La poca luz proveniente de la ventana hizo que despertará. Esta no era mi habitación lo supe cuando vi que no era mi cama en la que estaba echada y en la que había dormido.

Alarmada me levanté, estaba desnuda, y los recuerdos de la noche pasada vinieron a mi cabeza, como si fuese un balde agua que me hubieran tirado.

- Despertaste - voltee a donde habían hablado.

Había amanecido en la habitación de Jimin, este me miro de pies a cabeza para luego morderse el labio, confundida me mire, estaba aún desnuda, rápidamente agarré la sábana que estaba en la cama para cubrirme.

- ¿Que hora es? - lo fue lo que pregunté rápidamente.

Él ya estaba vestido, traía unos pantalones jeans azules que moldeaban sus piernas, junto a una polera negra, metió una de sus manos a su bolsillo sacando su celular para fijarse la hora.

- Seis de la mañana - respondió - aún es temprano - camino hacia a mi agarrando mi cintura, sabía sus intenciones.

Lo detuve poniendo mis manos en su pecho, para luego esquivarlo.

- Debo ir a mi casa, mi mamá me va a matar si se da cuenta que no dormí en casa.

Busqué mi ropa, encontrándola tirada en el suelo, me arrodille agarrando todo, sintiendo dolor en mi entrepierna, haciendo que arruge mis cejas por aquella sensación dolorosa. Me paré lentamente fingiendo que estaba bien. Caminé hacia una puerta la cuál suponía que era su baño.

Abrí la puerta de mi casa, suspire al darme cuenta que mamá no estaba en casa, fui hacia la cocina encontrandome con una nota suya.

Heesook no dormiré hoy en casa, me quedaré con Jorge.

Había tenido mucha suerte, subí a mi habitación para luego tirarme a mi cama, mientras miraba el techó y procesaba todo lo sucedido ayer.

Había perdido mi virginidad con Jimin.

La cuál siempre decía que la perdería cuando ya este casada, había pecado, el dolor en mi entrepierna y en todo mi cuerpo no se había ido aún. Me tapé con la sábana, dormiría un rato, luego iría al colegio, no podía faltar una vez más, si no estaría muerta, si mamá se entera.

Terminé de tomar mi desayuno, deje lo que ensucie al lavadero, para agarrar mi mochila y salir de casa directo a la escuela.

Loa brazos de mi mejor amigo me tenían apresionada a su cálido cuerpo, amaba sus abrazos, eran los mejores. Besó mi frente para luego soltarme.

- Te has desaparecido últimamente Hee, ya no pasamos tanto tiempo juntos - hizo un leve puchero - ayer te llamé para salir con Jin pero no me contestaste.

- Lo siento Nam, me quede casi toda la tarde limpiando, luego me quede dormida - reí, pero que estúpida mentira dices Heesook.

Namjoon solo asintió.

- No te preocupes pequeña, ven y entremos a clases - agarró mi mano y empezamos a entrar.

Todo había trascurrido normal, el timbre sono, rápidamente guarde mi cosas en mi mochila para poder salir. Pero la mirada de Jungkook hacia que me sienta incómoda.

- Hablemos por favor, no seas así Heesook.

No le hice caso, me apresuré en guardar mis libros que eran los únicos que quedaban en mi mesa. Él parecía sincero, pero realmente se me dificultaba creerle después de todo lo que me hizo. Agarró mi muñeca deteniendome, pero rápidamente hice que me suelte.

- Ya lo deje claro la última vez Jungkook, lo siento debo irme, me están esperando - lo mire para luego ponerme la mochila y salir del aula.

En las bancas frente a la puerta me estaban esperando Nam y Jin, ambos estaban sentados hablando, al notar mi presencia rápidamente se pararon.

- Hee - el más mayor se lanzó a abrazarme como si no me hubiera visto desde meses - has estado muy desaparecida.

Luego de unos largos minutos ambos nos separamos para sonreirnos.

- ¿Y a tu mejor amigo no le darás un abrazó? - Namjoon alzó una de sus cejas.

- Tonto... - me acerqué a él y lo abracé también.

Los tres nos sentamos en la banca un rato, mientras hablábamos de lo que habíamos hecho durante esta semana, les conté todo lo sucedido en estos días, claro menos lo de que pasó con Jimin, no le podía decir que había perdido mi virginidad con mi vecino que solo quiere sexo conmigo, porque estaba segura que Nam iría a golpearlo sin piedad.

- ¡Heesook! - escuche que llamaron mi nombre, voltee rápidamente encontrando a Yoongi en la puerta del colegio.

Él se veía muy apuesto, traía un polo negro largo, unos pantalones negros, y una casaca larga como de soldado, junto a esa bonita sonrisa que él tenía, resumen: el estaba perfecto.

- Hee, ¿quién es ese blanquiñoso? - susurró Jin con una sonrisa de oreja a oreja - ¿tu novio acaso?.

- Claro que no lo es, Heesook esta aún chiquita para que tenga un novio, y si algún dia lo tiene, ella debe presentarmelo, tengo que pasarlo yo primero - hablo Namjoon.

Solo sonreí por aquel comentario de mi mejor amigo, vi que Yoongi comenzó a caminar hacia nosotros con las manos en las bolsillos de su casaca.

- ¿Nos dirás quien es? - preguntó Jin.

- Es un amigo - susurre parándome para abrazar a Yoongi el cual ya estaba frente a nosotros.

Correspondió a mi abrazo, realmente lo había extrañado mucho, lentamente nos fuimos separando, no tenia idea como supo donde estudiaba, luego le preguntaría.

- Hola - Yoongi saludó con una sonrisa.

- Yoongi, el es Namjoon y Jin - sonreí presentandolos.

- Es un gusto conocerte Yoongi - sonrío Jin - ¿no es cierto Nam? - el pelirosa codeo disimuladamente al castaño.

- Sí, es un gusto - finalmente sonrío Namjoon.

- Quería recogerte y llevarte a tu casa.

Mire de reojo a Jin el cuál me dio señas que aceptara.

- Sí - sonreí.

- Uhmm...¿bueno te dejamos en buenas manos cierto? - yoongi asintió - Nam y yo nos iremos, nos vemos mañana Hee - me guiño el ojo para jalar a Nam que fulminaba a Yoongi con sus ojos.

Me ayudó con la mochila, para empezar a caminar hacia su carro, me abrió la puerta de copiloto, para el luego subirse y arrancar. En todo el camino nos la pasamos hablando y riendo hasta llegar a mi casa, estacionandose enfrente de ella.

- ¿Quieres salir mañana por la noche? es el cumpleaños de Félix, lo celebrará en la casa de Suran - volteo mirándome a los ojos.

- Si, no tengo nada que hacer mañana - respondí.

Poco a poco nos estábamos acercando, nuestros labios estaban muy cerca, pero en ese momento mi celular empezó a vibrar, haciendo que me separe rápidamente.

- Lo siento - susurre.

- Tranquila no pasa nada - sonrío.

Saqué mi celular de mi mochila, era un mensaje...

Jimin.

Soy muy bonito, ¿cierto?.

Pero que manera de molestar, le deje en visto, para guardar mi celular en la mochila molesta. ¿Quien se cree él?.

- ¿Tú mamá? - preguntó Yoongi algo preocupado.

- No, no era solo una amiga - sonreí.

Y en un abrir y cerrar de ojos nos estábamos besando como de costumbre, sentía esos labios delgados sobre los míos basándome, lentamente nos fuimos separando.

- Te mandaré la hora por mensaje, nos vemos mañana Heesook, te recogere. - sonrío para luego besar mi mejilla.

Bajé de su carro, me miro por última vez y arrancó, Yoongi era muy lindo conmigo, demasiado. Subí mi mirada viendo frente mio a Jimin con una sonrisa.

- Que linda escena romántica vi, muy tiernos son ustedes dos - hizo un pequeño puchero - ahora vamos, que tengo muchas ganas de sacarte ese uniforme y cogerte.

Estúpido.

¡♡!

Espero les guste, si tuve algún error mil disculpas, luego lo corregire. Les recuerdo que el link de la playlist que me inspiró a hacer este fanfic lo encuentran en mi perfil, también el link del grupo de Whatsapp.

Yoonginistas su varón últimamente me esta echando ojito, help 😫.

Es que miren lo bonito que es;