Cumpleaños

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 _ De verdad Valentina_ comenzó a decir Alex mientras entraba en el piso de la rubia como si fuera su casa_ no me gusta llevarme mal contigo, en el fondo te estimo muchísimo ¿no podemos olvidarnos de todo?

_ Alex_ dijo con amargor la ojiazul_ me dejaste muy claro que me utilizaste

Vause estuvo unos segundos de pie en el salón, con las manos guardadas en los bolsillos, miró a su alrededor, echaba en falta algo, aunque no caía en esos momentos, se quitó la chaqueta y se sentó en el sillón, colocándose el abrigo sobre sus piernas:

_ Valentina, en mi familia no hay cabida para fracasos, los Vause siempre tenemos que estar por encima de todos, aunque con ello tengamos que pisotear y usar a la gente en nuestro beneficio_ se cruzó de piernas y observó como la rubia se sentaba en el otro lado de cheslong_ sin embargo yo tengo algo que mi padre no tiene, algo que quiero conservar por encima de todo.

_ ¿Qué es?

_ Tengo a Piper Chapman_ se encogió de hombros_ mi negocio se está disparando y veo prescindible Division Models_ dibujó una sonrisa_ por eso quiero venderte mis acciones

_ ¿Vendérmelos?

_ No dejo de ser una empresaria querida_ rio entre dientes con picardía_ no pensarás que te lo voy a regalar todo ¿verdad?

A Valentina le daba igual tener todo el poder en Division Models, con los almacenes tenía suficiente, para vivir tranquilamente con Juliana y los mellizos durante el resto de sus vidas, pero si le podía la curiosidad:

_ ¿Te da igual tu rivalidad con Iris Allen?

_ Mi rivalidad nunca fue empresarial_ se puso sería_ cuando mi madre nos abandonó tenía que buscar la aprobación de mi padre, a cuanto más méritos ganaba más obtenía su afecto, el problema llegó cuando conoció a otra mujer_ comenzó a hablar tensa_ que tenía una hija de mi misma edad, ahora mis competencias no solo eran externas, también eran internas, comenzó a competir por el afecto de mi padre_ Valentina frunció el ceño, todo aquello era muy triste y demasiado superficial_ Iris Allen es mi hermanastra, ¿quién era ella para arrebatarme lo poco que me daba mi padre? No era nadie, una extraña queriendo usurpar mi lugar_ Se miró la mano donde estaba su anillo de casada_ pero analizándolo mejor, yo tengo algo más que dinero, el amor siempre ha estado sobrevalorado, no es cierto, Piper es inteligente, cariñosa y bendita su paciencia para aguantarme_ Valentina curvó los labios, ¿a quién le recordaría eso?_ No voy a correr el riesgo de que un día Piper se canse como mi madre y tome la decisión de marcharse, eso me dolería más que perder unos cuantos millones.

_ ¿tú rivalidad siempre ha sido de hermanastras?_ Valentina se llevó la mano a los ojos, comenzaba a tener jaqueca_ ¿con eso pretendes que te perdone?

Alex ya hacía mucho apareciendo en la puerta de su casa, ofreciéndole todo el imperio que en su día levantó, ¿qué esperaba que se arrodillase? Ningún Vause había pedido disculpas a nadie, sin embargo ahí estaba, era lo más cercano a una disculpa que obtendría de ella. Se levantó algo irritada:

_ Valentina, no me vengas de santurrona, no eres mejor que yo

_ ¿Qué no soy...?_ comenzó a preguntar casi atónita_ antes de cruzarme con Iris y contigo tan solo era una ama de casa, que se preocupaba por llegar a fin de mes y que a mis hijos no les pasara nada_ Iris se aprovechó de la debilidad de Oliver y tú hiciste conmigo lo mismo, no contenta con ello que me convertiste en tu misma imagen

Alex comenzó a carcajear de un momento a otro, como si le hubiera contado el mejor chiste del mundo:

_ No te engañes bonita, nunca te obligué a nada_ comenzó a caminar de un lado para el otro_ no te puse un arma en la cabeza para que firmaras el contrato, seguro, sensato consensuado, siempre estuvo en tu mano poder dejarlo_ se acercó a la rubia hasta quedar a escasos centímetros de su rostro_ pero te podía el miedo quedarte sola, ¿creías que te dejaría de lado si no te acostabas conmigo o te sometías? Por el amor de dios, te encontré en el borde de un puente_ se alejó_ puedo parecer muy perra y frívola, pero nunca te hubiera dejado en la calle y creo habértelo demostrado en cuanto terminaron los 365 días_ miró a su alrededor_ ya decía yo que faltaba algo ¿y el perro?

Valentina contuvo las ganas de llorar, se levantó tan bruscamente que acabó sintiendo nauseas. Agarró el abrigo de Alex Vause y se lo dio de mala gana, comenzando a empujarle hasta la puerta del piso:

_ Largo de mi casa, no quiero volver a verte

_ ¿Entonces no quieres las acciones?

_ Metete las putas acciones en el culo_ dijo airada antes de cerrar la puerta en las narices_ largo

Alex arqueó las cejas sorprendida, sí que tenía carácter, cuando le encontró vagando por las calles era un espejismo, suspiró decepcionada y comenzó a ponerse el abrigo, eso debía ser el embarazo, debería estarle agradecida, Valentina Carvajal era alguien, si no llega a pasar esa noche por el puente en esos instantes sería puro hueso a metros bajo tierra. Nunca le obligó a nada, ni si quiera a que siguiera su estúpido juego de los 365 días de placer, en el fondo también lo hacía para cubrir lo que más carecía en su vida, amor. Con el gesto torcido sacó el Smartphone de última generación, recién salido al mercado y marcó el número de su abogado:

_ ¿Ya tienes todo listo?_ asintió con la cabeza poniendo un gesto satisfactorio_ ya sabe cuándo se lo tiene que dar.

Vaya mañana había tenido, de un lado para el otro, le abrían la puerta en pelotas o se quitaban alguna prenda, no quería arriesgarse con Liah o peor ¿si era Lucho quien le abría la puerta mostrando alguna parte de su anatomía? Puso un gesto de asco. No, se quedaría con las ganas de desahogarse, porque por muy dócil que estuviera Valentina cuando le dejó con Alex no sabía qué se iba a encontrar, no estaba para que le volvieran a herir de nuevo el orgullo, si era recordar lo de esa mañana y bajarse la libido, claro siempre que se tratara de Valentina, por lo que pudo comprobar, con Lizzie y Gadot no tuvo problemas, tanta excitación en un día, le dolían los genitales. Hacía meses que no se había fijado en otra mujer, no de esa forma tan sexual. En lo que salía del ascensor y se dirigía al pisó meneó la cabeza, tenía que dejar de pensar así, quería a Valentina.

Cuando entró en el piso se lo encontró silencioso, pensando que estaba vacío y que Valentina había salido. Pero cuando entró, se la encontró en la cheslong tumbada de lado, dando la espalda a la puerta y arropada hasta la cabeza. ¿Eso era bueno? Con precaución dejó las llaves en el llavero junto al mueble que había en la puerta y lentamente se acercó, se sentó a su lado y le acarició el brazo:

_ Valentina_ dijo con voz suave_ ¿te encuentras bien?

_ No

Dijo con amargor. Juliana puso los ojos en blanco, ya estaba como en la mañana, había escarmentado no iba a insistir:

_ ¿quieres algo de comer?

Preguntó separándose y apunto de levantarse. Valentina se giró un poco parar mirarle:

_ No tengo mucha hambre_ una respuesta de lo más extraña, ya que a cada semana que pasaba Valentina comía más, tenía dos parásitos a los cuales había que nutrir_ pero ¿te tumbas y me abrazas?

Juliana curvó la comisura de los labios, se descalzó y se metió debajo de la manta antes de abrazarle y pasar su otro brazo debajo de su cabeza:

_ ¿te hizo algo Alex Vause?

_ Darme unos golpes de sinceridad

_ Valentina_ comenzó a decir con preocupación la morena_ sabes lo bien que se le da manipular...

_ Juliana, nunca me obligó a nada, pero resultaba más fácil dejarme llevar porque ya no tenía nada que perder, estaría muerta si no llega a ser por Alex, al menos le debo la vida_ la vaquera depositó un beso en su mejilla_ nunca me pidió nada a cambio, tan solo me propuso ese juego y acabé aceptando.

_ No te mortifiques, son cosas del pasado

_ ¿Qué no me mortifique?_ se giró un poco torpe para quedar de frente a la morena_ Te juro que intento ser la misma de antes, intento ser mejor y tratarte mejor, pero luego vuelvo a ser frívola y quien sale herida eres tú.

_ Valentina_ le aferró de las mejillas para intensificar su mirada_ es comprensible que no llegues a ser la misma de antes, crees que no lo sé, pero sí_ acarició su vientre y volvió a repetir_ lo sé, también sé que no eres solo madre de dos mellizos, eres madre de cuatro y eso nada lo cambiará, lo único que pido es que no te guardes nada y aun desahogándote no te sirve_ puso los ojos en blanco_ pues te dejaré que me insultes, eso sí con el límite de no herir el orgullo sexual que la libido se esfuma_ Valentina se acurrucó en su pecho y dejó escapar algunas lágrimas_ eres una persona maravillosa, que se preocupa por sus empleados, por su familia y aunque muchas veces se haga la dura, también sabe perdonar, por eso te quiero y muero por casarme contigo Valentina.

_ Siempre andaba pidiendo un gato

Acabó diciendo entre sollozos, Juliana le atrajo más mientras le acariciaba la cabeza, pasando los dedos por sus cabellos rubios:

_ ¿Quién?

_ Nate_ se sonó la nariz_ este viernes es su cumpleaños

Y en ese momento Juliana comenzó a comprender los cambios de humor que llevaba teniendo Valentina. Su jodida manía de ocultarlo y guardárselo todo:

_ ¿Quieres hacer algo especial este fin de semana?_ se separó un poco para mirarle el rostro y secarle la humedad de sus mejillas_ digo a parte de ir a por el gato.

_ ¿No te importaría?

_ No mi amor_ comenzó a decir con tono de confort_ es el hermano de los mellizos, claro que no me importaría. Son parte de ti y yo quiero todo lo que tenga que ver contigo.

_ Dime algún defecto para no verte tan perfecta

Juliana fingió estar pensativa, torciendo sus labios carnosos hacia el lado derecho, antes de sonreír y decir con tono jocoso:

_ Que Lizzie me abriera la puerta como su madre la pario y no abalanzarme sobre ella

La expresión de Valentina cambió a una más gélida, hasta que pasados unos segundos achicó los ojos aunque una poco más relajada:

_ Desnuda, llorona y empapada de líquido amniótico, normal que no te abalanzaras que asco

_ También he visto a Catalina en todo su esplendor

Valentina quedó boquiabierta:

_ ¿Por qué?_ Frunció el ceño, ese gesto que ponía antes de enfadarse_ Juliana, puedo entender que son algo alocadas y para nada pudorosas, pero hasta cierto punto, eso que se anden exhibiendo no me gusta_ descendió su mano y sin ser considerada apretó su entrepierna, palideciendo a la pobre vaquera que ponía un gesto de dolor_ esto es mío que te quede bien clarito.

Juliana asintió efusivamente, mientras reptaba por la Cheslong intentando aliviar el agarre de Valentina, obviamente controlando un poco, tampoco quería que se desmayara:

_ Más claro el agua_ dijo con un hilo de voz_ ¿Me devuelves las pelotas por favor?

Si antes le dolían por los calentones, ahora se había triplicado. Eso que no le había contado que había visto a la doctora Gadot, lo llega hacer le castra con esas uñas de gata. Valentina curvó la comisura de los labios y con tono divertido:

_ No_ suavizó el agarre y acarició un poco la zona antes de comenzar a desabrochar los pantalones, la vaquera recuperando el color miró la agilidad de sus manos, mientras que ponía esa expresión de "joder, me va a violar"_ lo quiero ahora

_ Ya no hay de eso si una no quiere_ dijo esbozando una risita nerviosa_ JODER

Valentina bajó un poco los pantalones y ropa interior para estimular una de sus zonas erógenas, nada de frenillo, nada de glande, directa a estimular el perineo. Para que decía nada la morena, si la ojiazul tenía sus artimañas o mejor sus manos que parecían conocer muy bien su anatomía y sus puntos débiles. Juliana apartó sus manos agarrándole de las muñecas:

_ Tendrás hambre_ Valentina a lo loba salvaje se relamió los labios_ digo de comida_ añadió corriendo la morena_ ¿Pido algo de comer?_ puso ojos como orbitas_ Valentina deja de mirarme así que das miedo

Eso no le detuvo, para nada, se zafó de su agarre y le empujó quedando boca arriba, facilitándole el ponerse a horcajadas. La ojiazul disfrutaba siendo la dominante en ese momento, se inclinó y acarició los labios carnosos de la vaquera con la punta de la lengua. No es que pensara en su madre como ocurría en las veces pasadas, pero la morena no dejaba de ser humana. Apretó los ojos fuertemente, ya que Valentina se le quedó mirando unos segundos antes de bajar la mirada unos segundos, vergonzosamente para la morena, su erección fue bajando. Valentina lejos de reírse o hacer algún comentario jocoso, se inclinó y comenzó a mimar con besos. Suaves besos que recorrían sus labios, mejillas, la línea de su mentón para acabar de nuevo en sus labios, sin ninguna otra finalidad, solo dulces besos:

_ Lo siento

Se disculpó ruborizada Juliana, esas cosas no sabía si eran normales, pero solo conseguiría herir más su orgullo, lo último que quería era decepcionar a Valentina. Sin embargo, esta dulce curvó la comisura de los labios y a escasos centímetros de su rostro, casi rozando sus bocas, dijo:

_ No pienses en otra cosa que en besarme_ Juliana acercó su rostro a la de Valentina, pero ésta lo retiro unos centímetros, provocándole, sonrió picarona_ pero ¿que esperas? Bésame_ La vaquera volvió acercar su cara, repitiendo el mismo proceso_ vamos Juliana_ esbozó una risita juguetona, la morena amplió una sonrisa e intentó agarrar las manos de Valentina para inmovilizarla y poder besar sus labios, pero la rubia traviesa se zafaba_ Oh vamos Juliana porfa bésame_ como si fueran adolescentes comenzaron a forcejear entre risas, mientras una intentaba besar la otra se retiraba_ Oh mierda

Dijo cuándo Juliana en vez de intentar inmovilizarle le atrajo, hasta pasar su mano detrás de su nuca y besar sus labios, en un principio lento, suave, como la seda, hasta que ansiosas anhelaban más, o cuando Valentina sentía que Juliana quería más, cuando dejó de sentirse tensa y nerviosa. Entonces estaba lista para reanudar lo que habían comenzado. La rubia seguiría encima, no era que se empecinara en dominar, es que debido a la barriga era una de las posturas más cómodas para ella. Nada de ir directa a estimular su miembro como hizo antes, poco a poco, comenzó acariciando su oreja con la lengua e introducirla dentro de su oído, era un punto erógeno de Juliana y aquello hizo que se le escapara un gemido. Incitando a la vaquera a que tomara un poco las riendas y comenzara a recorrer su cuello con esos besos excitantes que sabía dar. Ella misma tomó la iniciativa desabrochándose las mangas de la camisa, aunque Valentina siguió desabrochando el resto de los botones, hasta que paró de besarle y puso expresión de sorpresa:

_ Ups_ dijo sonriendo, en realidad casi de emoción_ se supone que aún falta un par de semanas para esto

_ ¿El qué?

Preguntó sin comprender:

_ Se han movido

Los ojos marrones de Juliana le brillaron y amplió una sonrisa. Curiosa puso la mano en la barriguita de Valentina. Desde que supo que Valentina estaba embarazada leyó mucho sobre el tema, sí que era cierto que una madre embarazada no empezaba a sentir al bebé hasta las veinte semanas de embarazo, siempre y cuando eran primerizas, una mujer que había dado a luz incluso dos veces podía sentir moverse a los fetos a partir del cuarto mes. No sintió nada:

_ Vaya, solo ha sido unos segundos

Acabó diciendo la ojiazul:

_ Seguramente primera riña de hermanos

Juliana amplió una sonrisa y comenzó a besar su barriga. No entendía como algunos maridos no encontraban atractivas a sus mujeres en los meses de embarazo, en cuanto vio a Valentina sin la blusa, la observó con verdadero anhelo, sus curvas y para nada refiriéndose a los senos, si no toda ella, a lo mejor es que estaba en una época del embarazo en el que liberaba alguna especie de feromonas en el que le incitaba a llenarle de amor y protección, no fueron directas al grano nada más quedar desnudas, ni la disposición de ambas, también la pregunta que salió a relucir por parte de la morena fue un poco... discorde al momento, por no decir que Valentina por casi se mea en ese instante:

_ se supone que sienten lo mismo que la madre ¿te has preguntado que sienten cuando tienes un orgasmo?

Uno, dos, tres y Valentina rompió a reír. Juliana la miró en plan "te lo pregunté enserio" la ojiazul trató de controlarse, pero ¿Cómo después de esa pregunta? Fue como si le preguntara si los mellizos experimentaban orgasmos. Después de un rato, más buen un buen rato de risas, Valentina se quitó las lágrimas, se tumbaron de lado mirándose y se agarraron de las manos entrelazándose los dedos:

_ El cuerpo humano libera una especie de hormona llamada oxitocina cuando se tiene un orgasmo, pero también lo segrega el cerebro cuando se siente felicidad y supongo que es eso lo que sienten, felicidad, ves si en el fondo no hacemos nada malo, sienten que estamos haciendo un acto de amor, "nuestras mamis se quieren y nosotros somos felices"

Juliana le agarró del mentón y se acercó para rozar sus labios:

_ Cuando quieres eres tú la densa

Valentina juguetona comenzó a acariciar su brazo, descendiendo por su abdomen y en vez de ir directa al meollo del asunto como hizo antes desvió el camino po su cadera, hasta acariciar su glúteo:

_ ¿Te puedo contar una fantasía que quiero cumplir para cuando no tenga a los mellizos en el vientre?

_ ¿Cuál? ¿Una orgia?

La ojiazul empujó a la vaquera y con gesto travieso se puso a horcajadas, con una sonrisa maliciosa se acercó al oído y le susurró la fantasía. La sonrisa de la morena se le borró y empujó un hombro de la rubia para mirarle a la cara:

_ Valentina te reconozco que es placentero que me metas el dedo cuando me haces sexo oral, pero eso ya es demasiado.

_ ¿Por qué? Es lo mismo solo con un poco más de dilatación

_ Valentina, no

Valentina arqueó una ceja, agarró su miembro erecto y se lo posicionó en la obertura de su sexo, entes de comenzar a descender lentamente:

_ Queda en conversaciones pendientes.

Ramírez estaba en un parque, sentado en una mesa tomando un café. Estaba en ese país de ilegal, se trataba de convencer de que todo aquello lo estaba haciendo por su familia, aunque por otro lado, se avergonzaba por lo que pensaría su hija de él, solo esperaba que algún día le perdonara y le comprendiese. Al final observó cómo un hombre elegante se acercó y se sentó enfrente. Eso se extrañó muchísimo, se supone que se reencontraría con Iris Allen:

_ Disculpa Ramírez, pero a partir de ahora será imposible verse con la señora Allen_ miró a su alrededor y sin llamar la atención le pasó una bolsa de papel de McDonald, se sacó un móvil con tarjeta de prepago_ ¿Ya sabe que tiene que decir si le descubren?

_ Todo ha sido porque odiaba al señor Ballesteros

_ Bravo_ dijo el hombre, antes de levantarse dijo en voz baja_ el móvil es para que la señora Allen se ponga en contacto con usted_ se miró el reloj_ esté atento, le llamará en cinco minutos_ dibujó una sonrisa malévola_ también me pidió que te recordara que tiene una hija preciosa, sería una pena que cayera en la explotación infantil.

Ramírez observó como el hombre se marchaba. Precisamente eso trataba de evitar, que su familia acabara siendo explotada por alguna empresa, trabajando desde que sale el sol hasta altas horas de la noche por cuatro duros. Allen le prometió legalizar los papeles a su familia, su hija podría ir al colegio, ser libres. El móvil que dejó el desconocido sobre la mesa de mármol comenzó a sonar:

_ Seré breve Ramírez, lo quiero poético por eso será este fin de semana, es el cumpleaños de su hijo muerto y seguramente haga algo, todos los años o va al parque o al zoo, eso ya es cosa suya de averiguar, después de todo se reunirá con sus queridos hijos_ gruñó_ siempre me incordió con ese tema, por cierto, ya sabe qué pasará si va a la policía

_ Si, señorita Allen

Dijo Ramírez con su acento hispano, Iris añadió una última cosa:

_ Desde primera hora de la mañana me irá informando, quiero verlo desde lejos, antes de que apriete el gatillo deshágase del móvil, rómpalo y la tarjeta sim también ¿entendido?

_ Si, señorita Allen

Después de esa afirmación, Iris colgó el teléfono móvil.

Valentina había pedido algo de comer, tenía antojo de cerdo agridulce y después de gastar un poco de calorías, tenía mucho apetito. Juliana, no comió mucho, estaba concentrada revisando los libros que usaría en la universidad, las clases empezaban en una semana:

_ La medicina se basa en conocer todo el cuerpo humano, la anatomía del hombre y la mujer_ comenzó a pasar páginas_ para la veterinaria hay que conocerse la anatomía de la mayoría de los animales

La ojiazul curvó la comisura de los labios, aunque andaba un poco perdida en sus cavilaciones. Después de tantos años su vida comenzaba a encarrilarse, por primera vez quería hacer algo que a su hijo Nate le hubiera hecho muy feliz, aunque no sabía cómo pedírselo a Juliana:

_ Juls_ Valentina se acercó y se sentó a su lado_ ¿puedo pedirte algo sin que te molestes?

_ Ya me has pedido darme por culo con un arnés_ cerró el libro y le miró con cara divertida_ ¿es qué acaso hay más?

_ Lo cierto_ se miró las manos_ pienso en lo que le gustaría y haría feliz a Nate_ Juliana le miró con más interés_ ¿te molestaría mucho si está Oliver?

La vaquera retiró la mirada, claro que era molesto tener al ex marido / hermano adoptivo siempre cerca, aunque tuviera sus motivos, se comportó como un puñetero cerdo era de entender que no le tragara. Cerró los ojos y suspiró, pero ese día no se trataba de Valentina ni de Oliver, si no de Nate, el hijo de ambos, así que teniendo que joderse, le agarró de la mano y forzó una sonrisa:

_ Sé que le hubiera gustado tener a sus dos padres en el día de su cumpleaños_ torció los labios antes de añadir_ pero tendrá que aguantar que su cruel madrastra esté presente también

Valentina sonrió y depositó un beso en la mejilla, antes de decir con tono tierno:

_ Te hubieran adorado, eres la mamá de sus hermanitos.

_ Pelota

SABADO EN EL ZOO

Sirenas parpadeantes y un hombre loco gritando, gente histérica corriendo de un lado para el otro. A lo lejos, entre la multitud una mujer elegante, escondía su mirada detrás de unas gafas de sol, no ocultaba su sonrisa llena de satisfacción. "perturbador" pensó, había presenciado como un hombre disparaba a otro hombre. Los paramédicos corrían hacía el lugar donde dos mujeres gritaban histéricas, sollozaban y llamaban los nombres de ambos cuerpos que habían tirados sobre charcos de sangre impregnando el suelo. Allen frunció el ceño "una víctima colateral, pobre" pensó antes de girarse y marcharse. Ignorando que aquel golpe le sería devuelto. 

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Esta historia NO me pertenece es una adaptación realizada con la AUTORIZACIÓN de su autor @elio_kin

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