El primer día en Nueva York lo pasaron de turismo. Valentina ya había estado antes, pero Juliana no y conociendo la curiosidad de la morena sabía que le gustaría. Como el teleférico Roosevelt island que hallaba enganchado al puente Queensboro que unía el barrio de Queens con Manhattan. Qué nivel, estaba tan entusiasmada que llegaba a sacar fotos de todas las vistas que ofrecía Manhattan, el edificio de Naciones Unidas, el edificio Chrysler. Pasearon por Central Park y como había prometido, no hubo más reproches y extrañamente, no más discusiones:

_ si yo fuera tu y estaría viajando cada dos por tres_ Dijo Juliana caminando por el bordillo de una acera, con los brazos extendidos para hacer equilibrio:

_ Pero si viajo casi todos los meses._ Respondió Valentina caminando a su lado con las manos guardadas en los bolsillos del grueso abrigo, Juliana puso los ojos en blanco:

_ No me refiero ese tipo de viajes_ pegó un salto y se puso a su lado_ me refiero a esto, disfrutar y no del trabajo.

_ Juliana, el dinero no llueve, que sea la presidenta de una empresa de éxito requiere atención.

_ Dinero_ hizo una pedorreta con la lengua, haciendo sonreír a la ojiazul_ el dinero no da la felicidad.

Valentina carcajeó:

_ No, pero la facilita mucho

Juliana ladeó la cabeza pensativa, hasta que volvió:

_ Era feliz y tenía una vida fácil hasta que tú apareciste_ Valentina puso expresión seria y aceleró el paso, no habrían discutido, eso no quería decir que su carácter se hubiera amansado_ quiero decir, hasta el momento nunca he tenido que replantearme nada_ la ojiazul le miró con más interés_ Liah siempre planea todo por mí, hasta mi madre me sigue comprando la ropa interior

Valentina se llevó una mano a la frente a la vez que reía fuertemente, se mordió el labio, miró de reojo a Juliana antes de decir:

_ No, eres una niña mimada.

_ Por favor_ Dijo haciendo un gesto con la mano para quitar importancia_ ¿ahora te das cuenta?_ amplió una sonrisa_ mi viejita siempre ha sido muy familiar y le cuesta tenerme lejos, ¿Por qué quitarle esa ilusión?_ Juliana podía llegar a ser muy parlanchina_ menos mal que mi hermano sigue ahí al pie del cañón

A diferencia de Valentina, la morena era un auténtico libro abierto, ya podía estar hablando de la primera vez que montó a caballo, de su familia o de cuando le pillaron robando un instrumento en el colegio para cantarle una serenata a Liah, eso sin contar que no sabe tocar ni un instrumento. Eso le pareció gracioso cuando se lo contó incluso tierno, Oliver pudo llegar a ser meloso pero no hasta ese nivel de romanticismo, de joven Juliana regalaba flores y su ex marido a esa edad gastaba el tiempo a tirarle huevos al director del colegio:

_ ¿Hermano?

Juliana se colocó el sombrero y asintió con la cabeza:

_ Mi hermano mellizo Diego, significa: hombre instruido o estudiado _ esbozó una risita_ y yo siempre le digo que el salió bien burro.

Valentina carcajeó y parecía tímida cuando le conoció:

_ Y Juliana ¿Qué significa?

La morena se encogió de hombros:

_ Mi madre dice que significa perfección, pero supongo que era porque en un principio me llamó Julian_ forzó una sonrisa_ Los médicos tienen la fea costumbre de decidir a qué genero pertenece una persona sin esta haberlo decidido, "enhorabuena señora Valdés ha tenido dos niños sanos", pero sorpresa resulté intersexual, en realidad lo decía por darme ánimos, no es común encontrarse intersexuales ahí y antes no estaba tan bien visto como ahora_ frunció el ceño y se miró las botas, no era agradable recordar aquello_ ¿Dónde entraba? Baño de las niñas o de los niños, me sentía niña pero a ningún padre le agradaba que una pirulilla entrara en el baño de las chicas y los chicos ni de cerca me querían ver. Supongo que si no llega a ser por mi familia y por Liah, mis pensamientos de suicidio hubieran sido más intensos_ volvió a encogerse de hombros_ pero lo que no te mata te hace más fuerte y aprendí a vivir con ello. Me acepto como soy y las personas que quiero, eso es lo importante, a los demás que les den.

Y después de contar aquello, con una facilidad increíble, amplió una sonrisa. La rubia sintió envidia con esa capacidad de poder contarlo todo, tanto las buenas experiencias como las malas. Buscó su mano y se la agarró, asombrándose, a pesar de que hacía frio, ésta le transmitía calor:

_ Eres perfecta Juliana

_ Lo soy

Admitió con gesto divertido, Valentina abrió la boda de sorpresa, puesto que se esperaba una respuesta humilde:

_ Tú no tienes abuela

_ Eh, que de las dos tu eres la prepotente, preciosa

_ Encima canta mañanas

Juliana frunció el ceño:

_ ¿qué significa eso? Hasta el momento no me has escuchado cantar ni una mañana.

Valentina paró de caminar, llevaban mucho tiempo con el paseo y por suerte una de las salidas del parque estaba cerca. De forma coqueta rodeó la cintura con los brazos y respondió con voz melosa:

_ Un canta mañanas es una persona que tiene poca credibilidad... cariño, preciosa, que ojos más bonitos tienes_ carcajeó recordando lo que le dijo esa mañana cuando le vio salir de la ducha_ hasta el gran astro tendrá envidia de tu belleza.

_ Eh_ dijo divertida_ también recuerda que te llamo satán, gremlin y en una ocasión te llamé Voldemort sin que lo supieras_ Valentina volvió abrir la boca, ¿Dónde había quedado la Juliana caballerosa que conoció?, la morena alzó varias veces las cejas_ solo que una versión más buenorra y culona.

_ Oh dios mío

Dijo partiéndose de risa, pero mira que podía ser descarada muchas veces. Juliana retiró un mechón rubio y lo colocó detrás de su oreja, deleitándose de su belleza, ni se imaginaba lo que le encantaba verla reír, le costaba un mundo ver esa sonrisa, en la intimidad cuando estaba relajada y se olvidaba de todo sí, pero el resto del tiempo lo que más veía era su cara de seta endiablada:

_ ¿Fan de Harry Potter?

Juliana alzó una ceja:

_ Fue la saga que me hizo adicta a la lectura_ acarició su mejilla con la yema de los dedos_ mi hermano y yo cogíamos un palo y hacíamos que nos echábamos hechizos, yo era Hermione y Diego hacía de Ron, hasta que empezó a cantear que entre esos dos personajes había un rollo muy raro

Puso un mohín de asco antes de reír, a Valentina le encantaba todas sus historias y se relajaba tanto que...:

_ Nunca me lo leí pero me tuve que ver la mayoría de las películas, a mis... _ y de un momento a otro, de nuevo sintió que se tensaba entre sus brazos_ a dos personas que conocí les gustaba mucho_ se separó y carraspeó_ he visto que el libro que estabas leyendo le terminaste_ señaló la salida_ hay una librería muy buena por ahí ¿Te apetece que echamos un vistazo?

Juliana forzó una sonrisa y asintió. Era consciente que no le gustaba hablar de su pasado y siempre que había tratado de forzarle para que le contara algo acabaron discutiendo, así pues, aun en contra de la naturaleza de la morena, ésta decidió controlar su curiosidad, de algún momento a otro ya acabaría abriéndose a ella, ya lo estaba haciendo, cosas triviales, pero al menos ya dejaba conocerla un poco más.

Flashback

Jacobo estaba sentado enfrente de los chicos, mirándoles seriamente, Lucia nerviosa caminaba de un lado para el otro. Valentina miraba avergonzada a la mesa, mientras que Oliver mantenía la compostura, toda esa tensión, la prueba estaba en el centro de la mesa. De un momento a otro Lucia comenzó a llorar:

_ Tienes catorce años_ comenzó a decir entre sollozos_ por el amor de Dios Valentina, tu futuro, tus estudios, todo...

_ ¿Qué piensan hacer?

Intervino Jacobo de un momento a otro, los chicos no se miraron, más bien quisieron contestar, era un tema que ninguno había hablado, ya que directamente fueron hablar con sus padres de acogida:

_ Tenerlo

Respondió Valentina a la vez que Oliver respondía otra respuesta muy diferente:

_ Darlo en adopción

_ ¿Qué?

Preguntó con sorpresa Valentina, al igual que Oliver se vio sorprendido al escuchar la respuesta de su novia:

_ Valentina_ dijo entre dientes_ mamá tiene razón, tienes un futuro por delante no puedes dejar que esto te lo eche a perder.

_ ¿Esto?_ preguntó señalándose el abdomen con enfado_ ¿Consideras cosa a nuestro hijo?

_ Pero si ni si quiera está en la etapa de feto ¿Cómo puedes considerarlo nuestro hijo?_ ahora fue él quien se levantó y comenzó a caminar de un lado para el otro_ míranos, dentro de poco acabo el instituto con unas notas tan malas que no me querrán en ninguna universidad, ¿qué puedo ofrecerle? Sin embargo tú eres lista tendrás un buen futuro si estudias y eso_ señaló a su abdomen, al ver la cara de desagrado que puso Valentina rectificó poniendo los ojos en blanco_ el niño es una carga que no se puede tomar a la ligera. ¿Estarías dispuesta a soportarlo? Porque mi madre pensó que sí y a saber dónde mierda está ahora.

Valentina agachó la cabeza. Era cierto la madre de Oliver era una adolescente cuando le tuvo. Jacobo carraspeó interrumpiendo de nuevo la discusión de los dos adolescentes:

_ Pues será mejor que lo decidáis rápido

_ Jacobo

Dijo Lucia, el hombre no estaba nada contento y bastante se estaba conteniendo, más por Valentina que por Oliver, ya que el chico era el más rebelde y en más de una ocasión le tocó ir a recogerlo en la comisaría:

_ Déjame hablar querida_ señaló al chico_ escúchame chico, si ese embarazo sigue adelante le cumplirás a Valentina y a ese niño como hombre, en cuanto puedan se casan.

No resultó nada fácil, Valentina siguió con su vida normal, con el único cambio de que un pequeño ser crecía en su interior, los primeros meses entre la joven pareja siguió las discusiones, ella en cuanto más notaba a su pequeño, más convencida estaba de tenerlo, Oliver no. No era por tener rechazo hacía su hijo, no quería que la historia se repitiera, padre delincuente, bueno, la mayoría de los que se quedaban en esa casa, los niños complicados y rebeldes como el acababan muy mal, ya que salían en cuanto cumplían los dieciocho y se agarraban a un clavo ardiendo para sobrevivir, madre adolescente, que acaba harta de esa vida y arrepentida por haber cometido ese error, no era justo ni para Valentina ni para el niño que estaba de camino.

Suerte que West estaba ahí y siempre estaba animando a la chica, ya casi en el quinto mes, encontró a la rubia con su barriguita y a West acariciándosela, los dos carcajeaban:

_ Va a ser un gran deportista, da buenas pataditas

Dijo West animado, a diferencia de Oliver, éste respetó su decisión y aunque no le quedaba nada para irse a la universidad, dejó claro que siempre estaría siempre que lo necesitara:

_ Como su tío West

_ Eso es soñar mucho_ dijo entre risas_ resulté ser un gañan en todos los deportes.

Oliver con paso indeciso se acercó. Los dos chicos al verlo se callaron y se le quedaron mirándolo. Valentina quería mucho a Oliver y le dolía estar a malas con él, entendía las razones por las que no quería quedarse con el niño, pero ella era la madre y aun sin haber visto su rostro, ni haber tocado sus manitas, lo quería:

_ Puedo_ dijo tímidamente_ puedo tocar

_ Claro

Se colocó al lado contrario de West y con mano temblorosa puso la mano en su barriga, en un principio no sintió nada, hasta que lo notó, el niño se había movido. Oliver asombrado y emocionado sonrió, sí que había dado fuerte el condenado:

_ Lo he sentido_ miró a Valentina, que tenía los ojos vidriosos_ ¿No te hace daño cuando se mueve?

La rubia negó con la cabeza:

_ En un principio me costó distinguir la sensación porque creían que eran gases.

Carcajeó, Oliver estuvo expectante de sentir otro golpecito. West, haciéndose el sordo dejó a los chicos solos, ya que tenían muchas cosas que hacer. Otra patadita. Vaya, dándose cuenta ese pequeñajo lo habían hecho ellos y sintió un gran mariposeo en su estómago, reteniendo las lágrimas, aún estaba convencido de no quererle dar la vida que por desgracia él vivió. Por el momento Valentina seguía manteniendo sus notas, a pesar de que en el colegio no estaba bien visto que una adolescente estuviera embarazada, golfa era lo mínimo que le habían llamado. Así pues, dándose por vencido suspiro y miró a esa preciosa chica:

_ Pues tendrás que ayudarme a ponerme al día con los estudios, porque nuestro hijo no tendrá como padre a un mecánico alcohólico.

Fin del Flashback

_ ¿Kama Sutra?

Preguntó esbozando una risita la ojiazul cuando encontró a Juliana escondida entre las estanterías más lejanas, con un libro en las manos, ésta sintió que se ruborizaba:

_ Bueno_ comenzó a explicar_ ya sé que dicen que la comunicación ayuda a reforzar una relación, pero_ cerró el libro y lo puso en su sitio_ no es agradable que siempre me estés guiando, da la sensación de que algún día te cansarás_ se tocó el sombrero, ya que uno de sus tics nerviosos era pasarse la mano por el pelo, pero siempre que llevaba sombrero acababa tocándolo_ solo quería sorprenderte

Valentina curvó la comisura de los labios y le miró con ojos brillantes. De cierta forma esas cosas sorprendían más que el acto en sí, le daban a entender que pensaba en ella y quería satisfacerle. Dio un paso hacia ella, le rodeó la nuca con los brazos y se puso un poco de puntillas para darle un fugaz besos en sus labios. Eran tan suaves, sabían tan bien:

_ Tú siempre me sorprendes

Juliana iba a contestar, cuando se escucharon las tripas de Valentina, ya iba siendo hora de cenar. Las dos rieron:

_ ¿Has visto alguno que quieras llevarte?

Juliana asintió y le enseñó la portada. La rubia alzó una ceja y musitó:

_ Átame, que título más porno

Se dirigieron a la caja. A regañadientes Juliana tuvo que dejar a Valentina que pagara, como con todo, pagaba ropa, comida, y siempre que le pillaba mirando algún capricho, por suerte, cuando la ojiazul se concentraba en su trabajo, aprovechaba y se pagaba lo suyo. Sabía que la chica tenía buenas intenciones, pero Juliana era muy suya y le gustaba ser independiente en ese sentido, aunque no tuviera mucho. No fueron a ningún restaurante, del viaje la ojiazul se sentía un poco cansada, no acostumbraba a pegarse esos palizones desde hacía mucho, así pues pidieron al servicio de habitaciones que subieran la cena. Apenas habían comenzado a comer cuando Valentina tenía el móvil en la mano, respondiendo un mensaje de Alex Vause y Juliana se encontraba leyendo el primer capítulo del libro, poniendo un mohín:

_ ¿Ya te descargaste desde el primer capítulo?

Preguntó Valentina dejando el Smartphone al lado del plato:

_ Es que desde el primer capítulo ya empieza fuerte, de verdad ¿Dejarías que te diera con el látigo una desconocida enmascarada?

Valentina amplió una sonrisa:

_ ¿Té piensas que mi relación con Alex Vause empezó con bombones y rosas?_ se apoyó en el respaldo de la silla y se cruzó de piernas_ para aquel entonces aún no había ni empezado los tramites del divorcio cuando me saltó sin más, señora Ballesteros le voy a ser sincera me excita y quiero vivir 365 días de placer con usted

La rubia carcajeó al ver la cara de estupefacción que puso Juliana:

_ Y ¿Aceptaste sin más?

_ Claro que no, después dieciocho años manteniendo una relación de lo más tradicional_ agarró la copa de vino_ heterosexual, me sentí escandalizada

Juliana hizo las cuentas mentalmente, pues sí que era joven cuando comenzó la relación con el tal Oliver Ballesteros:

_ ¿Cómo acabaste aceptando?

_ Alex_ dijo inspirando profundamente_ puede llegar a ser muy persuasiva_ pegó un pequeño trago al vino_ Piensas que se aprovechó de mi o por algo del estilo ¿Verdad?

_ ¿Sinceramente?

Preguntó un poco indecisa, no quería que se enfadara:

_ Por favor, sinceridad ante todo.

Apoyó las manos en su rodilla y entre lazó los dedos:

_ Sí, creo que se aprovechó de ti

_ Juliana, estuve con Alex porque quise, no me obligó a meterme en su cama ni a experimentar la sumisión, siempre respetó mis deseos y lo sigue haciendo.

_ ¿Ustedes siguen...?

Eso le hizo gracia, también como le preguntaba con un poco de miedo:

_ No, nuestros 365 días acabaron hace mucho tiempo_ se levantó y fue hasta su maletín, sacó un folio y dos bolígrafos_ pero basta de preguntas, quiero hacer algo_ regresó a su sitio y partió la hoja por la mitad_ quiero que enumeres diez cosas que te gustaría hacer en la cama o alguna fantasía que tengas y yo haré lo mismo.

Le dio el trozo que le correspondía y el bolígrafo. Juliana pareció dudar, vale, ¿Quién no tiene fantasías? O probar cosas en la cama, solo que podía a llegar a tener una mente pervertida, le daba un poco de vergüenza, aunque era Valentina que posiblemente habría experimentado hasta cosas que no sabría que existiría. Parece ser que Valentina las tenía muy claras, ya que comenzó a escribir enseguida.

Lista de Juliana:

1- Un baile erótico

2- Ver cómo te masturbas

3- Sexo Anal

4- Hacerlo en la bañera

5- Hacerlo en un lugar publico

6- Grabarse haciéndolo

7- Profesora- Alumna (la imagen de Valentina vestida de colegiala ya conseguía excitarle)

Bueno al parecer no tenía tantas fantasías como creía, le faltaban tres, ya las iría añadiendo. Valentina tardó menos, así que le tocó esperar:

_ ¿Ya?

Preguntó cuándo le vio dejar de escribir. Juliana miró su lista, no estaba muy segura de entregárselo, eso del sexo Anal a lo mejor no le gustaba. Ruborizada le entregó su hoja y recibió la lista de Valentina, por casi se ahoga, pues sí que empezó fuerte:

Lista de Valentina:

1- Pub single

2- Trio con mujer

3- Juguetes sexuales

4- Sexo Anal (eso lo confundió que le diera sexo anal o era ella quien quería hacerlo)

5- Fantasía violación

6- Ver cómo te masturbas (por fin una que no sentiría pudor hacer)

7- Someterme (podría intentarlo)

8- Hacer un vídeo mientras practicamos sexo (también podía hacerlo)

9- En un sitio público (otra que coincidían)

10- Susurra cosas guarras

_ Te faltan tres_ dijo Valentina mirando la lista_ veo que hemos coincidido en la mayoría

Juliana carraspeo nerviosa, eso de tríos y pub single no estaba segura que le iba a gustar, eso sin pensar en la fantasía que tiene de ser violada, ¿De verdad que fantaseaba con algo así?:

_ Tengo varias dudas, la primera el sexo anal...

_ En esa quiero que sea un quid pro quo, mi precioso y placentero culo_ le señaló con el dedo índice_ por el tuyo, me parece justo

_ Creo que eso debería pensármelo_ dijo mientras un escalofrío recorría su cuerpo, ¿esa mujer no quería dejar ni una zona de su cuerpo virgen?_ esto del pub single y el trio, no sé yo si podría hacerlo...

_ Lo del trio podemos ir viéndolo más adelante, pero lo del pub no hace falta participar, si quieres hacerlo bien y si no, se puede mirar.

La morena miró la hoja, lo cierto es que imaginarse a Valentina, liándose con otro o con otra delante de sus narices no le agradaba. Ya podría haber mujeres sexys y todo eso, pero aun así, no le gustaba la idea. Incluso estando prometida con Liah, siendo consciente de que en cuanto regresaran a Chicago el acostarse se acabaría hasta el siguiente viaje, la rubia estaba en su derecho de acostarse con otros, total solo era un acuerdo de 365 días de placer no de relación:

_ Valentina

La ojiazul había retomado su cena y se encontraba partiendo su filete. Que miraba Juliana con cierta envidia, ya que Valentina le había aconsejado que no impuesto, que retirara ciertos alimentos mientras que estuviera con ella, la razón, fue muy simple si comía carne roja no había felación, era una putada, porque había que reconocerlo a Valentina le encantaba darle sexo oral como a Juliana recibirlo, el asunto es que ciertos alimentos hacía más desagradable el sabor de su corrida:

_ Dime

_ Tú..._ como decirlo sin sonar egoísta, hipócrita y posesiva_ cuando estemos en Chicago y cada una esté por su lado_ comenzó a mover la pierna nerviosamente_ ¿También mantendrás relaciones sexuales con otras personas?

_ Juliana en alguna que otra ocasión me gustas salir, conocer a alguien divertirme y si te he visto no me acuerdo, eso no quiere decir que lo haga todas las noches_ se llevó el tenedor a la boca_ así que si, puede que exista esa posibilidad. ¿Por qué la pregunta? Ya te dejé claro que uso protección

_ No era por eso

Se dijo más para así misma que para Valentina. Esa respuesta no le gustó, sabía que era injusto, ya que ella dormiría con Liah cada noche, bueno obviando que nada de sexo, si acaso como siguiera la cosas así, alguna que otra masturbación caía y si no, ducha fría:

_ Juliana no puedes pretender que solo me acueste contigo, se supone que solo es una relación de placer, porque no te estarás enamorando de mi ¿verdad?

_ no_ se pasó la mano por la cabeza_ no se a lo mejor tengo un instinto primitivo, tampoco me hace gracia que el hermano ande rondando en Milán y Liah ahí.

_ No creo que Liah te sea infiel, y de ser así tú no eres nadie para reprochar nada.

_ Tú de qué lado estás_ se cruzó de brazos y se apoyó en el respaldo_ unos días te da igual Liah y me cabalgas como una vaquera salvaje y en otras ocasiones me pones a mí de mala defendiéndole.

_ Juliana, ni yo soy buena ni tu tampoco_ se levantó, giró la silla y se sentó encima de Juliana cara a cara, movió su cadera creando fricción_ me encanta cogerte_ La morena suspiró y colocó las manos en su cadera_ te encanta cogerme y en esos momentos, no piensas en Liah ni en lo que estará haciendo_ movió con más insistencia la pelvis, notando la erección de Juliana_ ahora mismo te daría igual que esté retozando con nadie porque solo piensas en ponerme a cuatro patas.

_ No, ahora mismo no me llega la sangre al cerebro.

Valentina carcajeó, quedando fija en sus ojos marrones, oscurecidos y dilatados por la excitación:

_ Lo que quiero decir es que, no me gusta ese pensamiento tan posesivo, tu puedes ser de todas pero las demás solo te pertenecen a ti, eso es hipocresía _ comenzó a desabrochar los botones de su camisa azul claro, con bordados azul marino_ la gente puede pensar que soy una puta, pero voy con la verdad por delante y es lo que hay, ¿por qué en vez de hablar gastamos el tiempo cumpliendo una de esas fantasías? Sé cómo tachar unos cuantos de una sola vez.

Se quitó de encima y tiró de Juliana hasta la habitación. La suite de ese hotel era más grande y tenía varias habitaciones, una que parecía un pequeño salón, baño y habitación, sin mencionar que tenían balcón. Dejó que la morena siguiera desvistiéndose mientras que Valentina sacaba unas cositas de su maleta, tirando encima de la cama un objeto que tenía forma de huevo:

_ Número seis, quiero ver cómo te masturbas con eso

La morena se había quedado en bóxer negro con la gomita rosa y pequeños lunares, obviamente los ojos azulados de Valentina no se fijaba en esos detalles, de solo ver el notable bulto en su entrepierna le humedecía todo su sexo:

_ ¿qué es esto?

El juguete estaba aun con el envoltorio, esas cosas siempre las compraba nuevas, también había sacado el antifaz que usó para sorprenderle con el zoo:

_ Es un huevo, ábrelo y sácalo_ ordenó a la vez que también se desnudaba, Juliana quitó el envoltorio y sacó el objeto de látex o silicona que había dentro, tenía forma de huevo solo que con una obertura en la parte de abajo, dentro de esa obertura tenía un pequeño botecito que contenía lubricante_ pero quiero añadirle un reto, conseguir que te corras antes de que cuente hasta diez.

Juliana carcajeó:

_ Ni que tuviera eyaculación precoz.

_ Eso es lo divertido, conseguir excitarte hasta el punto de no poder aguantar más_ dio unas palmaditas en la cama_ sube y ponte de rodillas, mirando al espejo

Estaba bien eso del reto, no es que aguantara por horas, ya le gustaría, a no ser que le pusiera un preservativo efecto retardarte, cosa que no haría más en la vida, estaría dentro de la media pero al menos lo disfrutaba. Se puso de rodillas mirando al espejo, Valentina se colocó detrás:

_ ¿Qué gano si aguanto?

_ Hago una cosa de tu lista, la que me pidas, menos la dos, la que quieras

_ ¿por qué la dos no?

Sintió las manos de Valentina acariciar sus glúteos a la vez que esbozaba una risita:

_ ya sabes porque

La rubia vertió el frasquito de lubricante dentro del juguete y lo masajeó para que se expandiera, bajó la ropa interior de Juliana, observó cómo se erguía su excitación en cuanto la tela dejó de hacer presión, se relamió los labios, aquel gestó no solo hizo dibujar media sonrisa a Juliana, si no que le excitó más, con la mano libre agarró su miembro y lo introdujo dentro del juguete, que sensación, fresco y no era liso como por fuera:

_ Tu mano dominante_ le susurró, Juliana agarró el juguete de silicona que envolvía su miembro y Valentina colocó la suya encima para marcar el ritmo que debía seguir, que placentera era esa mierda_ no puedes aminorar la marcha_ un pequeño mordisquito de paso en el lóbulo de la oreja antes de colocarle el antifaz_ ¿Lista?

_ ve preparándote para el baile erótico que me vas a regalar, preciosa

Valentina rio con sensualidad y mientras acariciaba los costados de Juliana le susurró en el oído:

_ Uno

Juliana comenzó con el ritmo que le había marcado Valentina, esperando que dijera el dos rápidamente, pero se temó su tiempo, dirigiéndose al otro oído, acariciando sus senos en la espalda de la morena, que al tener los ojos cerrados hacían más intensos esas sensaciones, puede que no se lo pusiera nada fácil:

_ Dos_ esbozó un pequeño jadeo_ yo también me estoy tocando

Dijo con voz erótica, ya iban por el dos y ya tenía claro que perdería ese puñetero reto, solo esperaba que no escogiera uno de los dos primeros, volvió a sentir el aliento de Valentina en el otro oído:

_ Tres, eso es Juliana mastúrbate para mi

Juliana no se vería reflejada en el espejo pero Valentina si lo hacía, eso le excitaba mucho, gestos de placer y de sufrimiento por aguantar hasta escuchar ese diez que le diera el poder de la liberación:

_ Cuatro, imagina que es mi boca quien te da placer, se me hace la boca agua cada vez que recuerdo el sabor de tu po....

_ Valentina por favor_ dijo suplicante mientras aminoraba la marcha_ di el cinco ya

Valentina al ver que aminoró la marcha le dijo el número cinco y le dio un fuerte azote en el trasero:

_ Te dije que nada de aminorar la marcha_ Juliana volvió a retomar el ritmo de antes, Valentina seguía estrujando sus glúteos, tensos, como su cuerpo, esbozó una sonrisa_ seis

Lo siguiente que hizo fue demasiado para la morena, volvió a cambiar de oído:

_ Siete_ agarró la mano que no estaba usando Juliana y lo acercó hasta su sexo_ mira como de húmeda me tienes

Al notar el calor y la humedad de Valentina en sus dedos fue demasiado:

_ Dios, Valentina

Dijo antes de explotar y llenar el huevo con su corrida, apoyó las manos sobre la cama vencida, esa mujer era demasiado sensual, erótica y sucia, como para aguantar ese ritmo. Valentina entre risas le quitó el antifaz, Juliana de mala gana se quitó el juguete y lo tiró al suelo:

_ Ven_ dijo entre risas la ojiazul pegándose más cuando Juliana se giró para estar cara a cara, rodeando con los brazos el cuerpo de la vaquera_ me encanta ver tu cara de placer, sobre todo cuando te corres.

_ Viciosa

Dijo Juliana con tono divertido, Valentina giró un poco la cabeza y miró su culo, las manos de la morena se estaban deleitándose masajeando sus glúteos, alzó una ceja:

_ No soy la única

Añadió ladeando la cabeza, puesto que la morena era menos paciente que Valentina, le encantaba besar su piel, sus labios, sentir su cuerpo, su calor, acariciar cada centímetro de su anatomía, su aroma, nunca pensó que una mujer podía oler tan bien. Fue bajando sus besos hasta el canalillo, si bien en esos días aprovechaba a leer artículos para complacer a una mujer, leyó que no había que ir directamente al pezón, si no que había que estimular poco a poco:

_ Me encantas

Decía entre gruñidos a la vez que recorría sus senos con la boca, a la vez que con las manos usaba los dedos gordos para estimular los pezones, Valentina entre gemidos enredó sus dedos en el pelo de la vaquera para atraerle más y cuando atrapó uno de sus pezones erectos con sus labios y tiró hizo que jadeara más fuerte, bueno eso sí que se lo enseñó Valentina una noche que se lo hizo. Le empujó suavemente y se tumbó sobre ella:

_ ¿No quieres saber que quiero que hagas?

Preguntó Valentina entre gemidos, los besos húmedos de Juliana habían descendido hasta su abdomen y lo recorrió con la lengua, incluso le dio un pequeño mordisquito. En parte se hizo la sueca, le cortaría el rollo si dijera, uno o dos, que se lo pidiese después. No fue directa tampoco a su clítoris, se tomó su tiempo, estimulando cada zona nerviosa que rodeaba esa parte, al igual que le gustaba el sexo oral que le practicaba su rubia, a ella también le gustaba practicarle el cunnilingus y con la practica a cada vez le llegaba a estimular y dar más placer, recorrió sus muslos internos, entre besos y lametones, en esa parte ya Valentina alzaba la cadera exigiendo más:

_ Juliana por favor

Esa suplica llegaba cuando la lengua de la morena recorría sus labios mayores y monte Venus, al menos hacía eso un par de veces, desesperando a la rubia y humedeciéndola más, se atrevía a introducir un poco la lengua y rozar sus labios menores, saboreando el dulzor de su flujo, desde esa zona, procedió a subir su lengua, acariciando levemente el clítoris, de nuevo bajó hasta los labios menores subiendo hasta el clítoris, Valentina se retorcía, sufría placenteramente, jadeaba quería liberarse de tanta excitación:

_ Juliana por favor

Ya no le hizo suplicar más y comenzó a torturar su protuberante clítoris, haciendo que jadeara más fuerte. Le encantaba que fuera una chica ruidosa en la cama, no era experta en gemidos fingidos, pero si eso era fingido Valentina ya podía ser una gran actriz. Introdujo las dos primeras falanges de sus dedos índices y corazón en su obertura. Ok, eso no lo leyó ni lo vio en ningún video, era algo que le tuvo que explicar la ojiazul, la zona g de la mujer no está junto a los riñones, eso le dijo en una ocasión que le introdujo los dedos buscando profundidad. No tardó mucho en explotar y en temblar:

_ Joder_ dijo casi sin aliento_ aprendes rápido_ Juliana se tumbó al lado de Valentina apoyando su codo en la cama y posando la cabeza en la palma de su mano_ y debo decir que has superado a todos, no miento, el mejor sexo oral que me han hecho.

_ Lo haces para excitarme ¿verdad?

_ En realidad era un cumplido_ dijo mirando su erección_ pero si eso te pone cachonda te lo estaré repitiendo a cada rato.

A ambas les gustaba las posturas cara a cara, puede que fuera por un poco de todo, porque se perdían en las miradas, se sentían más, pero esa noche Valentina haría la excepción y en vez de cabalgar a la vaquera mirándole a la cara, se posiciono mirando hacia el otro lado y apoyándose en las rodillas de Juliana marcó el ritmo. Obviamente a Juliana le excitaba ver como Valentina se movía, tenía una espalda muy sexy y sus glúteos, le encantaba agarrárselos cada vez que sentía deslizarse hasta lo más profundo:

_ Valentina mantente ahí

Pidió que se sostuviera un poco separada, sosteniendo sus glúteos, fue la morena quien movió la cadera y marcó el ritmo, más rápido que el que llevaba Valentina, que gemía de placer, lo notaba en su miembro, eso no se podía fingir:

_ Ahhh, Juliana

Gritó antes de notar las contracciones de sus paredes vaginales. Juliana le dio dos últimas embestidas fuertes, jadeando fuerte a la vez que le llenaba toda, y sin olvidarse del azote que le dio la ojiazul, aprovechó esa posición para devolvérsela, Valentina gritó y la miró sorprendida, Juliana entre risas:

_ Quid pro quo preciosa

Valentina carcajeó, se tumbó al lado de la morena y apoyó la cabeza en su hombro, siendo arropada por los brazos de ésta, sintiendo un ardor en su pecho y el estómago comprimido, como si lo estuvieran apachurrando con un puño, pues así, no sabía cuáles eran sus momentos favoritos con Juliana, ¿Cuándo hacían algo tan simple como pasear en un parque? Cuando de forma dulce le follaba o momentos como ese, después de haberlo hecho y sentir sus abrazos, sus besos en la frente:

_ Señora Carvajal_ dijo Juliana con tono divertido_ de todas debo admitir que has sido la mejor en todo, también tenga en cuenta que eran imaginarias así que no te lo tengas muy creído.

_ También admito que eres la mejor en el post coito

Dijo acomodándose sobre su pecho y cerrando sus ojos, el cansancio comenzó a vencerle:

_ ¿Por qué?

_ Por tus abrazos y las caricias que me haces en el pelo_ respondía medio adormilada_ es dulce.

_ ¿Ninguno de los que estuvo antes de mi lo hacía?

Valentina esbozó una risita débil:

_ para esas cosas tenían a sus mujeres y tampoco me sentía cómoda entre sus brazos.

_ Que desagradables_ dijo Juliana un poco molesta, lo primero si ya de por sí, era amorosa que le encantaba dar abrazos, después del sexo eran increíbles, lo segundo que le molestó, ya que Valentina se ofreció a esos puñeteros 365 días de placer, al menos tratarle bien, no usarle y a dormir ¿Cómo pudo permitir que le hicieran eso?_ Valentina

Valentina se había quedado dormida en su regazo, parecía un auténtico ángel, sin darse cuenta se vio sonriendo, le dio un beso en la frente y aun sabiendo que ésta no le escuchaba, le susurró:

_ Sería incapaz de tratarte mal y negarte un abrazo.

Suspiró, le estrechó más fuerte y se quedó dormida. La cama era muy cómoda, las sabanas suaves, estaba teniendo agradable sueño, bueno no tan agradable, más bien uno extraño, ya que se encontraba casándose con Liah y esa horrible sensación de querer salir huyendo a otra dirección, no quería estar en ese lugar si no con Valentina. La voz de la rubia sonó fuerte, más bien fue un grito, Juliana se incorporó, Valentina se había despertado gritando:

_ TOM PARA NOOOO

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Esta historia NO me pertenece es una ADAPTACIÓN que se esta realizando con la AUTORIZACIÓN de su autor. Todos los créditos y derechos pertenecen a:
elio_kin