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Maratón 5/5

- Estoy segura de que Michael sabe algo - Karol se encontraba en la comodidad de su cama comiendo el helado de fresa que Ruggero le había conseguido a las 10 de la noche, todo por un antojo.

- ¿Por qué lo dices? ¿Crees que ya la haya encontrado? - Ruggero estaba agotado, hace días que no dormía bien, el trabajo en la oficina, acompañar a su amigo para encontrar pistas y cuidar a Karol, no era nada fácil de llevar.
- Lo noté nervioso cuando le llamé - Karol llevó otra cucharada de helado a su boca.

- Tal vez lo hizo y no nos quiere decir porque la quiere para él - Rugge se acostó en la cama y no esperó para cerrar los ojos.

- No, él no es así, además me habló de una chica rubia que conoció - Karol estaba tan enfocada en sus helado y conclusiones que no notó cuando Ruggero ya se había quedado dormido. El silencio fue quien la hizo voltear a su lado para percatarse de la ausencia de su esposo - Genial - se dijo así misma.

Dejó de un lado el helado, colocándolo en su mesa de noche. Tomó su teléfono y salió de la habitación hasta la que sería de su pequeña. Marcó el número de su primo esperando una respuesta.

- ¿Karol? - contestó Mike después de dos timbres.

- ¿Quién más? - dijo la castaña algo irónica.

- ¿Qué necesitas?.

- La verdad, ¿estás seguro de que no encontraste a Caro?.

Silencio. El chico se había quedado pensando en algo para evadir la pregunta, era muy malo mintiendo. Quería decirle pero se lo había prometido a Carolina, aunque su prima no era alguien quien se rindiera tan fácil.

- Te diré la verdad, sólo prometeme que no dirás nada hasta que Caro quiera hacerlo - un pequeño grito de la castaña aturdió a Mike. La había encontrado y Karol estaba feliz con ello.

- No puedo creerlo, ¡La encontraste!. ¿Cómo esta? ¿Ella esta bien? Gastón, ¿cómo es? ¿que tan lindo es en persona el pequeño?.

Mike comenzó a reír ante las innumerables preguntas que su prima hacía.

- Tranquila, una pregunta a la vez.

- Esta bien, ¿por qué no quiere ser encontrada? - Karol no lo entendía, le resultaba hasta imposible creerlo, había jurado que cuando la encontraran la chica regresaría inmediatamente a Buenos Aires.

- Esta con alguien mas - soltó Michael. Karol comenzó a reír.

- Ya en serio Mike, ¿por qué no quiere volver?. Esa es la peor excusa, ama a Agus.

- Creo que ella merecía ser feliz - la risa de Karol paró, realmente lo decía en serio.

- No, no puede ser así - la chica no podía entenderlo. Ahora eso era un problema.

- Te marco mañana, le diré que hable contigo - sin esperar colgó. Karol se sentó en uno de los sillones que habían colocado en la habitación de su pequeña.

Ahora entendía porque Mike no quería decirle nada. Carolina estaba siendo feliz con alguien más mientras Agustín la buscaba. Era amiga de ambos y se encontraba entre la espada y la pared tratando de pensar en una solución que no sacrificara la felicidad de ambos. Debía de callar la información, al menos hasta que hablara con Carolina.

(...)

Al salir de las clases Sofía estaba feliz y algo entusiasmada por llegar a casa y quitarse su uniforme para colocarse tu tutu. Esa tarde también tenia clases de ballet, y hasta ahora, era la cosa que había hecho que su humor mejorara.

- Veo que estas ansiosa - dijo Agustín cuando ambos ya iban en el auto.

- Si - contestó Sofía. El interior del auto quedó en silencio; Agustín trataba de encontrar la forma de abordar la pregunta que tenía. En unas semanas seria el cumpleaños de Sofía y no sabía si aún recordaba su fiesta de hace un año, cuando todo cambio.

- Enana, ¿qué quieres por tu cumpleaños? - preguntó después de tomar aire repetidas veces y pasar ese nudo en la garganta que se le había formado.

- Con que Carolina este con nosotros me basta - la pequeña mostró una pequeña sonrisa. Por su parte, Agus no dijo nada. Simplemente no podía prometerselo. Las investigaciones sobre el paradero de Carolina iban mas lentas de lo que había imaginado.

Y por primera vez desde hace un año pensó en el que hubiera pasado si jamás se hubiera encontrado con Carolina, tal vez todo seguiría como antes, pero al menos nadie estuviera sufriendo. Le dolía admitirlo, pero a veces pensaba que era lo que mejor hubiera pasado.

Al llegar a casa Sofía corrió a su habitación. Dejando su mochila en el suelo; fue Agustín quien después la levantó y la acomodó. Miró aquella fotografía de él y Sofía, recordó cuando Carolina había pisado por primera vez esa casa y había estado observándola.

Necesitaba despejarse, y aprovecharía que Sofía iría a sus clases.
Marcó el número de su mejor amigos y al tercer tono respondió.

- ¿Qué sucede? - preguntó Ruggero.

- Salgamos, pasemos un buen rato hasta olvidarnos un rato de los problemas.

- No, sabes que debo de cuidar a Karol y tú no puedes irte por la solución mas fácil - parecía que Ruggero era padre de Agustín y estaba regañándolo por su mal comportamiento.

- Esta bien - Agustín colgó. Si Rugerro no quería salir con él, pues no lo necesitaba. Esa noche él se iba a divertir.

(...)

Eran aproximadamente las ocho y media cuando el teléfono de Ruggero comenzó a sonar. Era un número desconocido así que decidió ignorar, cuando su teléfono volvió a sonar, siendo nuevamente aquel número, decidió atender.

- ¿Hola? - dijo. Como si se alegraran de que contestara, la voz del otro lado suspiro.

- Hola, hablamos de la escuela de Ballet por la pequeña Sofía Bernasconi, hace una hora que las clases terminaron y nadie ha venido por ella. Marcamos al número de su padre y no contesta, estaba este número en caso de emergencia, ¿conoce a la pequeña? - Ruggero iba a matar a Agustín cuando lo encontrara.

- Si, ¿podría decirme la dirección? Ya voy por ella - la chica al teléfono le dio la dirección.

- ¿Qué sucede? - pregunto Karol, había estado al lado de su esposo desde que las llamadas habían comenzado, y por las expresiones que hacía, no le daba una buena señal.

- Agustín se fue a no sé dónde y dejo a Sofía olvidada en la escuela de danza - el coraje en Rugge era notorio. Simplemente no podía creerlo de su amigo, realmente había creído que había cambiado, pero seguía evadiendo sus problemas de la manera más fácil.

- Vamos por Sofía - Dijo Karol, quien ya estaba tomando un suéter para salir.

- No, tú te quedas aquí - le dijo contesto. Karol quería ir, quería hablar con Agustín, quería decirle de lo que se había enterado la noche anterior, quería darle un poco de motivación, no quería verlo que cayera justo delante de su pequeña.

- No, yo voy. Sé algo que puede hacerlo entrar en razón - la mirada tan demandante de Karol fue lo que hizo que Ruggero asintiera.

- Vamos pues - ambos salieron de su casa. Primero irían por Sofía y después la dejarían con su abuela para ir en busca de Agustín. Ambos esperaban que no cometiera alguna estupidez.

(...)

Llevaban al menos una hora visitando varios bares en la cuidad para dar con Agustín. Mientras Ruggero salía del auto en busca de su amigo Karol intentaba llamándole, con la esperanza de que le contestara. Frustrado por no encontrarlo Ruggero entro en el auto dando un fuerte puertazo. Llevo sus manos hasta su cabello removiéndolo. Karol se mantuvo en silencio, la situación a todos se les iba de las manos y ella era la que poseía la información adecuada para calmar la situación.

- Mike encontró a Caro - hablo cuando estuvo preparada para hacerlo.

- ¿Qué? - pregunto Ruggero. No estaba seguro de lo que había escuchado.

- Sí. Mike encontró a Caro en México. - Ruggero miro a Karol, tratando de descifrar si solo era una mentira que le dirían a Agustín para tranquilizarlo. Al saber que era todo verdad de volteo mirando hacia enfrente - Ella esta con alguien más y no sé si sea bueno o malo decírselo a Agus.

Todo estaba mal. ¿Y ahora que iban hacer?.

(...)

¿Qué creen que pase? ¿Le dirán a Agus? ¿Agustín habrá hecho alguna estupidez?.
Solo les digo que no cuando vuelva a publicar el siguiente capítulo, puede ser el domingo, en una semana o dos 🌚.

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