Emma

Por fin mi diploma, mi certificado de salida, de este encierro, por fin vida universitaria.

Al salir del convento grito a todo pulmón, "por fin" mi padre me esperaba afuera con una hermoso convertible gris plata, lo más hermoso, no puedo evitar emocionarme, mi hermana corre y se monta primero, me cruzó de brazos, ¡¡se supone que es Mi regalo!!

—¡Papá! —bufo  y hago puchero para que baje a la cansona de mi hermana.

—Emma comparte, cuántas veces lo he dicho, debes compartir con tu hermana.

Le sonrió y lo abrazo —Gracias por este regalo

—Debés viajar a la universidad en algo y a pie no creo que vayas.

—Pues no, pero gracias. — me subo al auto muy alegre empujó a Emilia  para la otra silla, ella me saca la lengua, lo bueno es que papá me ha estado enseñando, pero debo sacar mis documentos para poder conducir libremente. Ya tendré tiempo para esos documentos, antes de ingresar a la universidad.

Al llegar a la mansión, me tenían una comida; mis abuelos, mis amigas y las titulares, estaban ahí esperando por nosotros, nos bajamos del auto y nos encaminamos hacia la entrada de la casa pero, a mi padre le entró una llamada, debe ser urgente por la insistencia... Arruga su entre ceño.

—Papá ¿Pasa algo? — él niega y responde.

— Sí... Claro.. ¡Como así! Pero... —mi padre mira a Antony  y después al abuelo —Sí claro, no se preocupen, me tiene atento a cualquier novedad.

Pasa su mano por su cabello, mira a Antony y niega, camina hacia mí y me da un beso en la frente.

—Hija entra y disfruta, me disculpo por una hora, voy a estar  en el despacho con Antony  y el abuelo. Sigue derecho no saludo a nadie, Antony  y el abuelo lo siguen, ¿ahora que está pasando?

Espero que no sea nada grave, aunque debe ser grave, para que papá esté así.

........

Duvan

No lo podía creer, si algo llegara a pasar, las empresas vendrían en picada abajo.

—¿Qué pasó hijo?, ¿por qué esa actitud?.

—Disculpá papá, pero.. Acabo de recibir una llamada muy urgente y bastante complicada.

—¿Y ahora que pasó, los nuevos inversionistas? —pregunta Amtony, se sirve una copa y se sienta con las  piernas cruzadas. Niego.

—El señor Smith está muy crítico en el hospital, puede que él…

—¡Muera y con eso se viene los problemas financieros!, esperemos que todo lo haya dejado organizado el viejo ese. —responde mi padre, Antony  se acomoda sus lentes y nos mira serio.

—La vida le está pasando factura, se lo merece.

—¡Antony!.

—¿Qué? ¡Es verdad!, por hacernos sufrir a todos.

—Eso no cambiará nada... —aunque pensándolo bien, puede que sí... Cambie.

—Eres muy noble o muy estúpido, ya no se que pensar de ti —me saca la lengua,  no se por que sigo siendo su amigo.

.......

Roxxan

Tres años y medio han pasado...

—Happy Birthday To You, Happy Birthday To You, happy birthdar, happy birthday,Happy Birthday To You, 1 2 3.... 34 —aplauden, los miro mal, era casi imposible que lleguen en número real de mi edad exacta, y lo hicieron. —Feliz cumpleaños, madre... —mi hijo, todo un hombre, una belleza ejemplar, con una novia bastante hermosa, una británica  que muy pronto les tocará separarse.

Le pedí a mi hijo que terminará su vida en Estados Unidos, pero él no quiere, vivió mucho tiempo lejos de mí, pero era inevitable, esto lo ocasione yo.

"El tiempo lo cura todo"... Patrañas, pero si me hizo olvidar algunos sin sabores que viví.

—Mamá, feliz cumpleaños —la tomo en mi brazos a mi pequeña hermosa, mi segunda hija de tan solo tres años, fue una gran sorpresa su vida en nuestras vidas, nadie se imaginó que yo estuviera embarazada, pero mis cambios en el cuerpo y los malos olores están convertidos en esta pequeña, Queen Davies.

Queen es una niña angelical, dulce y bastante activa, pero cuando se enoja es otra niña, como su madre.

Me hace recordar mucho a su padre, es muy igual a él, son una gota de agua; Quees y Lisa,  son  muy amigas, ambas crecieron juntas, a pesar de que son primas se ven como hermanas también.

Lisa y mi hija, nacieron una un mes después de la otra, la hija de Cloe, bueno no se sabe a quién se parece, si a su padre o  su madre que siempre he dicho que ambos son lo mismo, lo distinto son sus sexos, pero en fin.

A donde vaya debe llevar a su prima, y viceversa.

Pero eso sí, desde que Reyk y Queen  se conocieron, él uno no se separa del otro y cuando vamos a despedir a Reyk al aeropuerto, Queen llora por una semana por su hermsnito, pero él debía acabar con sus estudios.

Mi vida dio un giro enorme de 360 grados y ahora otra vez los dará.

La muerte de mi abuelo me hizo volver a la fuerza, no quería volver, mi nueva  vida la tengo aquí, y mejor, ahora Cloe y  yo tenemos una academia de Danzas, con el estilo de Pole Dance, no muy grande pero si hermosa, es  una academia que incluye la   belleza y el diseño

Clara  fue la única que nos acompañó en todo momento, desde el día uno, en que nos venimos a vivir a una de las  isla de Londres. 

Ahora nos encontramos consiguiendo apartamento, mi abuelo me obligó a vender todo, mis ingresos restantes fueron metidos en su imperio, no se iban a perder pero tampoco era algo que yo quería.

Pero me tocaba, con tal de escapar de mi realidad brutesca.

—Reyk ¿Dónde estás?. —comienzo hablar sola, pero me alcanzan a escuchar.

—¡Se fue con Tomas a matricularse en la universidad! —me respondió Clara —Señorita Lisa venga, su madre ya viene.

—¿Y Cloe esta vez para donde se fue?

—La señorita está cerrando contrato con el piso de al lado —pongo mis ojos en blanco, le dije que podía vivir con nosotros.

—Clara... ¿No te hace falta alguien? ¿Dónde estás Queen? —coloco mi mano en la frente, esa niña...

—Roxxan tranquila, sabes que ella no se despega de su hermano.

Sonrió de medio lado y niego, esa niña como siempre pegada de Reyk.

Miro hacia el cielo, se parece tanto a él... Se parece mucho a ti, Duvan

......

Reyk

—Papá, en esta universidad ¡Sí hay la carrera! —mi padre conduce en dirección a la universidad que le había pedido.

—¿Tú madre cómo se siente con este nuevo cambio? —me cambia el tema —¿Cómo te sientes tú?

—Le toca acostumbrarse  a su nuevo estilo de vida, qué más da, además la tía y ella ya habían estudiado contaduría, bueno, la tía no se pudo graduar, pero creo que lo terminó en Londres, después de tener a Lisa.

—Entiendo.. —él miró por el retrovisor a mi hermana — Te quiere mucho.

—Y yo a ella —miro por la ventana —Algunas veces me hubiera gustado quedarnos en Inglaterra.

—Pero, tu vida...

—Si lo se, a mi madre le toca estar al frente, pero... A la vez no quiero, no se por que pero, presiento que algo malo saldrá de todo esto.

—¿A qué te refieres?

—A él...

Ambos sabíamos de quién hablamos, después de dos años, mi madre le contó a Tomas lo que había pasado, por lo tanto él ha apoyado desde aquel momento, se había enterado de muchas cosas que pasaron con sus amigas, bueno,   sus supuestas amigas

La única Leal fue Clara.

Las demás todavía no las perdoná, pero lo único que no quiero es que mamá vuelva a llorar o que su corazón vuelva a sentirse acorralado.

Ahora nos tiene a nosotros dos.

Pero con la diferencia que ahora Queen es una Rodriguez, aunque su padre no lo sepa y  me da rabia eso, pero... Mi madre.

Esa es su decisión.

—Mira hijo, hay muchos jóvenes, seguro que es está — asiento. Los tres salimos del auto después de que mi papá estacionaria.

Queen comienza a correr como loca por todo el campus, mientras mi padre se adelantó a la dirección, yo voy detrás de ella, es demasiado libre cuando ve la naturaleza y este campus  tiene por donde veas y pases.

—¿Te gusta Queen?, este será el lugar de estudio de tu hermanito.

—Yo quiero venir contigo aquí. Es hermoso

—¿Pero quién te dice que voy a vivir aquí, quién cuidaría  de ustedes dos?. —la despeinó un poco.

Sus ojitos brillan, se parece a mamá. Cuando comienza a soñar con algo que le gusta.

Mi hermana comienza a dar vueltas por todo lados, comienza a sacar sus clases de ballet a flote.

Mi madre exagera pero.. A Queen le gusta y la mantiene entretenida y es bastante buena.

—Ten cuidado, Queen.—la miró con una sonrisa en mis labios, ella es mi motivación, mi alegría, mi orgullo, mi hermana  también es mi vida, como lo es mi madre.

........

Emma

—Jajaja, pero lo hubieras visto, ese fallo  fue de  una manera muy ridícula, ahora que lo pienso, se debió joder el tobillo.

Estábamos caminando alrededor del campus, para poder  llegar a nuestra torre.

—Ya dejen en paz a esa chica.

—Pero Emma, sabes que fue chistoso —ahora me encuentro con mi grupo de compañeras, riendo por la caída de una chica atleta, no deberían reír así, y más que ellas son de natación. —Se vienen las competencias.

Comienzan a gritar —Niñas, niñas... —venía corriendo nuestra cuarta compañera de nadador.

—Controlate

—Niñas, ya se dieron cuenta el bizcocho que va ingresar al campus, es transferido desde Inglaterra, pero es norteamericano, es divino, y esos ojos verdes que te matan, aunque debe tener hija, ya que, se le veía muy feliz con una pequeña  niña, tiene los mismos ojos verdes de su padre —no paraba de hablar  y de alagar aquel chico.

Ojos verdes ¿Eh? .

Mi corazón se acelera —¡¿Dónde lo viste?! —le hablo un poco fuerte ella abre sus ojos y sonríe de medio lado, entre nervios y miedo me señala el camino.

—No deberías de ponerte así, tu tienes novio, déjanos algo, además, tu novio se pasa de bueno, y es el más popular de la universidad de Brooklyn aunque... Puede que ese chico también, esta muy lindo...

Pongo mis ojos en blanco, y niego, en esas llega mi novio, Marco

—¿Cómo esta el amor de mi vida más hermoso? — me saluda de beso en los labios.

—Míralo, allí viene — gritó ella, pero después me tapó la boca, miró hacia dónde ella tenía su mirada, venía una niña corriendo bastante energética, su cabello chocolate algo largo y su bella sonrisa hacían que mi corazón sintiera paz, pero.. Al abrir sus ojos no se por que se me hizo tan conocida aquella niña, era como ver ha...

—Amor, vamos a clases.

Ya no escucho voces, mi mirada no perdía el sendero de la niña, pero... Aquel chico que se acerca a ella y la carga, con aquella  sonrisa en sus labios...

—¡No! — era él, y ahora tenía una pequeña hija. Una lagrima traicionera sale de mis ojos y me la limpio con rapidez, Reyk había vuelto a Brooklyn después de tres años y medio.

—Vamos a clases —todos me miran, paso por un lado de ellos, y caminó un poco más rápido.

No quería verlo, no quería saber que él me había olvidado y no solo eso, destruyó su vida teniendo un bebe, ahora yo en su vida no valgo nada.

Solo quería guardar alguna esperanza para los dos, estaba dispuesta a todo, con tal de estar a su lado, pero ahora lo dudo mucho.

......

Reyk

—Rebeca ahora estoy con mi hermana, no molestes deja tus celos además, estas lejos yo estoy en Estados Unidos, al otro lado. Te dije que dejáramos  así, no sirve eso de relaciones lejanas.

—Pero amor, me estoy haciendo transferir a Brooklyn

Maldición, esta mujer está loca.

—Haz lo que quieras, Rebeca es tu dinero, pero no lo hagas por mí.

—No me importa, oye, se supone que nos queremos.

—Ajam, te dejo, estoy con mi hermana y sabes como son las cosas.

Rebeca solo fue... Con la persona que me distraje para olvidar un poco a Emma.

Cuelgo la llamada, suspiro pesadamente, ya había pasado un buen rato y Tomás  nada que sale.

Aunque, debe ser muy complicado pasar tantas notas y nivelar mi carrera como tal, aunque sea el mejor de mi área en contaduría, no quiere decir que aquí sea igual.

Bueno, puede que sí.

Me encaminó al área deportiva, miró que habían varios estudiantes.

—Reyk, aquí también serás capitán de fútbol.

—No se, Queen, quien sabe.

Nos acercamos a la cancha de fútbol americano, había una pelota tirada en el campo, la comienzo a lanzar con fuerza hasta su estación.

Mi hermana  solo gritaba gol, ella algunas veces compara el fútbol de pie al deporte que practico que es al contrario, debes manejar tu fuerza bruta y con las manos hacer los puntos.

En Inglaterra  también fui capitán, les gustaba mucho mis estrategias.

Extrañaré a mis compañeros. Me volví más abierto ante las personas.

—Oye, tu... —me llama un señor, debe ser el entrenador —Te gusta este deporte, unete..

le sonrió —Me encantaría, pero apenas fui transferido.

—Cuándo termines de transferirte pasa y habla conmigo, y miramos que tal.

—Si claro —le hago una reverencia, tomó a mi hermana y corrimos de nuevo a la torre contable.

Al llegar ambos reíamos pero al mirar hacia al frente, allí venía ella con un grupo de amigos y dos hombres. Mi sonrisa desaparece, mi hermana se aferra a mí pierna.

Ahora es tímida. Eso es nuevo.

—¡Quiero irme! ¡Quiero irme!. —me pide mi hermana, abro mis ojos.

—Reyk —me hablan, vuelvo a mirar al frente, sus amigas ya me habían devorado con la miras, les sonrió de medio lado, coqueto si me había vuelto, ella voltea su mirada y bufa.

—Emma.

—¿Cómo!? Ustedes ya  se conocen, pero si yo lo vi primero, además Emma, recuerda que este bobo grande es tu novio.

Le falto un megáfono a esa chica para gritarlo por toda la universidad.

—Claro, soy el capitán de fútbol...

Me estresa las personas que hablan mucho, mi mirada no cambia seguía neutra, les doy la espalda para llegar donde estaba Tomas.

—Reyk, espera.

—¿Qué quieres Emma?, estoy de afán.

—¿Vas a estudiar aquí?

—¿Y eso a ti que?. —el juego de preguntas.

—No me hables así, no te he hecho nada, además si a eso vamos la que más daño me hizo fue la zo.. —me acerco a ella, estoy a pocos milímetros de sus labios.

—Ojo con lo que dices, Emma —la miró mal, la tomó con brusquedad de sus labios con mi mano  —No tolero que hablen mal de mi madre, y más si no sabes nada, madura ya.

Ella retira mi mano con fuerza —¿Hablas de madurar? Ok, hablas de que tu madre la santa puritana no tiene la culpa. Pues te equivocas ella muy culpable de la muerte de mi madre, y la odio, Odio a todos los tuyos y eso te incluye a ti. —ella también me susurra

—Mira cuanto me importa Emma, déjame en paz.

Vaya encuentro el que tuvimos, me guarda recelo, rabia, tristeza, guarda de todo, ese corazón está a medio morir, como el mio; esta  universidad estara muy interesante.

Sigo pensando en Emma, sus ojos me decían otra cosa, sonrió de medio lado, se que ninguno de los dos nos hemos olvidado.

—Vamos Reyk, tu madre me acaba de llamar, esta enojada por que tu hermana vino contigo.

—Lo se... —reviso mi móvil, debe estar a explotar, no respondí ni una de sus llamadas.

.......

Roxxan

—Listo —por fin medio acabamos de acomodar este apartamento, pero... También tenemos la mansión del abuelo pero no deseo vivir en ese lugar, no me gusta esa mansión.

Así que, tomé la decisión de mandarla a derribar completamente, remodelado todo el diseño, mi arquitecto se encarga de lo demás.

También reacomode todo lo que tenía el abuelo, tenía dos haciendas, así que una se convertirá en Fundación para niños y mujeres abandonadas con su embarazo y niños huérfanos.
La otra hacienda queda a nombre de mis dos hijos.

Realice nuevos cambios en mi vida y eso incluye la vida de los míos y las empresas, ya cancele contratos con varios socios, Tomás me está aliado con unos de más fuerte calibre, eso sí ambos vamos a verlos.

Él se convirtió en mi mano derecha; él y Cloe, y yo estamos levantando de nuevo las bolsas de Smith, al morir el abuelo comenzó a caer de plano abajo todo.

Suspiro, escucho voces en el pasillo, abro la puerta y ahí venían ellos, me cruzó de brazos.

—Queen, ¡cuantas veces te debo decir que debes avisar que te vas con tu hermano!.

—Vez lo que te dije Queen, debes decirle a mamá, ella siempre te dejará ir conmigo

—A todas estas, ¿como te fue? —si siempre cambio mi actitud cuando se trata de mis dos bellos hijos, todos ingresamos a la casa, comienzo a servir la comida.

—Bien, me encontré con Emma —mi corazón se acelera, no estoy preparada para ver a esas niñas y más que ellas son las hermanas mayores de Queen.

Jamás lo sabrán.. Aunque…

—¿Y bien? ¿Cómo te fue con este nuevo apartamento?,  ¿te gustó? —asiento ante lo dicho por Tomas — Me agrada que te haya podido ubicar bien, bueno los dejo, mi señora me debe estar esperando.

—Que te vaya bien, papá.

—Gracias Tomas, nos vemos mañana temprano, ya sabes que tenemos reunión con ellos.

—Claro Tomas, no te preocupes, estamos juntos en esto.

—Nos vemos, tío Tomas. —él se agacha a la medida de Queen y la despeinada, ella trata de pegarle, reí  suavemente, ¿a quien saldría así?.

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Continuará
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