Sonidos extraños

— Mamá, en el colegio nos dieron este papel, que lo leyeras y firmaras si estabas de acuerdo — Sofía acaba de llegar del colegio. Había dejado su mochila en el perchero y se había dispuesto acercarse a la cocina.

— ¿De qué trata? — preguntó mientras terminaba de colocar en un plato alguna fruta picada para Gastón, quién esperaba ansioso su merienda.

— Aquí está — Sofía le entregó aquel papel a su madre — Yo se lo llevo — sujetó el plato y se dispuso a llevárselo a su hermano.

Caro se quedó en la cocina y comenzó a leer la nota.

"Por medio del presente le informamos que el próximo miércoles les daremos a los alumnos de sexto año su primera clase de sexualidad, reproducción y cambios hormonales, es por eso que hacemos una invitación a que le dé una introducción del tema a sus hijos. Sin mas por decir, me despido de usted"

Así que de eso se traba. Carolina colocó el papel en el refrigerador, sujetándolo con un imán, esperando que Agustín pudiera leerlo cuando llegara del trabajo. Ya se imaginaba lo que él diría, inclusive imaginaba su cara, había llegado en momento que él había estado atrasando en el último año, desde que Sofía había cumplido los 12 años.

Al llegar la hora de la comida Sofía se encontraba colocando la mesa mientras Carolina terminaba de cambiar a Ian. Gastón esperaba a que su madre terminara para bajar con ella, había estado ayudándola a cambiar a su hermano.
Cuando terminó ambos salieron de la habitación de Ian y bajaron las escaleras para disponer a sentarse en la mesa. En ese momento la puerta se abrió y Agustín entró.

— Papá — gritó Gastón corriendo a sus brazos para recibirlo con un abrazo. Sofía al escuchar el grito de su hermano también se dispuso a acercarse para abrazarlo, Ian, por su parte estiraba sus brazos para que Agustín le prestara atención y lo cargara, pero él estaba atendiendo a los otros dos, el pequeño hizo un puchero y comenzó a llorar.

— ¿Dónde está el bebé mas celoso del mundo? — preguntó Agustín cuando se acercó para cargarlo.

— Tenemos problemas — le dijo Carolina — Después te cuento.

(...)

Agustín había terminado de acostar a Sofía y a Gastón mientras Carolina aún terminaba de darle de comer a Ian. Al llegar a su habitación Agus se acercó por detrás de su querida esposa y le dio un beso en la mejilla tomándola por sorpresa.

— Dejame ayudarte — le dijo. Carolina le entregó a Ian y ayudó al pequeño alimentarse, aunque ya sabia perfectamente como sostener con sus propias manos su mamila.

— Creo que es momento — le dijo de repente Carolina captando la atención de Agustín.

— ¿Momento? ¿De qué? — nerviosa jugaba con sus manos, estaba segura de que no lo tomaría bien, pero no podían seguir posponiendo aquella charla con Sofía.

— Sofía dentro de unos días comenzará a ver temas relacionados con la reproducción y sexualidad — el color de piel de Agustín repentinamente cambió de color convirtiéndolo en uno casi blanco.

— ¿¡Qué!? ¿¡Cómo pueden hacer eso!? — replicó un tanto molesto, no entendía como en el colegio de su pequeña podían hablarles de aquello.

— Es por eso que han pedido la ayuda de los padres para explicarles sobre el tema antes de que ellos lo hagan — Carolina volvió a tomar a Ian en sus brazos antes de que la furia de Agustín cayera sobre el pequeño.

— Tú se lo explicaras — comentó después de un silencio.

— Lo más justo es que lo hagas tú. Tú eres su padre.

— Y tú la madre.

— ¿Quién era el que tenía sexo con su hija presente?

— ¿Te recuerdo dónde y cuando hicimos a Ian? — el pequeño sólo movía sus ojos tratando de seguir la conversación o discusión de sus padres. Las mejillas de Carolina se tornaron de rojo ante la mención.

— No necesitas hacerlo — Agustín comenzó a reír, le parecía graciosa la expresión que la joven tenía en esos momentos, seguramente recordando aquella noche.

— Esta bien, lo haré yo, mañana — se acercó para darle un beso en la coronilla de su cabeza y después le dio un beso en la mejilla a su hijo — Yo lo acuesto — volvió arrebatar a Ian de sus brazos y salió de la habitación para llevarlo hasta la de él.

(...)

Esa mañana se había tomado el día libre para encontrar la forma de explicarle aquel tema a su pequeña, llevaba al menos unas tres tazas de café y aún no se le ocurría como podía comenzar.

Llevaba en una libreta algunas ideas, pero hasta ahora solo eran dos, grabar un vídeo explicándole o correr y no regresar a casa hasta que Carolina fuera quien le explicara. Sin duda ninguna era una buena opción.

— ¿Qué haces aquí tan temprano? — preguntó Carolina. Su cabello estaba desordenado, lo que la hacía lucir tan natural y joven.

— Te ves hermosa — le respondió manteniendo una sonrisa en su rostro. Carolina rio levemente y se acercó para besar sus labios.

— ¿Qué le dirás a Sofía?

— Aún no lo sé.

Una hora después Carolina estaba dándole una papilla a Ian mientras Gastón terminaba de su desayuno. Sofia aún llevaba su pijama, Agustín había llamado al colegio diciendo que la pequeña estaba enferma, solo para tener tiempo para su charla.

— Vamos enana, ve al living, tendremos una mañana y tarde de películas — la alentó Agustín. Carolina volteó para mirarlo tratando de entender a donde quería llegar.

— Pero mamá dijo que me dirías algo importante.

— Así es, y para eso necesitamos la educación del cine — Sofía asintió no muy segura, pero aún así decidió obedecer a su padre. Carolina seguía mirándolo tratando de encontrar una respuesta.

— ¿Puedo ver las películas con ustedes? — preguntó con una gran sonrisa Gastón. Su padre asintió y sin terminar su leche el pequeño corrió detrás de su hermana mayor.

— ¿Qué es lo que planeas Bernasconi? Se supone que debes de hablar con Sofía.

— Y por eso veremos películas, que mejor explicarle el tema con una película.

Carolina no estaba del todo segura que el plan de Agustín funcionara, así que debía de estar pendiente de todo lo que pasara. No confiaba en él, sabia que mantendría la inocencia de la pequeña tal vez hasta los veinte, o más.

Agustín se sentó en medio del sofá, mientras Gastón estaba a su derecha y Sofía a su izquierda, ambos recargados en su padre, para estar más cómodos.

— Bueno, esto es para ti enana, veremos una película y a la vez aprendernos como es que nacen los bebés — Sofia estaba atenta y asentía tratando de entender todo.

— Los trae la cigüeña — comentó Gastón como si fuera lo más obvio del planeta.

— No, no, eso era antes — dijo Agustín, mientras reía por el comentario de su hijo.

— ¿Entonces? — preguntó confundido.

— Ya verán.

Tomó el control remoto y dio play para que la película comenzara. Fue así como la película comenzó, dando una introducción de lo que sería el tema a tratar.

https://www.youtube.com/watch?v=5PEbZnhgprk

(no es toda la película, solo el inicio)

— Espera — dijo Sofía ocasionando que su padre pusiera pausa.

— ¿Qué sucede?

— Entonces, ¿lo bebés se crean en una fábrica y después de todo ese proceso deciden si tienes una familia o eres un hombre de negocios? — preguntó Sofía tratando de encontrar sentido.

— Bebé de negocios — replicó Gastón.

— Exacto — respondió Agustín dándole la razón a ambos.

— Ese bebé se parece a Gastón, solo que con el cabello castaño — dijo Sofía riendo.

— ¿Yo llegué con traje? — preguntó con cierta esperanza el pequeño.

— Cierto, ¿y cómo explicar que las mujeres tengan panza? — Sofía era inteligente, y Agustín sabia que no seria sencillo hacerla caer.

— Bueno, es que es algo mental — la pequeña asintió, y después de un silencio Agustín entendió que era momento de seguir con la película.

— ¡No, no, espera! — volvió a interrumpir antes de volver a ponerle play — ¿Y por qué tienen que ir al hospital?

— Es que todos los bebés llegan ahí y pues debemos de hacer muchos trámites para poder tenerlo — Gastón estaba atento a todo, aunque no entendía aún con exactitud de lo que hablaban, ni el porque él aún seguía ahí, disfrutaba estar junto a su padre.

— Pero aún no entiendo — cruzó sus brazos molesta por no encontrarle sentido a todo lo que su padre le explicaba.

— ¿Qué pasa? — preguntó Carolina quién bajaba para ver el plan de Agustín.

— Nada, es solo que papá me está explicando con la película como nacen los bebés — respondió Sofía. Carolina miró la pantalla encontrándose con un bebé en traje, ahora entendía todo.

— Gastón, ni amor, ¿por qué no vas y juegas con Ian? — le dijo a su hijo. Él aún era muy pequeño para escuchar aquella conversación.

— Si mamá — Gastón se levantó de su asiento y dando pequeños pasos se dirigió hasta la habitación de su hermano menor.

— Muy bien, vamos arreglar esto — comentó en voz baja Carolina. Se acercó hasta el sofá y se sentó en el lugar que Gastón había ocupado.

— No le digas nada Carolina — le advirtió Agustín.

— Haber hermosa, los bebés así no nacen, es un proceso algo más sencillo de explicar, pero tu padre no quiere hacerlo.

— ¿Y por qué no?

— Carolina... — volvió a repetir Agustín tratando de detenerla, pero era obvio que no lo haría.

— Bueno, porque es algo difícil de explicar. Por eso te lo diré yo.

Los colores del rostro de Agustín bajaban, convirtiéndose en tonalidades blancas, no podía imaginar que era el momento, se sentía fatal que tal vez la pequeña recordara todos aquellos años en los se había tenido aventuras con desconocidas.

— No, yo le digo — interrumpió el morocho, estaba seguro que ahora hablaría con la verdad. Debía de hacerlo él, era su pequeña, lo entendía, pero era mejor prevenirla antes de que algo malo le pasara.

— Te escuchamos — lo alentó Carolina para que siguiera.

— Bueno, todos los seremos humanos tenemos aparatos reproductores.... — fue así como inició aquella conversación. Carolina solía intervenir dando su punto de opinión femenina, mientras Sofía estaba atenta.

— Jamás tendré hijos — dijo un poco asustada Sofia, provocando que Carolina riera, ella había dicho lo mismo cuando era pequeña.

— Eso espero — dijo Agustín en un susurro, que Carolina alcanzo a escuchar.

(...)

Y bueno, obviamente yo no les iba a explicar como nacen los bebés, ya saben 😂, además lo iba hacer más científico, así que hubiera sido aburrido.

Haré dos o tres capítulos extra más, y listo. Aquí voy con un anuncio, están TeamRoller haciendo unos premios "Roller Awards" por si quieren ir y nominar esta historia en la categoría Aguslina, y para los que ya lo hicieron, y además me nominaron en "Escritora del año", pues mil gracias, no saben lo bonito que siento.