once

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

JENNIE

El último día de nuestro viaje comenzó como cualquier otro, con risas y expectativas para una nueva aventura. La señora Kim nos dio la libertad de explorar más del bosque, y todos estábamos ansiosos por aprovechar al máximo nuestro tiempo restante. Lisa y yo decidimos aventurarnos un poco más lejos esta vez, queriendo disfrutar de la belleza del lugar sin interrupciones.

—¿Lista para una pequeña caminata? —me preguntó Lisa mientras nos preparábamos.

—Siempre. —respondí con una sonrisa radiante.

Nos adentramos en el bosque, siguiendo un sendero que parecía menos transitado. A medida que avanzábamos, el sonido del campamento se desvanecía, reemplazado por el canto de los pájaros y el susurro del viento entre los árboles.

—Este lugar es mágico. —comenté, maravillada por la naturaleza que nos rodeaba.

—Sí, lo es. —respondió Lisa, sonriendo.

Sin embargo, a medida que continuábamos caminando, me di cuenta de que el sendero se volvía cada vez más confuso. Los árboles parecían todos iguales, y empezamos a perdernos.

—Lisa, creo que deberíamos volver. —dije, mi tono preocupado.

—Sí, tienes razón. —admitió Lisa, intentando recordar el camino de regreso.

Pero el bosque parecía habernos envuelto en su laberinto verde. Nos dimos cuenta de que estábamos perdidas, y la preocupación comenzó a asentarse en nuestros corazones.

—Tranquila, no te preocupes, encontraremos el camino. —dijo Lisa, tratando de sonar segura.

—Espero que sí. —respondí, tomando su mano con fuerza.

Después de lo que parecieron horas de caminar en círculos, comenzamos a escuchar voces a lo lejos. Aliviadas, nos dirigimos hacia el sonido, esperando encontrar a nuestro grupo.

Para nuestro horror, nos encontramos con Junmyeon y un par de sus amigos. Él nos miró con una sonrisa sardónica, evidentemente disfrutando de nuestra situación.

—Miren quiénes están aquí. —dijo Junmyeon con una voz llena de sarcasmo—. ¿Se perdieron, chicas?

—No es asunto tuyo, Junmyeon. —respondió Lisa, tratando de mantener la calma.

—Oh, pero creo que sí lo es. —dijo él, acercándose a mí—. Parece que tu nueva amiga no es muy buena para cuidar de ti, Jennie.

Observé como una ola de ira atravesaba a Lisa.

—Déjala en paz. —dijo Lisa, avanzando un paso hacia él.

—¿Y qué vas a hacer al respecto, Lisa? —la desafió, sonriendo con malicia.

Sin pensarlo, Lisa levantó sus manos y lo empujó con fuerza. Junmyeon respondió con un golpe, y pronto estaban en una pelea física. Yo estaba gritando, pidiendo que se detuvieran, pero la rabia y la adrenalina eran demasiado fuertes.

La pelea fue rápida y brutal, con ambos intercambiando golpes. Finalmente, Lisa logró derribarlo y se levantó, respirando con dificultad.

—Lisa, ¡basta! —grité, corriendo hacia ella y sujetándola por los hombros.

Miré a Junmyeon, que se levantaba lentamente, con una mirada de odio en sus ojos.

—Esto no ha terminado. —dijo él, antes de alejarse con sus amigos.

Lisa me miró, sus ojos llenos de preocupación.

—Lisa, ¿estás bien?

—Sí, estoy bien. —respondió, aunque podía ver el dolor en sus costillas y el sabor de la sangre en su boca.

—¿Por qué hiciste eso? —pregunté, mi voz temblando.

—Porque no puedo soportar que te traten así. —admitió, sintiendo que las lágrimas amenazaban con caer—. Te quiero, Jennie, y haré cualquier cosa para protegerte.

Lo que dijo me tocó profundamente. Sin decir una palabra, me lancé a sus brazos y la abracé con fuerza.

—Yo también te quiero, Lisa. —dije, mi voz ahogada por las lágrimas.

Nos quedamos allí, abrazándonos en medio del bosque, encontrando consuelo en la presencia de la otra. Sabía que las cosas serían difíciles, pero en ese momento, sentí que podíamos superar cualquier cosa.

Finalmente, logramos encontrar el camino de regreso al campamento, donde todos nos recibieron con alivio y preocupación.

—¿Dónde estaban? —preguntó Jisoo, corriendo hacia nosotras.

—Nos perdimos en el bosque. —respondí, tratando de sonar despreocupada.

—¿Y qué pasó con tu cara? —preguntó Rosé, notando las heridas de Lisa.

—Una pequeña confrontación con Junmyeon. —admitió Lisa, viendo cómo las miradas de preocupación aumentaban.

Jungkook, Jisoo y Rosé intercambiaron miradas antes de asentir, comprendiendo la gravedad de la situación.

Esa noche, mientras nos sentábamos alrededor de la fogata, la señora Kim nos reunió a todos y nos dio una charla sobre la importancia de la seguridad y la responsabilidad. Pero yo apenas escuchaba, mis pensamientos estaban con Lisa y lo que habíamos pasado.

Cuando finalmente nos fuimos a nuestras tiendas, Lisa y yo nos quedamos despiertas hablando.

—Lisa, no puedo creer lo que hiciste hoy. —dije, mirándola con una mezcla de admiración y preocupación.

—Haré cualquier cosa por ti, Jennie. —respondió, tomando mi mano.

Nos quedamos en silencio por un momento, disfrutando de la tranquilidad de la noche.

—Lisa, ¿puedo pedirte algo? —pregunté, mi voz suave.

—Lo que sea. —respondió.

—Prométeme que siempre estarás a mi lado, sin importar lo que pase.

La miré a los ojos y asentí.

—Lo prometo, Jennie. Siempre estaré a tu lado.

Nos abrazamos, sintiendo la calidez de la otra y sin decir nada más, nos quedamos dormidas.

Al día siguiente, el viaje de regreso al instituto fue tranquilo. La tensión de la pelea aún flotaba en el aire, pero al menos estábamos juntas.

Cuando finalmente llegamos al instituto, la profesora Kim nos reunió a todos y nos informó que debido al altercado, Lisa y Junmyeon estarían suspendidos por una semana. Lisa aceptó la noticia con una actitud desafiante, mientras Junmyeon lanzaba miradas furiosas.

—Esto es tan injusto. —murmuré, sintiendo una mezcla de rabia e impotencia.

Esa tarde, justo antes de salir del campus, Junmyeon se acercó a nosotras, sus ojos llenos de rabia.

—Esto no ha terminado, Lisa. —dijo con voz amenazante.

Antes de que pudiera reaccionar, me interpuse entre ellos, con el corazón latiendo con fuerza.

—No te atrevas a ponerle una mano encima, Junmyeon. —dije, mirando a los ojos de el con determinación.

—¿Y tú quién eres para decirme qué hacer? —respondió él, su voz llena de desprecio.

—Alguien que no quiere más problemas. —respondí, tratando de mantener la calma.

Junmyeon me miró con desdén antes de alejarse, murmurando algo ininteligible. Sentí cómo Lisa ponía una mano en mi hombro, su calidez brindándome consuelo.

—Gracias, Jennie. —susurró Lisa, sus ojos llenos de gratitud.

—No podía permitir que esto empeorara. —respondí, dándole una sonrisa triste.

No sabía como habíamos llegado a esto si apenas hace unas semanas nos odiabamos aún. Lisa me dio un beso en la frente y yo la tomé de la mano. Mientras nos alejábamos del instituto, apreté su mano con fuerza, recibiendo solo una sonrisa cálida como respuesta.

Definitivamente me estaba enamorando de ella.

.
.
.
.
.
.
.
.
.

pues ya subí los capítulos de ayer y hoy, que tal? les gustó el beso o no? tal vez se venga más drama y más romance, que dijeron? ya pura felicidad, pues no mis cielas, todavía faltan más cositas, porque creen que Jennie le pidió a Lisa qué se quedara pase lo que pase? muejejejeje

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro