Bonita Pareja

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Namjoon.

El mocoso esta limpio, es verdad todo lo que le dijo a Seokjin, pero sigue comiéndome la cabeza saber que siempre esta con él a solas en la panadería, no debe de ser de mi incumbencia.

Seokjin es un padre soltero, uno que recién perdió a la madre de su bebe, dudo mucho que su orientación sexual cambie con ese chico, ¿Qué me importa a mi?

—¿Namjoon? ¿Me escuchas?

—¿Qué?

—Estas mas distraído de lo normal, te decía que descubrieron que el artista Min Yoongi resulto ser uno de esos Donceles, quede impactada, ya decía yo que su apariencia no era normal.

—¿Doncel?

—Si, los hombres que pueden concebir, que asco la verdad, el poder tener hijos debe ser exclusivamente de las mujeres, eso es algo tan antinatural.

—Si fuera antinatural, no podrían hacerlo, también son personas Yuna, estigmatizarlos no ayuda en nada.

—¿Estas de acuerdo con eso? No puedo creerlo, debería ser suficiente que aceptemos todo eso de la homosexualidad, no tengo nada en contra de las lesbianas y los gays, pero eso ya es demasiado.

¿Cómo vine a dar con ella?

—Mejor cambiemos de tema ¿Ya tienes todo lo que necesitabas? Necesito regresar a la oficina.

—Si.

—Vamos entonces —le ayude a levantarse de su silla, las bolsas de compras las llevaban algunos de los guardias que nos acompañaron hoy.

Seguía hablando de cosas de la boda, ella estaba comprando detalles para los invitados, el evento lo quería hacer en grande, por lo que la complacía con lo que me pedía.

Pasábamos por una de las tiendas, cuando mire a cierto chico, subir con una bebe en brazos que reconocía perfectamente.

—¿Yuna?

—¿Qué sucede?

—El chofer te llevara a tu casa, tengo algo que hacer, te veo después.

—Esta bien.

La deje bajar sola las escaleras eléctricas, mis guardias la acompañarían asi que estaría bien, yo casi corrí para ver al chico lindo de la panadería.

—Seokjin —alce la mano.

—Nam, Hola —esa sonrisa —¿Qué haces por aquí?

—Andaba de compras, pero siento que me faltaron algunas cosas ¿y tu?

—Hyejin ya casi no tiene ropa que le quede por lo que necesito conseguirle, esta creciendo muy rápido.

Mire en su mano una carreola doblada asi como su abrigo.

—¿Quieres que te acompañe? Parece ser que no podrás con todo.

—No pensé que las tiendas de bebes estuvieran en el segundo piso, ¿me sostienes a Hyejin?

Solo asentí tomando a la niña de sus brazos, esta como siempre me observo atenta, sus manos se fueron directo a mi rostro.

—Hola pequeña.

—Le agradas en verdad, otros han intentado cargarla pero siempre llora, solo tu y Tae la toman en brazos sin que llore.

—Pero el mocoso te hace reír —tome su manita que muy apenas podía envolver mi dedo —¿te gusta mas que yo? —ella sonrio dejando caer su chupón, balbuceando un poco —yo te vi primero no debes olvidar eso.

Mire a Seokjin que ya había terminado con la carreola, su mirada era algo seria pero no de mala manera, sus ojos tenían un cierto brillo, trate de desviar mi mirada pero me fui directo a su cuerpo, su cintura pequeña relucía mas con ese suéter que mostraba un poco de su estomago, trague saliva al subir hasta sus delicados hombros, es tan malditamente perfecto.

—¿La recuestas? —solo asentí mientras colocaba a la bebe en la carreola —gracias.

—¿Si me dejas acompañarte?

—¿No estas muy ocupado?

—Para nada.

Mande un mensaje a mi asistente para que cancelara mi junta, para encaminarme hacia las tiendas de bebes con Seokjin.

Elegia la ropa con cuidado, mirando lo que le quedaría en los próximos meses para el cambio de clima, además de que buscaba algunos conjuntos adorables.

Yo mire un abrigo en pequeño, uno similar a uno que uso y sin pensarlo dos veces lo tome y fui a pagarlo, sin que mi lindo panadero se enterara, deje la bolsa en la carreola, mirándolo aun lado de Hyejin.

—Tu padre es demasiado atractivo para su bien.

Las dependientas se juntaban a su alrededor como moscas, todas ofreciéndose para ayudar, él solo siendo amable pero mostrándose nervioso, parece que no esta acostumbrado a lidiar con su apariencia en publico.

—Vamos a rescatarlo —cargue a HyeJin que parece que ya se puede erguir un poco mas, miro a su padre para soltar el chupo y balbucear atrayendo su atención —¿terminaste cariño? Parece que la niña tiene sueño.

Todas miraron a mi dirección, luego a la bebe en brazos que esperaba que Seokjin la cargara, las chicas se tornaron decepcionadas, aunque otras mas tenían una mirada curiosa y morbosa que me causo escalofríos.

—Creo que ya tengo todo —cargo a la bebe y se iba a regresar para pagar pero no lo deje —Nam no.

—Déjame pagar esta vez, siempre eres un gruñón.

No dijo nada, ya que las chicas suspiraban al vernos, me dejo seguir con nuestra farsa y yo estaba mas que encantado.

—¿Tienen mucho juntos?

—Si.

—La bebe es adorable, es magnifico que los dejen adoptar.

—Fue vientre de alquiler, quería una pequeña con el rostro de mi esposo, ¿no es perfecta?

—Si, hacen una pareja perfecta, es afortunado.

—Lo se.

Sali agradeciendo, tome a Seokjin de la mano mientras salíamos de ahí, caminamos un par de tiendas, pero no lo soltaba.

—Creo que debería de soltarme antes de que mas gente nos vea, se podría meter el problemas.

—Si me sueltas lo aceptare, pero eres demasiado llamativo, por lo que atraes la atención de las personas y pareces aterrado, al menos asi se lo piensan antes de molestar, yo no tengo problemas.

Se fue a mi lado hasta que salimos del centro comercial, el clima era frio y caía una ligera llovizna que hacia el vapor de la respiración aumentar, Seokjin acomodo a la bebe para cobijarla bien, yo le había ayudado a ponerse el abrigo, no me había dado cuenta que se había hecho de noche.

—¿Qué haces?

—Llamo un Uber, además debe pasarme su numero de cuenta, no puedo dejar que pague lo de Hyejin, es demasiado, seria un abuso, ya me había ayudado con la promoción de la panadería.

Baje su teléfono, sus mejillas estaban sonrojadas, pero no podía adivinar si era por el frio, o por el hecho de que lo pongo nervioso.

—Una docena de madalenas será el pago perfecto por la ropa de la pequeña, además no te iras en un uber, mi chofer ya viene por nosotros, no dejare que un desconocido te lleve a estas horas.

Se mordió el labio y yo no pude evitar tocarle el rostro, no había mucha luz y la gente que pasaba no nos miraba pues se preocupaban mas por no mojarse mientras iban a sus coches, me acerque como si un imán tirara de mi, incline mi cabeza un poco, seria tan fácil besarlo ahora.

—Namjoon, ¿Qué haces?

—No lo se —mire sus ojos y luego sus carnosos labios —no se.

Su aliento es cálido y fresco al mismo tiempo, se acerco un poco mas, pero la pequeña se removió entre los dos haciendo que nos separemos. Tomamos distancia sin quitar la cara de decepción que ahora nos cubría a los dos, mi chofer llego, lo ayude a subir en lo que colocábamos las compras y la carreola en la cajuela, no dijimos nada durante el viaje de regreso.

—Gracias por traerme.

—No es nada, descansa.

Asintió y se despidió, la nena ya iba mas que dormida por lo que no pude despedirme, apenas nos alejamos de la panadería tome mi teléfono esperando a que sonara.

—Yuna, tenemos que hablar...

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