Narra Bella

Me quedé en estado de shock cuando Maléfica estaba parada justo en frente de mí. Carlos me empujó y me puso detrás de él, para que Maléfica no me viera.

-Vete de aquí, mamá. - dijo Mal.

-¡Ja ja ja! Que graciosa. - dijo Maléfica riéndose mientras señalaba a Mal - Que graciosa.

Maléfica después de reírse, miró seriamente a Mal.

-Venga, dame la varita. Ya ya.

-¡No! - gritamos Ben y yo al unísono.

Parecía que Mal le iba a dar la varita a su madre, pero en lugar de eso, se la pasó a la Hada Madrina. La Hada Madrina agitó su varita sobre su cabeza y fue a realizar un hechizo.

-Bibbidi, bobbidi---

-Boo. - terminó de decir Maléfica y levantó su bastón impidiendo que el hechizo del Hada Madrina se realice.

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Narrador Externo

El ojo de dragón del bastón brilló y el Hada Madrina junto con todo el salón se congeló. Carlos miró a Bella, que estaba detrás de él y para su sorpresa ella no estaba congelada como los demás. Bella y Carlos se miraron en estado de sock y luego se dieron cuenta de lo que había hecho eso.

-¡El anillo! - susurraron ambos.

Evie y Jay también se dieron cuenta de que Bella no estaba congelada y los tres se pusieron delante de ella, para que Maléfica no pudiera verla.

-Oh, fallaste. - dijo Maléfica y se rió.

Caminó hacia el Rey Bestia y le quitó las gafas.

-¡Oh! En otra época, en otra época...

Maléfica sonrió mientras evaluaba al hombre. Bella veía con odio a Maléfica mientras ella le volvía a colocar las gafas pero se las puso en el pelo. Quería gritarle a Maléfica por siquiera pensar en su padre de esa manera. Su bestia interior estaba saliendo a flor de piel, estaba enfadada, muy enfadada. Carlos al darse cuenta de como estaba Bella, le puso una mano en su brazo para calmarla, pero solo la calmó un poco.

Maléfica se alejó del Rey Bestia y subió los pequeños escalones mientras tarareaba una canción y reía. Se acercó al Hada Madrina y le quitó su varita.

-¡Oh! ¡Oh no! Alguien tiene que arreglarse los pelos de la nariz. - dijo Maléfica empujando la nariz del Hada Madrina con la varita.

Mal y los demás estaban atentos a lo que hacía Maléfica pero aún intentando esconder a Bella de la vista de Maléfica. Maléfica miró a los hijos de los villanos pero vio otra cabeza detrás de Carlos, miró a la familia real y se dio cuenta de que les faltaba un miembro.

-¿Por dónde empezamos? - preguntó Maléfica mirando directamente detrás de Carlos y sonrió maliciosamente.

-¡Ya sé! - gritó ella.

-¿Qué tal si empezamos por deshacernos de eso? - Maléfica agitó la varita mágica y el anillo de Ben salió volando del dedo de Mal y cayó dentro de la varita.

-¡Ha sido perfecto! - dijo Maléfica con felicidad mientras miraba como su hija estaba devastada.

-¡Oh! Perdón, mis disculpas, perdón... ¡Los cuernos! ¡Los cuernos! - dijo Maléfica mientras caminaba agachada debajo de los brazos del Hada Madrina. Mal miró su mano con tristeza y Evie puso su mano en su hombro. Maléfica miró a los pequeños villanos y sonrió al ver la cara de Bella.

-¡Oh! ¿Quién es ella? - dijo Maléfica con una sonrisa maliciosa.

El ojo de dragón brilló y Bella fue arrastrada hacia Maléfica. Bella gritó aterrorizada y Carlos trató de detenerla pero Bella ya estaba bajo el control de Maléfica. Maléfica ahuecó la cara de Bella y la miró a los ojos.

-Pero menuda cara bonita. - dijo Maléfica con sorna - Debes de ser la otra gemela de la familia de Bestia.

-¡Suéltala! - gritó Carlos.

Maléfica miró a Carlos y luego a Bella.

-Oooh, ¡oh oh! ¡Esto es muy gracioso! ¡Y verdaderamente ridículo! - dijo Maléfica riéndose a carcajadas - Ustedes dos... ¿enserio? - y se volvió a reír.

-Y pensaba que Mal era la única que había usado el hechizo de amor, pero el pobre Carlos... eso es simplemente muy malvado. ¡Me gusta! - dijo Maléfica.

-Yo no usé el hechizo de amor. ¡Yo la amo de verdad! - gritó Carlos enfurecido.

Maléfica se quedó en estado de shock.

-¿Enserio? Oh.

Maléfica soltó la cara de Bella y la agarró por el cuello, sin dejarla respirar.

-¡¡No!! - gritaron los cuatro descendientes.

-¡Suéltala de una vez! - gritó Carlos.

-¡Madre, detente! - gritó Mal.

Maléfica soltó a Bella y usó su magia para lanzarla al otro lado del pasillo. Los descendientes vieron como Bella salió volando sobre sus cabezas y Jay y Carlos corrieron como pudieron tras ella para salvarla. Justo a tiempo Jay consiguió atrapar a Bella y la colocó suavemente en el suelo. Los ojos de Bella estaban cerrados, pero todavía respiraba. Después de asegurarse de que Bella estuviera a salvo, se fueron corriendo hacia Mal y Evie.

-Oh, enamorarse es de gente débil. - dijo Maléfica caminando hacia Ben y volcando su corona hacia los lados - Y ridícula. - dijo mirando a Carlos.

-No es lo que quieres. - dijo Maléfica mirando a Mal.

-¡No sabes lo que quiero! - gritó Mal - Mamá, ¿me has preguntado alguna vez a mí lo que quiero?

Mal tenía ganas de llorar, vio a una de sus mejores amigas ser arrojada por su madre al otro lado de la habitación. Ella nunca quiso que hiciera daño a Bella.

-¡Yo no soy tú!

Maléfica miró a su hija.

-Obviamente. - dijo Maléfica - Yo he tenido años, años y años de entrenamiento para ser mala. Lo lograrás...

Mal miró a su madre.

-¡No, no quiero! - dijo ella - Y me gustaría mucho que tú no lo hubieras logrado.

En lo que hablaban, Bella se levantó poco a poco y caminó hacia Mal y los demás. Nadie se dio cuenta y Bella se alegró de que hasta ahora no lo hayan hecho.

-El amor no es de gente débil y ridícula. - dijo Carlos pensando en Bella y lo feliz que le hace.

-La verdad es que es maravilloso. - continuó Mal.

-Sé una cosa. - dijo Maléfica pero paró cuando vio a Bella y usó el ojo de dragón para llevarla hacia adelante - ¡Que no hay hueco para el amor en vuestras vidas!

Carlos se sorprendió de que Bella estuviera despierta y adelantada. Pero Bella con lágrimas en los ojos fue agarrada por el cuello por segunda vez.

-Por favor. - Bella se atragantó al hablar - por favor.

-¡Mamá! ¡Suéltala! - gritó Mal - ¡Ella es mi mejor amiga!

-¿Esta chica? ¿es tu mejor amiga? ¡Sus padres nos pusieron en esa isla y estás tratando de salvarla! - gritó Maléfica.

-Maléfica, por favor... solo déjala ir. - dijo Carlos quien también tenía lágrimas en los ojos.

Mal vio que su madre estaba usando la magia de la varita mágica en Bella. Mal pensó rápido e intentó salvar a Bella.

-¡Varita te voy a ordenar a mi mano volar! - gritó Mal extendiendo su mano, y la varita salió volando de la mano de Maléfica a la de ella. Bella cayó al suelo completamente noqueada. Carlos asustado corrió hacia ella y la levantó, poniéndose detrás de los demás.  (n/a: No entendí muy bien el hechizo de Mal, pero lo voy a dejar así porque es lo que entendí)

-Vamos, Bella. Quédate conmigo. - dijo Carlos.

-¡Ha funcionado! - dijo Mal mientras miraba la varita en su mano.

-Lo dudo mucho. - dijo Maléfica al caminar en círculo algo estresada.

-Sinceramente, esto es muy aburrido y muy inmaduro. ¡Dame la varita, dámela! 

Carlos vio a Bella despertar mientras la abrazaba cerca de su pecho, no sabía como había despertado, pero estaba contento de que lo haya hecho. En ese momento te das cuenta que no toda la magia oscura se rompe con besos de amor verdadero, sino solo con el propio amor verdadero.