Caer en tentación

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Dicen que cuando uno esta molesto, se tiende a tomar malas decisiones. Y si, a esto, le agregas alcohol, el resultado pude llegar a ser mucho peor.

Eso fue lo que paso con Levi.

Luego de haber escuchado las hirientes palabras de Hanji, Levi no solo salio de la habitación, sino también de la casa. No solo se encontraba furiosos sino también dolido, aunque no lo demostrara, tanto esfuerzo y sacrifico que había puesto en esa relación y matrimonio, para al final escuchar, de sus propios labios, que le hubiera ido mejor con otro hombre.

Se decidió por caminar para buscar un bar e intentar calmarse, ya que su furia era tanta que, muy probablemente, hubiera destrozado toda la casa en un intento por descargar su ira. Pero no funcionaba, en verdad necesitaba golpear algo o, si se pudiera, a alguien. Se encontraba tan hundido en sus pensamientos que no se dio cuanta todo lo que había caminado, y justo cuando estaba por doblar una esquina escucho una voz femenina que, a juzgar por su tono, se escuchaba asustada.

-Ya déjame en paz.

-¡¿Para qué?!¡¿Para que vayas a acostarte con alguno de los tantos amantes que tienes?!-también escucho una voz masculina, que usaba un tono intimidante.

Pudo haber dado medí vuelta e irse por donde vino, ya que no era asunto suyo; pero existía una cosas que Levi odiaba más que a suciedad y el desorden, y eso era el que maltrataran a una mujer. Así que, se quedo en el callejón vigilando a la pareja para evitar que llegaran a cosas peores que la fuerte discusión que estaban teniendo.

-¡Ya te dije que si no eres mía no seras de nadie!-el hombre que hablaba era alto, de piel morena cabello castaño y ojos esmeralda; mientras que la chica era de baja estatura, piel clara, cabello rubio y ojos aguamarina. Vio como el hombre tomaba bruscamente el brazo de la chica y comenzaba a sacudirla un poco.

-¡Me estas lastimando!-la chica se encogió más debido al dolor.

-¡Cierra la boca!-comenzó a jalarla para que camine-¡Camina!¡En cuanto lleguemos a casa voy a darte una paliza para que aprendas!

-¡No!¡No voy a ir a ningún sitio contigo!-comenzó a forcejear

-¡Tú no aprendes!¡¿No?!-en el momento que vio como alzaba su brazo, para golpear, se acerco lo más rápido que pudo y lo tomo por detrás.

-¡Ni se te ocurra tocarla!¡Maldito cobarde de mierda!-le retorció el brazo por detrás de la espalda.

-Arrggg...-el otro se quejo por el dolor-¡Ya suéltame!-volteo a verlo.

-Primero suéltala-apretó su agarré

-¡Tú no me dices que hacer!-soltó el brazo de la chica y formo un puño, con dirección a Levi. El cual lo esquivo rápidamente, sin soltarlo, para después empujarlo, para alejarlo de la chica, que se encontraba totalmente petrificada mirando la escena-¡Maldito enano!-se abalanzo sobre Levi, pero este le tiro un puñetazo en el estomago, haciéndolo caer al piso por falta de aire. Finalmente lo tomo del cabello y le propino un fuerte rodillazo en la cara, cayendo completamente al suelo; y en cuanto trato ponerse de pie, sintió como ponía su pie sobre su cara y hacia presión

-Vuelve a decirme así y te mato-la voz de Levi era tenebroso-Ahora, si te quedan algo de neuronas, lárgate de aquí o te irá peor-saco su pie de su cara y le dio una ultima patada en el estomago.

-Ma-malnacido..-se puso de pie como pudo, se podía ver sangre en su boca y nariz-Esta...me la...pagaras-comenzó a caminar hasta desaparecer en la oscuridad.

-Oi, ¿Estas bien?-Levi regreso hacia donde seguía la chica.

-...Si...muchas gracias...-la chica todavía hablaba con algo de temor, y se tapaba su brazo con su mano contraria.

-¿Te lastimo mucho?

-...Solo un poco...no es nada...

-¿Tienes problemas con ese tipo?

-Si...hace un mes que termine con él...pero me sigue buscando para que regresemos...y últimamente se ha vuelto violento-hablo la rubia con algo de timidez

-Si quieres demandarlo puedes llamarme-saco una pequeña tarjeta de su bolsillo-Soy abogado.

-Gracias-la rubia tomo la tarjeta y la leyó-Levi...pero no creo que sea conveniente.

-Igual, si cambias de opinion no dudes en llamarme.

-Lo pensaré...por el momento quiero irme a mi casa-guardo la tarjeta en su bolsillo y comenzó a caminar.

-Espera-Levi detuvo su andar- Déjame acompañarte, no me sentiría tranquilo si te fueras sola sabiendo que hay un lunático suelto.

-Muchas gracias.

Ambos comenzaron a caminar.

-Por cierto, mi nombre es Historia Reiss.

-Un gusto, Levi Ackerman.

-Igualmente-Historia sonrió un poco.

Minutos después, Historia se detuvo en la puerta de un edificio.

-Es aqui, gracias por acompañarme.

-No es nada, cuídate.

-LO haré.Adios-HIstoria abrio la puerta y entro.

-Adiós-una vez vio la puerta cerrarse, Levi suspiro más tranquilo, al menos su ira acumulada había servido para salvar a una chica de un infeliz abusador, y de paso desahogarse un poco, pero igual seguía sintiéndose furioso, por lo que decidió continuar con su plan que era buscar un bar. Camino un buen rato hasta que vio un bar muy iluminado al que no dudo en entrar y sentarse en la barra.

-Bien enviado, ¿que desea de tomar?-saludaba chico de baja estatura, cabeza rapada, ojos color avellana y cejas finas y delgadas.

-Una wisky.

-En seguida-el chico dio media vuelta y se fue a preparar la orden-Aquí tiene-puso un vaso de wisky en frente de Levi.

-Gracias-Levi, ni lento ni perezoso, se tomo de golpe el wisky-Sirveme otro.

-A la orden-el chico volvió a darse media vuelta.

-Hola precioso, ¿Porque tan sólito?-hablo una voz femenina de forma coqueta.

Levi volteo para la izquierda y vio a una chica de piel morena, cabello castaño que tenia amarrado en una coleta con una flor, ojos cafés y rostro levemente largado. Usaba un par de pendientes largos, un collar que les hacia juego y unas tres pulseras en su brazo derecho. Llevaba puesto un vestido negro con un escote pronunciado que dejaban ver sus pechos.

-No es asunto tuyo, y por favor, déjame solo-Levi trataba de no ser grosero con aquella chica que le sonreía de manera coqueta. Así que regreso su vista al frente y tomo el nuevo vaso que le habían traído.

-Al parecer alguien esta de malas, ¿te importa si me siento a tu lado?-desde un comienzo ya estaba sentada, pero no se rendía en tratar de entablar una conversación con Levi.

-Como quieras. Es un país libre.

-Lo de siempre, Connie-la chica chasqueo los dedos hacia el chico que atendía la barra.

-A la orden, Ymir-el chico regreso en el acto con una copa-Aquí tienes tu martini seco.

-Gracias-respondió Ymir para despues tomar su trago, pero sin dejar de ver a Levi.

Durante unos minutos hubo un silencio incomodo, hasta que un hombre alto, cabello negro y corto rapado en los costados, pequeños ojos negros, barba y bigote muy cortos se acerco hasta quedar detrás de Ymir.

-Hola, Ymir. ¿Como has estado?-le saludo con confianza y con una sonrisa.

Mientras que Ymir hizo una mueca de disgusto.

-Lárgate Nile, me arruinas la noche-ni siquiera volteo a verlo, siguió con su vista en Levi.

-Te gusta hacerte la difícil-se puso en medio de ambos para que lo vea a los ojos-Eso es lo que me encanta de ti-trato de tocar su rostro pero Ymir le tiro su bebida en la cara, provocando que retroceda un poco.

-Ya te déjame en paz, que yo no tengo tan malos gustos como para fijarme en ti-Ymir se puso de pie.

-¡Y yo ya estoy harto de ser amable contigo!-Nile la tomo del brazo bruscamente pero Ymir no dejo su pose defensiva-¡Así que, quieras o no, vienes conmigo maldita zo...-no pudo terminar de hablar porque Ymir lo había pateado en la entrepierna.

-Ya suéltame, que me provocas nauseas-Ymir se libro del agarre y regreso a su asiento.

-¡Desgraciada!-aún lastimado Nile iba a golpear a Ymir, pero Levi lo detuvo de un puñetazo en la cara, haciéndolo caer al piso.

-La dama dijo que no, barba de burro-Levi lo miraba de manera tenebrosa-Así que déjala en paz o te las veras conmigo.

-¡Seguridad!¡Saquen a este hombre de aquí!-Connie llamo a los guardias que se encontraban en la puerta del bar.

Un hombres altos y fornidos, tomaron a Nile por cada brazo, sacándolo a rastras del bar y lo lanzaron fuera.

-No era necesario que me ayudaras, se cuidarme sola- Ymir miro a Levi-Aunque gracias.

-No hay de que-respondió Levi sin importancia. Ya era la segunda chica que salvaba esa noche. ¿En que momento se había convertido en el caballero de brillante armadura que salvaba a doncellas en apuros?. Aunque no iba a negar que golpear a ese par de imbéciles le ayudaba a descargar su ira reprimida-Sirveme otro-le ordeno al barman.

-Espera-interrumpió Ymir-Déjame que te invite la nueva ronda-le volvió a sonreír mientras se acercaba un poco a él-Es lo menos que puedo hacer por quien me defiende de ese imbécil.

-De acuerdo.

-Connie, trae más tragos-ordeno Ymir chasqueando otra vez los dedos.

-A la orden, jefa-bromeo Connie

-¿Qué tal si empezamos de nuevo?-propuso Ymir-Mi nombre es Ymir Fritz.

-Levi Ackerman.

Los minutos pasaban y con ellos los tragos. Ya estaba mareado pero poco le importo y continuo bebiendo. No fue hasta dos horas despues, de platicar con aquella chica que su mente se volvió borrosa y completamente nula...

A la mañana siguiente.

Una fuerte resaca, producto de todo lo que bebió anoche, fue lo que despertó a Levi de su profundo sueño. Grande fue su sorpresa al abrió los ojos, ya que se dio cuenta que se encontraba en una cama que no era suya, mucho menos en la casa donde se encontraba. Pero lo que más le sorprendió fue darse cuenta que estaba completamente desnudo y abrazando a una chica por detrás, la cual no pudo ver su rostro porque era tapado por su melena castaña.

Se alejo rápidamente de ella, fue en ese momento que se dio cuanta que su miembro seguía dentro de ella. Por lo que se movió de forma lenta hasta que quedo fuera.

Agradeció, mentalmente, el por lo menos haber usado preservativo.

-Mmm...-la chica comenzó a despertar y se dio la vuelta para ver a Levi-Buen día, precioso-le dedico una sonrisa coqueta

Levi se quedo de piedra, era la misma  chica del bar.

-Ymir-fue todo lo que alcanzo a decir.

-La misma que viste y calza-bromeo Ymir mientras se incorporaba y estiraba sus brazos por encima de su cabeza, pero como la sabana resbalo de u cuerpo, dejando ver su torso desnudo.

El cual Levi trataba de no ver.

Ymir observo el comportamiento de Levi, y no pudo evitar reír un poco.

-Por tu cara, deduzco que no recuerdas lo que pasó anoche. Lo único que te diré es que la pasamos muy bien-se acerco un poco a Levi-Felicidades, eres todo un semental-dicho esto ultimo, quito lo sabana de su regazo y se puso de pie, dejando ver su cuerpo desnudo a la vista del azabache.

-La puerta esta al final del pasillo a la derecha-por el tono Ymir utilizaba, no era la primera vez que hacia eso-Hasta nunca-camino a donde parecía ser el baño.

Una vez solo, Levi trato de recordar lo que había pasado anoche. Varias imágenes pasaron por su mente. De cuando aún seguían en el bar, cuando se empezaron a besar, la proposición de ella para continuar en su casa, a lo cual él acepto sin pensarlo dos veces y, como cereza para el pastel, la apasionada noche que tuvieron.

La cabeza estaba a punto de estallarle. No podía creer lo que acababa de hacer, había traicionado a Hanji, algo que nunca pensó que seria capaz de hacer, porque, aunque estaba furioso con ella, no se atrevería a lastimarla con tal bajeza.

-¿Sigues aquí?-Ymir salia baño, vistiendo solamente unas bragas de color negro y una baja larga con bordes negros y estampado de unos cerezos, que tenia el nudo sin amarrar y dejaban ver un poco sus pechos-Desde ahora te aclaro que esto no es un hotel, así que no esperes nada para comer-su tono era de molestia. Dicho eso ultimo salio de la habitación.

Levi regreso en si, y, lo primero que hizo, fue quitarse el preservativo, que aún tenia puesto, y tirarlo a la basura. Después se vistió rápidamente y salio de esa casa.

Tuvo que abordar un taxi para llegar a su casa, debido a que no tenia idea de donde estaba. Al llegar, fue rápidamente al baño, donde se desvistió y entro a la ducha, quería quitarse el olor de aquella chica y, de paso, olvidar lo vivido anoche.

Estuvo media hora bajo la ducha, hasta que se decidió por salir, cuando salio del baño su vista fue directamente hacia Hanji, quien se encontraba todavía durmiendo plácidamente. Rápidamente desvió la vista, no se atrevía a verla, porque el solo mirarla le hacia recordar su traición.

Se puso lo primero que encontró y metió su ropa a la lavadora, en un intento desesperado por limpiar su conciencia. Pero era inútil, él mismo lo sabia, a pesar de que borrara todo rastro físico, nada podría hacer con los recuerdos de aquella noche y con la culpa que le embargaba.

Finalmente decidió preparase un té negro y leer el periódico, para despejar su mente.

Olvidar lo que hizo era lo mejor, pensó para sus adentros, después de todo Ymir no significaba nada para él, solo un error cometido por haber bebido demasiado. Con eso en mente, su mente se comenzó a sentir tranquila.

Lamentablemente, toda tranquilidad desapareció al escuchar la voz de Hanji.

-Levi-se le escuchaba tímida.

-Buenas tardes-lo buena era que Levi sabia disimular muy bien su voz, pero seguia sin atreverse a mirarla.

-Buenas tardes-escucho como caminaba hasta quedar en la silla de enfrente-Ammm... 

-Solo para confirmar, ¿qué tanto recuerdas?

-...desde el inicio...

-Bien,entonces ñas cosas están claras-se excuso.

-¡¿QUÉ?!-Hanji estaba sorprendida al escuchar esas palabras, que Levi decía con tanta facilidad-¡NO!¡LEVI!¡POR FAVOR!¡ESCÚCHAME!¡DÉJAME EXPLICÁRTELO!

-Lo hecho esta hecho y es demasiado tarde para quejarse o arrepentirse de eso-en verdad Levi solo buscaba un pretexto para no tener que estar o ver a Hanji-Estaré en mi estudio, más tarde pediré algo para el almuerzo-por lo que decidió encerrarse.

-¡LEVI!¡TENEMOS QUE HABLAR DE ESTO!¡DE NOSOTROS!...-el solo escucharla ya era un martirio, no podía estar en el mismo lugar que ella. Por lo que camino rápido hasta su estudio y se encerro con llave.

Tenia que aceptarlo, olvidar el acto tan bajo que cometió era imposible, porque solo bastaba la presencia de Hanji para recordarle todo hasta el más mínimo detalle.

Se la paso todo el día encerrado, únicamente salio para comer lo que ordeno por delivery, y en ningún momento se atrevió a dirigirle la palabra a Hanji, quien, afortunadamente para él, estaba igual de encerrada en su estudio. Ni siquiera se atrevió a tocar la puerta, por el solo pasar por ahí, le provocaban escalofríos.

Se sentía tan culpable, que prefirió dormir en su estudio.Lo cual resulto ser muy incomodo y doloroso, que a mala gana se despertó el domingo.

No podía seguir así, no se la podía pasar toda la vida escapando de Hanji, por lo que llego a una conclusión.

-No existía otra opción.

Tendría que contárselo.

Así sintiera que le arrancaban el corazón, tendría que hacerlo.

Pero justo, cuando se decidió a salir de ahí, se escucho la canción Hero de Skillet, por lo que tomo su teléfono, observando que era un numero desconocido, y atendió la llamaba.

-¿Hola?

-Hola, Levi. ¿Te acuerdas de mí?-se escucho una voz dulce y tímida desde el otro lado-Me salvaste la otra noche de...mi ex-novio.

-¡Qué ex-novio ni que nada!¡Te salvo de una bestia!-se escucho una tercera voz, que por alguna razón, se le hizo conocida.

-Oh, ¿Historia?

-Si, soy yo-respondió igual de tímida.

-¿Como has estado?

-Ah...muy bien-trato de sonar segura-¿Y tú?

-Pues...-no pudo continuar porque otra vez escucho esa voz.

-¡¿Como que muy bien?!¡Hay un malnacido con cara de perro acosándote desde hace un mes!¡¿Y tú dices que estas bien?!

-Historia, ¿qué pasa?

-Es mi amiga, lo siento, es algo escandalosa.

-Bueno, deduzco que me llamaste porque quieres demandar a ese sujeto, ¿o me equivoco?

-Bueno..en realidad sigo algo insegura...pero mi amiga me estuvo insistiendo para llamarte.

-Tu amiga tiene mucha razón en este tema, ese tipo no es solo un peligro para ti, sino para cualquier persona.

-Esta bien. Confiare en ustedes dos.

-Estas tomando la mejor decisión. ¿Te parece juntarnos un día de estos para discutir los detalles?

-Claro, ¿te parece este lunes a las ocho de la mañana en el Starbucks cerca de la estación?

-Me parece perfecto. Te veo mañana en la mañana.

-Muy bien. Adiós.

-Adiós-colgó la llamada.

Lo que quedo del día se la paso haciendo papeleo y cuando llego la hora de dormir, se fue al sofá.

Al día siguiente.

Levi se levanto muy temprano. Se alisto y desayuno algo antes de que Hanji despertara, y se fue al lugar acordado.

Llego antes de la hora acordada, ya era costumbre en él ser muy puntual.

Mientras esperaba se pidió un café cargado, ya que aún no podía tener la mente tranquila.

Hablaría con Hanji, lo haría al final del día.

Justo en ese momento apareció Historia, pero no venía sola.

-Buenos días, Levi-Historia tomo asiento al igual que su acompañante.

-Buenos día, Historia y...

-Oh, lo siento mucho. Ella es mi amiga Ymir-señalo a su amiga-Insistió en venir conmigo.

-Ymir Frizt. Buen día-Ymir saludo como si nada, sin ningún tipo de insinuación.

-Buenos días-Levi estaba con su expresión seria por fuera, pero internamente se encontraba sorprendido. Lo que menos quería era volver a encontrarse con aquella chica con la que traiciono a Hanji-¿podemos comenzar?-se decidió por ignorarla y continuar con su trabajo.

-Si-Historia se escuchaba algo insegura-Pero...

-Sin peros, Tori-Ymir hablo de forma seria-Ese malnacido merece ser refundido en la cárcel por todo lo que te ha hecho.

Historia suspiro.

-Tienes razón-miro a Levi segura-Comencemos.

-Muy bien, comencemos con el nombre del agresor.

Durante un par de horas Levi se entero todo lo que había sufrido Historia, debido a que las agresiones y maltratos venia muchos más antes de que se terminara la relación.

-Me celaba mucho, tanto que llego al punto de que no quería que saliera de casa...-Historia hablaba con algo de dolor-Un día me dejo literalmente encerrada en el apartamento que compartíamos, aprovechando que estábamos en el tercer piso para que me fuera imposible salir por la ventana, había bajado el interruptor de la luz para que no pudiera usar nada de la casa y se llevo mi teléfono. De no haber sido por la vecina del apartamento de enfrente, nunca hubiera salido de ese lugar. Pero lamentablemente él me encontró.

-¿Donde te encontró?-Levi estaba grabando toda la conversación con su teléfono y anotando los puntos más importantes en su libreta.

-En casa de Ymir, cuando escape fui directamente para allá.

-Ese maldito invadió mi casa, destrozo la puerta a patadas y entro gritando que donde estaba mi amiga. Le dije que se largara pero se negó.

-Justo en ese momento salí al vestíbulo y me vio.

-Trato de llevársela a la fuerza pero lo golpe y me puso entre ambos, y le dije, otra vez, que se largara o de lo contrario llamaría a la policía y lo acusaría por allanamiento de morada. Lo cual pareció entender, pero antes de que se fuera amenazo a Tori.

-Me dijo que nos volveríamos a ver, pero aproveche el que Ymir estaba conmigo para decirle que quería terminar, lo cual solo empeoro las cosas, porque intento golpearme, pero Ymir me protegió.

-Lo golpe en el orgullo-decía Ymir orgullosa-Y termine por sacarlo a patadas de mi casa.

-¿Y desde entonces comenzó a acosarte?-pregunto Levi.

-Así es, al principio fueron llamadas amenazantes, luego comenzó a seguirme desde el trabajo hasta mi casa, hace unos días rompió una de mis ventanas con una gran roca y lo ultimo paso el viernes, cuando me salvaste de él.

-¿Tienes grabada alguna de sus llamadas?

-Si, logre grabar algunas, ¿porque?

-Porque no solo basta con lo que me contaste, sino necesitamos pruebas concretas para el juez.

-¿Como la grabación de cuando irrumpió en mi apartamento?-pregunto Ymir.

-Exacto, ¿de verdad la tienes?

-Si, la guarde en caso de que fuera útil, también tengo como testigo al portero, al cual golpeo hasta dejarlo inconsciente, solo de esa forma pudo subir hasta mi casa.

-Muy bien. Te pediré que trates de comunicarte con la vecina que te ayudo a salir del apartamento que compartías con él, ya que es otra testigo de como te maltrataba.

-Esta bien-asintió Historia

-También que permitas que te tomen fotos del moretón que te hizo hace poco. 

-¿Es necesario?

-Claro que si, es una clara prueba de lo violento que era contigo.

-Descuida, Tori. Estaré a tu lado en todo lo que dure este proceso-Ymir le acaricio la cabeza.

-Muchas gracias-Historia sonrió un poco-Si me disculpan debo ir al tocador-se puso de pie-Con permiso-comenzó a caminar.

-Yo voy a pedir algo para beber-Ymir se puso de pie y dio media vuelta. Pero justo, cuando dio unas cuantos pasos, sin tío que alguien le sujetaba del brazo. Por lo cual volteo la vista, dándose cuenta que era Levi-Te agradecería que me soltarás-dijo con clara molestia.

Levi soltó su brazo.

-No digas nada-dijo rápidamente en un susurro.

-¿Nada de qué?-Ymir no entendía a lo que se refería.

-Ya sabes...eso que no debía haber pasado.

Ymir solo rodó los ojos.

-Mph. Me saliste melodramático. Pero bueno, si eso te calma-alzo los hombros-No diré nada. Tengo mejores cosas que hacer que estar contando con quien me acuesto. Fin del cuento-volvió a caminar con dirección al mostrador.

Levi regreso a su asiento y soltó un pequeño suspiro de alivio.

Al menos podía estar tranquilo que Ymir no diría nada de lo que paso entre ambos.

-Aquí estoy-Historia regresaba a la mesa.

-Yo también-Ymir volvía a la mesa, con un café en cada mano-Toma-puso uno enfrente de Historia.

-Gracias-Historia tomo el vaso.

-Eso seria todo por hoy, ya debo de ir a mi trabajo-Levi miro la hora en su reloj-Aquí te dejo el número y dirección de mi despacho-le extendió una pequeña tarjeta.

-Esta bien, muchas gracias-Historia acepto la tarjeta-Nos vemos mañana.

-Bien, hasta mañana. Adiós-Levi se puso de pie y comenzó a caminar hacia la salida.

-Adiós-Historia se despidió con la mano.

El resto del día Levi trataba de mantener su mente en otra cosa que no fuera Ymir, el solo saber que tendría que verla el tiempo que durara el proceso de demanda de Historia, había hecho que volviera a estar inquieto.

Tanto que mando al demonio el hablar con Hanji, ahora prefirió hacer horas extra en el trabajo.

Y cuando ya no pudo quedarse en el despacho, regreso a aquel bar a tratar de olvidar todo bebiendo.

Como la vez anterior, bebió tanto que ya ni supo como había terminado, otra vez, en cama de Ymir.

Al igual que la otra vez, ella lo echo en cuanto despertó.

Solo que esta vez, reviso su teléfono, dándose cuenta que tenia varios mensajes y llamadas perdida. Optando por ignorarlas todas y poner de pretexto que estaba en el trabajo.

Para la tercera vez, prefirió ya no beber nada y se fue directamente a casa de Ymir. Sabia que de todos modos terminaría ahí si bebía, y ya se había hartado de estar gastando en taxis, por lo que esta vez, condujo hasta ahí.

Cuando llego el día del juicio, Levi termino ganándolo.

Lamentablemente no pudo meter a aquel sujeto a la cárcel, pero si logro sacarle una buena cantidad de dinero, que constaba de cinco millones de dólares, como indemnización a Historia, por todo el maltrato, tanto físico como psicológico, que sufrió. Además de una orden de alejamiento de cien metros.

-Muchas gracias por todo-sin poder evitarlo, Historia abrazo fuertemente a Levi.

-No es nada, es mi trabajo-Levi correspondió al abrazo.

-¡Maldita perra!-como era de esperarse, el fallo a favor de Historia no le agrado para nada a su ex-novio. Tanto que intento golpearla. Lo bueno es que los policías lo detuvieron-¡Me las vas a pagar!¡No solo tú!¡Sino ese enano y la zorra de tu amiga también!-gritaba con rabia pura.

-Pónganle un bozal a ese perro-opino Ymir.

Los policías sacaron a empujones al sujeto hasta quedar fuera del juzgado.

-Le agradezco mucho lo que hizo por mi sobrina, señor Ackerman-hablo ahora un hombre alto, de cabellera rubia y ojos aguamarina, como los de Historia-Es un gran abogado.

-Solo me ocupo de hacer bien mi trabajo, señor Reiss.

-Acompáñenos a tomar un trago para celebrar este día, hace mucho tiempo que no veía a mi Historia así de feliz.

-¡Tío Uri!-le regaño Historia.

-Ya dejalo, Tori-intervino Ymir-Tiene mucha razón, al fin te liberaste de ese transtornado mental.

Historia solo rodó los ojos.

-Esta bien, vamos a tomar algo.¿Nos acompañas?-miro a Levi.

-Con gusto.

El resultado al final del día fue el mismo que los anteriores.

Levi dejo de sentir culpa alguna al recordar lo que, hace poco minutos, sucedió con Ymir.

Solo que ahora, ya no se quedaba dormido hasta el día siguiente cuando terminaban, resultado a que ya no bebía. Pero su trato indiferente con Hanji continuaba, incluso se volvió más frió con ella. Y cada vez que ella pedía hablar solamente le recordaba sus hirientes palabras.

Su actitud continuo así por los siguientes tres meses.

En los cuales finalmente admitió lo que nunca quiso admitir al principio de todo.

Que había caído en la tentación.

Final del segundo capítulo.

Hola.

Después de divagar un buen tiempo, al fin termine este capitulo.

Como siempre perdonen las faltas ortográficas.

Espero que les haya gustado.

Si es así, voten y comenten

Como aún tengo esta semana libre voy a tratar de actualizar todas las historias que pueda.

Ahora a corregir porque he escrito esto como sea para que no se me cortara la inspiración.

Nos vemos en esta o alguna otra historia.

Hasta la próxima.

Bye.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro