Maratón 2/?

Un médico que fue llevado en contra de su voluntad a pesar del dinero que le ofrecieron, pero que su respuesta había sido no al ver colmillos y ojos rojos, pero de igual manera estaba ahí, con un collar que hacía peso en su cuello, y lo hacía sudar.

—Si le ocurre escaparse, si hace una maldita cosa mal, ese collar va a explotar su cabeza, ¿Entiende eso, doctor? —preguntó el líder dejando a su esposo en la camilla, antes de llegar a la mansión, pidió que se desviaran al único centro de salud que había en el territorio, en dónde los vampiros heridos de gravedad iban para atención.

—S-si, líder Kang...

—Haga lo que tenga que hacer, si necesita algún equipo extra, pidalo —ordenó el líder mirando al especialista empezar a revisar a su esposo que había quedado nuevamente inconsciente en el camino, TaeHyun retrocedió, apoyándose a la pared de brazos cruzados, mirando todo fijamente y con una expresión intimidante.

El especialista sentía sus manos sudar, sabía que cualquier movimiento que le disgustara al líder podía causarle grandes problemas.

—Tiene fracturado el tobillo derecho, el meñique izquierdo fracturado, tiene una herida en la lengua pero no es tan grave... Quisiera revisar sus órganos internos para descartar algún daño en ellos —habló, TaeHyun asintió mirando a su esposo, inconsciente en la camilla.

Órganos internos...

—¿Qué posibilidades hay de que haga una cirugía a corazón abierto? —preguntó cruzando los brazos, el doctor balbuceó antes de negar con la cabeza.

—En este estado... No es recomendable, y si no hay necesidad de ello, no se debería hacer cirugía, señor, ¿Para qué la necesita?

—Eres curioso —señaló a médico que tragó grueso, intimidado. TaeHyun miró el cuerpo de su esposo— Solo necesito que inserte un... Chip de rastreo, en cualquier órgano, cualquier lugar que sea imposible de sacar, tenemos médicos vampiros que pueden hacer el trabajo, pero quería una opinión humana —explicó, alzando los hombros.

—Yo no lo haría, señor, sería muy desgastante para su cuerpo, y es de alto riesgo para él.

—Entonces olvídelo —finalizó dando dos pasos hacia el profesional que lo observó con miedo— Y ni se te ocurra mencionar nada de eso frente a él o te exploto el cuerpo entero.

—S-si, si, señor...

—Siga con la revisión —permitió, dejando al profesional en su espacio y en silencio, su esposo siendo atendido con eficiencia, cuidado y con rapidez.

La droga que había en su cuerpo empezó a disminuir al colocarle una intravenosa, su cara dejó de estar llena de sangre, su cuerpo recibió los tratamientos adecuados, su tobillo y la fractura de su dedo tratada.

Todo ese proceso le llevó al profesional tres horas.

Tres horas que estuvo TaeHyun de pié en la esquina de la habitación,
supervisando todo, intimidando al profesional.

—Puede que despierte en un rato, el suero lo hará hidratarse —comentó, ya el humano estaba impecable, con ropa médica un poco más grande que él.

—Salga entonces —ordenó mirando al profesional obedecerlo más rápido imposible, dejando a los esposos sólos.

TaeHyun observó a su esposo, tomando asiento en la silla cerca de la camilla, simplemente observándolo.

Por otro lado, BeomGyu suspiró profundamente, moviendo su mano derecha, se estiró adolorido, apretando los ojos por la luz.

—Kang... —susurró abriendo de a poco los ojos, una sombra se interpuso entre la luz y su mirada.

Su cuerpo dolía por los golpes, tenía moretones por todo el cuerpo, y el hecho de moverse simplemente implicaba un gran dolor.

Observó al vampiro inclinado sobre él, en segundos sintió el cuerpo ajeno acercarse al suyo.

TaeHyun lo abrazó, pasando sus manos por debajo de su cintura con cuidado, siendo lo menos tosco posible. BeomGyu movió sus brazos, dándose cuenta que tenía intravenosa colocada, aún así, rodeó los hombros ajenos.

Se quedaron así unos segundos, en silencio.

—Iba a ir contigo... —murmuró, TaeHyun respiró en su cuello, rozando la punta de su nariz por su yugular, sintiendo el leve latido.

—Lo sé, precioso... —contestó el vampiro con un asentimiento, separándose del otro para darle la cara, BeomGyu observó a su esposo. Seguía algo sucio, con sangre seca, la ropa arrugada y rasgada en algunas partes, tocó con su índice su mejilla, mirando sangre seca en forma de beso.

—¿Cómo están las cosas afuera? —preguntó moviendo su dedo índice por la cara del vampiro, notando los pómulos algo marcados, TaeHyun frunció un poco el ceño pero se dejó hacer.

—El líder de los cazadores murió, se quedaron sin líder y más de la mitad de cazadores se dividen en muertos y heridos, recuperamos territorio, incluso lo ampliamos —contestó, BeomGyu delineó la mandíbula ajena, alzó la mirada, conectando con TaeHyun.

—También se quedaron sin heredera —agregó, TaeHyun tomó la mano que había en su cara, sujetó los dedos y pasó su pulgar sobre su dorso, acariciando con suavidad mientras seguía viéndolo a los ojos.

—A largo plazo era un problema, matamos a sus padres, la secuestramos, le di golpes y asesiné al servicio en frente de ella, tarde o temprano esa niña desarrollaría odio a nosotros y como futura heredera, tenía todas las posibilidades de ir en nuestra contra —contó sin problemas algo que era lógico, que muchos habían pensado pero no se habían atrevido a decir— Nunca había matado niños... Pero bajo estas circunstancias, ese era el mejor final para ella.

—¿Quién eres tú para decidir el final de los demás? —preguntó ladeando la cabeza, TaeHyun sonrió de medio lado.

—Tal vez no pueda decidir el final de los demás, pero puedo decidir el nuestro, precioso —contestó, inclinádose para besar el dorso ajeno, BeomGyu relamió sus labios mientras esbozaba una sonrisa.

—¿Y qué final decidiste? —preguntó en un tono bajo, llevando su mano a la nuca del vampiro para acercarlo a él, TaeHyun lo observó directamente a los ojos.

—Un final en dónde nadie moleste y pueda estar contigo en paz —contestó, BeomGyu sonrió atrayendo al vampiro a él, juntando sus labios después de tanto tiempo.

Lo besó, sintiendo como encajaban  perfectamente, el cómo sus brazos se amoldaban al vampiro y el cómo ambos entendían y estaban en la misma sintonía para compartir el beso.

Nuevamente, Kang TaeHyun y Kang BeomGyu estaban juntos.

Con cuentas pendientes que saldar, pero juntos.

—Eres mío, precioso... —murmuró sobre los labios del humano que suspiró al separarse, un hilo de saliva aún uniendo su labio inferior con el superior ajeno.

BeomGyu relamió sus labios antes de inclinarse, dejó un casto beso en la punta de la nariz del vampiro que no reaccionó ante ello, solamente lo observó, sintiendo la lengua de su esposo pasar sobre sus labios, antes de atraerlo más a él, dejando sus labios a nivel de su oreja.

—Nunca dejé de serlo, TaeHyun... —susurró besando lóbulo, el vampiro lo abrazó por la cintura satisfecho por sus palabras.

BeomGyu pasó sus dedos por el cabello ajeno, mirando la habitación en la que estaba.

—¿Y tú, TaeHyun? —preguntó de repente, el vampiro clavó un beso en su cuello antes de verlo con seriedad— ¿Tú eres mío? —preguntó otra vez, bajando sus manos por su pecho, TaeHyun lo sujetó del mentón, acariciando su labio inferior con su pulgar.

—Empecé a ser tuyo desde antes de nuestro matrimonio, precioso... —contestó volviendo a tomar sus labios con los suyos, demostrando el ansia que le causaba tenerlo cerca luego de mucho, lo besaba porque lo provocaba, porque le gustaba, porque lo tenía a su lado.

Porque la muerte no se lo había llevado.

Mordió el labio inferior ajeno, jalando y sacándole un jadeo al otro.

—¿Quién es el bizcochito más dulce de este mundo? —preguntó en voz baja, BeomGyu sonrió abrazándolo por los hombros de nuevo, TaeHyun solamente sonrió de medio lado.

—Soy yo —contestó dejándose llevar de nuevo por el beso de su esposo.

Decidir un final no resultaba fácil para nadie, las decisiones que se toman a lo largo y las razones tienen un gran peso y sacrificio, un final no es fácil.

Aún así, BeomGyu aceptaba y tomaba como suyo el final que TaeHyun había decidido para ellos.

No había nadie de la familia Choi con opciones de atacar en su contra, seguía habiendo cazadores pero una minoría que no hacía nada de daño.

Estar sin que nadie los molestara, sin ataques ni guerras, uno al lado del otro, era el mejor final que podía tener.

Su final pudo haber sido la muerte.

Su final pudo haber sido al lado de otro hombre.

Su final pudo haber sido sólo y escapando de por vida.

Su final pudo haber sido matar a su esposo y heredar su imperio.

Pero ninguno de esos finales lo satisfacían tanto como el estar a su lado.

¿Era un transtorno? ¿Había desarrollado algún síndrome?

No.

Eran sentimientos retorcidos, una conexión que el mismo TaeHyun forjó hasta que BeomGyu se unió, que poco a poco se volvió dependencia, era su propio amor, eran sus propias maneras de amar, su propia manera de tocarse y de comunicarse.

—Quiero ir a casa —pidió el humano pasando sus dedos por sus labios que poco a poco se fueron hinchando por todo el rato que estuvieron besándose.

TaeHyun lo observó, ladeando la cabeza mientras formaba una gran sonrisa que resaltaba sus colmillos.

BeomGyu lo imitó al verlo, apreciando la sonrisa que el vampiro le daba, eran gestos que sólo iban para él, sólo los podía ver él.

—Vamos a casa, cariño mío —afirmó el vampiro volviendo a tomar la mano ajena para besar el anillo de matrimonio.

Ellos son los esposos Kang.

Qué a pesar de estar separados por meses, seguían perteneciendo el uno al otro, unidos por sentimientos retorcidos e inexplicables, por la dependencia y por el amor que muy pocos entendían.

Habían vuelto uno al lado del otro, y en definitiva, estaban logrando llegar al final.

No había leído los comentarios del síndrome de Estocolmo de Beom xd pero no, mis amores, BeomGyu no tiene ese síndrome

Al inicio lo consideré, pero lo descarté. Esto es más allá de un síndrome de Estocolmo:D esto son sentimientos retorcidos, dependencia (más que todo de TaeHyun) y muchísimas cosas más que ya se han dicho

En fin..

Los dos son unos loquitos :D

The_Dark_Diamond04