꒰ O1 ꒱

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Jimin había salido una hora más
tarde de su casa hacía el trabajo.
Por lo menos se sentía un tanto
más descansado que el día anterior,
pero su garganta parecía demasiado seca para su gusto. Recordando la publicación que había visto en redes,decidió que era buena idea hacer una parada antes de llegar al trabajo.

Además de que, por alguna razón
a su lobo le interesaba ir, con solo
imaginar llegar a la cafetería movía
ligeramente su cola, inquietándolo
de una buena manera.

-Lleguemos a la cafetería de ayer,
antes de ir a la empresa.-Habló
Jimin a través de la ventanilla,
mirando por el retrovisor al chófer.

-Claro, señor.

No estando muy lejos de ahí, fue
cuestión de minutos antes de que el
automóvil se estacionara una cuadra atrás a diferencia de ayer, teniendo la vista de como la cafetería era más concurrida aquel día.

-Yo bajaré, quédate aquí.-Sin
esperar una afirmación, bajó por
su cuenta. Caminó con desinterés
hasta la cafetería, opacando con su
aroma a los demás humanos que
concurrían en el lugar.

Entró a la cafetería, caminando
directamente al mostrador. El joven
que lo había atendido el día anterior
no se veía por ningún lado, solo
personas que lo miraban con cierta
desconfianza e inclusive miedo.
Acostumbrado a ese tipo de miradas
por el detalle de su olor y jerarquía,
el alfa se limitó a esperar con una
expresión de aburrimiento, viendo
el menú mientras que el omega
regresaba a su puesto de trabajo.

-¡Hola! Buenos días, perdón por la
tardanza.-Cuando una voz animada,
junto con un aroma dulce, apareció
de repente, levanto la vista.-Oh, es
usted. ¿Qué desea ordenar hoy?

La sonrisa que le ofreció fue la
misma de ayer, a diferencia que
hoy se veía más agitado y un tanto
cansado-Café negro.

-Bien, ¿Algo más?

-Una galleta de chispas.-Trató
de ubicarlas, pero solo vió un plato
vacío a un lado de la caja.

-Perdón, hace unos minutos se
llevaron la última. Pero le puedo
ofrecer otro tipo de postre, tengo
galletas de nuez o de pasas—
Señaló sobre la vitrina dichos
acompañamientos, pero el contrario
se limitó a responder con una
mueca.

-Sólo el café.-Dijo con un tono
seco, sacando su tarjeta.

-Podrá encontrar el siguiente
especial en estos días, puedes
seguir a la cuenta para saber todo
de ello—Señaló uno de los carteles
que se mostraban sobre la caja,
donde se podría apreciar las redes
sociales de la cafetería. El omega
sintió la necesidad de complacerlo,
no le agradó aquella mueca y,
aunque estuviera acostumbrado
a los clientes y sus comentarios
cuando algo se agotaba en su
menú, por alguna extraña razón
sentía la necesidad de apaciguar su
disconformidad.

Jimin no murmuró palabra
alguna, haciendo que Jungkook
cobrara de manera silenciosa el
café, una vez que le entregó el ticket
junto con la tarjeta, se giró para
preparar el café en silencio. El alfa
pudo sentir brevemente como el
aroma dulce del omega se agriaba
un poco, pero le restó importancia
mientras guardaba sus pertenencias
y se hacía a un lado, en el
espacio de las entregas mientras
mantenía una postura rígida. ¿Acaso
su humor se volvió agrio, si es que
se podía aún más, por el simple
hecho que no pudo probar esas
galletas? Ni siquiera comía algún
tipo de postre, odiaba todo lo que
tuviera que ver con lo dulce. Miró
al castaño terminar de preparar el
café, dirigiéndose a dónde él se
encontraba.

-Gracias por venir nuevamente,
espero volverlo a ver. ¡Que disfrute
de su café!-Le sonrió una última vez
antes de que el pelinegro se girara,
saliendo de la cafetería y haciendo
que los demás clientes pudieran
respirar de manera tranquila.

Las miradas iban pegadas a sus
espaldas, cruzando la calle en busca
del automóvil. Su chófer, al verlo
caminar hasta él, se adelantó para
abrirle la puerta, subiendo al auto
sin murmurar una sola palabra en el
proceso.

El resto del día pasó como un borrón,
cuando menos imaginó Jungkook ya
se encontraba limpiando las mesas
y despidiendo a sus últimos clientes
del día. Se sentía totalmente molido
por toda la carga de trabajo que le
correspondía a sí solo.

-Debería de contratar a alguien.-
Se dijo a sí mismo tan pronto como
volteó el cartel a "cerrado"

Con un nuevo pensamiento en mente
y un cartel qué hacer, apagó todo y
cerró el local, aún tendría muchas
cosas por hacer en casa.

Los siguientes días habían
transcurrido con normalidad,
Jungkook se había acostumbrado
a la presencia de Jimin por las
mañanas en esa primera semana,
pidiendo lo mismo de siempre
y siendo un hombre de pocas
palabras. Varios candidatos habían
ido por el puesto vacante, pero
ninguno parecía convencerle lo
suficiente para contratar, y sabía
que solo se estaba complicando la
vida, pero si iba a dejar que alguien le
ayudara, por lo menos sería alguien
a quien le diera una buena impresión
sin ser forzada. Además, no solo
se trataba de su propia aprobación,
sino que su lobo también estuviera
conforme con la persona, y si no les
estaba gruñendo desde el fondo, se
escondía de miedo o en señal de
desinterés.

Fue el siguiente lunes que ya estaba
esperando al pelinegro, recitando
la misma conversación una y otra
vez que tuvieron la semana pasada.
Pero cuando miró el reloj y este ya
marcaba pasados del mediodía,
comprendió que no iría aquel día.
Se sintió levemente extrañado en el
transcurso del día, su lobo en espera
de poder verlo mientras se hacía
cada vez más pequeño conforme el
tiempo pasaba, pero lo dejó pasar
cuando una cabellera pelirroja
entró a su cafetería con una gran
sonrisa, dirigiéndose al mostrador.
Y fue en ese momento que su lobo
volvió a levantarse, agitando su cola
mientras presenciaba frente suyo al
omega que le estaba sonriendo.

-Buenas tardes, ¿Qué desea
ordenar?-Sonrió como cordialmente
lo hacía.

-Buenas tardes, venía por el anuncio
que posteó del puesto vacante.-
Señaló la pantalla de su celular,
mostrando la publicación que había
realizado hace un par de días.

-Oh, claro.-Se sorprendió, no
esperaba recibir a más personas
interesadas después del fracaso
obtenido.-¿Cuál es tu nombre?

-Taehyung, Kim Taehyung-Recitó en un tono cálido.

-Un gusto, Taehyung. Soy Jeon Jungkook. ¿Estás listo para una pequeña entrevista? Te explicaré
los detalles del puesto, si te parece, pasaremos a la entrevista y luego a una prueba, ¿Te parece?-Cuando recibió un asentimiento algo enérgico, soltó una pequeña carcajada.-Perfecto, toma asiento mientras preparo algo para tomar,
de todas formas hoy es un día algo tranquilo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro