Capítulo cuatro: La luna roja

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—Tengo miedo. No creo poder hacerlo ésta vez. —JungKook se encontraba inseguro en el set al día siguiente, jugando con sus manos nerviosamente.

TaeHyung estaba junto a él, tratando de estar tranquilo y para nada preocupado en realidad. Confiaba en que el menor lo haría excelente.

—Oye, tranquilo. Yo sé que lo harás bien, sólo tienes que confiar en ti mismo.

—Ese es el problema.

—¡Cinco minutos para la grabación!

Los dos miraron hacia donde el sujeto que dió el aviso. Jungkook estaba cada vez más nervioso y TaeHyung trataba de calmarlo acariciándole las manos con cariño.

—Ey, tranquilo, ¿si? Yo siempre voy a estar aquí. —Musitó, un poco más cerca de su rostro y sonriéndole cálidamente.

Jungkook suavizó un poco más su respiración, asintiendo reiteradamente, aunque su semblante no demuestre convencimiento.

—De acuerdo, estaré bien. Iré a mi puesto.

TaeHyung asintió y le agarró de la mano, avanzando juntos hacia escena.

Aquel día era un poco más complicado, había algo en particular que a Jungkook le desesperaba un poco...

—¡Traigan la luna, por favor!

A Jungkook y TaeHyung casi se les pone rígido el cuello al levantar demasiado la cabeza, porque aquella luna gigante y brillante se encontraba sobre sus cabezas, tres metros más arriba. Jungkook sabía exactamente lo que tenía que hacer, y eso le asustaba más de lo que admitía.

—Bien, te pondremos seguridad y girarás en la luna por todo el lugar mientras cantas, luego pondremos unos efectos para que quede perfecto. —Le informaba el director, sonriendo abiertamente.

La siguiente escena era, claramente, la más complicada, pero se supone que se tendría que terminar aquel día. Jungkook no podía hacer otra cosa que formar una mueca en su rostro, se decía mentalmente que aquel hombre estaba más loco que una cabra, junto a producción.

Saldría vivo de eso, ¿cierto?

TaeHyung observó a Jungkook, le sonrió algo nervioso y puso sus pulgares arriba.

—Sólo respira, y tranquilizate, yo estaré cerca cómo siempre. —TaeHyung le acarició la mejilla y se alejó lentamente tras las cámaras.

Jungkook obedeció y respiró hondo, dándose ánimos a sí mismo.

Cuando hubieron hecho un poco más de coreografía, por lo menos los sujetos con trajes se encontraban detrás, lejos; algo que sus neuronas requerían. Se encontraba tranquilo desde entonces, pero sus nervios regresaron más intensos cuando en la siguiente escena todo se había puesto diferente.

—JungKook, bajarás con la luna, así que preparate, chico.

Jungkook miró a TaeHyung, quien seguía tratando de darle la mejor cara con una gran sonrisa. Fue hacia la parte de arriba en un estrecho pasillo, apoyando sus manos en las barandas. La luna estaba a su altura junto a él, le envolvieron la cintura con una cuerda negra y delgada, Jungkook meditaba en si era una buena seguridad. Procuró, algo temeroso y dudoso, subirse al gran objeto.

El suelo de madera era estrecha y apenas cabían sus dos pies, y sus brazos se envolvían sobre la parte alta de la medialuna.

—Sólo sostente de un sólo brazo, estás muy bien sujeto del cable.

Jungkook miró al hombre cómo si le hubiera dicho que tendría que, en cambio, saltar en paracaídas.

—Se ve difícil hacerlo. —Replicó él.

—No te preocupes, todo estará bien.

El castaño rodó los ojos y, con lentitud, apartó un brazo. Su respiración no era muy regular, pero trató de controlarse. En menos de un minuto, la luna comenzó a moverse y él se removió un poco, sintiendo su corazón detenerse por centésimas de segundos. Por un momento se sentía un suicida.

La música sonó al mismo momento en que bajaba, entonces supo que tendría que comenzar a cantar, pero era algo difícil lograr que saliera natural. El director desde abajo con un gesto, le decía que sonriera y que cantara. Pero Jungkook tuvo que apartar la mirada, porque empezaba a marearse.

El momento más difícil fue cuando la luna empezó a girar lentamente por el sitio, y los bailarines de abajo simplemente hacían su trabajo en la coreo. Jungkook ya no pudo seguir cantando, tenía nauseas. Y eso no era el mayor problema, cuando quiso sostenerse, sin darse cuenta, había roto el cable que lamentablemente era tan delgado.

TaeHyung que lo observaba desde abajo, pudo notarlo, y borró la sonrisa que procuraba mantener. Jungkook estaba más pálido, y parecía desmayarse. Y aunque trataba de sostenerse, era imposible porque seguía girando. La luna que antes era blanca, ahora se veía roja como la sangre. Entonces, sus brazos se resbalaron y comenzaba a alejarse cada vez más de la luna roja, cayendo hacia abajo.

Los ojos de TaeHyung se abrieron hasta casi salirse de sus cuencas. Apartó a todos a sus pasos, volviendo a echar al director —que en ese entonces se había paralizado de la impresión— al suelo con la silla al correr lo más rápido posible hacia el menor.

Jungkook cerró sus ojos, esperando algo que jamás llegó. No sentía el piso duro contra su espalda, o ningún tacto doloroso. Sólo unos reconfortantes brazos envolviéndole la cintura y las piernas. Abrió los ojos lentamente, girando la cabeza para ver a un chico rubio que lo miraba asustado y respirando agitadamente.

—¿Ya he muerto? Porque estoy viendo a un ángel. —JungKook musitó, mirando a los ojos de TaeHyung.

TaeHyung soltó una risa floja, sacudiendo la cabeza.

—Babo, ¿acaso no puedes sentir mi corazón latir fuertemente? Me asustaste. —Le regañó, con un deje de seriedad en su tono.

—Me salvaste, gracias a ti estoy bien.

—¡JungKook! ¿¡Estás bien!? —Se acercó Bang PD rápidamente.

TaeHyung ayudó al menor a levantarse y todos a su alrededor le dieron su espacio, aliviados de que al menor no le haya pasado nada malo. Ya no les sorprendía de que TaeHyung sea quien lo haya salvado; aquel chico era todo un súper héroe cuando se trataba de Jeon JungKook.

—Sí, estoy bien, gracias a TaeHyung.

—Oh, muchacho, me alegra tanto. Y tú, TaeHyung, gracias por todo. —Le palmeó la espalda. —Y quiero disculparme por lo de ayer, no estaba de muy buen humor.

—N-No se preocupe, hyung —, le dio una corta reverencia, sonrojándose. —Lo entiendo, y yo siempre estaré junto a Kookie. —Sonrió para el castaño, que también le devolvió el gesto.

—Eso me alegra de escuchar, me gustaría que trabajaras con nosotros para cuidar al pequeño, tendrás un buen sueldo. —Le ofreció el hombre, y el rubio quitó la sonrisa de su rostro.

—No, yo... Nunca cuidaría a Kookie a cambio de dinero...

—Pero TaeTae, tampoco puedes estar atrás de mí sin obtener nada. No es fácil y también tienes una vida fuera de esto. —Quiso convencer Jungkook.

Pero TaeHyung negó con la cabeza, tomando del antebrazo al menor para hablar más en privado.

—Lo que obtengo a cambio es tu bienestar, y eso es suficiente para mí, Kookie. No tienes que preocuparte, de todas formas yo trabajo, junto a mi padre. Él tiene una preciosa granja, y una muy grande, allí es donde me siento muy bien. Uno de estos días podría llevarte a conocerlo, estoy seguro que allí te sentirás en paz. —TaeHyung sonrió ampliamente, él amaba aquel lugar, todo le iba de maravillas a su padre.

Jungkook suspiró resignado.

—De acuerdo, está bien. Tú ganas. —Le dijo no muy convencido.

El mayor brincó victorioso. Porque TaeHyung no se sentiría bien consigo mismo si le pagaran por cuidar al menor; y por otro lado, Jungkook no se sentía bien consigo mismo si no le pagaba al mayor por cuidar de él. Eran dos pensamientos contradictorios, pero seguramente sabrían conllevarlo.

—JungKook —se acercó el director —, siento todo esto, lo mejor sería tomar un breve descanso y trataré de pensar en cómo cambiar ésta escena. —Decía el hombre frustrado.

Jungkook torció los labios pensativo.

—Creo tener una mejor opción. —Sonrió de lado.

Y así era, después de unos cinco minutos, la siguiente toma se volvió más sencilla y menos mortal. La luna roja no se veía tan mal después de todo.

Decidieron, gracias a la idea de Jungkook, que mejor bajaría en la luna cantando, mientras abajo esperarían los bailarines en montones realizando la alegre coreografía, sin la necesidad de que la luna de madera girara por todos lados. Y en cambio, él también podría sonreír sin el temor de morir, y todo se vería más colorido y emocionante.

Aquella escena entonces había culminado exitosamente, aunque les haya tomado unas cuantas horas —contando las que faltaban del descanso y el almuerzo—, pero todo ya estaba hecho. Jungkook junto a TaeHyung, ya no se sentían mentalmente exhaustos, porque la última toma ya no era nada más que el cierre.

—Bueno, mañana ya es el último día de grabación, así que espero no cagarla. —Comentó JungKook.

Los dos habían ido en su auto hasta la casa del mayor, y ahora estaban en la acera fuera del portal.

—No te preocupes, estoy seguro que te saldrá excelente. Hoy estuviste de diez.

—Bueno, casi estuve que ahorcaba al director Lee. Así que no tan de diez. —Mencionó, y los dos rieron por lo bajo. —Y lo peor de todo que para el viernes debo ir al psiquiatra, Bang me lo exigió. —JungKook se cruzó de brazos al agregar. No era algo que le apetecía hacer, se sentía de esa manera más loco de lo que ya se veía.

—Tranquilo, al menos de esa forma podrías estar seguro de lo que tienes, y sabes que no estás solo en esto, yo estoy junto a ti. —Le sonrió, asegurándole.

JungKook bajó un poco la mirada, sintiéndose avergonzado.

—Ese es otra de las cosas lo cual no me hace sentir muy bien. Tú no deberías de estar todo el tiempo junto a mí, ya hiciste todo lo que está a tu alcance. Encima de que soy tan peligroso cuando me descontrolo. —Suspiró pesadamente.

TaeHyung disminuyó un tanto la sonrisa y se acercó a él un poco más, levantándole la barbilla para verlo a los ojos.

—No tienes que preocuparte por mí más de lo que deberías de estarlo por ti ahora mismo. Yo sigo aquí porque así lo quiero, no deseo dejarte solo en este momento. Quiero que cuentes conmigo, Kookie.

JungKook sostuvo su mirada, brillándole los ojos y sintiéndose conmovido por el mayor. ¿Por qué Kim TaeHyung le decía cosas que le hacía temblar el corazón?

JungKook sostuvo el aire en sus pulmones y acercó su rostro al del mayor, dándole un beso en la mejilla que duró no más de tres segundos. TaeHyung abrió los ojos aun más por la sorpresa.

—¿Qué-qué fue eso?

—Un pequeño agradecimiento por tus bonitas palabras y por preocuparte por mí. —Le explicó, bajando el volumen de su voz.

TaeHyung tenía otro motivo por la cual volver a ampliar su cuadrada sonrisa. Él también le dió un beso al menor en la mejilla, sólo que éste duró un poco más, y estaba tan cerca de sus labios que aquello le hizo estremecer y erizarle los pelos a JungKook.

—¿Por qué eso? —Ahora preguntó el castaño, mucho más impresionando de lo que se encontraba antes TaeHyung.

—Por despedida, y porque no dejaría que me dieras nada a cambio por preocuparme por ti. —Le guiñó un ojo, y sin borrar su sonrisa, se alejó del menor, tratando de abrir el portón sin mucho éxito, dándose cuenta casi al instante de que estaba cerrado con llaves. —Ups —se rió de sí mismo —, estaba cerrado. Qué tonto. —Buscó en su bolsillo la llave, mirando a cada instante a JungKook que lo observaba divertido. TaeHyung se regañaba por ser tan distraído.

—¿Lo puedes encontrar? —Le preguntó JungKook.

—¡Sí! Aquí está —, sacudió las llaves en su mano mostrándolo y por fin abrió el portón, cerrándola ahora del otro lado. —Bien, entonces... Nos vemos mañana. —Rió tontamente.

—¡Por supuesto! Adiós. —Levantó la mano en un gesto de saludo y se metió al auto.

TaeHyung le observó alejarse, apoyando sus antebrazos sobre el corto portal de su casa. ¿Qué es lo que estaba mal con él?

Ahora no se lavaría la cara en un largo tiempo.




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No sé si éste capítulo estuvo bonito, pero quise que fueran algo tiernos e ir demostrando un poco sus sentimientos de apoquito, así avanzamos uwu.

Algunas querían besos, bueno, por ahora será en la mejilla xD ¿Quién dice que no podrían hacerlo más seguido? 6u6 jjsjs y lo más gracioso es que esto prácticamente ya tendría que ser el final pero lo modifiqué para hacerlo un poco más largo 😂 ¿eso les parece?

Espero que les haya gastado, no olviden votar si les ha gustado y comentar, porque amo cuando me dejan divertidos comentarios que me hacen reír también, yo los leo todos 😂💞 muchas gracias por el apoyo y mucho amor, yo en verdad me emocioné porque hayan dejado opiniones positivas todxs los que entraron a leer, eso me hace muy feliz bekdedn lxs amodoro 💕💕

Prontito el siguiente capítulo bbs, hasta luegito 💞💞💞 (ahre por qué así xD).

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