La noche en los cumpleaños de Arianna fueron los mejores para ella, se encontraba muy alegre,   bebió hasta cansarse,  tanto que ya hablaba muchas incoherencias  de las cuales, Chiara la callaba, no quería problemas con nadie.

Yeon y Won, estaban reidos por el comportar de las dos, disfrutaron de aquella noche, hasta que Won dijo no más, ya que se sentía muy cansado y adolorido.

El resto de la comida, se la repartieron entre todos los empleados de la mansión, agradeciendo a la señorita Arianna, ya que así le llamaban todos los que trabajan para Yeon.
Todos pensaban que ambos ya estaban juntos, además de que la chica es muy tierna y eso les llamaba la atención a más de uno, más el respeto que le tienen a su jefe.

—Nos vemos después, vamos Chiara, estoy molido —está le sonríe y afirmó.

—Ari, que lindo ver esa sonrisa, pórtate bien, y descansa ¿Si?. — Arianna ríe a carcajada

—Ya caíste Chiara, ya te enamoraste y de él, tu me prometiste que… —le tapó la boca a Arianna, Yeon frunce el ceño, Won tomó a Chiara del brazo con fuerza, esta gime de dolor. —¡Que pasa animal!, te duele que te digan la verdad, Chiara es mía, y yo soy de ella, usted solo me la quiere quitar y ya lo logro, ella te quiere, así lo presenció — Yeon levanta a Arianna y la Lleva entre sus brazos como si esta fuera una princesa —Solo cuida de ella , troglodita — habló un poco bajo, escondiendo su cara en el cuello del castaño, este rie carcajadas por las palabras de Arianna, sobre todo por llamarlo troglodita.

—Solo esta celosa, no prestes atención Won, ve a descansar animal —se va riendo Yeon con una Arianna totalmente dormida entre sus brazos, el trago la había vencido.

Al llegar a la habitación, Yeon la deja en la cama, encima de su nochero dejó el regalo, ingresó a la ducha y se baño, se queda un buen rato recibiendo el agua fría sobre su cuerpo, estaba excitado con aquella castaña, además será una tortura para el quitarle la ropa. Esa mujer le había salido con una buena noticia, quería conocerlo, y lo bueno fue, que se lo dijo después de estar ebria. Estaba en sus cinco sentidos, así que…

Le daba tiempo para ver por donde comer, o tal vez ella desee….

Negó varias veces, no se podía ilusionar con algo que no sabía si pasaría, además ella dijo algo que le causó curiosidad, ¿A que juegan las primas? Si se supone que ya estaba mejorando la convivencia entre todos
Es decir, que ellas tratan de huir, ¿Arianna quiere visión para huir? Pero, si él mismo desea que ella vea y dejarla ir, solo era eso, no tenía por qué pensar en escapar, aunque…

Él la deja ir, pero de su prima no sabia, ya que es de su mejor amigo, si él decide que no, Arianna se tenía que ir sola, y no con ella, así que, la castaña se terminaría  quedando a su lado

Toda la noche Yeon se quedó pensando en miles de situación que podían pasar, cuestionando muchos comportamientos de todos  y ninguna le gustaba, hasta  que decidió…

….

—Estamos todos reunidos, vamos a planear nuestro nuevo escape, nos vamos ha  China, los apartamentos ya están completos, debemos evacuar esta y dejarla a la venta, los muebles se los pueden repartir, los animales los deben dormir para llevarlos en la embarcación próxima.

—Mis cocodrilos, traten los con amor, cuando tiene hambre se pone como lobo, de mal humor. — todos estaban serios menos Won. —Partimos el fin de semana.

Concluyó Won; Yeon y su amigo se miran, ahora sólo faltaba decirles a las chicas, no, ellos no iba a decir nada, mejor se iba a llevar la sorpresa además, para que decirles a dónde se las llevan, así no tendrán como escapar, esos eran los pensamientos de Won

Comenzaron a empacar lo necesario, en la noche salían del país, así que nada iban a perder, volvían a comprar todo.

Esta vez iban a vivir en un complejo de apartamentos, cada uno al frente del otro, en los últimos pisos, habían comprando los dos últimos pisos del complejo Shangai, ellos dejaran de vivir en mansiones, lo único que si tenía triste a Won era su cocodrilo, no podía dejarlo en la mansión que habitan por que será vendida. Ahora era poner al cocodrilo en un lugar sano para que el viva.

Won se adelantó comprando una finca para sus descansos y fiestas, y dentro de esa misma finca estaría equipada con una nueva mazmorra, los escapes correspondientes, una cabaña para la subasta. Lo que más le gustó fue el hogar de su hermoso cocodrilo , aquel lago era enorme para su mascota.

—Listo, yo ya tengo todo justo y en orden, mis libros contables, nada se me queda.

—Y yo no voy a dejar mis libros de lectura, y menos los que me costó encontrar

—¡Yeon, deja eso! — Won reniega.

—¡Claro que no! — él llamó a dos de sus hombres y los puso a empacar todos sus libros, para enviarlos en el avión que iban a ir ellos. Su propio avión.

Sus libros era lo último que dejaría.

Ambos amigos terminaron de acomodar las cosas que eran importantes para ellos y que debían ir en el avión y no se podían quedar, tampoco regalar.
Después subieron a sus habitaciones y se separaron, en cada puerta habían tres maletas, no podían llevar más ambos tomaron una maleta y la otra para las pertenecías de las chicas, pero… Ellas no tenían mucho, ya que no recibían nada de ellos.

Yeon al ingresar a la habitación, ve a Arianna en la cama de rodillas, como siempre la misma pose, esta sonríe ya que sabe que es el castaño es quien ingresó a la habitación, este también sonríe por inercia, le gusta ese tipo de gestos viniendo de ella.

—Arianna, debemos hacer algo, me acompañas al guarda ropa — él ve que ella se sonrojar, niega. — No se lo que estas imaginando, pero lo único que quiero es que me acompañes a empacar la ropa.

—¿Empacar? — pregunta.

Yeon la tomó de la mano y la ayuda a bajar de la cama, Arianna seguía preguntándose por que él le pedía eso. ¿Sería que él se irá por un largo tiempo?.

—¡Nos vamos! — finalizó, ella tomó con fuerza su agarre y lo detuvo.

—¿Otro paseo? — estaba muy preocupada por la determinación del castaño, cuando ellos salen la lleva a conocer lugares que con el sólo olor sabía que donde era, pero, esta ves, él le estaba diciendo que se iban ¿Pero a donde?

—Algo así, ¡nos vamos todos!

—¿Tu y yo? —Yeon comenzó a empacar las cosas, mientras le  explicaba de una manera que ella no se preocupara tampoco, le iba a comentar parte de lo que habían planeado para que Arianna supiera el por qué la huida, pero ella no se lo permite, además de que, era lo mejor, así se evitaban muchas cosas y conflictos, Arianna no sabía mucho  el mundo en el que se encontraba y por qué debían escapar y de quien, lo único que supo es que, se iban de viaje, pero lo que ella no sabía era que se iban para siempre de los Estados Unidos.

—Yeon, algo no anda bien, ¿verdad? —Arianna suspira —No me digas, ya lo entiendo, ¿A donde iremos a pasear?

—Algo así, iremos un poco más  lejos, solo… —Yeon la toma de las manos — Confía en mi, no te haré nada, no te.. —Arianna pone sus dedos en los labios de Yeon.

—No me expliques, ya eso lo se, o no hubieras hecho eso hace un rato, aunque… — Yeon la beso, no quería que ella repitiera lo que él una vez le dijo.

Se arrepentía de aquel trato que le dio en un comienzo

—Perdóname Arianna, no te volveré a decir esas palabras feas, este soy yo, el que tienes aquí al frente tuyo. —ella sonríe y asiente.

Si, ella comprendía que Yeon es así, y que le encanta esta parte caballerosa de él, es tan distinto ahora al Yeon de antes.

El déspota, egoísta.

.........Continuará