Sumisión (Kim Taehyung)

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Taehyung

Se puede escuchar la respiración solamente en la habitación, se que está ansiosa, no sabe dónde me encuentro, no sabe que la observo, sus sentidos están algo adormecidos, dejándose llevar por los olores, sabores y sensaciones que se la han brindado previamente. Es obediente, es paciente pero también de que está llegando a la desesperación.

El día que la vi por primera vez, ella solo estaba leyendo de manera tranquila, se acomodaba los anteojos mientras estaba concentrada en su lectura, ese simple acto era hipnotizante, su rostro inocente, su cabello castaño, la piel blanquecina impoluta, sus labios rosados, ojos grandes de un grisáceo espectacular. Ella no notaba como llamaba la atención, siempre fue así, desconocía su propia belleza debido a su timidez y su desinterés por algo que no fueran los libros y la música. Un alma corrompible, un alma pura que debía ser mía.

En cambio yo, soy un ser corrupto, un alma oscura, que siempre ha pensado en su propio placer, si existe algo que yo desee siempre lo obtengo, no hay nada en este mundo que yo no pueda obtener. He caminado entre los humanos por miles de años, soy lo que ellos llaman un demonio, un ser del infierno, me da un poco de risa que piensen así cuando en realidad los que viven en el infierno son ellos. Desde que visitó la humanidad siempre busco divertirme, pasar el tiempo, así que me he dedicado a los placeres carnales, soy atractivo para ellos así que me es sencillo llamar su atención. La avaricia y vanidad que los domina me ayuda a cumplir mis deseos.

Aunque con ella es diferente, ella me ignoro desde el inicio, aunque por un momento le cause curiosidad, no paso de ahí, no cayó ante mi, no pude dominarla desde el inicio, entonces eso se volvió un reto, una obsesión que debía aplacar.

Me metí a su entorno, aprendí sus gustos, y tuve que acercarme poco a poco, ganar su confianza y finalmente tener su mirada solo para mí. Aunque fui un enorme imbécil, por milenios domine a los humanos y ahora yo fui dominado por una. Ella tomo el control de mi ser desde la primera sonrisa que me dedico, desde el primer beso que le robe, me enamore como un idiota de la humana Eva.

Poco a poco nuestros encuentros subían de intensidad, ella me dio todo, cuerpo y alma. Su primera vez, su primer orgasmo.

Y aunque la amaba quería convertirla en mi esclava en la cama, que toda la pureza que posee, al estar en una habitación se vuelva lo más obsceno, lo más lujurioso, que su carne arda en pasión y lascivia que solo sea provocada bajo mi tacto. Y lo logré.

—Eva —me acerque desde atrás tocando la piel de sus hombros con la yema de mis dedos

—Amo Taehyung—el solo hecho que su voz ya excitada me llame así me descontrola.

—¿Cómo te has portado Eva?

—Bien

Sus ojos estaban vendados así que solo seguía el tono de mi voz, su manos atadas a su espalda mientras estaba hincada ya desnuda con su piel perfecta expuesta y lista para marcarla.

—¿Bien?— tome su mentón acariciando sus labios con el pulgar —me tienes duro Eva, eso no es portarse bien, mi verga está palpitando por tu culpa—metí mi dedo pulgar en su boca —tendrás que ser castigada por ser objeto de mi deseo.

Saque mi duro miembro, metiéndole en si boca, sujetándola por la cabeza, ella no necesito más para empezar a mamar, ayudada por mis manos sus movimientos constantes acompañados por su lengua me hacían soltar gruñidos de satisfacción. Verla saborear y salivar en cada succión me hacía ir más rápido, penetrando su boca con intensidad llegando a su garganta dándole arcadas.

—Eva, tu boca se siente tan bien —mi voz ronca la provocada, notaba como movía las manos atrás de su espalda queriendo soltar los amarres se que quiere tocarme pero aún no la dejaré hacerlo.

En un jadeo intenso me corrí dentro de su boca, siendo bebido mi semen sin pensarlo, al salir su sucia lengua lamió alrededor de mi miembro y sus labios para eliminar cada rastro del líquido caliente.

—Dime Eva, ¿Deseas que tú amo de folle?

—Con desespero.

La levanté del suelo para llevarla hasta la cama notaba como sus muslos brillaban por la humedad que había provocado en el oral, la arroje boca arriba para poder lamer estos, provocado el primer gemido de la noche.

—Tu sabor es tan dulce Eva —mi lengua subió por sus muslos hasta su vagina —déjame probarte más, abre las piernas para tu amo.

En cuanto me dio acceso, delinee sus pliegues con la lengua causando que su espada se arquera en cada lamida, metí dos dedos con facilidad mientras succionaba su clítoris de manera agresiva, causando un placer tortuoso en ella, sus gemidos aumentaban a medida que mis dedos se movían dentro de ella, podía ver cómo sus pezones estaban hechos piedra por la dureza de la excitación, sentí que mis dedos estaban siendo aprisionados así que antes de que llegara al orgasmo los saque dejando de lamer también. Pude escuchar un chasquido de su lengua en molestia.

—¿Acaso eso fue un gesto de insubordinación?

—N..no.. no amo—

Casi pude notar una sonrisa en sus labios, esa es mi chica siendo una puta completa para mí, quite la venda de sus ojos, mientras su ojos de adaptaban a las luces rojizas de la habitación, me desnudaba de manera lenta, hasta que sus dulces ojos me miraron, sus ojos que en este momento ardían en deseo.

—Estas siendo muy mala esclava Eva, no debería de follarte, no mereces que lo haga.

—Por favor amo Taehyung, mi cuerpo lo desea.

—Eso es verdad Eva, tu cuerpo solo reclama mi verga, tu coño solo chorrea por mi.

La gire poniéndola en cuatro la penetre sin aviso sujetándola por la atadura, su cuerpo se contrajo por la invasión provocando que apresara a mi miembro con dureza, haciendo mis embestidas más placenteras y agresivas, con la otra mano daba azotes en cada nalga, que ahora brillaban en sudor, el sonido llenaba la habitación con cada azote y sus gemidos se ahogaban en ocasiones contra la cama.

—Eres perfecta, tu coño está hecho solo para mí

Mi voz era más grave, se me dificultaba tragar saliva, ella me provoca demasiado. La gire de nuevo desatando sus manos para ponerlas sobre su cabeza, ahora invadiendo desde enfrente, mientras seguía bombeando en su interior mis dientes y lengua atendían sus pezones.

—Amo Tae —alcanzo a decir —¿Puedo tocarlo?

—Hazlo niña.

Solté sus manos que de inmediato se fueron a mi espalda, subí por su cuello dejando mordidas, sus dedos se apretaban contra mi piel, llegué finalmente a su boca, devorando sus labios con la pasión que era merecidos, sus manos subieron a mi cabeza mezclándose entre mi cabello, sus lengua era dominada por la mía, sus piernas se enredaron en mi cintura, para finalmente ambos llegar a esa explosión de sensaciones que tanto amábamos, sus contracciones internas fueron tan agresivas como mis besos.

—Lo amo, Amo Tae.

—Lamentablemente yo también te amo Eva, no se que tan malo eso pueda ser para ti.

Esta es mi manera de desearles feliz año, nuevo se que no es tan largo pero es una idea que me ha estado rondando la cabeza, quiero un Taehyung demonio, pero aún no se estoy en veremos  ....

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