Hoseok.

¡ERA EL!.

NO LO CREO.

cuando visualice su rostro que me trataba de brindar confianza, me tranquilice enseguida...
Mi cuerpo de alguna forma u otra, dejo de se tiras tensa por el susto que me causaba anteriormente ese hombre.

Entonces... El, ¿Es el dichoso asesino?, O.. ¿Solo a querido asustarme?.

No entiendo.

-— Tranquilo bebé... Soy yo, ¿Vez?, Soy Taehyung -— Su voz era serena y tranquila. Su mirada me veía de manera tierna y ya casi no le temía.

-— T-tu... ¿Q-que?, ¿C-como?.

-— Tranquilo bebé -— Con ello, me levanto del suelo, y me recargo en sus brazos como si, si,  fuera un "bebé".

Me deje recargar en sus fuertes brazos, y prendió camino a mi habitación. Se sentó aún conmigo en brazos sobre la cama, mirándome fijo.

-— ¿C-como?... Tu... ¿A-asesino? -— Realmente no sabía si decir tan seguro lo último.

El asintió.

O-oh.

-— Tranquilo, amor. -— Hablo con su mirada fija en mi.

¿No sabía más que decir?

Suspire y creo que eso fue lo que ahora sí le dió a entender que estaba tranquilo.

-— ¿Estás bien?, ¿Te lastimaste mucho? -— Se refería a mi caída. Asentí y me removí en su cuerpo, solté un quejido y el supo que mentía. -— No me mientas bebé... Si no, no podré ayudarte. Te recostare -— Me informo.

Asentí nuevamente, el se levantó conmigo, y después trato de dejarme con delicadeza sobre mi colchón.
Gemí con un poco de dolor cuando sus brazos chocaron con mis costillas.

-— Perdón , bebé -— Me susurro, y dejo un fugaz beso sobre mis labios. -— No estoy aquí para acerté daño, te lo dije anoche, jamás te haría daño -— Repitió. -— Yo más bien te cuidare y protegeré...

Entonces.... Mi pelinegro del cual gusto desde hace unos días, y del que muero por todo, y que prácticamente dejaría que hiciera lo que sea conmigo.... ¿Le gustó?, Digo, si le gusto a Taehyung, me agradaría mucho. Pero, este Taehyung que está aquí conmigo ahora... ¿Realmente es mi Taehyung?, ¿Mi pelinegro?, ¿El causante de mis anteriores masturbaciones?.
Es.... ¿Un psicópata?

-—  Tu... No entiendo -— Solloze sin llegar a llorar.

-— Si tan solo digo que gusto de ti, ¿Entenderás? -— Me límite a asentir.

Entonces... El gusta de mi.

-— ¿Tu... Eres un....?

Alargue en espera a que el terminará y lo hizo. -— Más bien, soy él asesino. -— Sonrió. ¿Por que sonrió?, ¿Y por qué tiene una sonrisa tan bonita?.

-— V-van-

-— Vante Kim.. -— Termino por decir mi frase.

Trague en seco pero me parecía difícil tragar de mi propia saliva, sentía un nudo en medio de mi garganta. Y prácticamente me lo impedían.

-— Pero no temas de mi, bebé -— Se apresuró a decir. -— Tu eres mi todo, ¿Entiendes?, Eres mi angel, mi ser, mi vida, mi mundo .. mi todo, bebé. Y eres mío.

Oh, soy... Suyo. -— ¿T-tuyo?

-— Mío -— Susurro seguidamente acercándose a mi. Especificamente mis labios.

-— T-tuyo... Tuyo -— Argumente de nuevo tratando de captar todo.

-— Mío... Mío -— Su aliento fresco choco contra mi serena piel.
No sé que pasó conmigo, pero sin pensar lo dos veces, pegue mis labios con los suyos.

Me lastime un poco mi labio, pero no me impidió a seguir besándole con necesidad.

Correspondió gustoso, sabía que lo haría, el inicio esto. El no terminaría.
Creo.

Intenté reincorporarme para besarle con mayor comodidad, pero el antes de que yo lo hiciera, el se acomodo enzima mío, sin aplastarme.

Sabía lo que iba a ocurrir.
Y realmente quiero que suceda.

Una de sus manos rozo y acarició mi mejilla, mientras que la otra la utilizaba para sostener de su cuerpo para no caer en mi y lastimarme.

Solté un pequeño gemido, después de hacerlo el sonrió contra mis labios, haciendo chocar un poco sus dientes con mis labios.

Volvió a besarme y esta vez me levanto un poco y me acomodo enzima de su regazo, para disfrutar con más profundidad del beso.

Sus manos pararon a mi cintura, dandole un leve agarre fuerte, yo posicione mis delgados brazos sobre sus hombros. Jodee un poco más cuando sus grandes manos se metieron bajo mi playera, acariciando mi espalda y comenzando a bajar sobre mis glúteos.

Masajeo un poco de ellos, palmeando lo que podía. Moridos con delicadeza mis labios y yo lo hice de igual manera, o quizás.... Fui un poco más sucio al hacerlo.

Mi trasero que hacía bien sentado sobre su hombría, sentía el roce que este daba contra mi pequeño trasero.
Alzo mi playera con sus manos, tratamos de no despegarnos del beso mientras la quitaba, cuando la logro sacar solo dejando de tocarnos los labios por microsegundos , me tiró sobre la cama, esta vez siendo algo tosco.
Un pequeño quejido salió de mis labios, pero trate de no hacerlo fuerte, no quería que en estos momentos se preocupara y me dejara de hacer esto.

Se comenzó a sacar la túnica , dejándome ver bajo ella unos pantaloncillos largos de elástico, y un polero. Polero que se sacó después de a verse quitado la túnica.

Mi mirada recorrió su marcado cuerpo. Aquellos músculos en sus brazos, y aquel trabajado abdomen. Me lo comí con la mirada.
Y mordí con deseo mi labio inferior, importadome poco si me lastimaba o no.

Iba a juntarse de nuevo para besarme, pero le detuve poniendo uno de mis dedos sobre su pecho. Su ceño fruncio y sonreí un poco, trato de reincorporarse e imitar habla, pero le hice callar cuando baje de sus pantaloncillos.

El supo lo que trataba de decir.

Obvio. Tenía que ver el paquete completo.

Bajo su pantalón y bajo la tela de su ropa interior pude ver muy marcado su hombría. Hacía un poco mojado, sabía por qué.
El cosquilleo bajo mi vientre se intensificó de tan solo ver aquello.

Me miró de manera perversa y Jugueteo con el elástico de su bóxer. Oh valla.
Mordía de manera sexi sus labios, yo lo miraba plerpejo.

Lo quería seguir el juego, así que me levanté un poco y baje rápidamente su bóxer -— que al bajarlo le llegó hasta sus muslos.-—, de respingo y salpicando un poco mi vientre se dejó ver.
La punta roja y con pre semen saliendo de ella, y aquellas venas que se le remarcaban.

Esto iba a hacer exquisito.

-— Mi turno de ver. -— Dijo. No entendí por unos cortos segundos pero después le capte, cambiamos posiciones, yo me senté a horcajadas sobre su regazo y miembro, sin aún meterlo, y jodee al sentir la dureza.

Con un poco de dificultad retire mi cómodo short, y trate de ser sensual al momento de quitarme el boxer, el sonrió divertido y yo igual, se ti que me miraba tonto pero de alguna forma no. El me susurro un: "te jodere". Lo dijo de manera linda, así que lo tomaré bueno.

Mi hombría también escurría de pre semen, que cayó sobre su abdomen, sonrió gustoso y acarició un poco de el.
Jodee bajito mientras estimulaba mi amiguito.

Cerré mis ojos dejándome llevar por el placer, pero se detuvo, abrí mis ojos para ver el por que, y Vi sus rojas manos -— con la sangre seca -—, sobre mis vendas.

No pregunto si las podía quitar, solo las quito. -— Juro bebé, que nadie jamás volverá a lastimarte -— ¿Eso, era bueno?.Sonaba macabro, pero no le cuestione sobre su dicho.

Se reincorporo un poco para quedar algo sentado, sujeto mis caderas y beso con ternura mis costillas, y rozó con sus dedos cada hematoma ahí marcada.
Seguido de eso, me abrazo no tan fuerte y beso mi barbilla.

-— Pagará quien te haga sufrir -— Susurro.

Temía un poco... ¿Que me quería dar a entender con eso?.

Negué nuevamente cuando intenté preguntar por ello, solo me estime a seguir disfrutando de sus toques.

-— Te haré el amor -— Susurro seguidamente.

-— Hazlo -— Sonreí.

Quiero que lo haga.

Quiero que me joda.

Sus besos regresaron a mis labios, y sus manos bagaban por mi cuerpo.

Cambiamos posiciones de nuevo, separó mis piernas y le echo un vistazo a mi entrada. -— Exquisita -— Dijo con esa voz ronca.

Metió con algo de dureza sus dedos a mi boca, me indico que lamiera bien de ellos y lo hice. Chupe como si fueron una paleta.

Al sacarlos solo me dedico una sonrisa y los guío a mi entrada, gemí gustoso cuando esos duros dedos entraron expandiendo mis paredes.

Estire de mi cuello hacia atrás, e intenté cerrar mis piernas por el repentino dolor, pero Taehyung se encargó de que las mantuviera abiertas para el.

-— Quiero que gimas mi nombre en alto cariño, que te escuchan tus vecinos a quien perteneces -— Me límite a asentir.

Sus dedos chapotearon en mi entrada, consiguiendo así que está abriera.

Una vez salieron esos dedos de mi, sabía lo que seguía.

Cuando sentí su punta rozar mi entrada, mi boca soltó variedad de groserías que ni sabía que existían, tiré de nuevo de mi cuello hacia atrás, mi espalda se arqueo, mis piernas flaquearon y los dedos de mis pies se enroscaron.

En golpe fijo termino por entrar su falo en mi, sacándome gemidos ahogados y otros escandalosos.

-— Mi nombre cariño -— Me recordó.

Asentí con mis ojos cerrados y comencé. -— T-Taehyung~, T-aah~ -— Aún no había movimiento por su pelvis, tan solo tenerlo dentro me hacía gemir.

-— Fuerte -— Demandó.

-— ¡T-Taehyung!~ -— Estoy seguro que con este grito en gemidos, desperté hasta las personas fuera de este barrio.

-— Muy bien -— Felicito y comenzó a mover su pelvis.

Golpe tras golpe y la cama rechinar eran igual de fuertes que mis gemidos.

Las posiciones cambiaban constante los movimientos, que termine montandolo.
Aunque no era muy necesario que yo brincara contra el, ya que más bien era él quien se encargaba de mover mis caderas.

Me sentí extraño....

Hace unas horas atrás dije que estaría dispuesto a hacer cualquier cosa con el pelinegro que me trae mal. Cualquier cosa. Incluso ahora sí quiere que sea su esclavo sexual lo soy.
Le doy todo de mi.
Ahora mismo me imaginaba con una correa siendo jalado por el, para darle una buena mamada.

Dios... Me sentía loco.

Ahora mismo estoy teniendo relaciones con el tipo del bar que me traía pendejo desde hace días,  que también resultó ser el asesino en serie, y que me jode tan bien.

El sonido obsceno de mi entrada chocar contra su pene me hacía estar más caliente, y creo que a él también.

Mi frente hacia algo sudorosa como la de el, y aquella sonrisa satisfactoria en sus labios ... Me encantaba.

Sentí mi climax llegar, mi hombría dejo en libertad mi semilla, que escurrió en el abdomen de Tae.
Poco después sentí mi interior caliente y sus embestidas parar, me llenaba con tranquilidad mientras me dedicaba esa linda sonrisa cuadrada y tomaba mi mejilla en su mano para estirarla.

-— M-me jodiste bien -— Comenté sonrojado.

-— Te jodí bien -— Me afirmó. -— ¿Te a quedado claro que eres mío?

-— S-si, soy... Tuyo.

Tiro de mis hombros para hacerme caer a su pecho y besarle. De una manera tan..... Ah~.