Capítulo 13

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

¡Holiwis! De regreso para sacarl@s del suspenso XD.
*Al final del capítulo aparecerá una nota con las aclaraciones de los términos y elementos que pueden causar dudas*.

En la entrada del edificio de Byungseok, los subordinados que salieron un par de minutos después con intención de seguir a los infiltrados caían, uno por uno, instantáneamente tras recibir un balazo en la cabeza desde un lugar que no eran capaces de identificar, replegándose al interior una vez más.

—¿Dónde está el francotirador? —preguntó el que estaba a cargo de la persecución.

—No hemos logrado identificar su posición... No sabemos quién es, pero sus habilidades son de primera clase, se encuentra a una distancia considerable y ha sido capaz de derribar blancos estáticos o en movimiento con extrema precisión y velocidad; no es recomendable salir por ahora.

—¡Maldición! Ni siquiera fuimos capaces de detectar a estos intrusos; nuestro colaborador, aún desde fuera del país, nos alerta y ni podemos retenerlos en su fuga... Lamentable.

—Señor, lo mejor sería reorganizarnos. Logramos herir a uno de ellos, podemos rastrearlos en los hospitales y...

—¡Imbécil! —le gritó—. Olvida si hay alguno herido o no. Los datos que se llevaron... Si esa información se hace pública, puedes estar seguro de que ninguno de nosotros saldrá bien parado de esto —añadió, preocupado—. Lo mejor será comunicarnos con nuestro colaborador. Es vergonzoso, pero necesitamos de su influencia.

En la azotea, RM, sin alejar la mirilla del punto de salida de sus objetivos, se comunicó con Hoseok:

Todavía sigo en posición. Varios perseguidores intentaron seguirlos; los he neutralizado.

Gracias. V fue a buscar un médico y nosotros nos dirigimos a la clínica. No es demasiado lejos, con unos minutos más seremos capaces de quedar fuera de su alcance. No es bueno que te quedes e identifiquen tu posición.

Comprendo..., pero, aunque nos hubieran descubierto, considerando el tiempo y nuestra velocidad de trabajo, se organizaron demasiado rápido.

¿Insinúas que el apoyo extranjero del que sospechamos puede estar involucrado?

No tengo cómo corroborar mi sospecha, es solo una corazonada.

Tus corazonadas no suelen equivocarse —contestó Hobi con seguridad—. Seguiremos nuestros propios planes, sobre la marcha nos encargaremos de lo que surja, no nos queda otro remedio. Te enviaré las coordenadas de dónde nos dirigimos.

Perfecto, en cuanto me retire iré hacia allá, tengo que buscar una buena posición en caso de que necesite brindarles apoyo.

Entendido. Cambio y fuera.

Cambio y fuera.

Casi a la par de la retirada y el debate de las posibles complicaciones futuras, a varios kilómetros de distancia, un hombre de cabellos color gris esperaba por la respuesta de la persona frente a él; al ver que no la obtenía, comenzó a perder la poca tranquilidad que había logrado reunir para hablarle anteriormente.

—¡Jimin! —El grito de Tae sacó al médico de su trance. Se había quedado totalmente paralizado tras escuchar el ruego desesperado de aquel frente a su puerta—. ¡Sé que soy irracional, pero no hay tiempo! —Lo agarró de las mangas del pijama—. Por favor..., eres el único al que... le puedo pedir esto. —Cayó sobre sus rodillas, apretando sus párpados fuertemente para contener las lágrimas que, sin su consentimiento, comenzaban a asomarse.

El cirujano se recompuso de inmediato, golpeó un par de veces sus mejillas para darse valor, tomó el abrigo colgado a la derecha de la puerta, respiró profundo y centró su mirada.

—Vámonos —dijo, ayudando a Taehyung a levantarse, quien solo pudo suspirar aliviado y correr con él hacia la motocicleta.

Durante el trayecto, V sentía las manos temblorosas de Jimin apretar sus hombros con fuerza. Era capaz de imaginar cómo se encontraba el castaño. Él experimentaba una sensación similar, Jungkook era como su familia. No tenía derecho a involucrarlo, entre ellos no había ya ninguna relación, estaba poniéndolo en riesgo; pero no podía evitar ser egoísta por más injusto que fuese.

No estaba claro en su mente si era una esperanza ciega guiada por el deseo de salvar a su mejor amigo, pero saber que la vida de este estaba en manos del hombre junto a él, lo hacía tener la certeza de que se salvaría. Sin embargo, no podía detener el temblor de su propio cuerpo, temía que dicha seguridad fuera falsa, solo sustentada por un delgado hilo de fe que podía quebrarse en cualquier momento. Sacudió su cabeza para alejar los malos pensamientos y continuó el silencioso y asfixiante camino.

Faltaban solo unos minutos para llegar cuando recibió una llamada de Suga, que le explicó que Hoseok estaba en el quirófano con Jungkook y le informó acerca de la preocupación de Nam, quien acababa de arribar, sobre la rapidez con que el enemigo los descubrió.

Los pensamientos de Tae se aceleraron, comenzando a atar cabos que lo llevaron a una respuesta que para nada le complacía: "un rastreo". Se había encargado de las cámaras de seguridad internas del edificio; el cúmulo de imprevistos no lo habían dejado hacer lo mismo con las externas y de la carretera por donde se fueron. Sí, esas le angustiaban y mucho. Cada análisis corroboraba la teoría del susodicho colaborador foráneo. La llegada imprevista y agitada de Jungkook cuando se enfrentaron a esos hombres, la rápida organización y despliegue de los perseguidores que Yoongi le comentó... Había varios puntos ciegos, pero algo sí tenía claro, tenía que deshacerse de esos videos, no solo por la posibilidad de que ubicaran la clínica, sino también a Jimin, eso definitivamente no lo permitiría, estaba ya arriesgándolo, no lo convertiría en blanco de un enemigo del cual no conocían nada.

Hobi no podría preparar los ordenadores para él ponerse a trabajar en cuanto llegara, Suga no era muy diestro en asuntos informáticos, además de que estaría montando guardia y Nam seguramente estaría en posición para brindar apoyo en caso de que sucediera lo peor. Tenía que prepararse para verter todo su talento y velocidad en los teclados, no en vano era conocido por su gran velocidad a la hora de hackear... Llegaron a su destino y se dispusieron a entrar, saldrían victoriosos de esa guerra contra reloj, tanto él como Jimin, pues el conteo regresivo podía estar activado para Jungkook también.

V saludó a Suga y desvió su mirada a la joven sentada a su lado, recordando que se había marchado con ellos, parecía estar bastante calmada, era como si la sola presencia de Yoongi la tranquilizara. Divisó sus ordenadores en posición, solo quedaba encenderlos. Todos entendían el riesgo al que se enfrentaban, cada cual desempeñaba su papel y tenían la certeza de que él cumpliría cabalmente el suyo.

—Acompáñame, Jimin —le dijo, caminando hacia lo que parecía un pequeño salón de operaciones.

El castaño solo asintió y lo siguió. Entraron a un cuarto contiguo, donde estaban los utensilios para la desinfección previa y desde el que se apreciaba el interior a través de un cristal. Jimin quedó mudo, no se atrevía a dar un paso. Puso sus dedos dubitativamente en el vidrio, frente a él se encontraba Jeon Jungkook, inconsciente y asistido por un hombre que intentaba mantener sus signos vitales dentro de los parámetros normales. Retrocedió un par de pasos, no conocía la situación y... el solo imaginar que la vida de esa persona peligraba y podía escurrirse entre sus dedos delante de sus narices si no tenía éxito..., lo aterraron.

—Hobi-hyung, ya lo he traído —habló Tae luego de apretar un botón que permitía la comunicación entre ambas habitaciones.

El mencionado levantó la vista para inspeccionar al recién llegado, lo que le trajo desconfianza y preocupación, ya que notó la inestabilidad emocional y palidez en el rostro del médico traído por su compañero.

—¿Estás seguro de esto? —Volteó hacia el peli gris.

Aquellas palabras cargadas de desaprobación calaron profundo en Jimin, acababa de provocar una primera impresión terrible. Eso solo le hizo recordar un evento ocurrido durante su internado, hacía ya varios años; uno que contribuyó con creces a convertirlo en quien era hoy.

─━━━⊱✿⊰━━━─

—¡Profesor, es usted increíble! —decía el castaño de ojos miel al cirujano a su lado, un hombre ya mayor, lo suficiente como para peinar muchas canas.

—Ja ja ja, ¿sorprendido, Jimin? —contestó bromista.

—¡Por supuesto que sí! Nadie creía que ese paciente podría sobrepasar la operación y, ¡usted lo ha conseguido! —prosiguió, con admiración—. ¡No me lo creo! Solamente con su mirada dio a entender a todos que no fallaría. Por algo es conocido como el médico que hace milagros. —Amplió su sonrisa—. Espero algún día poder asegurar el éxito de mis operaciones desde antes de comenzarlas.

—¿Te parecí seguro? —El interno asintió-. Estuve con el corazón en la mano todo este tiempo —dijo, dejándose caer agotado y aliviado en una silla.

—¿Usted? —preguntó incrédulo.

—Así es... Escúchame bien: nunca podemos estar seguros de los resultados, pero eso no nos puede robar la esperanza. Te diré lo que me dijo mi profesor hace muchos años, cuando comencé mi residencia y todavía la incertidumbre y el miedo me hacían dudar antes de cada proceder: "el deber del cirujano no es solo operar, debe dar confianza a su paciente y a su equipo... Si vas a desmoronarte, que sea luego de haberte dejado la piel en el quirófano".

─━━━⊱✿⊰━━━─

Sus recuerdos lo golpearon con fuerza, ese error era pesado. Se prometió nunca cometerlo y... Mordió su labio hasta hacerlo sangrar y apretó sus puños, tan fuerte como no recordaba haberlo hecho antes. Levantó la vista, enfocándose en quien pronunció las palabras que le dejaron ver su ineptitud e incompetencia recientes. El fuego se encendió en sus ojos, denotando una determinación inquebrantable.

—Park Jimin, cirujano principal. Presénteme el caso, por favor —pronunció.

Una pequeña sonrisa de alivio apareció en los labios del especialista en infiltración y comenzó a responder al pedido:

—Jung Hoseok, seré su anestesista e instrumentista. Tenemos un paciente masculino de 30 años de edad, con herida de bala recibida hace 45 minutos en hipocondrio derecho*; el proyectil atravesó el cuerpo. Sedación inducida con 2mg de Ketamina*, hace 25 minutos y mantenida con Propofol* y Fentanilo*. Realicé incisión y tras la búsqueda del sitio de hemorragia, se reveló ruptura de arteria hepática propia, que al quedar expuesta provocó incremento de los previos signos clínicos de shock hipovolémico; dicha arteria fue pinzada hace 19 minutos. Se repuso volumen con las transfusiones pertinentes. Actualmente signos vitales estables, sin riesgo de fallo renal y vendaje compresivo sobre la herida.

Jimin, que había entrado mientras escuchaba el informe, luego de realizar el lavado quirúrgico de sus manos y cambiar su ropa por una estéril con ayuda de Taehyung, se posicionó frente al cuerpo de Jungkook. Suspiró profundo y tragó grueso, era la primera vez que trataba una herida de bala, esos casos no eran frecuentes. Tendría que basarse en los conocimientos adquiridos por los libros de texto y compensar con sus habilidades la falta de práctica... Una vida tan importante como la propia estaba en juego.

Corroboró por sí mismo la información recién obtenida, chequeó los signos vitales en pantalla y el estado de la herida bajo el vendaje. Hizo un silencioso gesto de aprobación a su actual instrumentista y le dedicó dos palabras que suavizaron su tensa faz:

—Excelente trabajo.

Se puso manos a la obra. Hoseok estaba atónito, ¿qué había sucedido con el manojo de nervios que llegó minutos atrás? Ahora solo presenciaba destreza y profesionalismo desbordados, combinados con una precisión y velocidad increíbles que podrían ser envidiadas por los mejores cirujanos del país.

Agrandó un poco la incisión anterior para mejorar la visibilidad, comprobó la integridad de la vena porta*, aliviado de que estuviera indemne; cauterizó e hizo ligadura de los vasos sanguíneos de menor calibre; revascularizó la arteria hepática propia, suturó y reconstruyó las estructuras dañadas del hígado. Con la ayuda de Hoseok, comprobó la integridad de los órganos vecinos, eliminó la sangre del interior de la cavidad abdominal mediante compresas y succión y se encargó de la limpieza y sutura de la herida, tanto en el plano anterior como posterior.

Hobi suspiró. Oficialmente, la cirugía había terminado y la vida de Jungkook estaba fuera de peligro.

—¡Doctor, lo logramos! —exclamó con una sonrisa. Jimin asintió.

—Ahora solo hay que... seguir observándolo. Podrías... encargarte de la... profilaxis antibiótica y... el resto de los protocolos..., por favor.

—Déjemelo a mí —contestó, ordenando el instrumental.

Cuando alzó la vista llamado por las entrecortadas palabras del cirujano, quedó incrédulo. El simple hecho de asegurar la vitalidad de Jungkook fue suficiente; las manos de Jimin habían comenzado a temblar nuevamente, su rostro se puso pálido, comenzó a sudar y a perder el equilibrio.

—Ya estás a salvo —le susurró a Jeon, con su último aliento, retrocediendo lentamente hasta que su espalda se encontró con la pared. «Ya lo he dado todo... puedo desmoronarme, ¿verdad, profesor?», pensó. Todo se volvió negro y se desplomó, pero su rostro estaba aliviado y satisfecho.

—¡Dr. Park! —gritó Hoseok asustado. En seguida fue a socorrerlo, pero se detuvo en seco.

La mano de Jimin se alzaba débil y temblorosa desde el suelo mientras se apoyaba en el codo de su otro brazo.

—Estoy bien..., recuerda que en el quirófano... tus manos deben estar... por encima de un metro de altura hasta que... termines tu trabajo —dijo con la mirada casi perdida y reuniendo las pocas fuerzas que le quedaban—. Dejo el resto... en tus manos —concluyó y perdió el conocimiento.

—Me ocuparé de ello, confíe en mí. —Estaba conmovido e incentivado, no fue hasta ese momento que entendió lo ocurrido, pues resonó el nombre Park Jimin en su mente, ese era, según les comentó V algunas semanas atrás, el novio de Jungkook.

Ese hombre no se recuperó por arte de magia. La presión que sintió debió ser monumental, pero reprimió ese enorme peso durante el tiempo que estuvieron ahí dentro, todo por garantizar el éxito de cada proceder. Escuchó una vez que los cirujanos no suelen encargarse de las operaciones de sus seres queridos, las relegan a alguien de suma confianza, no porque desconfíen de sus propias habilidades, sino por la imposibilidad de conservarse ecuánimes. Siempre es fácil ejercer frente a un desconocido...; pero cuando no es así, los menesteres más sencillos se vuelven una odisea. Esas acciones marcaron su corazón...; ese era, claramente, un doctor increíble.

—Si hubiera podido seguir estudiando mi carrera y volverme médico... Si no hubiera entrado a este mundo lleno de muerte y oscuridad sin retorno... El mayor honor de mi vida hubiera sido, sin lugar a dudas, poder consagrarme tanto a esta profesión como usted lo ha hecho, o, al menos..., haber tenido el placer de trabajar a su lado —dijo y comenzó a alistar lo necesario para el post operatorio. Recogió todo y ayudó a levantarse a ese hombre que le había demostrado un valor como hace mucho no veía y que lo había estremecido hasta lo más profundo de su ser.

Notas de la autora (por si alguien tiene curiosidad sobre esto XD):

*Hipocondrio derecho: tanto para anatomía, como para cirugía, el abdomen se divide por cuadrantes y en cada uno se encuentran órganos específicos. Cuando se divide en 9 partes, el hipocondrio derecho se refiere al cuadrante superior derecho. Aquí se encuentra el hígado.

*Ketamina: anestésico que favorece la vasoconstricción, disminuyendo las hemorragias. Sin embargo, su tiempo de duración en sangre es corto, por lo que en operaciones largas se puede usar para inducir la sedación, pero no para mantenerla.

*Propofol: agente hipnótico con gran rapidez de inicio y metabolizado rápidamente por el organismo. Se puede administrar por largos períodos.

*Fentanilo: fármaco opiáceo muy potente (cien veces mayor que la morfina), con un inicio de acción rápida, que suele usarse para la anestesia general.

*Datos breves sobre vascularización hepática: la vena porta se encarga de irrigar el hígado con sangre llena de nutrientes, por lo que en este caso, aunque la arteria hepática estuviera dañada, la funcionabilidad y vitalidad del órgano no se afectarían del todo. El hígado es un órgano con gran vascularización, por lo que las heridas en este suelen sangrar mucho.

🌸Espero se haya entendido. Perdón por especificar tanto, quería que fuera lo más realista posible. Si algo además de lo que expliqué les causó duda, o no entendieron algo de lo aclarado, pueden preguntar aquí. ➡️

IMPORTANTE (fechas fijas de actualización semanal de mis fics en emisión):

💮All for you (JIKOOKMIN) 💜 - martes.

💮 Complicated love (JIKOOKMIN) 💜 - jueves.

💮Over lies (JIKOOKMIN) 💜 - sábado.

Chao chan 😘

Hasta la próxima actualización.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro