Antes de empezar: Toda la historia estará totalmente fuera del canon de la serie. Por ejemplo, acá Shiro no es un clon, y quizás los personajes no suenen igual que en la serie. 

Sin mas que decir, disfruten nwn

Pov. Normal.

Ya hacia unos meses que Keith Kogane se había ido del Garrison, y a su vez, hacia un año que la tripulación de Shirogane Takashi había "muerto" en una misión por descuido del piloto, algo que algunos seguían sin creer. Entre esos que no podían creer lo que decía el Garrison, eran Katie Holt, hermana e hija de dos de los tres miembros de la tripulación, y Keith Kogane, el "hermano menor" del piloto Shirogane; cada uno se fue a buscar respuestas sobre lo ocurrido. Katie, con ayuda de dos chicos que conoció, entro con el nombre de Pidge Gunderson al Garrison, ya que no la dejarían acercarse al ser familiar de los desaparecidos, esos dos chicos eran Hunk y Lance, quienes al ver como sacaban a la chica del lugar casi a arrastras mientras ella gritaba, decidieron ayudarla; Por su parte, Keith se dirigió a una misteriosa cabaña que "lo llamaba" según él, y empezó a hacer una loca investigación sin fundamento alguno. Todo se junto un día, que Katie encontró unas extrañas señales, las cuales empezó a seguir a un raro lugar junto con quienes ya podía considerar "sus amigos", y a su vez, Keith también estaba cerca, se encontraron y aunque Lance y él no se llevaran bien, siguieron su camino; cual fue su sorpresa al encontrarse con un Shirogane inconsciente. Al deshacerse de los guardias, Lance se proponía a ayudar a Keith a cargar al hombre para sacarlo de allí, no estaba muy seguro de tocarlo, pero aun así lo ayudo. Huyeron a una chosa abandonada en donde al parecer Keith vivía, lo que siguió al día siguiente cuando Shiro despertó fue encontrar a esa leona robotica de color azul; la cual los llevo a todos a otro lado del universo a lo que seria una guerra y aventura espacial.

Todo estaría bien, pero lo que a Lance le estrezaba era que en algún momento tocara a alguien, estaban en medio de una guerra, por lo que todos podrían tener unos sentimientos horribles...aunque...con eso de que podía "intercambiar" sentimientos, por así decir, le daban ganas de quizás ayudar a la pobre Allura que parecía estrezada por lo que paso con sus padres y su situación actual, y también a Pidge, la veía aveces despierta hasta tarde buscando alguna ubicación o señal de su padre y hermano, también estaba Shiro quien se notaba que no dormía mucho, seguro por malos recuerdos por lo que habrá pasado cuando estaba con los Galra. Pero Lance no se atrevía, no podía acercarse a sus amigos y quitarles todos esos malestares, se sentía egoísta.

Pov. Lance.

Ya han pasado unos meses, nunca pensé que el tiempo pasaría tan lento para mi, pero poco a poco me acostumbro, levantarme, comer con todos, entrenar y aveces discutir con el greñas. Aveces también habían ataques de naves de los Galra y teníamos que pelear. Por suerte, hoy había empezado como un día normal, todos estábamos entrenando en equipo, y sorprendentemente íbamos muy bien. Esquivábamos, atacábamos y nos protegíamos, Coran nos dijo que tenia que ser sin nuestras armaduras, para poder pelear en caso de emergencia. Todo iba bien, hasta que en un descuido, Keith salio herido, y pum, todo se apago.

-Allura, ¿que pasa?-Shiro se comunico con la chica por el comunicador.

-Hemos parado en una luna. Estamos...teniendo unos problemas chicos.-se escuchaba a la princesa preocupada.

-Allura, Keith esta herido, necesita ir a la enfermería.-dijo Pidge al ver que las puertas no se abrian.

-Quiznark, no hay suficiente energía para abrir las puertas. Aguanten paladines, ya lo arreglaremos.

Yo también me acerque a Keith, Shiro estaba a su lado, tenia una herida profunda en su brazo izquierdo, no dejaba de sangrar obviamente.

-Maldita sea, justo ahora.-maldecía el greñas, también decía unas cosas en ¿coreano? creo.

-Manten el brazo arriba Keith.

-Ya lo se Shiro, ya lo se.

Allura tardaría mucho, y con tanta perdida de sangre quizás lo tengan que poner en una de esas capsulas donde a mi me pusieron, y quien sabe si habría energía para eso. 

-Necesitamos vendar la herida, así no habría problemas luego.-dijo Hunk, pero no había nada para vendar a Keith.

Pidge empezó a ver como abrir las puertas, Hunk estaba intentando pensar en cómo vendar la herida de Keith, Keith por su parte...parecía algo mareado, Shiro se notaba preocupado. De inmediato me vino una idea, y por dios, como odio que Keith sea tan imprudente y por eso este así ahora.

Me acerqué a él, me quite los guantes que nunca me quitaba por mi bien y los rompí.

-Déjame ver Mullet.-él solo se me quedo mirando un rato, todos saben que tengo "Misofobia" o eso creen. Aun así extendió su brazo a mi. Intente improvisar un vendaje, osea, si se como vendar y tratar heridas, pero ahora es diferente. Todo iba bien, no tocaba a Keith, pero por accidente lo toque y eso bastó para que viera todo. Estúpido emo gruñudo con una vida de mierda. Rápido me aleje de él.-no, no puedo. Hunk, tu ayudalo.-sólo me aleje.

-Lance, ¿estas__-Pidge me iba a tomar pero yo me aleje, no la iba a alejar de un manotazo, eso jamás, es mi amiga.

-Estoy bien, estoy bien. Solo...no me toquen, por favor.-me aleje del grupo.

Maldito, estúpido e imprudente greñas, su vida es jodidamente triste. Me hace querer llorar, y justo cuando lo roque sentí su culpa y preocupación por está situación. Coño de la madre, me siento triste y quiero llorar. Como no ser un jodido emo greñudo, gruñón, malhumorado, y depresivo cuando se tiene una vida tan horrible. Su madre no sabe nada de ella, su padre murió cuando el era niño y estuvo en un orfanato un largo tiempo hasta que entro al garrison, donde creo que si cambio las cosas porque ya no vi nada negativo allí, al menos hasta la desaparición de Shiro, asi, y ahora cuando le dije eso de que no recordaba el "momento de vínculo", es la verdad, no recuerdo haberle dicho algo cuando le dispare a...no recuerdo su nombre pero era uno de los soldados Galra, ¿fue tanto para él como para sentirse tan mal y vacío? Joder...ahora quiero disculparme.

Paso un buen rato, yo solo estaba recargado en una pared alejado de los chicos, Hunk se acercó a mi, no me toco ni lo intento, solo se quedó conmigo. Es un buen amigo, aun así no me atrevo a decirle lo que puedo hacer...aunque dudo que no me crea, después de todo estamos en un castillo/nave espacial con dos alienigenas en medio de una guerra contra lo que parecen gatos morados espaciales. Cualquiera pensaría que estamos drogados de solo escuchar todo esto.

Pero no les puedo contar, no me atrevo.

Después de ese gran rato, las puertas volvieron a abrirse y los dos alteanos entraron corriendo.

-¿Cómo está Keith?-dijo Allura notablemente preocupada y culpable por lo que paso.

Lo normal hubiera sido que yo dijera algo para acabar con la tensión del momento, pero solo me levante y salí de la sala de entrenamiento, dirigiéndome rápido a mi habitación. Quería llorar, y lo haría en mi habitación.

Pov. Normal.

Cuando Lance se fue rápido, Allura y Coran estaban confundidos y preocupados.

-¿Le paso algo a Lance?-pregunto la albina al no recibir palabra alguna del terrícola.

-Es solo...que es misofobico y creo que le dio un pequeño ataque.-contestó la italiana, recibiendo sólo una mirada más confusa de los alteanos.

-¿y eso...es una clase de enfermedad humana?-Coran trataba de entender mientras atendía la herida de Keith con quien sabe que cosas alienigenas, el punto era que la herida ya no fuera problema.

-Pues, más o menos. Es más bien, miedo a los germenes, bacterias y todo eso.-explicó Shiro de la manera mas fácil posible.

-Listo Keith.-término de curar la herida de Keith, ahora solo quedaba una cicatriz, no pregunten como.-¿Y esa enfermedad, es mala? Sería malo si esta enfermo en medio de una guerra.-Coran, al igual que Allura, parecía preocupado y algo confundido.

-No, no es malo. Es solo...miedo, en especial si toca algo. Por eso tiene esos guantes siempre, pero ahora...quien sabe lo que hará.-Hunk estaba preocupado por la idea de que su amigo no quisiera salir de su habitación.

-Oh, así que por eso usa esas cosas en su mano.-Allura parecía que ya entendía un poco.-entonces...¿podríamos hacer algo? Parecía...muy nervioso y asustado.

-...no creo. Lo mejor seria dejarlo, y si esta muy estrezado, pues tendremos que pensar en algo.-Shiro como siempre era quien mantenía la calma.

El único que no hablaba era Keith, él se sentía...un poco culpable. Por un descuido suyo hecho a perder el perfecto trabajo en equipo que estaban haciendo, y luego hizo que Lance, su supuesto rival, rompiera lo único que parecía darle valor de tocar cosas "sucias" por así decir. Él tampoco entendía muy bien la misofobia, pero no importaba, ahora se sentía realmente culpable por su compañero, rival...y chico idiota que le gusta de hace tiempo...

-¿Y...porque nuestro paladín azul tiene esa enfermedad?-Coran parecía tener curiosidad.

-Es diferente en cada quien. Casi siempre es por traumas infantiles.-la menor se acomodo sus anteojos.-Leí hace mucho tiempo en un artículo, que algunos misofobicos padecían eso por abusos infantil.-al escuchar eso, todos voltearon a ver a la italiana asustados, en especial Keith.

-¿Abusos? ¿acaso te refieres a...-Allura casi parecía pálida al escuchar aquello, eso si que parecía que los alteanos entendían.

-Si, ya saben. Aunque quien sabe, quizás no sea el caso de Lance, o eso esperemos.

El coreano ya no podía mas, tenia que ir a hablar con Lance. Por lo que se puso de pie y salio de la sala directo a las habitaciones, más específico a la de Lance. Nadie dijo nada, pues casi todos pensaron que se iba a su habitación,  todos menos Shiro que ya sabia como era Keith.

Llegó a la habitación del cubano y tocó la puerta, no iba a entrar salvaje cuando el chico estaba tan mal, aunque no le importaría entrar así nomas.

-...¿que quieren?-la voz de Lance se escuchó, se oía rota por lo que ha llorado.

-Lance, ¿puedo entrar?

Tardó unos minutos pensando.

-...si...

Keith entró y vio al cubano en su sentado en su cama abrazando sus piernas, se notaba que había llorado.

-Hey...¿estas bien?-dio unos pasos con la intención de acercarse más al cubano.

-...si, si, si, estoy bien. Solo...no te acerques mucho.-ya no pasaba nada si lo volvía a tocar, pero no quería saber si estaba triste o no.

-Lo siento. Los demás están preocupados...y yo un poco también.-no le importó lo que dijo Lance, y se acercó a él, sentándose a su lado.

-...te dije que no te acercaras.

-Y también que estabas bien y se nota que no.

Touche.

-...estaré bien. Solo necesito estar solo para calmarme.

-¿Aún sin esos guantes tuyos?

-Bueno, si será un problema, pero ya pensare en que hacer.

Ya no podía decir nada o hacer nada, solo podía irse de allí y dejar a Lance sólo, aunque Keith quería quedarse, pero sabía que eso no sería buena para el chico.

Por su parte, Lance sentía la necesidad de disculparse con Keith por todo lo que vio, pero eso significaba tener que contarle todo. ¿podría hacerlo?