CAPÍTULO 4

▬▬( ❝ KEEPING YOU CLOSE ❞  )▬▬

Un mes después del accidente habían pasado dos cosas, la primera: Bella se vio rodeada de tantas personas que comenzaba a ser abrumador, tal parecía que nadie podía olvidar lo ocurrido, la segunda; mientras Edward se alejaba de Bella e ignoraba su existencia, Jasper orbitaba alrededor de Kaylee sin poder apartarse de su lado, y es que después del descuido de Mike, Jasper se mantenía al tanto de lo que sucedía con ella y si llegaba a necesitarlo, él estaría ahí.

El primer día de marzo Kaylee se encontraba increíblemente desanimada por la noticia del baile de primavera que sería en dos semanas, la chicas invitan, era una suerte, ella no invitaría a nadie.

Aquel día por la noche, Jessica llegó a casa de los Newton para buscar a Mike, sabía por Bella que una noche antes le había llamado para preguntarle a Bella si le molestaria que invitara a Mike al baile, Bella y Kaylee rieron por un buen rato después de preguntarse, ¿Por qué le pide permiso a ella?.

Kaylee procuraba no hacer mucho ruido desde su habitación, Jessica y Mike estaban en la sala de la casa, sus padres aún no llegaban del trabajo, diez minutos más tarde se escucharon los pasos apresurados de alguien que bajaba las escaleras, un segundo después su puerta se abrió.

Mike entró arrastrando los pies hasta la  cama, Kaylee lo vio dejarse caer de boca contra el colchón.

"Me invitó al baile", murmuró contra las sábanas, Kaylee se dio la vuelta en su silla

"¿Y qué le dijiste?", preguntó curiosa.

"Le dije que debía pensarlo".

Kaylee puso los ojos en blanco, tomando uno de los juguetes de Domino qué estaban en el suelo para lanzarlo a la espalda de Mike.

"Ouch! Eso dolió! ¿Por qué?", exclamó él al ver el juguete de hule, su ceño se frunció.

"¿Por qué le dijiste esa tontería?"

Mike se quedó callado, sus mejillas se tiñeron de un color rojizo antes de abrir la boca para hablar.

"Yo —ehmmm... Yo estoy esperando a que Bella me invite", señaló con un poco de nerviosismo en su voz, Kaylee arqueo su ceja.

"Pues espero consigas un buen asiento hermano, porque te quedaras esperando", reosondio ella dándose la vuelta para continuar con su tarea.

Mike no apareció en lo más minimo el comentario de su hermano, aún con el ceño fruncido se puso de pie y salió de la habitación —sin cerrar la puerta, solo para molestar a su hermana.

Ella puso los ojos en blanco y continuó haciendo su tarea, eran las 7:30pm y afuera de su ventana todo estaba completamente oscuro, acompañado con una lluvia que había comenzado a caer a cantaros en el momento en el que Jessica se fue de la casa de los Newton, Kaylee apoyó su barbilla en el escritorio, sus ojos comenzaban a cerrarse poco a poco, lentamente la luz de la habitación fue reemplazada por la oscuridad en la que sus párpados la sumergieron al cerrarse.

Cuando Alexander Newton vio la luz encendida de su habitación, se detuvo en el marco de la puerta, podía ver a Kaylee apoyada sobre el escritorio, usando sus manos como almohada, su espalda subía y bajaba lentamente con su tranquila respiración, el hombre sonríe adentrandose a la habitación para comprobar que realmente estaba dormida. Entonces la tomó en sus brazos y la recostó sobre la cama quitándole las pantuflas de los pies y arropandola con extremo cuidado antes de dejar un beso en su frente para después abandonar la habitación, entonces todas las luces del hogar se apagaron.

A la mañana siguiente Kaylee estaba emocionada por el viaje escolar que harían con el señor Molina en la clase de biología, se había asegurado de llevar buena música y una manta para el frío en el autobús, incluso algunos snacks para el camino y de regreso ya que estarían ahí un buen rato.
En cuanto Mike dejó a Kaylee en la acera se apresuró a correr hasta Bella, la rubia suspiró poniendo los ojos en blanco para empezar a mover la silla hasta el señor Molina y entregarle los permisos.

Fue cuando Edward, Alice y Jasper llegaron al estacionamiento, los ojos dorados de Jasper captaron a Kaylee desde el primer momento en el que entraron, Alice se ríe al mirarlo por el espejo.

"¿Qué estas esperando? Ve y dile hola!",animó Alice.

Jasper no supo como o cual fue el motivo de su falta de resistencia, solo sabía que sus pies habían pisado el asfalto mojado y que ahora se dirigían hacía Kaylee quien estaba en su silla completamente sola, podía ver a su hermano hablar incomodamente con Bella —Bella lo volvía incómodo, Mike solo estaba tan nervioso que era patético, no podía irle peor que a él!
En cuanto Kaylee lo vio acercarse, sus ojos parecieron iluninarse como si se tratara de las luces de navidad, eso le dio un poco más de seguridad

"Buenos días Kaylee", saludó él, podía escuchar su corazón latir con fuerza, Jasper amaba ser la razón por la que su corazón parecía querer huir de su pecho para unirse con el suyo.

"Buenos días Jasper", saludó ella con una brillante sonrisa. "¿Vienes a entregar tu permiso al señor Molina?".

Jasper asintió ligeramente con la cabeza.

"En realidad quería preguntarte si, podría, sentarme a tu lado durante el viaje", comentó él con un ligero nerviosismo qué supo ocultar muy bien.

Las mejillas de Kaylee se sonrojaron, ella asintió.

"Eso me gustaría mucho", espetó ella haciéndolo sonreír ampliamente, una hilera de dientes blancos se dejó ver por ambos lados, el señor Molina llegó con ellos.

"Señorita Newton, Señor Hale. Sus permisos", pidió él, Jasper esperó a que Kaylee los entregara primero, el de ella y el de Mike, entonces él entregó el suyo, el señor Molina se marchó.

Cuando Jasper Hale se acercó con la silla de Kaylee a la entrada del autobús, nadie dudo en dejarlo pasar primero y es que la atención sobre ambos era realmente abrumadora, Jasper sentía los nervios de Kaylee, nervios que eran provocados por la gente que los miraba.

"¿Lista?", preguntó él.

"Espera, Mike me subirá al—...", comenzó a decir ella, pero sus palabras se quedaron en el viento pues Jasper la tomo en sus brazos sin esfuerzo alguno, las mejillas de Kaylee no se habían sonrojado tanto en una sola mañana.

Jasper era tan fuerte que Kaylee no sintió que su agarre se aflojar a sobre ella en ningún momento, él parecía estar cargando un libro, quizás algo más liviano, Alice fue la que dobló su silla y la subió detrás de ellos. El joven de cabello rubio escogió un asiento en la parte de atrás y la sentó a ella cerca de la ventana.

Kaylee ignoraba lo mucho que Jasper Hale la miraba en las clases que compartían, pero él nunca se perdía el momento en el que pedía a su hermano que la sentará junto a la ventana, le gustaba ver el bosque y la neblina que cubría las copas de los árboles, le gustaba el cielo gris y la lluvia golpear su ventana, esta vez no fue distinto. Ella lo miró con una sonrisa qué Jasper solo pudo describir como encantadora, Alice pasó junto a ellos deteniendose.

"Hola Kaylee, aquí esta tu mochila y nosotros llevamos tu silla a la parte de atrás, ¿si?", preguntó antes de tomar asiento en el lugar detrás de ellos, pero algo en la forma en la que lo hizo, le dio a entender a Kaylee qué en realidad no le estaba pidiendo permiso, entonces sólo asintió con la cabeza antes de ver a Edward entrar al autobús detrás de Alice.

Los ojos curiosos de Kaylee miran por la ventana, Mike estaba dando vueltas por el estacionamiento cuando Jessica lo detiene y apunta en su dirección, Kaylee agita su mano en el aire a su hermano quien suspira aliviado.

Sería un buen viaje.

Jasper no era una persona de muchas palabras, en realidad Kaylee y él no compartieron nada en los primeros veinte minutos de camino, la escuela de Forks había quedado atrás, Jasper vio a Kaylee llevar su dedo índice al vidrio vaporizado a su lado para dibujar un pequeño sol.

Pero Jasper tenía un buen motivo para no hablar o si quiera para iniciar una conversación, era común que Emmett y él ocasionalmente —la mayor parte del tiempo, se burlaran de mis intentos de Edward por hablar con Bella, y es que su hermano era increíblemente anticuado, demasiado ridículo para entablar una conversación con la hija del sheriff y era una burla regular entro todos.

Deberia de ser fácil hablarle, Kaylee era el ser humano más amable y dulce del mundo, ¿Pero de que iba a hablarle? Hablar del clima sonaba estúpido, el viaje escolar no era tan emocionante y él no creía ser demasiado interesante. Pero Kaylee no hacía que el silencio fuera incómodo, de hecho escuchar su calmada respiración era lo único que lo mantenía a raya para no saltar al cuello de algún estudiante, lo cual él agradecía, no era necesario hablar con ella.

Unos diez minutos después el autobús se detuvo en el estacionamiento del invernadero, Kaylee miró una vez más por la ventana, el segundo autobús se había estacionado justo al lado, Jasper estaba esperando paciente a que todos sus compañeros de clase salieran, entonces esta vez Edward llevó la silla de ruedas de Kaylee para bajarla del autobús, Jasper se puso de pie.

"¿Estás seguro que no quieres que llame a Mike?", preguntó Kaylee con timidez, Jasper negó y le tendió la mano.

"No te ofendas, pero tu hermano podría caer y tirarte", señaló él tomándola en brazos.

Kaylee no quería admitir que tenía razón, pero Jasper tenía razón y si Jasper quería ayudar entonces ella no le daría una negativa. En el momento en el que llegaron al húmedo asbelto, Alice tenía la silla lista en el suelo, incluso había sacado la manta qué tenía en el bolsillo de la parte trasera de la silla para cubrirla con ella.

"Gracias Alice", agradeció Kaylee cuando Jasper la dejó sentada en la silla de ruedas.

Entonces los pasos apresurados de Mike llamaron la atención de todos, tenía la mandíbula tensa y no había que ser un adivino para saber que estaba totalmente disgustado.

"Kaylee!", llamó él llegando a su lado, Jasper se apartó a un lado, pero no se alejó, Alice percibió la tensión en el aire y entrelazó su brazo con el de Jasper para alejarse de ahi, entonces Mike comenzó a hablar.

"No puedes desaparecer así como así!"

"No desaparecí hermano, tu estabas muy ocupado perdiendo tu dignidad por otro lado", señaló Kaylee suspirando mientras veía a Jasper avanzar con Alice.

Ella no lo vio, pero las mejillas de Mike se tiñeron de un color rojizo mientras se adentraban al invernadero.

"Lo siento, pero, ¿sabes que hubiera hecho papá si te pierdo? Me mata", espetó él empujando la silla.

Ella suspiró y puso los ojos en blanco, sería un día muy largo.

"En mi defensa, tu me dejaste solita", comentó encogiendose de hombros mientras ambos avanzaban.

El señor Molina se había detenido en la puerta para indicar a todos que entrarán, pronto volvería a llover y al menos durante su estancia estarían refugiados de la lluvia.

"Vamos chicos andando! El verde es — el verde es bueno! Pasen, anden!", comentó él moviendo las manos hacia el interior del lugar.

"El señor Molina me recuerda al profesor de iCarly con su retiro de raíces y moras", se burló Mike sonriendo al señor Molina mientras pasaban a su lado.

"Pero no se viste como hippie", argumentó Kaylee.

"Pero si nos haría ir a un retiro de raíces y moras".

Kaylee no pensaba en discutirlo.

Mientras todos caminaban por los estrechos caminos del invernadero, la silla de Kaylee dejó de ser empujada por Mike para pasar de ser empujada por Angie o Eric, quienes realmente no parecían molestos de hacerlo. El señor Molina hablaba de abono, Kaylee arrugaba la nariz por el aroma, aunque el aroma de tierra mojada era más fuerte en el lugar.

"Cáscaras de huevo, zanahorias, el abono es bueno!", exclamó el señor Molina con emoción, Eric había dejado de empujar la silla de Kaylee para ayudar al señor Molina mientras preparaban composta. Mientras Eric aplanaba todo, el señor Molina extraía el líquido de los barriles de composta." Y ahora tenemos una taza de té de composta para ti!", y procede a extenderle la taza a Tyler.

"Te doy 5 dolares si lo bebes", espetó Kaylee con una sonrisa inocente.

"Ve sacando tu billetera, güerita", se burló Tyler antes de pegar sus labios a la taza.

"NO BEBAS ESO!", exclamó el señor Molina arrebatandole la taza de las manos, Tyler le había dado un buen trago.

"Mi dinero", señaló él extendiendo su mano a Kaylee.

Pero cuando ella se giraba para sacar su dinero, Tyler cubrió su boca con su mano y salió corriendo del grupo donde todos estaban reunidos. Todos reían al ver a Tyler huir para poder vomitar, Kaylee se sintió culpable, pero había sido bastante divertido.

Cuando todos se disoersaron por el lugar, Kaylee también lo hizo, sus ojos pasaron por todas las plantas que habían en ese lugar y se maravilló con cada una de ellas, reconoció a la mayoría y se detuvo en un sector peculiar donde habían muchos cactus, se percató de que había algo peculiar en uno de ellos, Kaylee se inclinó un poco para admirarlo, en la punta del cactus había una pequeña flor de pétalos largos de color naranja que era realmente hermoso, extraño, porque el verano aún no llegaba a Forks.

En ese momento Bella se acercó hasta Kaylee y ella dejó de mirar al cactus para verla a ella.

"Hola Bells".

"Hola Kay", saludó la castaña de regreso.

"¿Por qué esa cara?", Preguntó Kaylee con media sonrisa.

"Es Edward", comentó desganada y Kaylee apretó los labios sutilmente.

"¿Esta siendo grosero otra vez? ¿Quieres que le pase la rueda de la silla por el pie?"

Bella la mira con una ceja arqueada y ríe por lo bajo negando con la cabeza.

"Estoy a nada de aceptar", espetó Bella con diversión.

Kaylee ríe también y comienza a mover su silla, pero rápidamente el lodo de las llantas le manchan las manos, Bella al notarlo se incorpora y comienza a empujar la silla por ella, para que no se manche las manos con la tierra.

"Gracias Bells".

"Un placer".

"¿Y a que se debió esta vez?", preguntó Kaylee mirando todas las plantas a su alrededor, Bella suspira.

"Me preguntó el motivo de irme a Jacksonville el día del baile".

"¿No iras al baile?", preguntó Kaylee mirándola por encima de su hombro, Bella negó. "Vaya, y vas a ir a Jacksonville?"

"En realidad fue una mentira para que todos me dejaran de pedir que los invitara", comentó Bella por lo bajo con diversión. "Le dije a Charlie que iría a Seattle de compras. ¿Tú irás?"

"¿Al baile? No", respondió Kaylee desanimada. "Nadie quiere ir al baile con una chica que no puede bailar", respondió con una tristeza que fue bastante sencilla de ocultar cuando nadie veía su rostro. "Pensaba en un maratón de películas de terror".

"Ven conmigo a Seattle! Podemos ir al cine, de compras, a cenar algo", invitó Bella.

"Eso me gustaría mucho, gracias Bells", respondió Kaylee dando la vuelta para mirarla con una sonrisa un poco más animada, Bella siguió empujando su silla.

No volvieron a tocar el tema de Edward Cullen o el baile.

Al final del recorrido del señor Molina, Bella y Kaylee salieron, Kaylee había perdido de vista por completo a su hermano y a sus amigos, pero disfrutaba pasar el rato con Bella y era algo mutuo. Cuando se dirigieron a los autobuses, Kaylee escuchó unas pisadas rápidas qué se dirigían a ellas, no prestó la más mínima atención hasta que el nombre de Bella fue llamado por la voz de Edward, entonces la silla se detuvo y Kaylee quiso desaparecer.

"No debemos ser amigos", espetó Edward, Kaylee se puso a mirar su manicura ahora cubierta por algo de tierra mojada.

"Eso debiste pensarlo antes", respondió Bella, Kaylee miró al cielo esta vez. "¿Por qué no dejaste que me atropellaran? Pudiste ahorrarte el arrepentimiento".

Edward se detuvo un momento, dudó de sus palabras, pero estaba seguro de ellas.

"¿Crees que me arrepiento de haberse salvado?", preguntó Edward inclinandose a ella.

Kaylee empezó a mover la silla lentamente en otra dirección, una donde no pudiera estar en el medio del fuego cruzado.

Podía ver a Edward y a Bella hablando cuando los demás se acercaban al camión, Kaylee bajó la mirada y solo se dedicó a observar los detalles bordados de su suéter cuando diviso un par de zapatos frente a los de ella, levantó la mirada y Jasper estaba ahí.

Era curioso, pero siempre que sus ojos se desviaban a algún sitio, eran los ojos dorados de Jasper los que siempre encontraba.

"Hola", saludó ella de nuevo, Jasper sonríe hacía ella, eran las pocas veces en las que Jasper Hale no parecía estar sufriendo.

"Hola", saludó de regreso.

Entonces Kaylee lo ve mover algo en su mano, era una bolsa de plástico que sostenía, Jasper se pone a su altura para agacharse frente a ella, comienza a descubrir lo que había en la bolsa, los ojos de Kaylee se iluminan al ver el contenido.

"Vi lo mucho que te gustó", dijo él mientras los ojos de Kaylee observaban detenidamente como el cactus qué había estado observando minutos atrás ahora estaba frente a ella.

"Jasper... No... No tenias que hacerlo", dice ella negando ligeramente con su cabeza.

Él se encoge de hombros antes de extenderle la bolsa que el vendedor había puesto debajo de la pequeña maceta del cactus para que no regara la tierra.

"Muchas gracias", agradeció ella con una sonrisa y mejillas sonrojadas.

"Fue un placer".

Ambos se miran un breve instante que pareció horas, ninguno parecía dispuesto a apartar la mirada hasta los golpes de Edward en la puerta del autobús llaman su atención, Kaylee se sobresalta ligeramente y aprieta sus manos sobre la maceta del cactus, Jasper mira a su hermano adoptivo entrar al autobús, pero la última mirada de Edward hacía Bella, hizo a Kaylee fruncir el ceño.

"Nos vemos, Kaylee", se despidió Jasper incorporandose.

"Hasta mañana, Jasper", él hizo una ligera inclinación con su cabeza y se alejó para subir al autobús, Kaylee no evitó suspirar.

Bella se acercó con la mandíbula tensa y las manos apretadas.

"¿Podrías pasarle la rueda por el pie y romperselo?"

"Dalo por hecho!"

Estrellita si quieren que Kaylee le pase la rueda de la silla por el pie a Edward 👩🏼‍🦽

Voten y llévense de regalo un cactus! Cortesía de Jasper 🌵

De verdad, voten, comenten, es desgastante escribir y que nadie lo valore, en todo caso mejor nadota.

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