PoV Amy

Han pasado tres días y me dieron el alta. Ahora estoy en casa sola, sin nadie que me moleste, sin nadie que me haga compañía, sin nadie que esté aquí conmigo para decirme que todo estará bien. Lo extraño.

Me hago bolita en la cama debajo de las sábanas y no puedo hacer más que llorar mientras mi hermano está en coma por un accidente que puede que haya sido mi culpa. O simplemente me estoy imaginando cosas y haya sido solo culpa de esa maldita moto. ¿Cuántas veces la habré maldecido ya?

Me levanto a duras penas. No creo que Shad haya querido que esté así como muerta. Sé que el saldrá de esto con o sin mi ayuda, sólo tengo que mantener la fe.

Me dirijo al servicio y hago mi aseo diario, las mismas cosas de siempre y salgo directo al instituto sin desayunar. No me preocupa mucho sin embargo no estoy de ánimos como para comer. Ahora mismo no. Me coloco mis auriculares y pongo el modo aleatorio. Comienzo a escuchar Faint de Linkin Park y hasta encuentro un tanto gracioso el hecho de que me haya salido una canción como esta en un momento como este.

I can't feel the way I did before, don't turn you back on me, I can't be ignore.

Esta canción me recuerda tanto a cuando Shadow y yo éramos pequeños...

Sin darme cuenta llego al instituto y me detengo en la puerta. No es que tenga miedo, solo me siento desprotegida sin Shad a mi lado.

Camino un poco más hasta llegar a las escaleras y subir por estas. Siento la ansiedad creciendo en mi y las ganas de irme corriendo sin mirar atrás son cada vez más tentadoras, sin embargo ya estoy dentro y no hay vuelta atrás.

-¡Amy!

Me doy la vuelta en cuánto escucho la voz de una de mis amigas, enserio las necesito ahora y que me den el abrazo más fuerte de todos.

Los tacones de Rouge con lo que más se escuchan por los pasillos, son como pequeños clavos siendo clavados rápidamente. Una vez está en frente mía me abraza y las ganas de romper a llorar se hacen presentes. Sin pensarlo dos veces le devuelvo el abrazo mientras pequeñas lágrimas traicioneras bajan por mis mejillas y escondo la cabeza en el hombro de Rouge.

-Tranquila, todo estará bien.

PoV ??

Un molesto pitido invade mis oídos, siento mis orejas moverse hacia los lados para saber de dónde viene ese irritante sonido. Intento pararlo poniendo la mano sobre lo que lo esté haciendo pero no logro nada, abro poco a poco los ojos para poder acostumbrarme a la luz del sol. Maldito sol.

Observo una habitación blanca, una ventana a un lado con unas cortinas del mismo color, al lado izquierdo una puerta color azul y en frente de la cama con sábanas azules donde me encuentro hay otra puerta del mismo color. Encuentro cables en ambos brazos y tengo puesto unos tubos para poder respirar y a un lado la irritante máquina de los irritantes pitidos.

Agarro los cables y los arranco de mi cuerpo, no soporto estar quieto y ese molesto pitido a comenzado a sonar más fuerte y más persistente.

- Agh, maldita máquina.- la agarro y la tiro por la ventana totalmente molesto.

La puerta se abre y aparece una enfermera mirandome con una cara de espanto. Con razón, debo de parecer un monstruo.

Doy grandes zancadas hacia ella y la tomo por los hombros agitandola.

-¡¿Dónde demonios estoy?!

-E-en e-e-l hospit-al E-esmerald.

-¡¿Y por qué diablos estoy en un hospital?!

-¡Sufrió un accidente!

Dejo de agitarla y me pongo a pensar. ¿Accidente?

-¡SHADOW!

La cabeza me comienza a dolor y me veo obligado a sentarme en la cama. ¿De quién era esa voz?

-¿Le ocurre algo Señor?

-Me duele demasiado la cabeza, no recuerdo bien.

-Tumbese por favor, enseguida llamo al doctor.

La enferma se va y por una vez hago lo que me indica. Los recuerdos son borrosos y demasiado desordenados, siento que mi cabeza va a estallar. Lo raro esque es cada uno de los recuerdos me veo a mi con una pequeña mancha rosa, joder, esto me está poniendo muy nervioso y tengo ganas de gritar de la impotencia, maldita sea.

Escucho la puerta abrirse y veo a un lobo con bata blanca entrar.

-¿Cómo se encuentra Señor the Hedgehog?

-Me duele muchísimo la cabeza, me vienen muchos recuerdos de golpe pero todos son demasiados borrosos. ¿Qué me pasa?

-Señor, le hicimos un escáner y sufrió una fuerte contusión. Lamento informarle que ha perdido parte de su memoria.

Cuenta la leyenda que me aparezco en esta historia una vez cada mil años y ese día se puede pedir un deseo.

Ha pasado ya un año y la verdad no sabía cómo continuar la historia y al parecer solo me viene la inspiración cuando estoy triste, asique aquí les dejo otro capítulo tan esperado por ustedes.

Ya saben todo lo demás, denle amor a esta historia❤️

Gracias por leer!
Besos con amoor❤️