Libro: Vísceras, huesos y piel.

Autora: noirdandelion

Género: Epistolar. 

Primeras impresiones. 

Portada.

En primera instancia, y siendo muy, muy sincero, no supe de qué trataba la portada, pero también puede que sea porque leo desde la web y las imágenes allí se ven más chiquitas. Recién ahora, que copio y abro la imagen en un formato más grande, me doy cuenta de que hay un chico lanzado en el suelo con un embrollo en la cabeza y unos cuantos cuervos a su alrededor. Después de leer la obra (hasta donde está actualizada), uno dice: ¡tiene todo el sentido del mundo! Sin embargo, en primeras impresiones, creo que la portada no me enmarcó demasiado bien de qué iba la obra. Primero, porque no veo las vísceras ni los huesos ni la piel, y las letras no hacen una buena representación de estos elementos, elementos que, en realidad, son algo siniestros. Las letras, en cambio, son muy "amables" al representarlos, pudiendo perfectamente representar algo mucho más chill, un poster de dibujos, por ejemplo, o cualquier cosa que en realidad no tenga nada que ver con lo oscuro.

Ahora bien, al saber de qué va la historia, tampoco diría que sea especialmente oscura y necesite con urgencia un cambio turbio en su portada, ya que el libro sabe jugar de forma magistral con sus propios elementos, pero sí tiene sus toques lúgubres, porque en realidad habla de cosas que, en su profundidad, pueden ser demasiado turbias, como es el suicidio y el infierno. No obstante, tampoco nos muestra las cosas de forma grotesca, sino a través de una visión mesurada y ojos narrativos que pueden resultar tan malvados como inocentes. Aun así, y en conclusión, considero que podría incorporarse un toque más oscuro a la portada, no para hacerme sentir que las cosas dentro son horribles y sangrientas, sino para darme una mejor idea global de lo que estaré leyendo.

El fondo demasiado blanco, por ejemplo, entrega demasiada limpieza, reduciendo los toques contrarios.

Sé que todo lo que digo puede sonar algo complicado o desafiante de recrear, pero es que ya le tomé cariño a la historia y creo que merece llamar más la atención. Al fin y al cabo, todos somos crueles en un inicio. Si la historia no llama con su portada o sinopsis, solemos no darle una oportunidad. Solo espero que mi punto de vista ayude en algo.

Sinopsis.

Donde un demonio hace un pacto con un humano llamado Lautaro y le escribe cartas.

No sé qué decir de la sinopsis, y a la vez podría decir muchas cosas jaja ¿Por qué me entregas algo tan corto? Aunque en el fondo creo saber por qué lo haces. Le he dado muchas vueltas para saber qué decir, para saber si en realidad todo es apropiado y no hay absolutamente nada que criticar, pero entonces me pregunté qué me atraería más a la hora de leer: ¿una sinopsis extremadamente concisa que me deja demasiadas ideas dando vueltas en el aire?, ¿o una más contextualizada, que me explique mejor lo fundamental y me deje intrigado igualmente? Me di cuenta de que la segunda opción me atraía más.

Pero a ver, no es que necesites entregarme una sinopsis gorda para recién capturarme, pero sí dame lo necesario como para hacerme volar más la cabeza. Con esta sinopsis, aunque suene muy interesante el pacto que hizo un demonio con un humano, y te preguntes por qué le escribe cartas, creo se podría enriquecer mucho más. Y es que por otro lado, la sinopsis es explicativa más que demostrativa, ya que hace eso, explicarme (aunque solo lo extremadamente necesario). En mi experiencia personal y a través de lo que he aprendido, sé que una sinopsis buena es aquella que explica y a la vez te demuestra algo, llevando al lector a entrar la historia de inmediato, a verla, a sentirse dentro de ella.

En este caso, y solo por tirar una idea, podríamos empezar con algo así:

¿Hasta cuándo estaré en cuerpo, Lautaro? Aunque debo decir que tengo una duda, creo que me gusta estar en ti, pero...

¿Le estás sacando provecho, Lautaro? Al no estar en ti sino en mí.

Por mi parte, me veo aquí, frente a un escritorio, sentenciado a un compromiso, a escribirte durante una eternidad desconocida...

A través de esta sinopsis, estamos medio explicando y a la vez demostrando. CABE DECIR que es una idea apenas madurada, solo lanzada. Con ella solo busco ejemplificar una sinopsis algo más visual, que nos hace preguntar y crear ideas, ideas difusas, claramente, pero con una raíz más visible. De resto hay que ir jugando, quitando y añadiendo cosas o cambiando por completo el inicio y buscar otro tipo de demostración/explicación. La verdad es que hay demasiadas ideas viables, un mundo de posibilidades que dependen del autor.

Contenido:

Y ahora lo mejor de todo... el contenido de la historia.

Reconozco que en un principio me sentí algo decepcionado(¿?), pero no te asustes, no es porque haya algo malo con tu obra, sino porque no suelo pasarlo muy bien con las historias muy cortitas y fraccionadas, siento que no las cuentan bien y que a veces dejan demasiadas cosas vacías. Pero en tu caso me encantó todo, y vuelvo a resaltar el ME ENCANTÓ. Desde el principio hasta la última letra disfruté en demasía leerte. Y Dios, me dejabas tan picado con cada carta, porque me das de a poquitito, lo justo como para engatusar mi paladar, y zas, me obligas a seguir leyendo, convirtiéndome en un picaflor que se hace adicto a las pequeñas porciones de azúcar que me ofreces.

Pero ¿qué es lo mejor de todo?, que no se siente al narrador forzando esto. Es decir, en ocasiones, los narradores en este tipo de historias te arrebatan información de la mismísima nada, cual cocinero pasando el cuchillo a lo loco por el pastel, dejando algo impresentable. Lo mejor en tu caso es que tenemos al demonio de narrador, y él en sí no es que nos esté contando una historia, solo le manda cartas a Lautaro, solo le está contado lo que va ocurriendo, lo que ve, y nosotros los lectores estamos ahí de chismosos enterándonos de cositas indirectamente.

Cuentas la historia demasiado bien, tanto que da gusto, tanto que dan ganas de gritarle a todo el mundo que aquí hay un ejemplo de historia a seguir. La manera de ir dándonos pistas apenas suficientes, cada una llena de intriga, invita a ir completando un rompecabezas muy atractivo. Ya que el demonio, quien hizo un pacto para cambiar de cuerpos con Lautaro, nos va contando su día a día según lo que él entiende. Su escasa habilidad social y experiencia en el mundo humano, lo trasforman en un narrador demasiado peculiar, con la capacidad de ir creando en nosotros las mismas preguntas que tiene él y mucho más.

Es primera vez en mucho tiempo que me encariño con personajes a través de tan pocas palabras. El demonio, así para mí su clase sea tan asquerosa y malévola, indigna de toda empatía, me sacaba sonrisas con cada carta y me hacía quererlo por mucho que yo me resistiera. Es que es fascinante el equilibrio realista que tiene entre sus cualidades internas; cómo la ingenuidad congenia con su oscuridad, cómo logra incluso temer o entusiasmarse al sentir las emociones remanentes que dejó Lautaro en su cuerpo.

Lautaro, por su parte y por lo que se demuestra, no tuvo una vida en lo absoluto fácil. El demonio logra que nos preguntemos cada aspecto de él, por muy minucioso que sea, es decir, hasta un detalle tan ínfimo como su color de pelo, se podría sentir sumamente interesante bajo la perspectiva del demonio.

Alrededor de Lautaro, parecieron pasar demasiadas cosas, que pueden ser tan extraordinarios como típicas, y es que a la vez no deja de tener una familia con la muchos nos podríamos sentir identificados. Un padre que, por ejemplo, inspira angustia con el simple hecho de hablar. Se percibe que hay una historia detrás de cada tramo de su entorno, y pudiesen ser extremadamente simples, pero la manera de abarcarlas hace que todo luzca de gran manera. Este es un talento que aplaudo.

También tenemos a Nina, una compañera de Lautaro cuyos movimientos siempre nos dejan con la cabeza dando vueltas. Es misteriosa, a veces pareciera ser la más peligrosa del aula, pero en ocasiones la más humana o la herida. Se nos insinúa que Lautaro pudo haberle hecho algo. La gran pregunta es ¿Qué? Hasta el momento solo sigo al pie de las teorías, y eso que me considero un lector muy atento que muchas veces logra predecir las cosas. Aunque me duela admitirlo, me encanta cuando alguien logra que no pueda prever lo que ha de venir.

En síntesis, la autora de esta obra es una chica cruel, despiadada con la mente del lector, pero a la vez su escrito es muy "manso", por decirlo de algún modo, ya que solo deja que sus personajes fluyan sin incorporar tonalidades impropias de ellos o cosas grotescas que pudiesen no venir al caso.

Quiero saber todo de sus personajes. Y por favor, me encantaría conocer a detalle todo lo que vive Lautaro en el infierno, los paisajes, las sensaciones, la experiencia de vivir con cuervos.

En pocas palabras, en esta reseña reitero que no hay nada que criticar, que todo está muy bien llevado. La ortografía y demás detalles relacionados también son muy propios para una historia así. Te imaginas todo con claridad, todo con poquitas palabras, porque las acciones hablan más que las descripciones, y eso me tiene muy a gusto.

Me gustaría hablar más, pero en sí la historia es corta por obvias razones. Aunque, ahora que lo pienso, ¿mencioné al pescado? La manera en que el demonio se queda mirando los ojos desalmados del pescado, me dejó encantado xD Es que este tipo de detalles enriquecen mucho al personaje, llevándonos a entender cómo es sin que el autor se tome la molestia de explicar nada o darnos un currículo para que lo conozcamos.

En fin, solo le pido a la autora actualizar pronto e invito a todos aquellos a los que les gusta romperse la cabeza, ¡a sumergirse en esta premisa impecable!