¿Le dijo quién era Tom? No, ni Juliana quiso tentar a la suerte, solo el mero hecho de despertarse gritando y tirarse un buen rato llorando en los brazos de Juliana, ya le puso de mala gana. Lo cual obligó a Juliana estar distante parte de la mañana, con las preguntas perforando su cabeza "¿Quién era Tom? ¿Qué te hizo? ¿Por qué no confías en mí?" o la pregunta que podía llegar afectar más "¿Por qué no me miras?" Después del día en que Liah no atendía ni una de sus llamadas, ni por Skype, ni por teléfono, con la excusa de que había estado dando apoyo en un evento a Serena donde fue a recoger un premio y luego se fueron de fiesta, su relación a distancia se normalizó, volviendo a contactar, tanto por vídeos llamadas por Skype, Smartphone, o llamadas normales y comunes. Siempre tratando de ponerse en un lugar que no enfocara a Valentina o que diera a entender que estaba en su suite. Incluso en el momento que estuvieron hablando por Skype, Valentina estaba sentada enfrente leyendo una revista que había publicado un artículo que hablaban de ella:

_ En un rato me tengo que preparar_ decía Liah mirando su agenda_ quedé a las 17:30 para merendar con las chicas

Bueno, diferencia horaria entre Estados Unidos Este, ubicación de la morena y Milán ubicación de Liah eran seis horas, por lo cual, si en Nueva York eran las 10:00 en Milán eran las cuatro. Estaba en su habitación sola, o eso parecía, aun con el pijama puesto, bueno tenía una de sus camisetas de tirantes que usaba para dormir, debió de escuchar algo se incorporó un poco para mirar por la ventana, ese instante Juliana achicó los ojos:

_ ¿Qué es eso que tienes en el hombro?

Preguntó entre dientes, Liah se miró y habló quitándole importancia:

_ Ya me conoces, cuando llevo una copa encima me vuelvo torpe y sin darme cuenta me di un golpe.

Juliana se lamió los labios:

_ Liah_ retorció los dedos nerviosamente_ ese golpe ¿no te lo habrá hecho alguna boquita verdad?

Liah le miró con enfado:

_ Juliana últimamente te estás pasando con tus comentarios posesivos_ bufó airada_ Nunca has sido así, ¿alguna vez te he dado motivos?

La morena se pasó las manos por el pelo, para seguir hablando con más tranquilidad ha le vez que forzaba una sonrisa:

_ Lo siento, es que, te echo de menos.

En ese instante la rubia que había parecido concentrada en la lectura miró por encima de la revista. Pero que mentirosilla

_ Y yo a ti_ contesto la chica mordiéndose el labio inferior_ hay algo que me ha dado por pensar últimamente ¿por qué no hacemos sexo telefónico un día?

A Juliana se le pusieron ojos como orbitas, desviándose la dirección de su mirada a Valentina, que sonreía divertida y dejaba la revista junto al plato, esperando a ver que respondía Juliana. Hablar con la novia teniendo a la amante al lado no era buena idea:

_ Ahora tengo un ratito_ siguió diciendo coqueta a la vez que bajaba uno de sus tirantes_ ¿qué te parece la idea?

Valentina agarró su móvil y rápidamente mandó un mensaje rápido, Juliana lo sacó para leerlo:

"por favor quiero ver cómo te masturbas mirando a la guarrona de tu prometida"

_ Parece ser que hoy no va a poder ser, satanás me ha mandado un mensaje solicitando mi presencia_ Valentina esbozó una amplia sonrisa_ De verdad Liah ¿Cómo has podido soportarle tantos años?_ a la vez que se relamía los labios, comenzó acariciar la pierna de la morena con su pie descalzo_ a veces me dan unas ganas de darle unos buenos azotes, pero de los que duelen

Valentina volvió a mandar otro mensaje:

"Cuando quieras"

_ ¿Ves? Que pesada y que oportuna porque me muero por ver que esconde ese top_ Liah puso un puchero_ te dejo adiós

Iba a cortar la video llamada por Skype, cuando Liah le detuvo:

_ ¿No vas a decir que me quieres?

_ Te... _ le entro la risa nerviosa, aunque fuera por cam, los ojos castaños de Liah estaban fijos esperando ese "te quiero" que había escuchado de sus labios que lleva escuchando desde hacía doce años. Era la primera vez que le costaba decírselo, quizás porque Valentina tenía el pie en una zona prohibida y la sangre no le llegaba al cerebro_ eres increíble Liah, cuento los días para verte

Y cortó la video conferencia. Quitó el pie de Valentina de su entre pierna y se levantó nerviosa, ahora era ella quien necesitaba asomarse por el balcón y coger aire. Tenía razón hipócritamente le había echado en cara si el golpe de su hombro era un golpe, para luego ¿qué? No poderle decir "te quiero":

_ Ahora creo que todos son de mi igual condición_ dijo cuando sintió a la rubia asomada, mirándole fijamente_ ¿Qué me has hecho Valentina? ¿Qué he hecho? Y lo peor de todo es que lo sigo haciendo.

Valentina le agarró de la mano y le giró para que esta quedara de frente:

_ ¿Quieres parar?

Era la primera vez que una pregunta le causaba pavor, quitando el día de su boda cuando le hicieron la pregunta "¿quieres como esposo a Oliver Ballesteros?" incluso la cuestión actuar le dio más terror. Juliana asió sus mejillas y se inclinó para darle un beso, lleno de anhelo y ternura, cuando se separó unos centímetros apoyando sus frentes, la morena cerró los ojos mientras que Valentina los mantuvo entrecerrados mirando los labios carnosos de Juliana, que respondió con un débil:

_ No

Maldiciendo en su fuero interno lo débil que era ante su cercanía, deslizó sus manos por la espalda de la ojiazul y abrazarse, ésta apoyó su cabeza en el hombro de Juliana, que mantenía sus labios pegados en su sien, la brisa de la mañana les acariciaba, revoloteando sus cabellos, mientras que de fondo se escuchaba el bullicio de la gente caminando, hablando, corriendo, los coches alguno que otro pitaba, sin embargo, resultó ser un murmullo lejano, puesto que la ojiazul estaba perdida escuchando los latidos de Juliana y la morena se encontraba perdida en sus tortuosos pensamientos:

_ Juliana

Rompió el silencio la rubia, que aun desistía de alejarse de sus brazos:

_ Ummm

Respondió emitiendo un sonido la vaquera:

_ ¿Me quieres?

_ Si

Y en este instante a Valentina por casi le dio un infarto, una sensación de lo más extraña le embargó todo su ser, aparte de que la patata le iba salir disparada por la garganta, sentimientos de terror, dicha, de querer salir corriendo, de júbilo, de... miró a Juliana con ojos como orbitas y totalmente pálida, la morena al ver la cara de espanto que había puesto comenzó a carcajear:

_ No me refiero en el sentido romántico Valentina _ alivio y decepción, pero que bipolar_ si me hubieras preguntado si estaba enamorada de ti la respuesta hubiera sido otra_ le besó en la frente tratando de calmar ese susto que acababa de sufrir_ quiero decir, te tengo cariño a pesar de tus puñeteros defectos, siento la necesidad de estar protegiéndote. ¿Y tú?

Valentina carcajeó, recuperándose de ese susto:

_ Mirándolo de la forma que tú dices_ le acarició sonriente_ aunque tenga mis arrebatos y lo pague contigo, también te tengo mucho cariño.

Su vida se había convertido en una montaña rusa, por un momento se odiaba por hipócrita, por otros momentos, como ese aun sabiendo de hipocresía sentía un mínimo de felicidad, había derribado un muro, puesto que algo en su interior le decía que Valentina Carvajal no le había dicho nada parecido a nadie en mucho tiempo. También le llenaba de dicha el hecho de que a cada día que pasaba más sonriente era. Al menos conseguía algo. Valentina le agarró fuerte de las manos y con una sonrisa traviesa le llevó hasta la habitación.

Liah estaba enfrente del espejo, terminando de vestirse, se llevó la mano al abdomen, sufría acidez y en más de una ocasión llegó a vomitar, antes de cerrarse la blusa observó su busto, había aumentado de tamaño, se llevó las manos a la cara y maldijo en su fuero interno, si al menos se hubiera acostado con Juliana antes de viajar a Milán hubiera ganado algo de tiempo. Los golpecitos a la puerta le sacaron de sus pensamientos, se terminó de abrochar la blusa y fue a abrir, con la sorpresa de que se trataban de los hermanos Van der Woodsen. Liah miró a ambos, un poco con cierto temor. El fotógrafo, iba vestido de Armani, traje, gabardina y tenía el pelo engominado, éste amplió una sonrisa:

_ Hola preciosa_ entró a la habitación sin ser invitado a la vez que se quitaba los guantes de cuero negros_ me han comentado cierto asunto del que debemos hablar

Liah miró con reproche a Serena, que agachó a la cabeza:

_ Serena_Dijo la prometida de la señorita Valdés:

_ Tuve que hacerlo_ contesto avergonzada_ ya sabes que puede ser muy insistente

_ No le eches la culpa a mi hermanita_ dijo divertido_ ya sabes que puedo ser_ caminó hasta colocarse detrás de Liah y susurrarle en el oído_ muy insistente, eh leoncita

Liah apretó la mandíbula, se apartó rápidamente, señaló con el dedo índice la puerta y con determinación:

_ ¡Fuera de la habitación ahora mismo!

Vociferó. Mala elección, Charles Van der Woodsen podía ser un hombre caballeroso y dulce de cara al público, pero en la intimidad, únicamente con las mujeres, podía llegar a ser un idiota misógino. En un principio solo era negocios, Ford Models hacía competencia a Division Models Carvajal a cambio de una buena suma de dinero. El muy imbecil podía llegar a ser muy persuasivo cuando una mujer iba pasada de copas. Charles la miró airado y de un arrebato dio un par de zancadas y agarró del cuello fuertemente a la rubia, estampándole contra la pared:

_ Escúchame putita, será mejor que te encargues de esa mierda o encasquétaselo a otro porque no pienso pringar por un mal polvo de una noche_ Serena reaccionó para separar a su hermano de la chica ya que empezaba a ponerse colorada, pero el mayor de los Van der Woodsen se la quitó de encima dándole un guantazo y siguió amenazando a Liah_ Ahora, dame lo que he venido a buscar

Liah intentado respirar, señaló encima del escritorio una carpeta. Charles, éste sonrió y soltó a la chica que comenzó a toser con las manos en el cuello. Serena desde el suelo observó los chanchullos que se traía Charles con Liah:

_ Como siempre, es un placer hacer negocios contigo Serena, Iris te enviara las gratificaciones_ se dispuso a salir de la habitación cuando volvió a mirar el abdomen de la chica_ supongo que te ha quedado claro ese asunto ¿Verdad?

Liah temblorosa asintió:

_ Lo siento hermanita_ dijo mientras salía de la habitación_ sabes que ocasiones puedo dejarme llevar por mi mal carácter_ antes de cerrar la puerta_ nos vemos S.

Serena se levantó tapándose la nariz con el reverso de la mano y miró airada a Liah:

_ ¿Qué era eso que se ha llevado?

_ Nada_ respondió reteniendo las lágrimas_ ¿por qué narices le has contado la puta situación?

_ Porque había que hacer algo, ¿qué pensabas hacer abortar?_ Liah agachó la cabeza_ ¿No pensarías encasquetárselo a tu novia la virgen?

_ No lo sé_ se llevó las manos a la cabeza_ a lo mejor si le cuento lo que ocurrió de verdad lo entendería.

_ Y querría denunciarlo o peor, matarlo_ se dirigió hacia la puerta indignada_ antes de saber en los chanchullos en los que andabas metida te hubiera apoyado.

_ Oh por favor_ dijo con un mohín_ ya sabes lo zorra que puede llegar a ser Valentina Carvajal ¿te piensas que voy a soportar tantos años a su lado siendo humillada?

_ Eso es espionaje empresarial_ respondió Serena entre dientes_ se te caerá el pelo por esto.

Liah alzó las cejas sorprendida:

_ Ni se te ocurra_ achicó los ojos_ si no quieres que Valentina sepa que te acostaste con Oliver estando ella aun casada con él.

_ No te atreverás_ Dijo sorprendida Serena:

_ Provócame y lo verás.

Después de haber mantenido un buen rato intenso y duro en la cama, la morena a cada vez cogía más confianza y a pesar de la rudeza conseguían conectar con miradas llenas de deseo, besos entre gemidos e incluso los abrazos que le daba a cada embestida. Tanto así que en esta ocasión fue Juliana la primera en dormirse. Valentina a pesar de la fatiga, lo achacaba a la edad, tuvo que mantenerse despierta, tumbada boca abajo junto a la morena, estaba apoyada con los codos con el Smartphone en la mano, antes de abrir el correo contempló durante unos instantes a Juliana dormir, dibujó una sonrisa, pero que preciosa era y en esos momentos estaba siendo suya, se le erizó el bello de la piel cuando le admitió que le quería, no de forma romántica. Suspiró, encendió el Smartphone y Mr. Jekyll salió de nuevo a relucir, emitiendo un sonoro gruñido estampó el Smartphone contra el suelo mientras se ponía de rodillas, Juliana se sobresaltó y con preocupación actuó:

_ ¿Qué pasa? ¿Qué tienes?

_ ¿Qué tengo?_ preguntó con furia_ Iris se ha vuelto adelantar con uno de mis fichajes

Juliana puso los ojos en blanco y calló desplomada de nuevo a la cama:

_ Ah_ dijo un poco quitando importancia_ pero si es la versión Gremlin de Valentina

Valentina le miró fulminante:

_ No todo son eventos y mis almacenes bonita_ esa fue una inversión que hizo Valentina aparte de haber recibido la empresa, Alex Vause no tuvo nada que ver_ hay otros elementos que si fallan todo se va a la mierda, tu sueldo y el del resto de mis empleados_ respondió irritada_ No eres el centro del mundo Juliana, a mis espaldas hay miles de puestos y aunque grite, ladre o muerda sí que me preocupa que mantengan su trabajo.

Se levantó y fue hasta su equipaje, cuando se enfadaba tenía por costumbre tirar su Smartphone contra el suelo, contra la pared y bueno, en una ocasión llegó a escalabrar a uno. Así pues, siempre viajaba con un par de repuesto. Juliana se sentó al borde de la cama. Tenía razón, aborrecía tanto ese trabajo que no le prestaba atención. Lo único que le gustaba de ese puesto, era la rubia encabritada que estaba extrayendo la tarjeta sim y SD de un móvil para introducirlo al otro:

_ Perdona, Valentina _ la ojiazul seguía concentrada en lo suyo_ tienes razón, a veces puedes ser tan prepotente que a nadie le da por pensar que miras realmente por tus empleados.

_ La época que trabajé para Iris Allen_ comentaba mientras recogía el desastre que había montado en un momento_ llegué a pasar días con quemaduras por los cafés que me echaba encima o cuando pasé a trabajar para Alex Vause, me enseñó que si quería productividad había que tener mano dura_ cuando terminó de recoger se sentó al lado de la morena_ Nadie supo el rollo raro que tuvimos, así pues me trataba como una empleada más delante de los demás_ suspiró_ sé lo que es contar el dinero para llegar a fin de mes, si para conseguir que nadie se duerma en los laureles y mantengan la empresa a flote tengo que ser satán, Gremlin o la odiosa bruja piruja lo seré, pero al final del día todos tienen un techo, un plato caliente, ropa para sus hijos, todo por la mierda de la empresa que tanto odias.

Juliana esbozó una sonrisa adorable, Valentina le dio un beso en la mejilla fue a por ropa y fue a la ducha, era una suite, ese baño disponía de ducha con hidromasaje como una bañera con burbujas, pero sin llegar a ser Jacuzzi. Juliana se apoyó en el marco de la puerta con los brazos cruzados:

_ ¿No te jodería perder la empresa si quiebra?

_ Ya tengo mis almacenes y mi fortuna_ respondió mientras se enjabonaba el cuerpo_ puedo reinventarme invirtiendo en otro negocio si me apetece, los únicos que tienen la de perder son ustedes_ abrió la mampara de golpe y miró amenazante a Juliana_ una palabra de lo que te estoy contando y te daré un castigo_ Juliana carcajeó_ anda, mira si puedes pedir algo dulce de comer que tanto ejercicio me ha bajado el azúcar.

_ Si señorita

Dijo saliendo del baño, Valentina con una sonrisa divertida alzó aún más la voz:

_ Vístete cuerpo serrano

Se escuchó la voz de la morena:

_ En cuanto desalojes la ducha

Esa tarde no tenían un evento muy importante dedicado a la moda, más bien era un evento solidario contra las drogas quienes estaban invitados las empresas que colaboraban donando grandes cantidades todos los años. Como si fuera un agradecimiento por los gestos altruistas de los empresarios. Hacían una yincana en el que los concursantes eran ciudadanos neoyorquinos que se habían apuntado al evento solidario:

_ En realidad la mayoría usan las ONG'S como un medio de negocio_ le susurraba Valentina a Juliana mientras observaban una de las pruebas_ un tanto por ciento de lo donado desgrava, es decir dinero limpio regresa a nuestros bolsillos y que hacienda no puede tocar, reconozco que la mayoría de ONG'S que colaboro es con ese fin.

_ Entonces ¿Les llega el dinero a las ONG'S?

_ Pues claro, la cantidad que se ha desgravado lo devuelven una vez al año, es decir todo el dinero recaudado durante todos los meses van para ellos supongo.

_ ¿Colaboras en alguna ONG porque quieres o lo haces para que regresen tu dinero?

Valentina se encogió de hombros y aplaudió:

_ Algunas ONG me resultan más convincentes que otras, pero mayormente suelo donar más los que van con la lucha de drogas_ hizo un gesto con la cabeza a una de las pruebas_ como esto, al apoyo familiar y para investigaciones contra enfermedades, el futuro es la investigación y yo invierto en eso, por el avance del ser humano y de los beneficios que se puede sacar de eso, a nivel de salud, digo ¿si mañana descubren la cura contra el Alzheimer? Tendría posibilidades de prevenirme llegando a la vejez_ miró a Juliana_ o poder avanzar y sacar en coma a una persona antes de que llegue a muerte cerebral.

Juliana estaba fascinada, que parlanchina estaba la ojiazul, normalmente es al contrario, lo cierto es que le encantaba aquello. No le estaba contando de donde procedía ni nada por el estilo, pero al menos supo facetas de Valentina Carvajal que no se esperaba. Era cierto, cuando invirtió en los almacenes hizo que su fortuna aumentara y que si el día de mañana la empresa se iba al traste, ella seguiría estando sobrada de dinero:

_ Me sorprende señora Carvajal

Valentina volvió a mirar hacia delante con gesto travieso:

_ Porque no puedo emplear mi lengua con otros quehaceres más divertidos.

Juliana dibujó media sonrisa y negó con la cabeza, esa mujer no tenía remedio, ya podía estar hablando de colores que siempre terminaba con fuego abrasador. Después de la yincana acabaron en un salón donde habían reunido a todos los empresarios, se basó en una cena ligera, unos discursos de agradecimiento y un par de horas con música animada. Valentina, se mezclaba con los empresarios, aunque fuera de la industria de moda y textil ella también era una, siempre buscando otras salidas y si veía algo que invertir, comprar o que tuviera futuro ni se lo pensaría dos veces:

_ Señora Carvajal_ dijo uno de los hombres mirando la pista de baile_ ¿Esa no es su asistenta bailando con la señora Watson?

La señora Watson era una de las empresarias que hizo fortuna abriendo restaurantes, teniendo casi la edad de Valentina abrió el restaurante y así siguió hasta montar sus propias cadenas de restaurantes de comida rápida.

La rubia carcajeó, era cierto, Juliana y la señora Watson, por cierto una mujer de sesenta cuatro años, hacían los pasos de la macarena. En ese instante se olvidó de lo que estaba hablando con el señor Parsons, ya que no dejaba de mirar a la morena, se tapó la cara cuando le vio hacer el gesto del aspersor. No tenía vergüenza en algunas ocasiones, aunque le daba en la nariz, que las copas de vino que se tomó en la cena habían colaborado. Suspiró, le estaba dando demasiadas libertades, no dejaba de ser su asistente, si fuera otra ya le hubiera cantado las cuarenta. Pero es que era tan mona animando a la señora Watson. No se había cruzado mucho con esa mujer, pero las dos últimas veces le había visto desanimada por el fallecimiento del señor Watson y esa noche parecía disfrutar en compañía de Juliana.

Aunque disfrutaba viendo como la morena, acababa robando sonrisas a los presentes, llegó un momento en que los tacones le estaban matando. Tocaba marcharse, los presentes, bueno en realidad los más ancianitos lo lamentaron, ya que normalmente eran los olvidados y que esa jovencita tan maja se hubiera acercado a animarles, era de agradecer:

_ Te pasas encantadora muchas veces

Comentó la ojiazul riendo mientras miraba por la ventanilla:

_ Ni que los ancianitos fueran leprosos, siempre van agradecer que se les tenga en cuenta

_ Seguro que le has robado el corazón a más de uno

_ Sin vergüenza me llaman a mi_ comenzó a tararear_ porque me río, me río y me vuelvo a reír.

_ te desmadras cuando bebes

Hizo un gesto con la mano para quitarle importancia:

_ Solo han sido cuatro copas de ese vino espumoso.

_ Espero que te apetezca champán_ dijo cuando el coche comenzó aminorar para aparcar enfrente del hotel_ he pedido una botella.

_ ¿Pretende emborracharme?

_ Puede

Respondió de forma coqueta, atravesaron el recibidor, pacientes como era costumbre, esperaron el ascensor, se abrieron las puertas, paciencia, antes de que se cerraran de nuevo Valentina ya se había enganchado a su cuello y comenzado a devorar la boca de Juliana, que respondió encantada con la misma fiereza:

_ Y ¿esta impaciencia?

Valentina estrujó los glúteos de Juliana mientras que carcajeaba:

_ verte bailar la macarena me ha puesto caliente

_ Me vas a volver una adicta al sexo

_ Soy una adicta al sexo

Añadió la ojiazul alzando una ceja. Por fin llegaron a la planta donde se encontraba la suite de Valentina. Ya habían dejado la cubitera con dos copas y la botella de champan. Para poner la guinda al pastel un baño relajante en esa fabulosa bañera, bueno la morena le había susurrado cosas muy obscenas y sucias cuando lo estuvieron haciendo, su número diez de la lista y sin habérselo pedido, así que ella también quería tachar un numero de la lista de Juliana. La primera en entrar fue Valentina y esperó a que la morena apareciera con las copas de champan, ésta se echó para adelante para que Juliana se sentara detrás y posicionar a la ojiazul entre sus piernas. Valentina recargó la cabeza sobre su hombro, mientras notaba como sus brazos le rodeaban la cintura, extrañamente sus manos no fueron directas a su pecho o a su sexo, como habría hecho otro, disfrutaron de las burbujas de la bañera, el agua caliente relajante:

_ Me estas mal acostumbrando_ dijo Juliana entre risas antes de dar un trago al champan_ cuando llegue a chicago estoy viendo que daré mucho uso al huevo ese

Valentina carcajeó, Juliana le hablaba con su mejilla pegada a su sien y con una mano hacía figuritas en su abdomen, entre caricias y cosquillas:

_ Haz bien tú trabajo como asistenta y puede que te recompense algún día.

_ Vamos, que voy a desgastar el huevo

Valentina volvió a carcajear:

_ Aun estás a tiempo de estudiar lo que te gusta_ acarició la rodilla de Juliana_ lo importante es que seas feliz, de trabajar en lo que más te llene

_ Valentina, hacer eso es como retroceder_ entrelazó sus dedos mientras miraba el agua pensativa_ todos los años que malgaste sacándome la licenciatura de Administración de empresas, si no hubieran sido por mis compañeros, esos años de mi vida habrían sido una mierda, ¿para qué? Pensaba en el futuro feliz con Liah y sin embargo, ese futuro a cada vez lo veo más negro.

_ ¿Por qué?

Preguntó con el corazón a mil:

_ En ocasiones siento que no me quiere a mí, si no la persona que quiere que sea_ buscó la mirada azulada de la rubia_ muchas veces serás una perra sin escrúpulos_ hizo que pusiera los ojos en blanco_ pero hasta tú has mostrado más interés por mi forma de ser que mi prometida.

Valentina se giró para quedar cara a cara con la morena. Y Liah ¿qué pretendía que fuera Juliana? Era atenta, cariñosa, apasionada cuando hablaba de los animales, de su familia incluso muchas veces de la propia Liah. ¿Qué quería? Más dinero, eso no daba la felicidad, sin embargo, el sentarse a horcajadas sobre sus piernas y besarle, eso era bonito. Valentina por el momento había comprobado siempre que le ha necesitado, había estado ahí. Tenía dos defectos a los ojos de la rubia, su hipocresía y por muy cariñosa que fuera, como pareja estable no era para nada fiable. En parte por su culpa lo reconocía, en un principio la morena se resistió, no, sonrió en su fuero interno, no lo hizo:

_ Si tan perra, egoísta y fría que soy ¿por qué accediste a lo que te propuse?

Juliana sonrió y dijo con tono divertido:

_ Porque estás muy buena_ acarició el rostro de la ojiazul_ es algo que ni yo me explico, me he pasado años rechazando mujeres, muy guapas por cierto, curiosamente lo sigo haciendo ¿Por qué tu no? No lo sé incluso llego a pensar ¿Qué pasará cuando tenga a Liah junto a mí de nuevo?_ se encogió de hombros_ antes pensaba en ella y me excitaba, ahora tú me nublas

_ No cariño_ dijo Valentina esbozando una risita mientras acariciaba su miembro erecto_ estás excitada.

Juliana se lamio el labio a la vez que su respiración se agitaba:

_ Te tengo a horcajadas_ comenzó a mover la pelvis acompañando las expertas caricias de Valentina _ desnuda, es inevitable excitarme

Valentina acercó su rostro al de Juliana y con una sonrisa traviesa:

_ Número cuatro de tu lista_ dijo acelerando el ritmo de su masturbación, Juliana gimió_ prepárate para el buen sexo en la bañera.

Little Flashback

Durante horas soportó las terribles contracciones que le provocaba el condenado bichito. Así le había llamado en alguna ocasión, cuando le cantaba y le hablaba a su barriguita. Casi toda una noche, posicionado de culo tuvieron que practicarle episiotomía, un bonito recuerdo en su cuerpo de su primer hijo, ya que cuando fuera una mujer de éxito pensaba traer muchos hermanitos a Barry.

Cuando le sostuvo en brazos por primera vez, era tan pequeño, tenía el cabello rubio, pero el color de los ojos de Oliver, en cuanto éste le vio, le brillaron los ojos. Ambos se abrazaron sonriendo a ese pequeño ser que trajeron al mundo:

_ Mira que hemos hecho Valentina

_ Lo se

Dijo la adolescente de quince años, Oliver que cumplió sus diecisiete, miró a la chica con ojos ilusionados:

_ En cuanto podamos nos casamos_ besó a Valentina en la frente_ hemos formado una familia_ sonrió feliz_ Te quiero mi vida_ besó al bebe_ los amo

_ ¿por siempre jamás?

Preguntó feliz, puede que fuera porque su cuerpo estaba con las hormonas revolucionadas, pero estaba feliz. Ironía de la vida, la película favorita de Valentina era la de Peter Pan, quizás le recordaba mucho que sus "hermanos" y ella eran niños perdidos obviando el que vivían en un mundo para nada parecido al mundo Jamás:

_ Por siempre jamás mi vida.

Fin del Flashback

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Ya está aqui GabiSampp07 y gloria199415  espero mi recompensa 👀
Ahora debo correr al trabajo es tardísimo 🙈🙈🙈🙈🙈🙈