Era una noche fría y estrellada, los rayos de la luna se filtraban por la ventana de uno de los tantos apartamentos de Nueva York. En donde reinaba el silencio total, dejando escuchar claramente el rechinar de la cama y los gemidos de las dos personas que se encontraban sobre esta, totalmente desnudos y disfrutando el uno del otro.

-Ah...naf...ahnh...afff-gemía de placer la mujer de tez morena y pelo castaño; al recibir las embestidas del hombre de piel tan blanca como la misma porcelana, cabello tan negro como la oscuridad y un cuerpo que parecía haber sido cincelado por los mismos dioses. Quien sujetaba cada una de sus piernas para poder embestirla con más profundidad-Ah..ahh...Levi...ahh...¡Ah!

-Y...mir...Ym...ir...Ymir...- el hombre jadeaba el nombre de la chica mientras observada cada detalle de ella mientras la seguía embistiendo. Las gotas de sudor bajando por su cuerpo, al igual que él; sus mejillas sonrojadas, sus manos aferrándose fuertemente a las sabanas y el que le llamará por su nombre, hacia que se excitará aún más-Ymir...-se echo sobre ella para apreciar aún más sus expresiones y acariciar sus cabello son un de sus manos.

-Aah...ah, Levi...haah..ah-la mujer enrollo sus brazos en la espalda del hombre.

Ambos unieron sus labios en un beso apasionado, en el cual exploraban la boca del otro con sus lenguas. La saliva se desbordaba por las comisuras de la boca de la chica. Se separaron una vez les falto el aires, quedándose unidos por el hilo de saliva de sus lenguas.

-¿Ahhh?-la castaña se sorprendió al sentir como el azabache tomaba sus caderas, para luego sentir como retiraba lentamente su miembro de su interior-¿Que ha...¡AHHHH!-gimió con fuerza mientras arqueaba la espalda, al sentir como entraba de golpe en su interior-¡Aw!..¡Ahh!...-sus manos volvieron a aferrarse a las sabanas y lagrimas empezaron a salir de sus ojos al igual que la saliva de su boca-¡Levi!

-Ha...Haaa...Ymir.

-Levi...más...¡Quiero más!

El azabache no dijo nada, solo se encargo de voltear a la castaña, sin salir de ella. Y volver a embestirla.

-Ymir...yo...quiero escucharte-puso su mano sobre la mano de la castaña; que se encontraba sobre uno de sus pechos, apretándolo un poco.

-Ahhh...¡Deja de jugar!...ahh...¡Y ya dámelo!-reclamo entre jadeos la castaña.

-Di mi nombre-lamió la comisura de su oreja-Dilo, de lo contrario no lo haré.

-Jajajaja...ahh..-volteo la vista para mirar al azabache-Me encanta cuando me tratas así...Levi-dijo eso ultimo con una sonrisa picara en su rostro.

El azabache sonrió de lado, complacido por lo que había escuchado, y comenzó a embestirla fuertemente.

-¡Aahh!..¡Haa!..¡Levi!-gimió aún más fuerte la castaña. Mientras el azabache ponía cada mano sobre sus pechos, comenzó a masajear uno y pellizcaba el pezón del otro-¡LEVI!

-Ymir...-continuaron así hasta que ambos se corrieron al mismo tiempo. Dejándose caer sobre la cama totalmente agotados.

Horas después, el azabache fue el primero en despertar, retirándose cuidadosamente del interior de la castaña. Se puso de pie y camino con dirección al baño, para tirar el preservativo, que todavía tenía puesto, y tomar una ducha.

En cuanto salio del baño vio que la castaña seguía echada en la cama boca abajo, pero ahora se encontraba despierta y lo miraba con una sonrisa pervertida en su rostro.

-Ya puedes usar el baño.

-Gracias-la castaña se puso de pie y camino, completamente desnuda y sin cubrirse con nada, paso por un lado del azabache, con un movimiento exagerado de caderas -Por cierto, tu teléfono ha estado vibrando por un buen rato-señalo el celular que estaba sobre el mueble de la lampará, para después entrar al baño.

El azabache se acerco a la mesa de noche y tomo su teléfono, movió un dedo para encender la pantalla y vio que tenía varios mensajes y llamadas perdidas, todas de la misma persona.

-Tsk-Chasqueo la lengua fastidiado y regreso el teléfono a la mesa de noche. El cual volvió a vibrar pero lo ignoro y comenzó a ponerse su traje.

-Al parecer estas muy solicitado esta noche-bromeo la castaña, que acababa de salir del baño.

-Eso no te interesa-respondió el azabache terminando de vestirse.

-Alguien esta de malas, pero tienes razón, nosotros no hablamos solo follamos.

-Ya me voy-se puso de pie una vez termino de ponerse los zapatos-¿Te ayudo a cambiar las sabanas?-volteo a ver a la castaña, que estaba vestida con una bata media rojiza y transparente que dejaban ver sus pechos, y unas bragas de color negro.

-No, gracias, me gusta dormir sobre donde he follado recientemente.

-Eres rara.

-Pero bien que te gusta-la castaña alzo una ceja de forma coqueta y cruzo sus brazos-De lo contrario no me buscarías cada vez que quieres.

-Lo dices como si yo fuera el único que disfruta-se comenzó a acercar hasta quedar en frente de la castaña.

-Que puedo decir, de todos los hombres con los que he follado, tú has sido el mejor en el sexo.

-Tú tampoco te quedas atrás-la tomo del cuello y la jalo para adelante, para unir sus labios en un apasionante beso.

Parecía que ambos tenían ganas de seguir con otra ronda, pero el celular volvió a vibrar, arruinando el momento.

-Tsk. Adiós-dio media vuelta y camino hacia la puerta.

-Hasta luego, precioso. Si quieres más diversión, sabes donde encontrarme-en cuanto vio como la puerta se cerraba, camino hasta la cama, donde se echo y tomo las sabanas para comenzar a olerlas con total fascinación-Me encanta este olor a sexo-fue lo ultimo que dijo antes de quedarse dormida.

Mientras tanto con Levi.

El azabache acaba de estacionar enfrente de una casa, bajo de su auto y camino hasta la puerta. Saco una llave de su bolsillo y la inserto en la cerradura para así poder ingresar a la casa.

-¡¿Donde estabas?!¡Estoy llamándote desde hace horas!-le daba la bienvenida una mujer de cabello castaño, anteojos y tez morena.

-Trabajando-respondió el azabache, sin siquiera mirar a la castaña con lentes, que se encontraba sentada en un sillón de la sala. Se quito su saco, lo coloco en el perchero y camino con dirección a la cocina.

-¡¿Hasta esta hora?!-pregunto sorprendida la castaña mientras se ponía de pie-¡Son casi las tres de la mañana!-camino hasta quedar en la entrada de la cocina.

-Se me complico un caso y quería dejar todo en orden antes de salir. Si fueras más ordena lo entenderías-el azabache estaba ocupado preparándose una taza de té negro.

-¡No cambies el tema!

-Y tú deja de gritar.

-¡Lo hago porque es la única forma que he encontrado estos últimos días para que me escuches!

-¿Y que quieres que escuche?-pregunto el azabache sentándose en una de las sillas del comedor de la cocina para beber su té.

-¡Levi¡!Tenemos que hablar!

-¿Hablar sobre que?-el azabache estaba más concentrado en su té.

-¡Sobre nosotros!

-No hay nada de que hablar, lo dejaste todo muy en claro-dijo Levi en un tono frió y cortante, mirando a la castaña a los ojos-Fin de la conversación-se puso de pie y salio de la cocina con dirección las escaleras.

-¡Levi!¡No huyas!-la castaña fue tras él.

-No lo hago, simplemente estoy cansado y quiero irme a dormir-comenzó a subir las escaleras.

-¡Hablemos al menos un poco!¡Hace tiempo que no lo hacemos!

El azabache se detuvo a mitad de las escaleras y volteo la vista para ver a la castaña a los ojos.

-Se honesta, Hanji, tú solo quieres hablar porque te sientes culpable-la miraba con el ceño fruncido-De lo contrario estarías encerrada en tu estudio haciendo más basura, que más tarde tendré que limpiar-dicho eso ultimo se dio la vuelta y continuo subiendo las escaleras.

-¡Eso no es cierto!¡Levi!¡Por...-no pudo terminar de hablar porque Levi le cerro la puerta en la cara.

-No entres a la cama si no te has bañado antes. Eres doctora, piensa más en tu higiene personal, por los mil demonios-fue lo ultimo que dijo Levi antes de irse a dormir.

-...-Hanji no dijo nada, solo se quedo mirando la puerta de su dormitorio por un rato, para después bajar las escaleras con dirección a su estudio de donde no salio hasta la mañana siguiente.

Al salir de su estudio, fue directo a la cocina, la cual encontró completamente vacía y limpia. Así que subió rápidamente las escaleras y abrió la puerta de su dormitorio, encontrándolo en las mismas condiciones.

Eso solo significaba una cosa, Levi ya se había ido de casa y nisiquiera había desayunado ahí. Lo que provocaba que Hanji sintiera un dolor en su corazón, pero decidió ignorarlo y comenzó a alistarse para salir.

Primero tomo una ducha, se coloco su ropa para del diario, amarro su cabello en una coleta y se coloco sus gafas; desayuno algo rápido, tomo sus cosas, salio de su casa y subió a su auto con dirección al hospital donde trabajaba.

Al llegar bajo del auto, entro, marco su tarjeta y fue con dirección a su oficina, en donde se coloco su bata y se sentó en su escritorio para comenzar a realizar su papeleo. Sin embargo, por más que trataba no podía sacarse el mal sentimiento que tenía en el pecho, no solo el de ese día sino ese sentimiento ya lo tenía hace ya varios días, y cada vez se hacia más grande, tanto que no le dejaban pensar en otra cosa.

Como no podía concentrarse, dejo los papeles encima del escritorio y soltó un largo suspiro.

-¿Porqué?¿Porqué tuve que decir eso?-su tono era triste-¿Porque tuve que hacerlo?-su voz se comenzaba a quebrar mientras pasaba las manos por su cabeza-¿Porqué?-no supo el momento en que grandes lágrimas comenzaron a bajar por sus mejillas.

-¿Hanji?¿Estas aquí?- entro a la oficina una mujer alta, cabello rubio y ojos azules, quien se asombro al ver a la castaña llorando sobre su escritorio-¿Que pasa?-se acerco rápidamente hasta quedar a un lado de Hanji y la abrazo fuertemente-¿Porque lloras?

-Nana...snif...lo arruine...snif...- correspondió al abrazo mientras secaba sus lágrimas con el dorso de su manga-Arruine...snif...mi matrimonio...-se escondido en su hombro y continuó llorando.

Así es, Hanji y Levi estaban casados, lastimosamente su matrimonio no se encontraba en su mejor momento, y parecía no mejorar, más bien todo lo contrario, se estaban yendo de mal a peor.

Si alguien los viera ahora, nunca pensarían que antes eran una feliz pareja de casados que no querían separarse en ningún momento del otro y que disfrutaban de la compañía del otro.

¿En que momento cambiaron tanto las cosas?

Para eso retrocedamos un poco en el tiempo.

Levi y Hanji eran una feliz pareja de recién casados, que acaban de mudarse a su nueva casa, donde empezarían su nueva vida y formarían su propia familia.

Dormían abrazados, y Levi siempre le despertaba con un beso en los labios

-Buen día, cuatro ojos-cuanto extrañaba ese apodo.

-Buenos días, enanin-ambos se llamaban por apodos, que lejos de ser ofensivos, para muchos, a ellos les gustaba, ya que así demostraban su cariño-Déjame dormir un poco más, después de todo, tú te bañas primero.

-Esta bien-le dio un beso en la frente para después levantarse

Y cuando Levi salia de la ducha vistiendo solo una toalla, Hanji no podía dejar de sonreír como pervertida.

-Estas comenzando a asustarme, ya deja de mirarme así.

-Cálmate, solo disfruto la vista-Hanji no despegaba la vista de ese maravilloso cuerpo que era solo para ella.

-¿Vas a quedarte todo el día viéndome o vas a bañarte?-pregunto Levi arqueando una ceja.

-No es mala idea, la vista es excelente.

-No seas floja y ve a bañarte.

-Bien-Hanji se levanto y camino hasta quedar frente a Levi-Pero solo si nos bañamos juntos.

-Tus deseos son ordenes-agarro a Hanji de la cintura para acercarla más a su cuerpo y besarla apasionadamente.

-¿Tan temprano y ya estas con ganas?-pregunto burlona.

-Tú me provocaste, así que no te quejes.

-Nunca lo hago-ambos entraban al baño a hacer algo más que bañarse.

Desayunaban juntos y a la hora de que cada uno debía de ir a su respectivo trabajo, no podía faltar un beso de despedida.

-Nos vemos en la noche, cuatro ojos

-Lo mismo digo, enanin-se volvían a besar y se iban cada uno por su lado.

Los primeros meses fueron maravillosos. Sin embargo, con el paso del tiempo, la convivencia no estaba yendo tan bien que digamos.

-AHHHHH¡¿DONDE ESTA?!¿¡DONDE HAZ GUARDADO EL LIBRO QUE ESTABA SOBRE MI ESCRITORIO?!¡TE HE DICHO MILES DE VECES QUE NO DESORDENES MIS COSAS!¡ES MOLESTO!

-¡¿QUE?!¡PARA EMPEZAR, EL ESCRITORIO ESTABA COLAPSANDO DE LIBROS Y EL SUELO COMPLETAMENTE LLENO DE PAPELES QUE TERMINAS ARROJANDO!¡ESE CUARTO NO ESTABA EN ORDEN BAJO NINGÚN ASPECTO!

-¡AHHH!¡ERES IMPOSIBLE!¡ES UNA PERDIDA DE TIEMPO DEVOLVER UN LIBRO A SU LUGAR SI SE NECESITA MÁS TARDE!

-¡TAL VEZ A TI TE GUSTE VIVIR EN UN ESPACIO CARGADO DE POLVO E INMUNDICIA PERO A MI NO!¡NO PIENSO CONTRAER UNA ENFERMEDAD POR TU CULPA!

-¡ES INÚTIL RAZONAR CONTIGO!

Hanji y Levi siempre discutían sobre la limpieza y el orden en la casa. Levi era muy obsesivo con esta, mientras que Hanji le daba igual. Lo que generaba que siempre pelearan por el mismo tema, les molestaba tanto que preferían ya no verse para no seguir discutiendo.

El tiempo continuo pasando, hasta que llego el día del punto límite para Levi.

Un viernes, Hanji regreso a altas horas de la noche a su casa.

-¿Donde demonios estabas?-Levi la esperaba sentado en el sillón de la sala-Es casi media noche.

-Jajajajaja...hip...hola, Leviiii...-saludo Hanji arrastrando las palabras, se notaba algo mareada-Jajajaja.

-¿Que mierdas te pasa?-Levi se puso de pie y se acerco rápidamente a Hanji, notando sus mejillas rojas y un olor a alcohol en el aire-Has estado bebiendo.

-Esa no es...hip... una pregunta...hip...es una respuesta...jajajajaja-Hanji se sostenía de la pared.

-¿Porque apestas a alcohol?

-Por que...hip...fui con mis amigas....hip...a beber un poco...después del trabajo.

-¿Y no se te paso por la mente avisarme?-Levi estaba con el ceño fruncido.

-¡¿EH?!...-exclamo Hanji sorprendida-...hip...¿Y para que?...hace tiempo...hip...te dejo de importar...hip...lo que hago.

-Deja de decir tontería y vete a bañar, a ver si así vuelves en ti.

-¡¿Qué?!...hip...¡De ninguna manera!...hip...¡Estoy bien así!

-Muy bien, si no es por la buena es por la mala-Levi cargo a Hanji sobre su hombro y comenzó a subir las escaleras con dirección al dormitorio.

-¡¿QUE DEMONIOS HACES, ENANO?!¡BÁJAME!-Hanji golpeo la espalda de Levi.

-Tsk. Ya cállate, maldita borracha-Levi entro al baño y comenzó a llenar la tina.

-¡LEVI!¡NO LO HAGAS!-Hanji ya sabía lo que significaba ese ruido.

Una vez estuvo llena la tina, Levi solto a Hanji dentro de eta, sin importarle que salpicara fuera de la tina.

-¡ESTA HELADA!¡ESTA HELADA¡-Hanji trataba de salir de la tina-¡¿QUE RAYOS TE PASA, MALDITO ENANO?!¡¿ESTAS TRATANDO DE MATARME?!-se puso de pie, como pudo, dentro de la tina.

-Solo hago que tomes un baño, no pienso compartir la cama con alguien que apesta a alcohol.

-¡PUES NO LO HAGAS!¡LA VERDAD, A MI TAMPOCO ME INTERESA COMPARTIR LA CAMA CON UN IDIOTA?!

-¿Como me dijiste?

-¡QUE ERES UN IDIOTA!¡UN MALDITO IDIOTA OBSESIONADO CON LA LIMPIEZA!

-¡Y tú, una maldita loca feliz de vivir entre la basura!

-¡¿ASÍ VEZ MIS INVESTIGACIONES?!¡¿COMO BASURA?!

-¡Digo lo que veo!¡Y lo que veo, cada vez que limpio tu estudio, es basura!

-¡PUES NO LO LIMPIES!¡ASÍ DE FÁCIL!¡YO LO LIMPIARE!

-¡Si!¡Claro!¡La última vez que te vi limpiar algo aquí fue hace tres años!

-¡SI ME HUBIERA CASADO CON MOBLIT, ME HUBIERA IDO MEJOR!

-¡¿Con Moblit?!

-¡ASÍ ES!¡ÉL ME TRATA MIL VECES MEJOR QUE TÚ!¡ME APOYA EN MIS INVESTIGACIONES!¡NO SOLO ES MI MANO DERECHA EN EL TRABAJO SINO MI MEJOR AMIGO!

-¡Ya basta!

-¿¡Y QUIERES SABER LO MEJOR!?

-¡CÁLLATE!

-¡ES ALTO!¡ES DE MI MISMO TAMAÑO!¡SI TUVIÉRAMOS QUE BESARNOS NO NECESITARÍA AGACHARME PARA NADA!

-¡Solo estas diciendo esta mierda porque estas borracha!

-¡CLARO QUE NO!¡LO ESTOY DICIENDO EN MIS MALDITOS CINCO SENTIDOS!¡Y TE LO VUELVO A REPETIR!¡ME ARREPIENTO DE HABERME CASADO CONTIGO Y NO CON MOBLIT!-grito eso ultimo mirándolo fijamente a los ojos.

-...-

-¿¡Y EN CASO DE QUE SIGA EBRIA?!¡¿QUÉ NO SABES QUE LOS EBRIOS SIEMPRE DICEN LA VERDAD?!¡SOLO NECESITAN UN POCO DE ALCOHOL EN SUS VENAS PARA PODER SOLTARLO!

-¡Cierra el pico y termina de bañarte!-Levi le dedico una mirada asesina a Hanji, para luego, abrir la llave de la ducha dejando car más agua helada sobre ella.

-¡AHHHH!¡MALDITO ENANO!¡CIERRA ESO!

Levi se dio media vuelta y salio del baño, cerrando la puerta de un golpe.

Minutos después, Hanji salio del baño, vistiendo solo una toalla que rodeaba su cuerpo y con otra,secaba su cabello.

-Supongo que dormirá en el cuarto de huéspedes-dijo al ver la cama solitaria. Termino de secarse, se puso su pijama, se echo en la cama y se durmió al instante.

A la mañana siguiente.

Hanji despertó con un poco de dolor de cabeza.

-Mmmm, ¿que paso ayer?-se pregunto a si misma, mientras se sentaba en la cama y se pasaba una mano por el cabello.

En ese momento, los ojos de Hanji se abrieron a más no poder, al recordar todo lo que había hecho y dicho en cuanto regreso a casa.

-Oh no, ¿que hice?-se llevo ambas manos a la boca al recordar todo lo que le había dicho a Levi-¿Que hora es?-volteo la vista para ver el reloj de la cómoda, dándose con la sorpresa de que ya era más de medio día. Se levanto de la cama de un salto, salio de la habitación, bajo las escaleras con dirección a la cocina, en donde encontró a Levi. Quien estaba sentado de espaldas leyendo el periódico con una mano y con la otra sostenía su taza de té negro-Levi-dijo con algo de timidez.

-Buenas tardes-respondió Levi de forma fría y sin voltear a mirarla.

-Buenas tardes-Hanji tomo asiento en la silla que estaba enfrente-Ammm...

-Solo para confirmar, ¿que tanto recuerdas?

-...desde el inicio...-susurro Hanji agachando la cabeza.

-Bien, entonces las cosas están claras.

-¡¿QUÉ?!-Hanji estaba sorprendida al escuchar esas palabras, que Levi decía con tanta facilidad-¡NO!¡LEVI!¡POR FAVOR!¡ESCÚCHAME!¡DÉJAME EXPLICÁRTELO!

-Lo hecho esta hecho y es demasiado tarde para quejarse o arrepentirse de eso-Levi dejo el periódico a un lado, se levanto de su asiento aún con la taza en mano y camino con dirección al lavadero, en donde comenzó a lavar la taza-Estaré en mi estudio, más tarde pediré algo para el almuerzo-dejo a taza recién lavada a un lado y salio de la cocina.

-¡LEVI!¡TENEMOS QUE HABLAR DE ESTO!¡DE NOSOTROS!...-escucho como cerraba la puerta.

El resto del día, Levi se la paso encerrado en su estudio, solo salio únicamente para comer la comida que había ordenado a delivery y en ningún momento le dirigió la palabra a Hanji, quien también se había encerrado en su estudio, pero a diferencia de Levi, ella no hacia nada porque no podía concentrarse para nada.

El día siguiente fue igual, cuando regresaron a trabajar Levi se volvió más distante. Ahora regresaba a casa a altas horas de la noche. Lo que preocupaba a Hanji, por lo que comenzó a llamarlo todo el tiempo, no solo a su teléfono sino también a su despacho; pero nunca le respondía, tampoco los mensajes de texto. Así que ahora lo esperaba hasta que llegará para intentar conversar con él, pero la respuesta era la misma, y en las mañana ya no lo encontraba.

Hanji se sentía fatal, y se notaba en su apariencia y actitud. Ya no sonreía, ahora se la pasaba con la cabeza agachada, y cuando le preguntaban que le sucedía ella simplemente respondía que nada y sonreí para que no le tomaran atención a su actitud.

Así continuaba con su día a día, fingiendo que nada pasaba, pero cuando llegaba a casa, que estaba completamente sola, se desahogaba llorando en su habitación, sabia que era su culpa pero quería arreglar las cosas entre ambos, desafortunadamente Levi no daba de su parte para nada. Lo que la hacia sentirse peor.

Final del primer capitulo.

Hola.

Si, ya sé lo que van a decir algunas.

¿Que hago publicando otra historia cuando debería de actualizar Perfume: la historia de un amor?

Pues les diré que hace tiempo quería publicar esta historia, solo que no sabia como empezarlas como la mayoría, pero al fin termine.

Y ya sé que a muchos les parecerá extraño el Levi x Ymir, pero ya me conocen, siempre se me ocurren ships demasiado crack XD.

Aunque si les soy sincera no estoy muy convencida sobre este lemon que hice, y eso que me inspire en un doujinshi Levihan.

Otra vez quiero agradecer a kuramakaneky por ayudarme con las ideas de esta y mis demás historias.

También quiero agradecer a RivaiFem, por la hermosa portada que me hizo para esta historia. Si les soy sincera, esta es mi portada favorita de todas.

Bien, es todo.

Como siempre perdonen las faltas ortográficas.

Ojala les haya gustado.

Si es así, voten y comenten.

Me voy a ver que otra historia actualizo o publico.

Hasta otra ocasión.

Nos vemos.

Bye.