Parte del equipo

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

YoonGi miraba a TaeHyung fijamente sin poder elaborar una frase en su mente.

Nunca en su vida se había sentido así. Le habían robado besos antes, pero jamás se había quedado pasmado como ahora. Tae, igual de asustado que él, salió corriendo del gimnasio. YoonGi caminó lento para no alcanzar a Tae. Tenía que decir algo y no podía hacerlo.

Su decisión fue fingir que no sucedía nada ante los demás y solo llevarle el agua a JungKook.

Cuando terminó la hora de detención, JungKook estaba un poco mejor. Arrastraba la voz pero caminaba decentemente. Tuvo que cargarle la mochila, el otro muy apenas podía consigo mismo, además iba bastante mareado.

— Tira — ordenó YoonGi a su hermanastro al verlo quedarse quieto para ver la practica del equipo de baseball.

— ¿Por qué pelearon? — Preguntó el otro, su voz era graciosa.

— Porque quisieron golpear a YugYeom y Tae.

— ¿Y por qué te metiste? ¿No prometiste que ya no pelearías?

JungKook se abalanzó a la malla y YoonGi corrió a detenerlo, pensando que se caería.

— ¡Eh, ustedes! — Gritó JungKook, pero no parecían oírlo. — ¡Si vuelven a pegarle a mi hermano se las verán conmigo!

— Joder — dijo YoonGi, ligeramente enternecido.

Lo tomó de los hombros y lo obligó a caminar. Su hermano sólo hacía ruiditos de vez en cuando para aclarse la garganta. El camino fue mucho más largo con Kook distrayéndose con cada cosa a su paso.

— YoonGi — dijo en una de sus distracciones al ver un gato — . ¿No podemos llevarlo a casa?

— Pero vamos a ver — contestó el mayor — , no sabes nada de animales, se te va a morir.
— ¿Sa... sabes que... — tartamudeó — , en los animes todos tienen un gato? — Se giró para ver a su hermano. — No seas cruel, llevémoslo.

— Vale — dijo YoonGi — , sólo si puedes cargarlo, tienes una oportunidad.

YoonGi sabía que los gatos eran animales que fácilmente atacaban y huían así que dejó que su hermano se metiera en ese problema.

Sorpresivamente el gato se acercó a JungKook con alegría.

— Tienes que estar puto bromeando.

— YoonGi— dijo JungKook con suavidad al mismo tiempo que le entregaba el gato a su hermano — ¿a ti te gusta alguien?

YoonGi se sorprendió por la pregunta pero sabía que no tenía malas intenciones.

— ¿Por qué la pregunta?

— Creo que a mí me gusta alguien — Oh no — . Mika...

— ¿Y quién coño es Mika?

No recordaba haber visto a JungKook hablando con ninguna chica en especial.

— No, la gata... se va a llamar Mika.

— Joder... ¿entonces quién te gusta?

Kook no respondió porque se había vuelto a distraer, miraba hacia atrás.

YoonGi le sujetó la muñeca pero JungKook no se movió, cuando alzó la vista vio a tres tipos con máscaras correr hacia ellos. Quiso pensar que no iban a por ellos.

— ¡Están muertos, hijos de puta! — Mierda.

YoonGi hizo su agarre a JungKook más fuerte y comenzó a correr, el otro apenas podía mantener el paso. Era inútil escapar, YoonGi no iba a poder correr así por siempre, las dos mochilas le hacían un buen peso y el puto gato se le iba a caer en cualquier momento. Tiró a JungKook al suelo, cuidando que no se golpeara muy fuerte y le dio el gato.

Uno de los tres tipos que venían detrás, tiro de una de las mochilas y los otros dos se acercaron peligrosamente a JungKook.

No iba a dejar que lo tocaran de nuevo.

A como pudo se quitó al primero y alejó a patadas a los otros dos. JungKook, mareado, intentó recuperar las mochilas y levantarse. Los otros arrojaban golpes a YoonGi.

No podía dejar que esos malditos volvieran a tocar a su hermano. Su corazón estaba acelerado, iba a perder y lo sabía, apenas podía sacárselos de encima.

— ¡Corre! — Le gritó a JungKook, quien tomó a Mika y comenzó a correr.

— ¡No! — Gritó uno de los tres tipos. — ¡No dejes que se escape!

Uno corrió detrás del menor. Otro golpeó tan duro a YoonGi que lo tiró al suelo. Se dio vuelta para intentar defenderse de quien lo tenía abajo.

Entonces una persona jaló al que YoonGi tenía encima. ¡¿Baek?! Y no venía solo, Sehun y Jin venían con él. Sehun fue detrás de JungKook y alcanzó al otro tipo fácilmente, no por nada era el jugador estrella del equipo. La velocidad que lograba tomar para correr entre bases lo distinguían entre todos.

YoonGi no preguntó, solo aprovechó la ayuda y se defendió como pudo.

Los tres tipos quedaron en el suelo.

YoonGi tomó a uno de la ropa y le quitó la máscara, le tomó una foto e hizo lo mismo con los otros dos. Tomó las cosas del suelo y se dirigió a ver a JungKook. No estaba a herido, gracias a Dios.

— ¿Quiénes son esos tipos? — Preguntó Sehun.

— Unos hijos de puta que quieren matarnos.

— Ah, ¿y ya está? — Dijo Baek sarcástico. — Normal, el pan de cada día.

YoonGi se alejó para poder hacer una llamada. Jin le tocó el hombro a Baek.

— ¿Estos no son los que se pelearon contigo el otro día? — Le susurró.

Baekhyun asintió.

— ¿Entonces por qué los ayudas?

— Porque llevan nuestro uniforme — respondió Sehun.

— Nos llevemos bien o mal, somos de la misma escuela — dijo también Baek — es estupido pero...

— Pero es un juramento que tendrás que hacer también, Jin — completó Sehun — . Mientras lleven el uniforme, son nuestros hermanos. De eso se trata ser parte del equipo.

YoonGi regresó justo en el momento en que JungKook vomitó.

— Joder — dijo cansado.

Jin tomó a Mika y la acarició. YoonGi y BaekHyun se miraron con caras serias, se escuchó una patrulla llegar y luego otra.

Bajaron oficiales y detuvieron a los tres tipos.

— Gracias por la ayuda — dijo YoonGi sinceramente — , nos habrían matado a golpes de no ser porque estaban aquí.

Una nueva patrulla llegó y de ella bajó un hombre trajeado, miró con decepción a JungKook y seriamente a YoonGi.

Era su padre. El jefe de policía.

En el cuarto de Tae, Jimin escuchaba la historia del beso de su amigo y el Dios. TaeHyung se encontraba acostado en su cama mirando al techo y Jimin lo veía sentado en la silla de su escritorio.

— Y ahora no sé qué hacer, hombre — dijo Tae terminando su historia — , ¿crees que deba contarle a YeonJun?

— Pues depende.

— ¿De qué?

— De si te gustó el beso o no.

Tae se sentó en la cama con una expresión de absoluta confusión.

— ¿Cómo me va a gustar si duró medio segundo?

— El beso duró medio segundo pero di la verdad, Tae, ¿Cuánto tiempo llevabas queriendo besarlo?

TaeHyung no respondió. Se talló los ojos y volvió a acostarse.

— ¿Y qué pasa si me ha gustado?

— Pues, terminas a YeonJun y te quedas con el otro.

En realidad era una solución factible. Pero no podría hacerle eso a YeonJun, no podía traicionarlo de esa forma.

— Tengo que contárselo — dijo finalmente.

Sacó su celular e intentó llamar a YeonJun.

— ¿Lo harás ahora mismo? Vaya par de cojones...

— Shh, shh.

— ¿Tae? — Escuchó al otro lado de la línea.

— Yeon, necesito que hablemos.

— Tae, ¿puede ser en otro momento? Ahora mismo estoy algo ocupado.

Miró a Jimin. Tragó saliva.

— Claro, Yeon — respondió TaeHyung — . Mañana durante el almuerzo.

— Me parece perfecto, cariño.

Colgó la llamada y sonrió, miró a su amigo delante de él: SooBin. Estaba sin camiseta en su cama, mirándolo nervioso.

— ¿Seguro que tus padres no estarán en casa? — Le pregunto SooBin a
YeonJun.

YeonJun se puso encima de él, provocativo.

— Completamente seguro.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro