Capitulo 3: Miedo.

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

¿Qué era peor? ¿Tener dolor de cuerpo o soportar a Soshiro? la verdad es que se declina un poco a lo segundo... Y es que simplemente no puede con la perseverancia de este niño, pero de todas formas ser el saco de boxeo no es tan malo, esto le ayuda a pulir sus habilidades. Además de que ni loco piensa permitirle superarlo.

Sin embargo hoy si siente mucho dolor en todo el cuerpo, de hecho ni siquiera pudo dormir del todo bien debido al dolor el cual lo atormentó durante toda la noche. Incluso hubo un momento en el que ya no lo soportó y tuvo que ir por un botiquín de primeros auxilios para atender sus propias heridas.

Su madrastra no debía enterarse de su estado actual, lo que menos quiere es que ella se enfrente a su padre de nuevo, y terminé siendo golpeada otra vez. Ya no quería ver de nuevo a sus hermanas y a su madre sufrir por culpa de ese monstruo que se hace llamar su "padre."

Luego de haber caminado hasta llegar al lugar acordado por Soshiro, lo que hizo fue sentarse primero para tratar de relajarse un poco. Menos mal ese niño no ha llegado por lo que podrá tomar un pequeño respiro de todo lo que ha estado viviendo.

De hecho mirar los árboles y el cielo completamente despejado lo relaja mucho, desafortunadamente odia el calor y parece que hoy no habían tantas nubes así que sufrirá mucho con el calor insoportable.

"¿Por qué no nací en una familia diferente? Probablemente habría vivido con más tranquilidad.... Nadie me miraría como si fuese una basura o una herramienta..."

Apenas tiene ocho años, pero ya aprendió a identificar cuando lo miran con odio y cuando no. Aunque su progenitor actualmente lo ve como su más grande creación... Su creación, técnicamente para ese hombre es solo un arma en proceso.

Quisiera golpear algo para desahogarse, pero ahora no se siente muy bien y todavía necesitaba energías para ayudarle con el entrenamiento a Hoshina. Menos mal su padre finalmente se fue, tendrá durante unos días paz, y sobretodo descansará un poco ya que del entrenamiento del día anterior pudo superar a su tío tan odioso. Eso quizás le dió mucha satisfacción a su padre que finalmente se "apiadó" y finalmente le dio un descanso, que bueno porque sino probablemente moriría o habría colapsado.

Sus ojos de la nada comenzaron a volverse cada vez más pesados, y no lo pensaba solo por ser dramático sino porque en serio era cada vez más difícil mantener estos abiertos. Antes de cerrar estos miró hacia todas partes para asegurarse de que ese niño aún no esté cerca, después de confirmar eso finalmente pudo cerrar sus ojos. Bueno, una pequeña siesta no le vendrá mal, con ese pensamiento se quedó dormido por un momento.

Él dolor en el cuerpo sigue allí, pero esperaba que una siesta le ayude a dejar de pensar en dicho dolor.


Mientras tanto a unos cuantos metros de Osuke....

-Estupido, ojalá un día esa sonrisa suya se le caiga de la cara.... Maldito Soichiro.

Esas eran las palabras o mejor dicho las maldiciones de Soshiro, este se encontraba ciertamente enojado pero con su hermano mayor, y con ese humor estaba yendo a reunirse con Osuke. No le interesa si a este último le molesta su actitud, mínimo estarán a mano, porque honestamente no le gusta para nada el comportamiento de Osuke, era un niño muy arrogante, demasiado y en ocasiones le decía cosas no muy agradables como lo hizo el día anterior.

-Ese Kimura... -Mencionó entre murmullos a la vez que apretaba un su mandíbula. -Se cree la gran cosa solo por ser más fuerte, pero ya verá hoy lo voy a derribar.

Aunque en el fondo si reconoce lo fuerte que era, ningún niño de esa edad tendría esa fuerza algo que Osuke posee ¿qué tipo de entrenamiento debe recibir un niño como él?. La familia Kimura, existen muchas historias sobre ellos aunque la mayoría no muy agradables, por eso es que su familia no ve con buenos ojos a los Kimura, sin embargo ahora está yendo a entrenar con uno.

Probablemente su padre le de un buen sermón y lo castigue durante un mes por haber hecho contacto con alguien de esa familia. Claro que solamente será por un tiempo, mínimo hasta que pueda derrotar a Osuke y hacerlo bajar de su nube de arrogancia.

Llegó al sitio en dónde entrenarían hoy, pero se confundió al no verlo eso lo hizo fruncir el ceño ¿será que no vino y lo dejó plantado? No, no podía haber Sido capaz de hacerlo....

Aunque si lo piensa mejor...

-Maldito, si es capaz de hacer eso. -Expresó con cierto enojo, recordaba que Osuke es un Kimura seguramente si lo haya dejado plantado. -Pero ya verá si no llega.

Entonces decidió buscar un sitio en el cual sentarse para esperarlo, quería ver y confirmar si realmente no llega. Pero al acercarse a un árbol se dió cuenta de algo, cuando rodeó dicho árbol allí se encontró a Osuke, pero durmiendo. Se veía muy tranquilo como si no fuese consciente de que alguien o algo podría venir y hacerle algo.

-¿Realmente está durmiendo?

Para confirmarlo lo que hizo fue mover una de sus manos frente al rostro de Osuke, y en efecto este se encontraba durmiendo. Eso no es bueno, pues vino aquí para entrenar ¿qué se supone que haga entonces si él está durmiendo?

Bueno, algo que puede hacer es despertarlo, pero ¿será prudente hacer algo como eso? Después de todo el de cabellos oscuros podría enojarse mucho y probablemente quiera darle una paliza después, aunque obviamente no le daba miedo eso... Sin embargo perderían tiempo si se ponen a pelear como dos niños pequeños, aunque eso sean.

-Oye. -Lo llamó Soshiro tratando de ser cuidadoso, pero el Kimura no reaccionó. -Ey, despierta. -Siguió intentando despertarlo.

Desafortunadamente Osuke no daba indicios de querer despertar, eso solo comenzó a desesperar a Hoshina, incluso una vena se hizo presente en su rostro. Pero intentó mantener la calma y no desesperarse, sin embargo ¿cómo puede sentir empatía o compasión por alguien quien literalmente lo trataba como un debilucho?

Ya tenía ahora la intención de gritarle lo más fuerte que sus pulmones le permitieran. Pero entonces observó como en el rostro de Osuke se deformaba en una mueca, pero de dolor como si algo le esté doliendo. Aún así Soshiro no quería echarse para atrás por lo que ya iba a gritar hasta que un murmullo bajo lo detuvo.

-Me...duele... -Pronunció aún dormido Osuke, la mueca en su rostro se había hecho entonces más notoria.

El menor de cabellos morados permaneció en silencio después de haber escuchado a su contrario pronunciar esas dos palabras.... ¿Estará soñando? eso se cuestionó en su mente ahora. Debe de ser un sueño lo suficientemente aterrador como para ver esa expresión en el rostro dormido de alguien.

No debería de importarle lo que le pase, por lo que podría despertarlo sin sentir culpa... Pero ¿por qué no lo hace? porque si, al final no despertó a Osuke quien siguió durmiendo, aunque manteniendo esa expresión que lo hizo dudar de si era buena idea dejar que siga durmiendo.

Sin embargo ¿qué puede saber un niño como el sobre sueños? Para ver si era buena idea o no despertarlo se acercó un poco más a Osuke, técnicamente agachándose para estar a su misma altura. Llegó a notar entonces como el rostro del Kimura comenzaba a sudar, eso lo alarmó un poco ¿será que está enfermo y por eso se puso así?

Lo miró un poco más, y creyó notar unos hematomas en el cuello y uno en el rostro de Osuke, solo que este se encontraba un tanto oculto por el cabello de él, que ni cuenta se dio antes.

Quiso creer que aquellos golpes fueron ocasionados por el entrenamiento que el Kimura debe de recibir.

Debe de entrenar mucho como para lastimarse de esa forma.

Al menos eso era lo que cree Soshiro, pues al igual que Osuke en ocasiones ha llegado a lastimarse cada vez que entrena o se enfrentaba a su hermano mayor. Cuando aquel susodicho cruzó por su cabeza instantáneamente recordó el porqué antes estaba tan enojado.

Su hermano mayor siempre era alguien muy molesto, cada que puede lo molestaba siempre diciéndole que es débil y que lo mejor que puede hacer es rendirse. En su familia lo reconocen por ser bueno con la espada como también con las armas de fuego, mientras que su nivel en el uso de dichas armas es bajo.

Y como si la vida haya querido darle otro golpe, tiene que aparecer Osuke para demostrar la fuerza que este tiene. Ya que sí, le duele admitirlo pero si es fuerte, lo único defectuoso quizás era esa actitud que adopta... La verdad es que cuando se comporta de esa forma lo hace verse como el idiota de su hermano mayor, probablemente por eso es que no consigue aguantarlo.

Salió de sus pensamientos en cuanto escuchó quejidos bajos venir de Osuke, además de que él rostro de él se tornó un poco de rojo.

Se le ocurrió hacer algo ahora y eso era confirmar su sospecha de que si él Kimura se encontraba enfermo, pero ¿y si lo despertaba? probablemente se gane un buen golpe... Pero al final terminó por llevar una de sus manos a la frente de Osuke, para su desafortunada suerte el de cabellos oscuros era muy sensible que pudo sentir como alguien tocó su frente.

Eso lo hizo despertar y lo que vió, fue a Soshiro frente a su persona y muy cerca. Aquello lo hizo exaltarse mucho que terminó por levantarse rápidamente, para su mala suerte fue muy impulsivo y por eso es que terminó estrellando su cabeza contra el rostro del Hoshina, haciéndolo caer boca arriba.

Ahora Osuke estaba tocando su cabeza adolorida, como si ya no fuera suficiente con los golpes que recibió el día anterior, debido a eso miró más que molesto a Soshiro quien ahora estaba quejándose también por el golpe recibido en la cara.

-¡¿Por qué estabas tan cerca de mi?! -El solo pensar que hace un segundo alguien extraño había estado muy cerca de su persona era suficiente para que sus alarmas sonarán. Jamás le gustó tener a otras personas cerca, a parte de su madrastra y hermanas claro. -¡Ahora me duele mi cabeza!

-¡¿Y de quién es la culpa, eh?!

Soshiro no podía con la indignación que sintió ahora, solo se había preocupado por Osuke ¿y así lo trataba? menudo mal agradecido.

Para Osuke, su espacio personal es algo un tanto delicado por eso le disgustó mucho el hecho de que Hoshina se haya atrevido a invadir dicho espacio como si nada... ¿Y si se dió cuenta de los golpes? porque tenía uno que otro en el rostro.

-Creo que mejor te aclaro algo.... -Habló luego de haber permanecido en silencio por unos segundos en los cuales trató de calmar el dolor aún presente en su cabeza. -No te me acerques mucho ¿entendido? odio que otras personas invadan mi espacio y sobretodo me toquen.

-Pero que delicado.... -Se quejó Hoshina ante la clara advertencia de su contrario. -Yo solo estaba asegurándome de que no estés enfermo.... Alguien en ese estado no sirve para mí entrenamiento.

Este idiota....

A Osuke le salió una vena, ese comentario tocó un poco su orgullo. No puede mostrarse débil aunque esté enfermo, después de todo es un Kimura.

Debe de demostrar que sin importar su salud, siempre seguirá siendo fuerte como lo son en su familia... Además de que no puede permitir que Soshiro se haga más fuerte y lo supere, eso jamás.

-Callate, tu no decides como me siento y lo que haré... Toma tu espada pero ya, créeme que no me gusta darle de mi valioso tiempo a un Hoshina, sobretodo a uno demasiado terco como tú.

Porque era cierto, para Osuke aquel niño de ojos cerrados es muy testarudo. No importaban las veces en las que siempre lo derrote, este niño siempre seguirá levantándose para continuar luchando.

Aunque su determinación es algo de admirar. Sin embargo en su familia esta solo sería vista con malos ojos, para ellos la fuerza lo es todo, quien no consiga entrar al estándar de su familia es técnicamente defectuoso. Por algo sus hermanas son totalmente dejadas de lado solamente por ser niñas.

Soshiro le tomó la palabra a Osuke luego de que este le haya indicado lo siguiente. Pero aún así, los moretones que observó en él lo mantenían dudoso, pues no planea contenerse mucho con el Kimura y este parece estar muy golpeado, sin mencionar que hace un momento estaba sudando mucho.

Quería en serio superarlo, y demostrarle que es fuerte, pero no tendría caso si Osuke se encuentra en pésimas condiciones, por ese motivo es que finalmente habló.

-¿Realmente crees poder luchar ahora?... Digo... Podría jurar haber visto unos moretones, principalmente uno en tu cara.

La sangre de Osuke se le congeló de un segundo a otro... Entonces miró a Soshiro como si este fuera un fantasma muy aterrador. Lo vió, notó los golpes que tenía, menos mal su ropa cubre los demás ya que en su cuerpo habían muchos más moretones, unos incluso más feos que otros.

Pero aún así no cambia el hecho de que alguien se dio cuenta de los moretones de su cuerpo, unos que cualquier niño no debería de tener.

-Pues... -Vaciló ya que no sabía que decirle ahora para que se olvide de esos moretones. -Ya te lo había dicho antes ayer, entreno con mi familia y probablemente me los hice sin querer.

No quería que otra persona se entere de su situación, mucho menos alguien quien pertenece a la familia Hoshina... Si Soshiro va con su familia a chismorrear su situación, probablemente se vuelva en la siguiente burla de su generación, no, mejor dicho la de toda su familia y eso hará enojar demasiado a su padre.

No se dio cuenta de que su cuerpo había comenzado a temblar un poco ante el terror que le daba imaginarse las consecuencias.

Soshiro no comprende el porqué Osuke lo había mirado de esa manera anteriormente, sin embargo no pudo preguntarle cuando el Kimura comenzó a temblar, después de que la mirada de él fuera hacia el suelo.

Pronto observó como el menor de cabellos oscuros comenzó a respirar de forma muy irregular, como si él aire haya comenzado a faltarle de repente.

La preocupación se hizo presente en el entonces por lo tanto se acercó a Osuke para averiguar el porqué comenzó a respirar con irregularidad, como si su contrario esté a punto de sufrir un ataque de pánico.

-Oye... ¿Qué te pasa?

Sin embargo Osuke por un momento había dejado de escuchar la voz de Soshiro, ya que su mente solamente se proyectaba la imagen aterradora de su padre, el cual enojado golpeaba a su madrastra y a sus hermanas. No, no puede permitir que nadie ajeno se entere de los maltratos que existen en su hogar... Tiene que callar su voz, debe hacerlo y solamente complacer a ese sujeto tan horrendo al cual ni siquiera ve como un padre.

De repente volvió en si, y se percató de que Hoshina se encontraba frente a su persona, se dió cuenta de que aquel niño tan molesto lo estaba sujetando de sus hombros, claramente volvió a invadir su espacio personal. Pero... Ahora su cuerpo se encontraba inmóvil y su mente todavía estaba regresando en si.

-No me pasa nada.... -Dijo de inmediato Osuke antes de mirar hacia otra parte, necesitaba ocultar ese miedo que por un momento estuvo por hacerlo entrar en pánico. -Solo me quedé pensando...

-¿Pensando? -Cuestionó sin creerle Soshiro, pues pudo ser testigo de como Osuke estuvo a nada de perder el control de si mismo... Se vió de hecho como si lo hubieran descubierto u algo por él estilo. -Pues no lo vi de esa forma.

No... Es como si Osuke hubiera tenido miedo de algo, o a alguien.

-Ya te lo dije. -Insistió para que él Hoshina ya no le siguiera preguntando... No quiere contestar, mucho menos que descubran la verdad cruda que habitaba adentro de su casa, la cual era más una prisión que otra cosa.

-No, estás mintiendo.

El Kimura ya estaba planeando negar eso aunque si estaba mintiendo en realidad... No debe decir nada, no puede mostrar debilidad ante nadie, pero ahora Hoshina acababa de presenciar como estuvo cerca de perder la cabeza, porque la situación en casa se estaba tornando cada vez más peor. Lo más doloroso era el hecho de que no puede pedir ayuda sin que su madrastra y hermanas resulten heridas, por eso debe ser el único quien aguante los golpes de su progenitor.

Así deben de ser las cosas y por más que ya haya recibido en muchas ocasiones dichas palizas, no dejan de ser dolorosas y su padre nunca dejará de ser su mayor terror...

-¿Tienes miedo?

Esa siguiente interrogativa lo dejó en silencio total... Y ese silencio fue una respuesta para Soshiro, para este último era la primera vez que veía a alguien tan asustado.

¿Pero a qué le tendría miedo un Kimura como Osuke? Eso era lo que le intriga.

"No.... Ya se dio cuenta... " Pensó Osuke, esa sola pregunta fue suficiente para que su barrera se viera agrietada por un momento, incluso no supo que contestarle ahora a Soshiro.

Para rematar, comenzó a sentirse mareado, y el dolor en su cuerpo regresó... Pero intentó ignorar este para buscar una forma o una mentira creíble para que su contrario ya no sospeche.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro