Las pisadas de unos elegantes zapatos negros con algo de tacón resonaban en aquella habitación oscura en ese sótano oscuro en algún lugar de Asia. A cada paso, el sonido parecía revelar que entraba en contacto con pequeños charcos se agua en el suelo, solo hacía falta tener olfato para notar que aquello realmente era sangre con algo más.

El  leve sonido de unas cadenas metálicas se escuchaban de vez en cuando acompañado de quejidos de dolor y una agitada respiración.

— Muchos desconocen lo espléndido que puedo llegar a ser con quienes lo merecen. — La voz gruesa de aquel sujeto hizo eco, acercándose cada vez más a quien yacía encadenado en el suelo. — Me gusta rodearme con seres competentes, por eso cuando me encontré con un débil Alfa desterrado como tú, que logró abrirse paso en otro continente, creí que tendrías lo necesario. Por eso, yo invertí tiempo y recursos en ti, ¿qué obtengo a cambio? Un inepto que ni siquiera se da cuenta cuando está siendo seguido.

El estruendo ocasionado por el impacto de un látigo de metal en la piel de aquel licántropo que cayó al suelo una vez más, no fue nada leve. Un gruñido intentó hacerse camino, murió antes de poder liberarse por completo.

— Era mi destinado... — Logró decir bajo luchando contra el dolor.

— Con mayor razón, ¿tan poco estás dispuesto a hacer por tu destinado? — El cinismo mezclado con una sádica diversión y molestia adornó la voz de aquel licántropo. — Era una tarea sencilla para la que te preparé, tu sistema fue potenciado, te hice un verdadero alfa, te coloqué a la cabeza de todo un continente, hago constantemente donaciones a tu causa, pero tú no puedes completar una sencilla tarea. — Acercándose para tirar de su cabello lo empujó. — ¿Por qué?

— F-Fuimos interrumpidos, me atacaron...

— Te lo puse en bandeja de plata, solo tenías que obtener su esperma, un poco de su sangre y luego podrías vivir a su lado libremente como el compañero del Mul. Te entregué a mi sobrino, contaste con la suerte de que incluso resultó siendo tu destinado, sin necesidad de engañar a su olfato, podías no solamente volverlo loco de la excitación con esa droga, sino hacerlo entrar en un estro y ni siquiera así fuiste capaz de obtener dos cosas tan sencillas como esa. Solo tenías que morderlo y dejar que tu trasero recibiera todo el semen que pudiera darte mientras gozabas sexualmente. ¿Dónde estaba lo complicado de la tarea?

— S-Señor Lezle, yo realmente lo intenté...

— Lo único que lograste fue confirmarme que él es un Theta, de lo contrario, jamás hubieras podido ser su destinado. Eras un alfa tan débil como los omegas, de no haber sido por mí no serías nadie, no entiendo cómo puedes ser el destinado de alguien del Ártico de mi sobrino. — Lo miró con cierto desprecio porque Taeyong no era digno, nadie más que él debería ser capaz de formar pareja con el Alfa Mul. — Con lo que te inyecté ibas a poder sentir el olor de un Theta, por la Diosa Luna, te lo di todo y no me has dado nada útil. No me sirves de nada.

— E-Espere, todavía puedo intentarlo, soy su destinado después de todo, s-somos amigos y conseguiré que rompa su vínculo para que me reclame. — Lezle que estaba de espalda se giró sobre sus pies rápidamente para verlo.

— ¿Vínculo?

Debido a una repentina tos, Lee no pudo responderle rápidamente y esto causó que le propiciaran una fuerte bofetada, que su cabello fuera tirado y su estómago golpeado.

Un Theta podía aparearse con cualquier casta siempre que no hubiese escogido pareja y cerraran un vínculo. No sería sencillo tomar simplemente su esperma una vez que esto sucedía porque simplemente tendría todos los números bajos. Su fertilidad estaría condicionada a su pareja, ni siquiera si utilizaban su estro, una vez que cerraba vínculo era imposible utilizar al Theta.

— ¿Cómo es posible que ya tenga pareja? Lo comprobé hace poco, él seguía soltero...

— Te dije que el Alfa Bul tenía pareja.

— Eso ya me lo dijiste, ya la estamos buscando, pero eso no tiene nada que ver con que... — La voz de Lezle se quebró y sus colmillos se mostraron mientras sus ojos se tornaban púrpura y brillantes. — ¿Bul es la pareja que el Theta escogió e incluso cerraron vínculo?

— S-Sí...

— ¡Ahhh! — Gritó con todas sus fuerzas y aulló antes de descargar su rabia contra el cuerpo del alfa en la habitación. Solo cuando estuvo ligeramente más calmado, asintió limpiándose sus manos ensangrentadas. — Quedarás vivo, aún me sirves un poco más. Debes seguir dando la cara como el jefe "L", muchos asocian tu nombre con mi apodo, además, debes ser mi cara para otros asuntos.

El Alfa no tenía fuerza para responderle, había sido tan golpeado en las últimas semanas, por Jungkook y Lezle que su cuerpo carecía de toda fuerza. No podía ver o escuchar con claridad, pero reconocía el procedimiento. Sabía que el Ksi estaba sacando de su saco alguna de esas cosas creadas por él. No se equivocó, cuando el fuerte pinchazo atravesó su cuello y aquel líquido comenzó a filtrarse al interior, lo confirmó.

El Alfa se transformó para poder soportar el dolor y el frío que aquello le causaba bajo la atenta mirada de aquel licántropo del Ártico que estaba poniendo todo de él para controlarse. Todos sus planes debían agilizarse porque ahora estaba más expuesto, si en algún momento Yoongi encontró la forma de comunicarse con su sobrino o la encontraba, su identidad podría revelarse. Debía modificar desde ya absolutamente todo, debía seguir dos pasos adelante sin dejarse alcanzar.

No podía creer el modo en que los Bul siempre se cruzaban en su puto camino, si hubiera matado al antiguo líder desde el comienzo, este ni siquiera hubiera procreado a esa puntilla de trasero molesta que era Jeon Jungkook.

— Wong Yukhei... — Habló al teléfono.

+++

Él no supo que si lo miraba y ayudaba, pasaría algo entre ellos dos. Sin esperarlo se encontró perdido deseando el cuerpo y corazón de un desconocido. El deseo de volverlo a ver después de aquel encuentro casi a la locura lo llevó. En sus besos encontró lo ardiente que podían ser los labios y besos de alguien.

Se tocaron y besaron sin querer, hicieron el amor sin querer y luego tuvo ganas de volverlo a hacer. Sintió que aquello era una locura, un atrevimiento, pero solo bastó mirar los ojos de quien él creía un alfa como él para perderse. No esperó que sus sentimientos escalaran tanto desde aquella primera vez, aun cuando lo buscó por años, jamás se imaginó cerrando un círculo con alguien, ni siquiera con él.

No sabía qué era eso que le estaba matando, algo que no podía controlar y le estaba matando lentamente. No creía que su amor por Taehyung pudiese volverse más profundo. A pesar de todo lo sucedido, a pesar de que se decía a sí mismo que debía aborrecerlo ahora que le puso un punto final a todo, no sabía si podría soportarlo.

Cómo lo haría si ni siquiera podía negar que cada mañana o instante del día lo pensaba. Ese Theta tenía algo que le hacía vivir, algo que lo mataba con una mirada, con un beso. Él, quien ya se creía con sueños gastados, se encontraba ahora con un corazón que no dejaba de amar y nuevos deseos.

Deseaba que todo aquello no hubiese sido más que una pesadilla, que no existiera destinado o al menos, que su pareja no quisiera pasar tiempo con ese destinado planteándose cuáles eran sus sentimientos.

— ¿Dónde estabas? — Preguntó Jungkook contestándole la llamada a Namjoon aún en su oficina ya pasadas las diez de la noche, rompiendo su hilo de pensamientos. — ¿Ya averiguaste quién fue el causante del retén de esos camiones? Quien haya sido tenía conocimiento que me pertenecían, esa es una ofensa directa hacia mí. Además, humanos en el territorio Nala sigue siendo demasiado raro. Ellos son los más recelosos con los humanos.

— Jungkook...

— Encárgate también de hacer directamente las próximas transacciones de menor envergadura con los Mul, no tendré tiempo para encargarme de esos pormenores.

— Taehyung...

— Namjoon... — Interrumpió el pelinegro dándole un leve gruñido telefónico, frotando su tabique. — Basta.

— Está muriendo... — Con un enorme salto en su pecho el menor detuvo sus movimientos, elevando la vista, temeroso de escuchar el resto de las palabras de su mejor amigo. Manos que se tornaron trémulas y una respiración que se enganchó bruscamente. — Kim Taehyung está muriendo y te necesita. Precisa de su pareja, esa que cerró su vínculo y que su lobo anhela. — Jungkook cerró sus ojos con fuerza, buscando a través de su marca algún indicio de que todo eso no era más que una confusión. — ¡Jungkook!

El pelinegro se levantó de su silla y echó a correr por el pasillo hacia el elevador colgándole a un Namjoon que esperaba salir vivo después de esto. Tal vez había exagerado un poquito el estado de salud del Mul, pero de lo contrario, sabía que el orgullo y dolor del Alfa no le hubiesen permitido ver más allá de su propio sentir.

— Una mentira blanca por una buena causa, no te martirices. — La voz de un Jimin que lo abrazaba por la espalda lo tranquilizó muy levemente. — Por momentos cuando lo miramos no parece que Taehyung esté muy lejos de eso que le dijiste, luce fatal. — Musitó separándose para voltear a verlo.

— Tu omega se pondrá mejor pronto, verás que sí. — Sosteniendo su cabeza, se inclinó para darle un beso en su frente antes de notar la vista de Hoseok fija en ellos. — Hobi...

— L-Lo siento no quería parecer entrometido viéndolos fijamente, se ven bien y por alguna razón me dio nostalgia verlos de ese modo. — Sonrió alejándose de la pared adonde estaba recostado con sus brazos cruzados. — Ahora que lo he experimentado, puedo entender mejor tus palabras del pasado. No solamente se trataba de encontrar a tu destinado sino del encuentro y creación de un amor puro. Después de soltar y permitirme entregarme completamente a esos sentimientos que guardaba opresos en mi pecho, pudo entender la plenitud que un amor correspondido y sin obligaciones puede brindarte. Me alegro de que se hayan encontrado.

— Gracias, naranjita. — Agradeció Jimin acercándose a él para darle un abrazo. — Tuviste el tesoro escondido durante mucho tiempo, pillo. — Bromeó viendo a Namjoon mirarlos con una sonrisa que dejaba ver sus hermosos hoyuelos. — Casi te montas un quinteto tú solo. Nam, Yoongi, Jin, yo... Sí que has sido un suertudo.

— Yah... — Hoseok lo empujó ruborizado.

— Jimin... — Agregó el peligris tirando de él para abrazarlo. — Es el peor momento para tus comentarios.

— O el mejor, así disipo un poco la tensión de todos. — Sonrió volviendo a mirar a Hoseok. — Si están muy tensos, me ofrezco a darles unos besitos para relajarse.

— Detente. — Demandó el alfa ahuecando las mejillas del pelirrojo con un poco más de fuerza de la esperada. — Todo tiene un límite, no lo cruces.

Hoseok no pudo evitar ensanchar sus ojos al ver al alfa de paciencia infinita tensarse por algo tan sencillo. Tal vez porque no se amaban desde el comienzo, pero con él nunca fue celoso o posesivo, no exudaba todo eso que en sus ojos se evidenciaban mientras miraba a Jimin.

El omega sintió una extraña emoción recorrerlo, pero a su vez un ligero nerviosismo porque haciendo memoria, hasta la fecha, su alfa solamente lo miraba así de serio en la intimidad de su cama. Sin procesarlo siquiera, solo asintió, dejando que el mayor lo atrajera sin soltar sus mejillas fuertemente. Sus labios fueron pasionalmente presionados, el inferior mordido y tras superficialmente profundizar ese beso por cortos segundos, lo separó dándole una mirada seria.

— Lo s-siento... — El de cabellos naranja con ojos bien abiertos selló sus propios labios y volteó ligeramente su rostro para no verlos.

— Deja de mirar hueco, ven aquí. — La voz de Yoongi los sobresaltó. — ¿Qué haces ahí mirándolos? Necesito tu ayuda, ven.

— V-Voy, amor. — Namjoon y Jimin compartieron una mirada cómplice antes de notar lo gachas que se volvieron las orejas de Hoseok.

— A alguien lo tienen bien dentro del carril. — Se rieron divertidos, alejando por unos minutos las preocupaciones. — ¿Qué tiempo tarda Jungkook de la oficina a aquí?

Mirando su reloj, Namjoon constató de que su mejor amigo ya debería haber llegado para ese momento, en esta, con su vehículo y la noticia que le dio, era para que hubiese llegado ya. Tomando su teléfono, el peligris depositó un beso en la frente de Jimin y se encaminó hacia la puerta.

— ¿A dónde vas? — Cuestionó el menor al notar que se iba sin decirle mucho.

— A encontrarme con Jungkook. Regreso en un rato.

— ¿No se suponía que él ya venía en camino? — Volvió a indagar el pelirrojo acercándose a su novio. — Algo está pasando y no me lo quieres decir para no preocuparme, ¿cierto? Voy contigo...

— Jimin...

— Si algo le ocurrió a Jungkook cuando nadie se atreve a enfrentarlo fácilmente, no hay manera en este mundo en que te deje ir solo.

— Por supuesto que no irá solo, nosotros iremos con él le guste o no. — La voz de Hoseok los sorprendió, él estaba apareciendo en la entrada, seguido de un Yoongi serio.

— Dado los últimos acontecimientos, definitivamente deberían ir juntos. Lo crean o no, yo puedo defenderme y pelear tan bien o mejor que ustedes. Además, estamos dentro de la mansión rodeados por muchísimos licántropos, nadie vendrá a aquí en estos momentos. Vayan juntos a buscar a Jungkook.

— Yo conduzco. — Espetó el de cabellos naranja guardando la pistola que sostenía en su mano en la parte trasera de su espalda. — Hay repuestos en la cajuela de mi vehículo. — Girándose hacia donde estaba el kappa, le dio una tímida sonrisa, entrelazó sus manos y dejó un suave beso en su mejilla, luego en sus labios. — Estaremos pronto de regreso.

— Dejen de hablar y váyanse.

El camino al edificio JK perteneciente a los Bul. Antes de entrar al estacionamiento subterráneo, Namjoon descendió para cubrir la entrada principal seguido por su omega también armado mientras el peli naranja se estacionaba y revisaba los alrededores.

Lo primero que notó al entrar fue que el negro Bugatti Chiron de Jungkook seguía estacionado. Si Namjoon lo había llamado para decirle lo sucedido con Taehyung, lo más probable fuera que hubiera tomado ese vehículo para ir a gran velocidad. Revisó en silencio todo el estacionamiento. Nada de eso le olía bien y, una vez junto al auto, maldijo agachándose para recoger la llave que yacía junto a la goma delantera del lado izquierdo.

— No está en el edificio, miré las cámaras de seguridad y vimos como varios hombres con máscaras negras le dispararon varios dardos tranquilizantes. Cuando cayó al suelo...

— Se lo llevaron. — Culminó Hoseok la frase mostrándole la llave del auto al mismo tiempo que Jimin recogía un dardo que se encontraba en el piso.

Los tres olieron y tuvieron que apartarse rápidamente arrugando sus narices por el potente químico que lastimaba sus fosas nasales. El olor era muy parecido a lo que Yoongi les mostró, parecido a Taehyung, pero a la vez diferente, mucho más agudo y picoso, molesto.

— ¿Lezle? — Esa pregunta de Namjoon fue casi una respuesta que los otros dos confirmaron con un asentimiento. — Esto no puede estar pasando.

— ¿Realmente crees que se atrevan a asesinarlo ahora mismo? — La preocupación en la voz de Hoseok era evidente.

— Esperemos que no, no creo que les convenga, pero podemos esperar cualquier cosa de sus intenciones. Sin embargo, no lo permitiremos, necesitamos controlar las cámaras de seguridad de la calle y seguirles el rastro porque fuera de los dardos, no dejaron ningún otro olor. Eso significa que tienen neutralizantes de olores y como lobos no podríamos ubicarlos.

+++

— ¿No lo matamos, jefe? — Alguien preguntó pateando el sedado cuerpo de Jungkook mientras comenzaban a desvestirlo y ponían esposas especiales en sus muñecas.

— Todavía no. Necesitamos atraer al líder de los Mul y para ello lo necesitamos vivos. — Lezle acariciaba sus anillos de su mano derecha con los dedos de esa misma mano mientras la otra peinaba su gris cabellera. — No lo vistan.

Demandó cuando sus hombres le iban a colocar los harapos bañados en uno de sus inventos nombrado "L", la misma droga que utilizaba para someter a los licántropos y a la que Jungkook le siguió tanto el rastro que le hizo parar su uso y distribución por un buen tiempo. Esta mantendría al Alfa bajo efectos tranquilizantes aun cuando recobrara la conciencia.

— Salgan todos. — Admirando en silencio el cuerpo del Bul.

Esperó a que sus hombres abandonaran aquel cuarto en mejor condición que la mayoría de los cubículos de ese lugar. Al menos tenía una ventana con barrotes que dejaba entrar la luz y una cama. Eso sin contar la mesa en donde en esos momentos se encontraban algunas jeringuillas, un cuchillo y una cámara fotográfica.

Tan asombroso como despreciable la similitud que el alfa tenía con su difunto padre, el único licántropo que él quiso. Ese fue el único miembro de la familia Jeon que no mató creyendo que era su hijo. Mala suerte la suya y la de su descendencia que perdía siempre frente a los hermanos. Él logró revertir eso y quizás le debía agradecer a su hijo por ello porque le dio la fuerza para volverse a levantar cuando sintió que no valía la pena seguir viviendo.

Con su pie empujó su cuerpo para dejarlo boca arriba, detallando minuciosamente su cuerpo, concentrándose en la marca de su cuello que le hizo gruñir. El Alfa Bul una vez más rompiendo sus planes al atreverse a cerrar un vínculo con la llave para su suceso.

Siendo Taehyung un Theta, de nada valdría eliminar la maca para romper el vínculo por la fuerza. Menos si no era su destinado por la Diosa Luna porque sus lazos se formaron sin necesidad de este y, conociendo su habilidad para defenderse, había una posibilidad que de igual forma el esperma de Taehyung no funcionara aunque la extrajera.

— Tú provienes de un linaje poderoso de alfas... — Musitó bajo relamiendo sus labios, estudiando muchas posibilidades en su mente. — El período de gestación en los licántropos al igual que en los lobos dura entre 62- 75 días aproximadamente. La última vez que te vi sin marca fue hace tres o cuatro semanas. ¿Ya habrás intentado plantar tu semilla en mi Theta? ¿Qué tan loco podría volverlo si logro darte un hijo? ¿Realmente su respeto por tu sangre triunfará?

Ladeó su sonrisa mientras se agachaba y acariciaba su marca, descendiendo sus dedos hasta sus genitales, asintiendo complacido. Le había heredado muchas cosas a su padre, incluyendo los lunares en sus testículos.

Incorporándose a gran velocidad, tomó la cadena con grilletes que adornaba la pared, se los colocó en su cuello y manos sin importarle que ya tuviese las esposas, nunca se era demasiado precavido. Del suelo también arrastró dos cadenas, colocando cada una en un tobillo diferente.

A pasos lentos fue hasta la mesa para tomar la cámara y hacer algunas fotos junto a un video de Jungkook. Tomó una de las jeringuillas preparadas y se acercó para inyectarle su cuello justo en el lado donde no había marca. Una segunda inyección llegó pero no para el Alfa, sino que, el mismo Ksi sacó algo de su saco que se inyectó en las venas de su antebrazo. El subidón sería casi instantáneo, golpeándolo treinta segundos después haciendo sus ojos púrpuras brillar y sus caninos sobresalir.

Cuando la colocada en el Alfa Bul hizo efecto, este intentó incorporarse rápidamente completamente fuera de sí porque ese no era Jungkook, sino el resultado de lo inyectado, su consciencia no estaba presente en esos momentos.

Mientras se retorcía en el suelo, Lezle pasó a desnudarse sin prisa, sonriendo satisfecho al ver sus muslos empapados y el miembro del hijo de su ex pareja palpitar liberando una cantidad absurda de pre semen. La fertilidad de ambos definitivamente se había duplicado.

— Shhh, tranquilo lobo, sé que debes estar sufriendo mucho en estos momentos, todo tu cuerpo debe doler, mas yo te ayudaré a sentirte mejor. Solo debes concentrarte en dejar salir todo lo que tienes guardado en ti, entrégamelo todo. — Se inclinó para besarlo, mordiendo no solo sus labios, sino cada lugar sin marca de su cuello con cierta molestia. — Veamos cómo es que podrías hacer sentir a mi sobrina o cómo hiciste sentir a los omegas en tu pasado. Veremos si realmente le haces justicia al apellido Jeon. — Musitó descendiendo sobre la erección de aquel licántropo que solo aullaba y gruñía sin ser dueño de su persona, sin poder al menos transformarse.

[Aquí debería haber un GIF o video. Actualiza la aplicación ahora para visualizarlo.]

¿Ya han unido todos los puntos o todavía? ¿Quizás una nueva morada al trailer los ayude...🙈😈😂😘
LORED