[Una nueva amiga]

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng


—Así que, una chi-chica nueva—corroboró MinA a su lado con la respiración demasiado agitada.

—S-se llama Chae Young—contestó Hana de igual manera—Fue transferida, y ti-tiene un hermano.

—¿Y quieres que la conozca?—le preguntó algo confundida.

—Digo que s-sería lindo, ella no es muy sociable igual que no-nosotras.

Las dos chicas se hallaban corriendo en la pista de atletismo, era su clase libre del día que tenían en común. Desde que Hana se había topado con aquel chico de cabello negro, deseo ser diferente en muchos aspectos, sobre todo físicos, así que se le metió la idea de adelgazar en la cabeza.
Decidió pedir ayuda para ello y quien mejor que pedírsela a MinA, su mejor amiga. Con lo que no contaba, es que tuviese su resistencia hasta el subsuelo como ella. Recién habían comenzado y ya no podían ni con su propia existencia.

—Espera, espera—le interrumpió bajando un poco la velocidad hasta detenerse por completo—¡Ya se lo que ocurre aquí!

—¿Q-qué?

—¡Te gusta su hermano!—exclamo casquivana—¡Ya decía yo que lo de bajar de peso tan repentinamente era raro! Nosotras nunca, jamás, hacemos ejercicio excepto en deportes, y somos pésimas.

—¡No ha-hables tan fuerte!—solto Hana deteniéndose de igual manera y confirmando la reciente especulación—Van a escucharte.

—¿Por que no solo me lo dijiste?—preguntó llevando las dos manos a sus rodillas para recuperarse—Puedo ayudarte sin necesidad de hacer esto.

—Estaba...avergonzada.

—¡Ey! Qué te guste alguien no es motivo para avergonzarse, no tiene nada de malo.

—N-no por mi MinA, por el—confesó bajando la mirada—¿Imaginas s-su reacción al saber que yo gusto de él? Se decepcionaría.

—¡Oye, oye!—le interrumpió frunciendo su entrecejo—¿Cuántas veces debo decirte que eres hermosa para que lo creas? Y no solo físicamente.

—Y-yo no soy her...

—¡Eres hermosa Hana!—gritó de la nada llamando la atención de muchos alumnos que iban pasando por el lugar—¡Eres la chica más hermosa que conoz...

—¡MinA!—se quejó divertida tapando la boca de la peli negro con su mano—¿Podemos seguir con el ej-jercicio?

—¿Por qué el afán de bajar de peso?—le cuestionó volviendo a trotar—A este paso, podrías desaparecer, ¿Crees que ese chico sea tan superficial?

—El es perfecto—respondió acompañada de un largo suspiro—Y yo soy...sólo yo.

La castaña repitió la acción de su amiga y también volvió a trotar, pero tan pronto lo hizo, el aire empezó a faltarle en los pulmones, su vista se volvía borrosa a los segundos y las piernas comenzaban a fallarle.

—Y-yo solo digo que...—entonces un fuerte ruido se escuchó a sus espaldas haciéndole detener y voltear al instante, topándose con la castaña tirada en la pista—¡Hana!

MinA se acercó tan rápido como pudo hasta la chica tumbándose a su lado y la movió con delicadeza, comprobando así que estaba consciente, no se había desmayado lo cual era importante.

—¡¿Estás bien?! ¡Sabía que esto era mala idea! No debiste exigirte tanto de un día a otro—le regaño.

—Estoy bien, tra-tranquila. Es sólo que olvide desayunar esta mañana.

—Vamos a la enfermería, necesitas descansar.

—Te digo que...

—Déjame ayudarte—interrumpió un peli negro apareciendo de la nada estirando su mano.

¡Hana no podía creer lo que sus ojos estaban viendo! ¡Era el! ¡Definitivamente estaba ahí, no era un espejismo!

—Gr-Gracias—dijo casi en un susurro tomando su mano para después ponerse de pie.

Y por la reacción de su amiga, MinA supo inmediatamente quien era el chico que había ofrecido su ayuda.

—Deberías tomarle la palabra a tu amiga e ir con la enfermera, mejor prevenir que lamentar ¿no?

—Lo haré.

—Eres Do Hana ¿Cierto?—le cuestionó el chico tomando su nuca avergonzado.

—Si, es ella...¿Cómo lo sabes?—interrumpió MinA encantada, recibiendo una mirada fulminante de la contraria.

—Mi hermana, no deja de hablar de su nueva amiga—respondió aún más tímido—Bueno yo, ya de-debo irme, hasta luego.

Las dos adolescentes lo miraron alejarse hasta que lo perdieron por completo cuando él siguió corriendo, y hasta ese momento fueron conscientes de que el chico llevaba el uniforme de deportes puesto. Lo que significaba una cosa...: Él también estuvo practicando en la misma pista, lo que posiblemente las llevaba a creer que pudo haberlas escuchado, por supuesto eso no era una buena noticia, bueno, al menos no para la castaña.

—¡Es perfecto!—exclamó la chica de pelo negro—Ahora que probablemente lo sabe, no necesitas esconderlo.

—¡¿Bro-bromeas?! ¡Es te-terrible!—se quejó la contraria tapando su rostro de vergüenza.

—Ya, sólo estamos creando especulaciones Hana, quizá sólo vio cómo te caíste y ya...

—¡Eso es aún peor! ¡Vió como mi cabeza y gran cuerpo azotaron en el suelo!

—Buenooo...—dijo alargando la palabra, buscando cualquier cosa para mejorar este asunto y calmar a su amiga—Al menos ahora ya sabe tu nombre ¿No? Eso es buen avance.

—¿Lo es?—le preguntó la castaña atreviéndose a mirarla.

—¡Pero claro! Ya te identifica, ahora sólo debemos encontrar la manera de que te acerques más a él.

—¿Y cómo haré eso?—cuestiono.

De pronto, aquel paso número uno propuesto por Jin apareció en su cabeza.

—¡Por amigos en común!—contestó sonriente—Dijiste que Chae Young comerá con nosotras el día de hoy ¿No?

El silencio reinaba en el lugar, sólo podían escucharse los palillos chocando con la charola de su comida. Nadie sabía qué decir y sólo cruzaban miradas de vez en cuando.
Eso no era lo que MinA ni Hana esperaban, o algo que habían imaginado, pero de alguna forma, cuando Chae llegó a la mesa, sus mentes quedaron en blanco y ninguna supo exactamente qué decir.

—Así que...¿Compartes clase con Hana?—habló por fin después de toda una eternidad.

—Así es, mi hermano y yo fuimos transferidos desde Busán—respondió la rubia sonriéndole.

—Conozco a tu hermano, va en mi clase—le dijo la peli negro tratando de hacer que hablara más sobre el chico, quizá que dijera algo que le ayudara a su amiga—Es Jeon Jungkook ¿No?

—Si, lo es—se limitó a responder, lo cual no le beneficiaba en nada.

—¿Y él no nos acompañará el día de hoy?—continuo tratando de no sonar tan insistente.

—El, pese a ser tímido, es mejor socializando que yo—contesto Chae dándole un sorbo a su malteada—Así que posiblemente ya hizo amigos, entonces...

MinA ya no presto atención a lo que dijo después, no pudo evitar sentirse un poco mal por acercarse a esa chica sin amigos sólo para ayudar a su amiga a ligarse a su hermano. (Ok, si lo pongo de esa manera suena aún peor).

—Bueno, ya no tienes que preocuparte por eso—contesto Kang sonriéndole amablemente—¿Verdad Hana?

—Co-completamente—exclamó la castaña.

—Puedes sentarte con nosotras cuantas veces quieras, puedes pedir nuestra ayuda cuando lo necesites y...esas cosas que las amigas hacen—continúo algo avergonzada—Ahora conoces nuestro lugar favorito para almorzar. Bienvenida al club de los renegados Chae.

—¿De verdad?—contesto conteniendo la emoción que poco a poco nacía en su interior—Me encanta formar parte de esto ahora.

—Por cierto, ¿No co-comerás nada?—le cuestiono Hana algo confundida al observar su charola completamente intacta.

—No tengo mucho apetito—se limitó a responder.

—¡O por Dios! Allá va Jun—susurró básicamente escondiéndose en los arbustos. Haciendo que el tema anterior quedará básicamente en el olvido.

Y aunque MinA aún se sentía algo incomoda en presencia de la rubia por no conocerla lo suficiente, aquella incomodidad duro: Nada.

—¿Quién es Jun?—cuestiono Chae con cierto toque de intriga.

—Jun, es el chico más guapo de todos—exclamó embobada completamente.

—A MinA le ha gustado desde la primera vez que lo vio, fue hace como un año y medio, en el pasillo principal—dijo esta vez la castaña.

—Lo recuerdo como si hubiese pasado ayer, él sacaba sus útiles de su casillero, su cabello estaba bien peinado, sus hoyuelos adornaban su rostro y entonces se giró acompañado de una sonrisa ladina.

—Entonces, la tontuela dejo caer su cuaderno por la impresión—soltó Hana.

—Ah, si. Él se acercó para ayudarme a recogerlo, luego se despidió pasando a mi lado y yo...quede sumida en el paraíso.

—Vaya, de verdad te gusta demasiado. ¿Has hablado con el?

—Pero cla...

—¡MinA!—les interrumpió una voz acercándose al jardín donde se encontraban—¡Por Dios Kang! ¡Te busque por todas partes!

—Lo siento Jin, hoy no pude comer con ustedes, estaba con...

—Si si, no importa—dijo restándole importancia a todo y tratando de regular su agitada respiración, parecía que había corrido un maratón—Vamos, es momento de ejecutar el paso dos.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro