Me remuevo en la cama, siento que el frío del balcón sucumbe  mi cuerpo  y como no, me he quedado desnuda, bueno me han dejado desnuda. Sonrió como tonta.

Me levanté de la cama e ingresé al baño, tomé mi bata de dormir, me acomodé un poco y salí del cuarto piso. Tenía hambre y sed; bajó las escaleras, se me había olvidado  ponerme las pantuflas, aunque no me molesta estar descalza al contrario, me agrada estar así

Me siento un poco más libre.

Continúe caminando hacia las escaleras del tercer piso ... Ya llegando al segundo piso escucho unas voces.

—¡¿Cómo es posible que hasta  ahora me entere de eso papá?! Yo no.... No… —Shaoran estaba discutiendo.

¿Pero qué carajos pasa?, me escondo detrás de la pared, active mi hechizo para que no sientan mi presencia.

—Hijo, eso fue mandato de Sakura,   no mío. Fue su orden y ella claramente  dijo, "si los vampiros no matan a los lobos, deje que ellos  se maten", "todos los lobos deben ser híbridos" . Yo me opuse a tal decisión, pero ella...

—¡Tú corazón y el de mi madre lo tiene ella y quien sabe donde estará!.

Tapó mi boca para ahogar un grito. Cómo es que ellos... Como unos seres andan por ahí sin corazón acaso ellos dos... ¿Por qué?.

—Lo siento hijo por no contarte toda la realidad, pero creo que es momento de que sepas que tu hombro derecho está la marca del cerezo, esa pequeña flor poco a poco irá floreciendo  y en el momento que eso pasa tú...

—Jamás lo haré, ¡¿qué ocurre con ustedes?! Cómo pretende que yo la maté, ¡es mi mujer!, por qué demonios quiere matar mi felicidad.—está desesperado, lo sé, mi corazón cada vez se acelera más, empuño mis manos y fui cayendo poco a poco al piso, no solo Sakura marcó a Shaoran para que él me matará, también me marcó a mi para que yo  le sacara su corazón y fuese entregado a mi.

En realidad ya no se que es lo que quiere esa loca. ¿O será el pago? Pero si ellos ya le habían pagado por este gran favor que ella les hizo a ellos, pongo mis ojos en blanco.

El corazón de Shaoran, el mio... Hien y Ieran no tienen corazón... Algo desea ella…No debo permitir que eso pase y por lo otro...Veré como quitarle eso. No dejaremos que esa maldita bruja se salga con las suya.

Limpio mis lágrimas y salgo de mi escondite, sigilosamente vuelvo a las escaleras y hago que bajo estas haciendo  un poco de ruido, sus voces se callan abruptamente.

—Hola, ¿qué hacen aquí los dos? —paso por el lado de ellos para que no noten mi cara de tristeza.

—Nada, ya iba por ti —me medio sonríe Shaoran, rió por lo bajo.

—Ya estoy aquí, iré por algo de comer, muero de hambre y después iré a ver a Yuna... ¡So-la!.—Shaoran gruñe

—Los dejo... — dice hien bastante serio.

—propio.—le sonrió a Hien y él a mi haciéndome una reverencia.

....

Había terminado de medio  comer, la verdad casi apetito no tenía, mi hambre se fue a la mierda después de escuchar aquella conversación.

Es inevitable, ya lo veía venir.

Ingresó al calabozo donde está Yuna, seguía  amarrado ya  que todavía no soporta la luna llena, pero.. Ya le habían preparado la que era la habitación de Shaoran, ahora será suya y es la que siempre ha utilizado hasta ahora cuando Hien lo deja salir de aquí.

—¿Cómo va todo? —suspiro.

—Mejor que a ti no creo —ambos sonreímos.

—Ya me controlo más. La luna llena refleja mi cuerpo y no me he convertido.

—Eso quiere decir...

—Que también soy vampiro. Sabré manejar ya los dos, el Señor Hien me enseñó mucho, aunque...

—¿Aunque?...

—Siento que la mamada está desesperada por saber de mi 

Saco mi nuevo móvil, el otro no se donde lo perdí o donde lo deje.

—Toma, llamalos, habla con tu padre y ordena la calma. —le ordene.

—Si.

El marca el número, varios minutos y nada que contestaban, hasta que.

—Papá.. Si con Yuna.. Papá, calma... No me ha pasado nada, Sakura me ha ayudado mucho.. Estoy lejos, no te preocupes por mí, trata de que la manada esté en calma y por favor, traten de no salir tanto de su territorio.

Mientras tanto tomo mi collar y lo acarició, cierro los ojos, suspiro, para un lobo ser híbrido  es de lo peor, ya que es vulnerable para muchas cosas

Además de que debe combinarse con los vampiros, aunque no le veo el lado malo, se vuelve un poco más fuerte, aunque su metabolismo cambie.

Suspiro con pesadez — Listo Sakura —me acerco a él y tomó mi  móvil, me agacho y comienzo a quitarle las cadenas; no era necesario con las llaves, además no las encontré por ningún lado, decidí congelar las cadenas y  dañarlas, así que, la culpa  será de los dos, no solo mía.

Ambos nos paramos  del suelo.

—Gracias

—¿Por qué? — Él acaricia mi mejilla, lo miro a los ojos, los tenía entre dorados y rojos, gran combinación. —Por soltarme y confiar en mi

Niego — Sería injusto que, después de que ya te adaptaras a la luna y sus cambios siguieras  aquí encerrado.—levanto mis hombros.

—Que te puedo decir, me encariñe de estas cuatro paredes, mis mejores días los pase aquí —río por su sarcasmo.

Ambos reímos a carcajadas, él me abraza con fuerza, correspondo su abrazo

—Extrañaba esto de ti, tu olor, tu calor, tenerte así.

—Yuna...

—Lo sé, pero no me importa —me azota contra la pared y devora mis labios, con una ansiedad más grande que la de la última vez.

—Yuna — lo llamó para que pare pero nada, mala decisión venirme en bata, debajo solo tengo unas bragas y si él llega hasta ahí será difícil  contender. —Yuna— nada que paraba, me estaba desesperando, además si  Shaoran le diera por ingresar y verme en estas… Nos metemos en la grande.

—Ya basta Yuna —él para, su respiración estaba entrecortada al igual que la mía, me trató de acomodar mi bata y mi cabello. No quiero que piensen que... Aaahhh...

—Disculpame Sakura, no se que me paso, me entró un instinto difícil de controlar.

—No te preocupes Yuna, pero trata de no hacer más eso, estamos en casa de Shaoran además, al que yo quiero es a él, y…

—¿Por qué ese vampiro?

—Ni yo lo sé. —paso por su lado en completo silencio y salimos de esa celda, dejó a Yuna en la habitación del segundo piso, le indico que vivo en el cuarto piso y que en cualquier momento puede subir o si se sentía solo o descontrolado ahí me encontraba.

Continúe mi andar subí rápido las escaleras hasta llegar a mi habitación, me detuve en la entrada al ver a Shaoran de espaldas, él estaba mirando hacia el balcón, creo que no se ha dado cuenta de mi llegada, caminó decidida dónde está él parado y lo abrazo por la cintura.

—¿Me estabas esperando?.

—Como un loco demente incapaz de vivir sin su droga.

—Oh, qué poético. —sonrió.

Él se voltea y los dos quedamos cara a cara, pasó mis manos por  su cuello, acarició su cabello y me empino para llegar a saborear su cuello, siento que Shaoran suspiró varias veces, sonrió de medio lado.

—¿Qué sientes?

—¡Deseo de  tenerte! —acaricia mi espalda, me paro normal y deslizo mi bata de mi cuerpo hasta que ella cae al piso

—¿Y qué esperas? —sin pensarlo dos veces me toma en sus brazos para que yo enrolle mis piernas en su cintura. Nos besamos con un fuerte deseo, frunce su ceño, dejó sus labios y beso toda su cara — ¡Sabes que Shaoran! — él gruñe, se que le excita que diga su nombre cuando estamos muy calientes —No me importa lo que pase, quiero estar siempre a tu lado.

—Sakura —se detiene. Su mirada se ilumina como si fuese oro, realmente Shaoran  es hermoso - Te amo.

Mi corazón se acelera, tomó su cara con mis manos y lo beso, pero este beso es suave, con ternura, transmitiendo  todo mi deseo de estar a su lado; le transmito todo el cariño que le tengo, le transmito todo el amor que le tengo y de lo que soy capaz por él.

—Y yo te amo más, Shaoran. — ambos nos miramos, le sonrió de medio lado, me tumba con fuerza a la cama

—Te quitaré ese maldito olor a lobo de encima —abro mis ojos de asombro, ya veo por qué frunció su ceño, río a carcajadas, él comienza a lamer mi cuerpo y a morderlo, jadee más de una vez.

La sangre está inundando nuestra habitación. Ya no me dolía, porque es él el que lo hace.

Y como él lo dijo, quería borrar lo que Yuna había hecho hace unos minutos atrás.

—Aahhh.. Shaoran.. Eso es... Trampa — me tomó desprevenida, solté un fuerte gemido, después de  varios jadeos, Shaoran estaba en mi parte íntima explorando la como si fuese un pequeño bosque.

Estoy maravillada, encantada, deleitada.

De un momento a otro ya tenía  a Shaoran deborando de mis labios, lo atraigo más a mi con mis piernas permitiendo que el ingrese en mi, deseaba que él me  tomará ya mismo, no soportaba más la idea de tenerlo separado de mi.

La verdad, no soportaría la idea de tener que alejarme de él, mi vida le pertenece.

Fue bastante... Como decirlo, al principio no lo toleraba pero ahora, dejo que él haga  lo  que se le plazca con mi cuerpo, con mi vida, hasta que... Ese jodido momento llegue.

No quiero que Shaoran muera y menos en mis manos.

—Eres mía Sakura, solo mía —pasa su lengua por mi cuello — Nadie más puede robarte, si lo hacen los mato, entiendo que eres mía.

—Soy tuya —me abrazó de él, escondo mi cara en su cuello y lloró en silencio, no quiero separarme de él, no quiero.

—Soy tuyo Sakura.

—Soy tuya, Shaoran

—Mi reina.

—Mi rey —sus embestidas aumentan cada vez más, mis gemidos no cesaban, cada vez me daba con mucha más fuerza hasta que ambos llegamos a nuestro clímax.

Esta vez Shaoran se ha vuelto a venir  dentro de mi, por ahora no me importaba  quería estar así con él abrazados, bajo el sudor de nuestros cuerpos.

—SAKURA, SHAORAN —maldita sea, verdad que estos vampiros no saben que es tocar la puerta, ahora no es Hien si no Eriol. Bufo

—¿Qué carajos quieres  Eriol?, por que ingresas así. —Shaoran se para de mi cuerpo, me tapó con la sábana mientras Eriol se acerca a nosotros.

—Es tu hermano Sakura, tus abuelos también están aquí, mi madre los trajo — esta vez fui yo quien se para de la cama sin importar cómo estaba  y corro al baño a bañarme y a organizarme un poco.

—Cierra tus ojos idiota, es mi mujer

—No seas ridículo, Shaoran — comienzo a escuchar una pelea de hermanos, lo que faltaba

—Ya basta los dos —ambos me miran de abajo para arriba, evitó sus miradas, mi cara se ha calentado un poco — ¿Qué?

—Ese vestido negro se te ve... —veo la parte baja de Shaoran, su cuerpo estaba tomando vida propia.

—Anda toma una ducha y baja.

—¿Qué, no me vas a esperar? —niego, él me mira con ojos de cachorro degollado, rio a carcajadas

—Claro que sí, dale rápido.

Me había puesto un corto vestido negro de voleros y unas sandalias que me llegan hasta las rodilla, estas tenían muchas tiras y son del mismo tono del vestido, mi cabello lo deje suelto, solo lo peine un poco, debía volver  a cortarlo, mi cabello es otra parte de mi que cobra vida propia  y comenzá a crecer solo de una manera exagerada.

Veo que Shaoran se había puesto una camisa verde con  unos jeans negros, se veía bastante atractivo, muerdo mi labio.

—Sakura, si haces eso, en verdad que daño ese vestido  y te tomo en este instante.

Carraspean una garganta.

—Es obvio que ya se  les olvido que estoy aquí—suspira con pesadez — Vamos Sakura, tu familia te espera y pues no te gustara ver como está tu hermano. —me asombro por sus palabras ¿Qué ha pasado?

Ambos asentimos y bajamos, al llegar al primer piso me encontré con todos incluyendo a Yuna, este estaba sentado al lado  de Hien, ya veo, solo confía en él.

Después posó mi mirada en Touya y corro a él.

—¿Qué te pasó? ¿Touya quien te hizo esto?

—El mismo que viene por ti, Sakura estás en peligro.

—Nadie la toca  por qué lo mató — todos miran a Yuna, sonrió de medio lado.

—¿Y quién es ese? —lo señala como si fuera una basura.

—Larga historia, ahora soy su.. Dueña por así decirlo.

—Sakura, mi madre se alió con ellos, ella... Es hermana de ellos

—¿Cómo así? De qué me perdí.

—Sonomi es una Li, es la hermana menor de Hien, los hermanos Li son: Hien, Clow y Sonomi, ellos son hermanos y está claro que ella se siente traicionada por que te tenemos aquí, aunque sepa que no eres cualquier persona.

—Soy la hija de la mujer que le quitó su amor... Hasta yo sería capaz de eso. —miró a Shaoran, él me sonrió de medio lado.

—Sakura. —Touya llama mi atención, lo miró con el ceño fruncido.

—¿Puedes hacerla entrar en razón?. —vemos que Touya asienta en  afirmación.

—El problema es ingresar a la mansión Reed.

Ese es el problema.

Minutos después del silencio paso a  un fuerte estruendo que  nos sacó a todos de aquella burbuja de pensamientos, pues como se esperaba, comenzaron atacar.

—Yuna  lleva a mis abuelos al calabozo, Eriol protege a Touya hasta que llegue hasta donde su madre y los traes de vuelta aquí. — les doy una orden a ambos, los dos asienten, me paro con decisión —Familia, esta noche nos haremos respetar.

Todos me sonríen de medio lado y me hacen una reverencia.

—Como usted ordene. —hablan al mismos tiempo.

—Sakura —venía corriendo Yuna —Mi familia también está afuera, me encontraron.

—Sakura ¿Y si son ellos? —niego ante las palabras de Shaoran.

—No lo son, lo sé, además ellos saben que Yuna está bien conmigo y que  me lo traje para ayudarle

—Mi padre está de tu parte, Sakura —Yuna ignora a Shaoran.

—Yuna —él me mira —Solo no muerdas a nadie —todos me miran sin entender mi orden hacia él — Solo has caso. No lo hagas, porque si lo haces todos…

Continuará...