla de la camaㅡMe siento asustado, no quería lastimarte al corresponder tus sentimientos, porque de alguna forma siempre termino arruinando las cosas, y al no querer hacer eso, empeoré la situaciónㅡbajó la miradaㅡTú me gustas muchoㅡsonrió aún sin mirarloㅡCualquiera podría sentirse atraído hacia ti para algo más allá del sexo, y tengo tanta suerte de que hayas decidido sentir lo que sientes por mi, es más de lo que algún día creí merecer de alguien, eres tan amable y sonriente que es imposible no sentirse bien a tu lado.

Félix había empezado a sonreír desde que escuchó las palabras que tanto había esperado: "Tú me gustas". Luego de eso, cualquier dolor se fue rápidamente, escuchando atentamente las demás palabras que salían del mayor, estaba tan feliz. No entendía por qué no lo estaba viendo, tal vez porque estaba apenado, pero no le importaba, confiaba en cada una de sus palabras, así que sin esperar mucho más, se tiró sobre él para abrazarlo, retomando su brillo de siempre.

Changbin se asustó al sentir el repentino cambio, pero no iba a quejarse de la lluvia de besos que caía en todo su rostro, le gustaba ver esa bonita sonrisa, y estaba seguro de que quería verla por mucho tiempo.

Jeongin se sentía muy afortunado por estar

en ese lugar con Chan, cuando conoció al peligris, no imaginó que llegarían tan lejos, pensó que se quedaría en un simple capricho de un niño sintiéndose atraído por un chico mayor. Cada vez que Chan llegaba a casa de su mejor amigo para visitar a Seungmin, lo admiraba, fantaseaba con estar con él. Siempre lo vio tan inalcanzable hasta que un día se encontraron en la cocina, Chan buscando algo de tomar y Jeongin algún dulce para comer, se sintió tan nervioso que solo logró hacer una reverencia antes de salir corriendo a la segunda planta sin sus dulces, pero a Chan ese acto le había parecido demasiado tierno.

Con los siguientes días, ya no eran simples miradas avergonzadas, Jeongin estaba seguro de que ese chico de veintitrés años le llamaba la atención, le parecía tan varonil que le era imposible dejar de mirarlo. Hasta que un día Chan empezó a corresponderle las miradas y las pequeñas sonrisas, algo que lo hacía sentir cada vez más cerca de lo que tanto quería. Y Yang Jeongin no iba a rendirse tan fácilmente, aunque su mejor amigo le repetía mil veces que a lo mejor no le llamaba la atención porque parecía ser muy pequeño, pero todo cambió cuando un día, los Kim tuvieron que salir por unos minutos, dejándolos solos.

Chan sabía que se estaba arriesgando al salir con un chico que acababa de cumplir diecisiete, y Jeongin sabía que debía dejar de ser tan infantil para que Chan se fijara en él, cosa que funcionó, ya que a partir de ese día, el peligris empezó a invitarlo a pequeñas salidas, salidas que se convirtieron en citas, hasta que por fin, después de unos largos meses, Chan confesó su enamoramiento.

Jeongin sabía que debía esconder su relación a su familia hasta que cumpliera los dieciocho, y es por eso que se sentía tan libre en ese viaje, podía ser él mismo con Chan, podía besarlo, tomarlo de la mano y abrazarlo tanto como quisiera.

Por lo menos aprovecharía antes que regresar a su realidad en la que debía seguir esperando.

ㅡChannie~ no te levantes aún, es muy tempranoㅡJeongin hizo un adorable puchero antes de envolverse más entre sus sábanas.

ㅡDebo hacer el desayuno, todos se levantarán pronto.

ㅡNo debes hacerte cargo siempre, ¿sabes?

ㅡLo sé, pero soy el mayor aquí, todos ustedes están bajo mi cargo.

ㅡSi, estamos bajo tu cargo, pero no por eso harás todo, ¿o si? Ya mejor ven de nuevo aquíㅡpalmeó el espacio vacío a su ladoㅡAdemás, creo que los chicos no han dormido nada.

ㅡ¿De qué hablas? De seguro despertarán pronto, Jisung es madrugador.

ㅡDe hecho, estoy casi seguro de que no ha dormido muchoㅡmurmuró, recordando los sonidos provenientes de la habitación de la que se supone que no se escuchaba nadaㅡVen conmigo, no lo diré de nuevoㅡfrunció el ceño y cruzó sus brazos sobre su pecho.

Chan lo miró con cariño, adoraba su lado infantil y caprichoso.

Suspiró con derrota y se metió bajo las sábanas de nuevo, viendo como la sonrisa de Jeongin aparecía de nuevo. Convencerlo era fácil, dándole besos, dulces y abrazos eran más que suficientes para tener al pelirosa feliz, y él amaba ser mimado de esa manera.

Al sentir como Jeongin se acurrucaba más hacia él, deseó que ese momento fuera eterno, deseó que el tiempo se detuviera justo ahí, porque no necesitaba nada más para saber que era feliz. 

Holi, estar de vacaciones se siente extraño.

Espero que les guste❤️

Por cierto, muchísimas gracias a todas las personas que me felicitaron en el capitulo anterior😭 de verdad que son los mejores, muchas gracias por todo❤️