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Nota de la autora 💜:
¡Feliz día del lector y la lectora!
Es un honor este día yo ser también una lectora y que ustedes lo sean.

Hoy estaría cumpliendo años  el escritor Jorge Luis Borges ¡Feliz cumple también! 💜🍷.

Y feliz día a todos ustedes 😗♥️.
¡Gracias por estar aquí conmigo en este momento, gracias por ser mi lector en esta historia extremadamente extraña jeje, gracias porque aunque no tenga muchas lecturas cuento  con la tuya, gracias lector, no tengo un regalo pero si un capítulo ¡Espero que lo disfrutes! 💜🍷Tiamu.
*********************

Capítulo 24
(24•23)

¿Esos fueron celos o molestia?

«vaya que muchos no saben controlar sus emociones y pueden terminar estropeando el momento». ♥️

Angeles Carrasquero ✍🏻📖

Montserrat White 🥀🃏

Antes de salir de la guarida no olvide llevarme conmigo una pistola para mí protección, no puedo contar solo con Max. Tengo que estar más segura y confiable de mi también, se que puedo... Tirar el gatillo y bueno, inmovilizar a alguien.

«Ni de eso estás segura»

Escuché que nos iremos por el sur, dicen que es más cercano que estarse yendo por el norte. Así que tomaremos una ruta más corta, Max y los demás no solo llevaron con si una simple pistola, también armas blancas y rifles, escopetas, dagas, todo eso por uso de protección, al parecer no vamos a una simple gala. Sino a una gran misión donde yo estaré involucrada; asi que también estaré encantada de verlos en acción.

La Jet tardó seis horas en llegar a la ciudad Celeste, nos fuimos en la madrugada llegamos al medio día, todo el trayecto me lo pasé hablando con las chicas y por supuesto recostada en el hombro de Max, llegamos a tiempo y un señor nos recibió en la pista de aterrizaje.

Llegamos a una gran pista llena de otros jet, al frente de nosotros estaba un gran campus de grama artificial, nos recibieron con unas botellas de agua y dos chocolates.  El señor, llamado Temus, fue nuestro guía durante el recorrido a la ciudad. Además, el sol no sólo nos recibió sino que fue nuestro acompañante durante la caminata.

La ciudad es idéntica a la de Cristopholis, con la gran diferencia que es más... Pequeña, los edificios son algo altos y algunas construcciones antiguas tienen un aire muy Aesthetic y también gótico, pero esa fue una zona de la ciudad donde pasamos.

Llegamos a la parte donde habían instalaciones de agua con luces y musicas relajantes, una gran torre parecida a la Eiffel pero está era mucho más alta y tenía la letra “C” la letra que representa la ciudad y el cielo es tan celeste, tan vivo.

Nos detuvimos al frente de una estación de trenes, Jhose nos propuso tomarlo para llegar más rápido a la mansión donde nos vamos a hospedar, el guía, Temus, nos recomendó mejor tomar otro jet, pero Jhose, obviamente por ser el rey de todo esto, su palabra vale más, así que tomaremos un tren.

Nunca me he subido a uno, está será mi primera vez, no debe de darme nervios ni nada más, sin embargo, como dije nunca he estado en uno así que esto será nuevo, al menos este mundo me da una oportunidad de conocer algunos vehículos y naves que jamás había experimentado ni mucho menos sabía de su existencia. Esto es todo nuevo y me gusta.

Pues, como tal nos había recomendado el guía, no era mejor ir en tren este estaba lleno así que solo habían pocos asientos para mí no quedo ni para Jhose, quedamos de pie, antes de que comenzara a avanzar ya los nervios estaban conmigo ¿Por qué? Porque esto es nuevo y no sé nada.

Max se levantó de su puesto, antes de ponerse en marcha el tren.
—Tranquila, ten mi puesto—ordenó caballeroso Max.

Me senté en su puesto, mientras mi corazón saltaba feliz, Max era todo en realidad. Él y Jhose quedaron de pie, no por mucho, los demás al darse cuenta quién era se apartaron de los asientos dejándolos completamente vacíos.

—¡Son los reyes!—exclaman al darse cuenta de quienes son.

—Majestades—Dicen algunos mineras todos hacen una reverencia.

No puedo creer cuanto honor a sus reyes, yo ni siquiera el primer día que los conocí hice una reverencia. Ellos como respuesta le dieron una sonrisa con un asentamiento de cabeza; las chicas con sus cámaras, las personas con sus teléfonos les tomaron fotos, les gritaron de emoción su nombre, y entre todos los gritos escuché varios:«Rey, rey aquí está un puesto»«Oh, rey Max, puede sentarse aquí, es todo suyo»«Son los reyes» «Rey ¿puedo tomarme una foto con usted?»«¡Son los majestades, de pie todos!». Max y jhose se negaron a sentarse, las chicas con una sonrisa encantadora se les acercaron, les tomaron fotos, obviamente ellos nada más con hacer algún gesto parecen modelos, son arte esos chicos.

Emily no se quedó atrás en las fotos, a ella junto con Cristhel también les tomaron fotos, Barth no aguanto así que se sentó a mi lado, lo vi algo inquieto, después me susurró.

—:¿Por qué tantas fotos?—me preguntó en un susurro.

Mire a los chicos hablando con las chicas, a Emily también así que mire a mi hermano para decirle.

—Son los reyes y las reinas, cris... Es una princesa, y además es como si fueran actores, es obvio que las personas se vuelven locas, Barth—explique sin dejar de mirar al frente—Ellos son superhéroes, son guardianes, Max es el rey al igual que Jhose, ellos son reconocidos y conocidos por todo el mundo, son respetados y además el público se vuelve loco es también por su belleza, no es que, en todos los países existe un príncipe o rey  lindo ¿No? Así que por eso también, supongo.

—Vale, vale—acepto con diversión—Es genial. Mira cuantas chicas detrás de ellos, debe ser lo mejor.

«Mmm chicas, ay, no te vayas a poner celosa».

Celosa, que palabra mas estúpida, y que hace que todos cometan una estupidez, no me pondría celosa de eso, además son reyes es obvio que merecen ese afecto de las personas.

Mire que habían distintas chicas, todas parecían sacadas de películas, eran lindas, sus cabellos tenían brillo y eran largo, ellas eran altas, hasta sus labios carnosos eran perfectos. Ellas sonreían con ellos mientras se tomaban las miles de fotos y les coqueteaban eso me dio una cuanta molestia:«Mis amigos se pondrán celosos al verme con esta belleza de rey»«Esta foto ha sido la mejor de toda mi vida».

Respire hondo para alejar un poco la molestia, Max ni siquiera se limitó a mirarme, estaba tan concentrado en ellas que me dio fue la espalda, las ganas que tenía eran muchas de levantarme y espantar a todas esas chifladas, pero me mantuve igual. No me levanté. No tenía que armar show ni nada, ya que, como Max dijo “solo es un juego” y no me puedo poner molesta porque no le puse condiciones sobre las chicas. Tonta que fui.

Cuando pasaron los minutos el tren se detuvo y bajamos, Max bajo luego y las chicas también, algunas se despidieron de mucho beso en el cachete, eso sirvió para que mi enojo colapsara.

«Celos es una palabra y tú eres el significado».

No, no... Mejor shhh Enshandres.

Iba directo a donde estaban las chicas, donde estaba Max con Jhose, pero algo me decía que mejor me quedara, por otro lado que fuera y me diera mi falso lugar.  No quería que esas chicas se quedarán más tiempo con ellos, no lo podría permitir. Lo más seguro es que debo de tener una guerra entre mis espíritus, no sabía pero ya estuve más cerca, solo un metro y llegaba donde estaban ellos.

Una de las chicas se me quedó mirando de pies a cabeza, soltó una risa y me dijo:

—Oye, si vienes a tomarte una foto con este bello rey—reprendió mirando a Max—Ya no están disponibles las fotos, ellos ya se van.

Ay, chica.
Pues ya había llegado más cabreada.

—¿A si? Pues disculpa, no vengo por fotos—mire  a Max, le sonreí y lo tome de la mano—Y es cierto lo que dices, este bello rey no está disponible para ustedes. Mis queridas ¿Nos vamos amorcito? Nos esperan las chicas.

La cara de las chicas fue de tragedia, si, nunca creyeron eso y yo tampoco me creí capaz de decirlo pero hay estaba, defendiendo mi lugar no quiero que nadie este sobre este puesto, solo yo; ellas luego sonrieron, fingieron estar bien y se despidieron de ellos mientras ingresaban a otro tren.

Ya la molestia me iba pasando, mire a jhose que estaba de brazos cruzados con una amplia sonrisa sin mostrar los dientes, por otra parte Max no estaba del todo feliz, se zafó de mi agarre de mano mientras pasaba por frente de mi sin pasar palabra ni mirada pero llevaba su mandíbula tensa, al igual que su cuerpo ¿Le había molestado que yo me diera mi lugar? Eso sería absurdo.

Quizás no debía venir.

O

Quizás si debía venir.

Sin más Jhose iba a hacer lo mismo que él pero se me acercó para decirme:

—Fue muy lindo, ojalá alguien se pusiera celosa por mí pero...—hizo una pausa—A Max no le gustó y bueno, lo que quizás tú no puedes hacer ellas si podían.

Mi mundo se me bajo con eso, las dudas fueron más presentes y me las respondí al entender a qué se refería, antes de irse lo detuve.

—¿Qué exactamente?—pregunte, fingiendo la ingenua, sabía bien a que se estaba refiriendo.

Él lamió sus labios, se acercó a mí oido.

—Cosas diferentes a las que sueles hacer con él, no salir a come helado, no leer, no jugar a la novia falsa—me explicó—Sino jugar a una novia real y la de un rey, pasar noches con él, salir a comer en restaurantes y por si fuera poco, follar en las noches.

De mi parte recibió un fuerte golpe, pero no muy claro. No suelo golpear a mis compañeros, además solo llevamos un par de meses conociéndonos, vaya. Tan rápido pasa el tiempo que pronto, muy pronto sería dos meses asi que eso se debe al tiempo por qué si bien sabemos, delmon fue quien inventó este caos.

Max avanzó hasta cierto punto que se detuvo a donde estaban las chicas, ellas junto con él y Jhose avanzaron, por mi parte los seguí porque no me quedo de otra que hacerlo, mire por encima de cada hombro mientras llevaba mis brazos cruzados a la altura de mi pecho; eso de causarme celos había resultado no muy útil ya que había empeorado la conversación entre él y yo. Y bueno, ¿Ese era mi objetivo? No lo era.

No quería poderlo de mal humor, empero, también me sentí mal  en realidad soy una estúpida... Me estoy jugando el papel de una niña caprichosa, una tonta una hija de...

«Vale, niña, ¿Podías dejar de decir estupideces? No vas a conseguir nada con eso, y si fuera posible no. Este Max no es como piensas, seguro si se molestó y mucho».

Enshandres, yo solo necesito un abrazo.
Mi padre, (Ben Morgan) si, ese mismo, me abrazó cuando sucedió el incidente. Y desde este día yo... Algo en mi cambio tanto que mis recuerdos bloquean mi mente...

«¿Bloqueó tus recuerdos? Entonces tienes que empezar a darle uso a esa vieja memoria para que te proceda la información que buscas... Si delmon dijo claramente que:“Todo está en tu mente” además nunca has echado un vistazo al resto de los libros ¿O si?».

Le tenía claro que no, mi supuesto padrino filadelfio había conocido a mi madre, me había regalado un libro con hechizos y yo ni siquiera me había dado cuenta de las cosas que están sucediendo, si mi madre estuvo aquí ¿Por qué Max ni Jhose la conocen? Ellos llevan la misma cantidad de años que filadelfio y delmon ¿Por qué no me conocen? ¿Acaso Max sabrá quién soy en realidad? Eso no... Claro que no sería posible.

Cuando por fin llegamos, ante nosotros el guía nos mostró una gran estructura, una mansión extremadamente hermosa, dimos unos pasos a la puerta, está era de maera con cristales, entramos y ante nosotros había un inmenso salón,  un extenso salón de fiestas donde el piso de juego ajedrez era tan impecable que nuestra silueta le lograba ver, habían candelabros,  mire a las paredes doradas, los pilones que sostenían el salón era de un hermoso diseño, el techo era de una pintura que mostraba un cielo estrellado con una hermosa luna, obviamente era una hermosa obra de arte.

Caminé mientras mis ojos me llevaron a muchas pinturas, había una de un hombre desnudo con una esbelta figura estética, es un dibujo que parecía mucho a la de la mona Lisa pero ésta es aún mejor, no es que me considere experta pero si de algo estoy segura: ésta es mejor.

Me deje ver más pinturas, niñas, personas, hasta creí ver a Albert Einstein en una de esas pinturas pero era obvio que, aunque ese científico-matemático  loco  hubiese creado cosas jamás habría encontrado una respuesta a este mundo. Es todo extraño y eso ya me está haciendo efecto.

De la planta de arriba colgaban una cortinas que le daban el aire de perfección y de elegancia a la sala, sin decir la inmensa ventana que si fuera de noche la luna se reflejaría allí, sería muy bonito.

—Esto es solo la sala de eventos ahora mismo iremos al resto de los salones—expuso el guía con las cejas levantadas con un gesto que me daba angustia—Y por último sus habitaciones para finalizar el recorrido.

A medida que lo seguíamos nos iba indicando el lugar, esta mansión a pesar del gran tamaño, contaba solo con tres habitaciones y tres baños, lo genial era que esta noche no sería igual al resto de las otras.

Nos indicó cada una, nos mostró todo el lugar como debía de ser su trabajo. El lugar era ese de tipo cuando buscas en Pinterest la mejor mansión del mundo y te aparece la que ni logras imaginar que puede existir bueno, así era ésta. Demasiado hermosa. Para cuando el señor Temus terminó su recorrido se despidió de nosotros deseando toda  la suerte en la Gala de mañana.

Ahora solo había una gran confusión y debía de ser aclarada ya: ¿Tres habitaciones? Y ¿Seis personas?.

Esta  lógico y muy cierto, si bien son tres habitaciones lo seguro y esa es la única respuesta es que cada persona debe dormir en pareja para ganar el número completo en las habitaciones.

Todos en un círculo pequeño, una mesa redonda, unas copas en la mano con vino blanco que Jhose recomendó que a él le gusta porque con ese mataba el despecho y Max lo aprobó estábamos bebiendo. Nadie estaba borracho solo llevamos una copa.

—Bien mis gallardos—alzó la voz Jhose entre todos—Si Bien, yo los amo, ustedes me quieren pero de algo debemos estar claros: seis personas, tres habitaciones lo lógico es que en cada habitación se hospede una pareja ¿No? Así que decidan rápido.

Mire a todos excepto a Max, me daba la curiosidad de saber quién sería su pareja para dormir, sin embargo,  saber que me va a  ignorar por mirarlo, me mantenía un poco el leve orgullo que me queda.

Emily levantó la mano para hablar así que le prestamos atención.

—Bien... Me gusta la propuesta de Jhose—estuvo de acuerdo—Y hagamos esto, chicas con chicas y chicos con chicos ¿Vale?

Jhose no aguanto y soltó una carcajadas captando nuestra atención y miró a Emily.

—Ay, Emily creo que debes mejor pensar antes de hablarlo—le reprendió entre risas, lamió sus labios—¿Chicos con chicos? Explícame eso, 
O mejor hacemos un trio entre ambos ¿Que dices?

Emily cerró los ojos mientras chasqueaba la legua, levantó el dedo del medio para Jhose este le respondió con un gesto también: Hizo un círculo con los dedos pulgares e índice.

Cristhel miro a ellos con hastío, se levantó de la mesa captando la atención de todos incluso la de ellos,  nos miró a cada uno.

—Hagamos lo siguiente—dictaminó acomodándose su cabello a un lado—cada uno una pareja, chico y chica.

—¿Que tal si jugamos a las adivinanzas?—propone Barth, todos le prestan atención con los ojos brillantes, atentos por escuchar, se gira a mirar a los chicos—Adivinen con quién va a dormir Cristhel.

Todos nos miramos esperando a que Barth diga algo, mineras que yo pensaba exactamente con quién queda mejor, si con Max o Jhose.

—¡Con Jhose!—grita Emily emocionada mientras aplaude—Son la pareja ideal para dormir juntos.

Jhose frunció el ceño mientras negaba divertido, en sus labios había una discreta sonrisa. Se acercó a donde estaba Cristhel.

—Mira tú —la señaló—Acepto dormir contigo, sea como se no me importa, y bien digan lo que quieran, te advierto eh, soy un poco pervertido pero no te dañaría tanto. Lo juro.

—bien, vale, contigo no se puede jugar—brome la rubia y me señala—La siguiente pareja será Barth y Montse, Emily quedará con su hermano.

—¿Qué?—Escupe Jhose con una ingenua sonrisa, mientras sus cejas se arquean—¿Te estás escuchando? ¡Así no vale el juego! ¿Adivinen quien dormirá esta noche con Barth? ¡Emily, es la perfecta! Y bueno, ay, lo siento pero no hay más pareja—se pone una mano en el corazón dramáticamente fingiendo estar triste—¿Solo quedan ellos, que podemos hacer? ¡ah, claro, que duerman juntos! Que gran idea la mía, eh.

—¡Arg! ¿Que no tiendes?—bramó la rubia cruzándose de brazos—Ellos no quieren hablar aquí, mucho menos lo van a hacer más tarde.

Observé a Max con disimulo, estaba al tanto de la conversación, sin embargo, sus ojos estaban sumidos en una profundidad, quizás pensando o analizando la situación.

—No te alteres Ricitos—le coqueteó  Jhose calmando la situación—Eso es si ellos quieren, además veo que si tú te callas la situación sería...

No lo creí, pero Max se levantó se puso entre el medio de ellos tranquilizando a ambos, nunca había visto esa expresión de Cristhel pero tampoco tratar así a jhose que era la persona que le gustaba más aún tenía que decir lo siguiente: son como EnemiestoloversEn caso ella es.

—¿Que no se cansan de pelear? Me tienen harto ustedes dos—se limitó a decir Max con mucho hastío—Dormiré con ella—me señala con desdén—¿Feliz chicos? ¿Una fiesta? Me voy a mi habitación y espero que no me molesten en ella. Si me disculpan.

Rodeó a los chicos antes de salir de la cocina con pasos fuertes y apresurados. Me limité a mirar a los chicos estaban mirándose mientras que Jhose tenía una sonrisa grande como si disfrutara la escena. Sin más tome mis cosas para seguirlo por el pasillo, escuché incluso Cristhel reprocharle a Jhose por como se comportaba.

Me apresure a pasar por el pasillo a medida que los pasos de Max se alejaban dejando las conversaciones de los chicos atrás y dirigiéndose a las escaleras arribas para llegar a la segunda planta donde estan las habitaciones, y donde dormiré con la bestia.

Me detuve para ajustar mi maleta, estaba pesada, habían libros que no los iba a dejar ya que con ellos sería más fácil iniciar mi búsqueda por estos lares, si estaremos una semana aquí no voy a dejar de investigar, además, el peso también se debe a la ropa que he traído, no es mucho y si pesa en algo. Falle al tomarla para iniciar la caminata.

La maleta rodó y cayó al suelo provocando un ruido al chocar las ruedas con el piso. Frustrada me agacho para tomar la maleta y seguir mi ruta como si nada. No quiero interrumpir a la bestia que llevo delante de mi, que ahora no desea verme; como las cosas son tan extrañas al levantar la cabeza veo a Max de frente con la mirada en la maleta, está furioso conmigo, empero eso no quita que sea caballeroso. Toma la maleta por mi y se adelanta a paso apresurado.

—Gracias—Digo y no obtengo respuesta.

Llegamos a la segunda planta donde estan las habitaciones, mi mirada cayó en los cuadros y el lujo de esta mansión, hay cuadros de la batalla de Cristopholis, hay más cuadros de la misma niña—victoria, "ella"—donde está acompañada con Jhose.

Doblamos el pasillo y hay otro más con largas paredes blancas, el piso se refleja a medida que caminamos, voy con la cabeza baja mirando mis pies, estoy molesta conmigo misma por hacer tal escena, no quiero causarle molestias al único que me soporta y lo sigo haciendo.

Me detuve a una distancia de Max, él abrió la puerta con una mano, ingreso primero y luego yo hice lo mismo. Ante mis ojos todo era lujo, una habitación de paredes de color rojo, la cama es grande con un hermoso diseño de color oro con almohadas rojas y sábanas color dorado, en el techo hay un candelabro dorado con rubíes cayendo como  lluvia, un diseño en la pared que está pegada a la cama del mismo modelo, unas ramas dotadas salen detras de la cama y le dan un perfecto toque de elegancia, en el piso que sostiene a la cama es color rubí brillante y al bajar de este lo espera otro piso color dorado pulido.

Al lado de la cama hay una ventana grande con cortinas color rojo y almohadas negras, en la parte de afuera de la ventana hay rosas y una amplia vista. Al lado derecho de la cama hay una mesita de noche con una lámpara color oro y en la otra parte reposan libros. Del lado izquierdo donde esta la venta hay otra mesa con un jarrón de flores.
 
Al frente de la cama hay un armario blanco con relucientes gavetas con diseños dorados. Un espejo reposa a un lado de este que permite ver todo el cuerpo completo y otra mesa está llena de cremas y cepillos.

Hay un mueble de bordes dorados con cojines rubíes, todo encanta perfecto con la combinación de la habitación, y sin contar los pequeños cuadros.

Me acerqué a la fila de libros que posaban en la mesita sintiendo la mirada de Max en mi espalda, no me gire para verlo ni mucho menos encararlo, él no me quiere en estos momentos así que lo mejor es darle espacio.

Después de ducharme baje las escaleras a cenar con los chicos, Max se quedó en su habitación no quiso bajar a cenar. Reí con los chicos debido a los diferentes chistes que decían para animar la noche. Pasaron las horas fueron pasando a medida que ya tenía mis párpados cansados.
Me despedí de los chicos cuando miré la hora en mi celular—que no se había descontrolado—eran las nueve y media.

Me senté sobre el mueble de mi habitación, Max no estaba por ninguna parte de la alcoba y es que se encontraba cenando, no quiere ver mi presencia por los momentos. Tome uno de los libros que me gane en el juego que nos hizo dark magic, este libro tenía de título: DARKEST MAGIC.

Cuando abrí sentí que algo despertó en mi, habían palabras escritas en él, una de ellas me dejó la intriga.

“Dark Magic, fuerzas del mal, asi es como empezó todo”.

DESDE QUE LAS PERSONAS TIENEN MEMORIA RECUERDAN A UNA CHICA QUE SOLO AMAN Y QUIEN NO SABEN SU HISTORIA ES PORQUE NO ES DE ESTE MUNDO.

ELLA ANTES DE SER "ELLA" NO LA CONOCÍA Y SE PONÍA FURIOSA AL SABER QUE TODOS LA PREFERÍAN A ESA OTRA QUE A ELLA.

LAS RESPUESTAS ESTAN CLARAS EN LA HISTORIA, LA REINA CELESTINA NACIÓ PARA SER ADMIRADA Y ADORADA, MIENTRAS QUE SU HERMANA MORGANA LA ODIABA, LA ENVIDIABA ENTONCES ELLA SE ALEJO Y PROVOCÓ EL CAOS.

LUEGO NACIÓ OTRA PERSONA, UNA NIÑA, Y FUE LA MÁS ADMIRADA DE TODAS, FUE LA MEJOR AMIGA DE LA REINA Y HABIA ALGUIEN QUE TAMBIEN LA ENVIDIABA, ESTA PERSONA SE LLAMABA LUCY E HIZO QUE TODO DESAPARECIERA PERO SIEMPRE GANA LA PERSONA BUENA.

LUEGO EXISTIÓ UN CHICO QUE SE GANÓ EL RESPETO DE LA REINA CELESTINA, Y ESE MISMO CHICO PROVOCÓ UN GRAN Y TERRIBLE ACCIDENTE, ÉL LLEVA LA MISMA MALDICION QUE SU PADRE, AL INTENTAR AYUDAR A UNA PERSONA SOLO HIZO QUE OTRA PERSONA SE TRANSFORMARA EN UN MONSTRUO.

DESPUES DE ESO, ESE CHICO AL NO CONSIDERADO UN VERDADERO HUMANO HIZO QUE UN PUEBLO DE MONSTRUO SE ENFRENTARA A ÉL PARA LUEGO GANARSE DE NUEVO A SU REY.

ESTE CHICO NO ES LO QUE CUALQUIER PERSONA CREE, ES ALTA MUY, CUYOS RASGOS SON HERMOSOS PERO SU VERDAD SECRETA Y OSCURA NO LO DEJA SER QUIEN ES.

SEÑALES QUE DEJÓ DARK MAGIC PARA IDENTIFICAR A SUS PRESAS PARA TENERLAS CÓMO ACOMPAÑANTES: LOS TITANES HUMANOS, LOS CIENTÍFICOS, LOS NERD, Y POR SI FUERA POCO SUS SEÑALES: EL MIEDO Y NERVIO, LA LÓGICA Y OBVIEDAD, LA SOLEDAD Y LAS MALAS GANAS HACIA EL REY, LO SABELOTODO EN NERD Y... SU AMISTAD.

Cerré el libro marcando la página que iba a leer luego, tenía ya más pistas de quien podría ser el infiltrado, si es así, la persona la conozco, no está aquí. Esta en el otro grupo y se quien puede ser exactamente, pero tenía que comprobar que todas las señales las tenía él en su aspecto así que cuando llegue de esta misión investigaré más a fondo sobre los chicos ya tenía como empezar.

La puerta se abrió de tal manera que me asusté, tengo que dejar de ser tan miedosa, algún día yo misma me mataré con mis nervios. La puerta se cerró al momento que Max entró con esa cara de pocos amigos,  se queda mirando el televisor con las intenciones de encenderlo, toma de una mesita de noche el control  y enciende la tele, también el acondicionador provocando un aire frío por toda la alcoba.

me levanté tomando los libros y dejándolos en la mesa, ya había terminado de leer y no le iba a decir a Max que libro se trataba bueno, siquiera se interesaba en saber, seguía molesto conmigo es lo más obvio.

Ya me había dado una ducha antes así que solo debía acostarme y descansar, me acosté en la cama mientras que Max se quitaba su camisa y me daba la espalda, esa ancha espalda, sus músculos tan masculinos y ejercitados estaban en perfecto estado incluso se veían tan duros, juro que pienso hasta que hora jugará con las pesas.

Se tomó su tiempo para sentarme en la orilla de la cama mientras mirada su camisa, yo ya me había tapado incluso estaba algo... ¿Molesta? Si, algo molesta pero conmigo misma por tratarlo de esa manera, lo hice mal. Me siento incluso mal, es cierto yo no puedo darle lo que otras si pueden y no soy todo lo que él espera.

—Montse...—mi corazón comenzó a latir más rápido al escuchar su voz ronca,  me gire para verlo aún me daba la espalda—¿Por qué dejaste de leer?

¿Qué? La pregunta fue algo tonta pero de inmediato me incorpore en la cama, también me di cuenta que él estaba doblando su camisa, por eso me daba la espalda.

—Pues porque...—intente explicarle que solo era por el simple hecho que había terminado pero él dijo:

—Si encendí la tele y te molesto, vale puedes apagarla no me molestare en lo absoluto.

—No, no es eso.

Él termina de doblar su camisa y se levanta de la cama con elegancia, en su pantalón se puede ver la orilla de su boxer, y por si fuera poco me inquieta saber que tiene un trasero tan... Hermoso, él deja la camisa en un mueble, tomó el control y apagó la televisión dejándome con el sonido de la noticia en la mente.

se acercó al interruptor, apagó las luces mientras su silueta se veía por la tenue luz que se adentraba de la ventana, se reflejaba en su rostro delicado. Llegó a la cama y se acostó de lado dándome la cara está vez.

—¿Segura?—inquirió no muy convencido de lo que le había dicho, sus ojos estaban puestos en mí.

—Si.

Suspiró dejando caer su pecho lentamente, sin dejar de mirarme incluso su mirada perspicaz me transmite paz, él me trasmite paz.
Se acomoda en la cama y frunce el ceño al verme sin pijama.

—La olvide—revelo dejando al descubierto mi blusa y un jeans negro que llevaba puesto. Él asintió.

El silencio se presentó otra vez y no era incomodo, Max no me dejaba de mirar y yo tampoco, ignoramos lo que había a nuestro lado, si había algo de Max y algo que hasta a mí me gustaba eran sus ojos y su brillo estaba en su lugar, pero no podía enamorarme de él y algo me decía que ya me gustaba estar a su lado.

Nos miramos tanto que luego miré  sus labios una vez, con su mano acarició mis mejillas, esa fría mano me encanta demasiado.

—Max—lo llame, él de inmediato asintió—Perdón.

«No que los vampiros no piden perdón ¿Eh? Veo que no quieres ir al infierno».

—¿Por qué me pides perdón?—inquirió—¿Es por lo que pasó temprano? No tienes que disculparte.

Respire profundo para decir todo.
—Es que yo sé que no estás feliz por eso, sé que hice el mal siempre lo hago, y a ti no te gusta que ande arruinando las cosas porque es lo único que suelo hacer—Expuse sintiéndome mal y quitándome un peso de mis hombros—siempre ando de intrusa arruinando tus citas con otras personas, además sé que yo no puedo... Digo, ellas están dispuestas a hacer lo que tú quieras mineras que yo no... Lo siento, me molestó mucho.

Abrace mi cuerpo con mis manos, sintiendo como mis mejillas arden de la vergüenza ¿Por qué dije todo eso?

—¿Qué? Espera...¿Por qué dices que no eres nadie y que siempre la estas...? ¡ahs, maldito ruido!—max le gritó a los chicos que estaban jugando algún vídeo juego, luego de callar a los chicos me volvió a mirar—¿Por qué dices eso? Yo jamás... Digo, ¿Quién te dijo eso? Tú no eres así tú eres...

—No Max, soy alguien que...—le interrumpí, trague saliva evitando el nudo—Ni quiera merece esto, merece oportunidad yo... Soy un... Alguien que no debe estar en esta hermosa cama en una lujosa mansión y todo es que yo... Soy un monstruo que todos algún día odiarán.

Max se quedó un minuto mirándome, yo seguramente tenía mis ojos cristalizados y es que tenía la intención de dejar salir una lágrima pero no pude. Se escucharon nuestras respiraciones.

—Montse mírame—me ordena y le hago caso—Desde que te conozco nunca has sido un monstruo con nadie, nunca confundas la apariencia con el corazón son muy distintos, todos vemos en ti una persona distinta, yo veo a una linda niña con hermosos sentimientos ¿Crees que me importa si eres un monstruo o no? A nadie le debe importar eso, tú eres como eres y eso no te cambia. El aspecto no discrimina la clase de persona.  Además he de admitir que eres fuerte.

Me di la vuelta expulsando el aire de mis fosas nasales, Max tenía razón en eso sin embargo no soy fuerte. Tengo mis debilidades como todo humano.
Quería reprimir el llanto y no quería tampoco.

El sueño me dominó por completo que me quedé dormida. A la madrugada me lleve la sorpresa que desperté sobre el brazo de Max, aferrada a su pecho mientras él estaba dormido y tenía una pierna encima de la mía. Sonreí sabiendo que hizo eso para no dejarme ir y en la posición que está seguramente se durmió mirándome, me aferre más a su brazo mientras deposité un beso en su pecho desnudo. En realidad mire sus labios que estaban entreabiertos, tan hermoso pero debía respetarlos.

Esto no queda así, lucharé hasta conseguir a Max, me gusta esta comprobado. Ya me gusta demasiado y no quiero dejarlo ir fácil.

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GRACIAS POR LEER, TE AMO CON MI ALMA OSCURA Y FRIA PERO TE AMO ❤️🍷.

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