Capítulo 39

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No pierdo tiempo e inmediatamente conduzco en dirección al centro médico más cercano, justo donde trabaja el padre de Clari y los de Dominic. Al llegar, somos atendidos inmediatamente y James es llevado a un consultorio para evaluar su caso; quería pasar con él pero me lo impidieron a causa de lo concurrida que se encuentra la sala de emergencias, no me queda otra opción que esperar en una pequeña sala el veredicto médico.

Pasan alrededor de cinco minutos y la ansiedad comienza a dominarme, camino de un lado a otro en el reducido espacio y gracias al cielo mi teléfono suena sacándome momentáneamente de mi pequeña burbuja de angustia.

<< ¿Hola?.>>

<< Emms... ¿dónde están?, quiero decir... ¿en qué hospital?.>>

<< ¡Ab! estamos en el London Bridge Hospital.>>

<< Bien, vamos en camino.>>

<< No es necesario, todo está bajo control.>>

<< ¿De qué hablas Emms? ¿para que somos los amigos?. De igual manera ya llegamos, estamos estacionando el auto. Nos vemos en un momento.>>

Antes de que pueda volver a protestar mi embarazada amiga ya ha cortado la llamada.
Aprovechando los pocos instantes que tengo antes de la entrada de mis amigos, analizo todo lo que ha pasado hoy, aunque estoy muy preocupada por lo que pueda pasarle a James en su mano, me inquieta la actitud de Dominic y sus imprudentes acciones.

— ¡Emms!—Exclama Clarisse corriendo hacia mí.

— ¿Clari? te dije que no era necesario.

— ¿Y? para eso estamos los amigos. Emma ya hablé con mi papá para que él lo atienda y le haga el debido tratamiento, supongo que es mejor alguien conocido.

— Gracias amiga, creo que tu padre ya se está encargando del caso en este momento.

— Si, tenemos que esperar a que salga para que nos diga que hay que hacerle a James, pero no te preocupes... él está en buenas manos.

— De eso estoy segura, no sé que hubiese sucedido sin ustedes.

— Oh Emms, sabes que aquí estamos para ayudarlos en lo que necesiten.

— Ehh... yo no diría lo mismo—Dominic se acerca a nosotras y se une a la conversación.

— ¿Entonces para qué viniste?

— Para acompañar a mi novia, ni creas que la voy a dejar sola. Además en cierto punto también me siento obligado en venir aquí.

— Entonces vete, Clarisse puede quedarse con nosotros. No es como que muerda o la vaya a matar, a no ser que también opines eso de mí.

— Emma...

— No, Clari. Ya estoy harta de esta estúpida actitud que tiene tu novio conmigo.

— Dominic creo que es mejor que te vayas—Lo echa la castaña e intento no reír con la mirada de póquer que tiene el chico.

— ¿Qué? pero... ¿te vas a poner de su parte?.

—Te dejé venir conmigo para que te disculparas, pero si lo único que harás es causar problemas y división de nuestra amistad... lo mejor será que te vayas y pienses un poco lo que has hecho.

— Clarisse, esto no me lo esperaba.

— Tú verás si te enojas o no conmigo de después de esto, pero... la verdad es que no entiendo esa actitud tuya si al principio habías aceptado las cosas.

— Si, las aceptaba hasta que me tocó ser testigo de como mi hermano se empezó a alejar de la familia por sumergirse en el trago, empezó a faltar a la universidad mientras se destruye lentamente y cae en depresión—Comienza a alzar la voz y las cosas empeoran cada vez más.

— Dominic, yo no tengo la culpa de eso, no buscaba causarle ese daño a tu hermano—Digo al borde de las lágrimas.

— ¿Ah, no? porque tú y Kyla a la final no tienen tanta diferencia, las dos se encargaron de destruir a mi hermano con intención o no.

— ¡Dominic ya es suficiente! estamos en un hospital y no permitiré más discusiones cuando Emma está pasando por un momento difícil.—Interviene Clari.

— Mi hermano también está pasando un momento difícil y a ella no suele afectarle ni importarle, ¿entonces... porqué a mí si?.

— Dominic te pido que te retires si no quieres que esto se vaya a mayores y llame a seguridad—Intervengo.

Antes de que alguno de los dos pueda reaccionar, mi teléfono comienza a sonar distrayéndome.

<< ¿Diga?.>>

<< Emma, hola...>> —Al escuchar la voz de Liam, siento un escalofrío recorrer mi cuerpo y observo a Dominic que sigue estático en su lugar.

<< ¿Liam, estás bien?.>>

<< No te preocupes por mí y te pido que no te dejes influenciar por lo que sea que te haya dicho mi hermano. Yo... estoy tratando de superarte y mejorar, así que te pido que tú hagas lo mismo, sigas tu vida y seas feliz sin importar lo que sea que pase conmigo; pues de eso se trata el amor, ser feliz porque la persona a la cual amas lo es, aunque sea sin ti.>>

<< Pero yo te ocasioné todos esos problemas y sin querer hice lo mismo que Kyla.>>

<< Ni en un millón de años te compararía con esa idiota. Tú no tienes para nada la culpa de lo que sucedió entre nosotros, la culpa en realidad solo fue mía al fin y al cabo; no prestes atención a mi hermano, suele creerse mucho el papel de hermano sobre protector.>>

<< Está bien, de todas formas no puedo evitar sentirme culpable.>>

<< No tienes que hacerlo, de verdad que he retomado mis clases en la universidad y estoy dejando el alcohol porque me he dado cuenta de lo idiota que he sido al intentar olvidar las cosas de tal miserable forma. Además, ese problema me lo ocasioné yo.>>

<< Liam no quiero hacerte daño y tampoco quiero que te lo hagas tu, por favor prométeme que no volverás a hacer eso.>>—Le ruego entre lágrimas.

<< Emma, yo...>>—Está por contestar cuando Dominic me arrebata el teléfono de mi mano.

<< Hermano... ¿cómo se te ocurre hablar con ella? Pensé que habías aprendido la lección.>>—Comienza a alterarse Dominic mientras alza voz.

No sé lo que le responde su hermano al otro lado de la línea, pero no hay palabras para describir la expresión de Dominic. Estoy pasmada y no sé que hacer, Clari está igual que yo y vemos cómo Dominic se aleja para continuar con las conversaciones lejos de nosotros.

El silencio inunda la sala y miramos atentas la forma en como el rostro de Dominic enrojece a causa de la ira que se acumula en él.

— Dominic, pásame el teléfono—Le ruego.

— Tengo derecho a hablar con mi hermano también.

<< ¡No me interesa Liam, ya te dije que es injusto que te preocupes más por ella que por ti! Ella está con otro y tú sigues loco por ella.>>

Frustrado me devuelve el teléfono, yo recibo y se despide de Clari con un beso en la frente, consiguiente se retira del hospital.

<< ¿Liam sigues ahí?.>>—Él responde al otro lado de la línea y noto que está llorando.

<< Si... lamento mucho esto Emma, no quiero darte más problemas.>>

<< No me has dado problemas, al contrario... yo te los he causado a ti.>>

<< De todas formas creo que es mejor acabar con todo esto de una vez. No te preocupes más por mí, yo estoy hallando la manera de volver a ser el que era, mientras tanto quiero que tú disfrutes tu vida y seas feliz con James, pues lo tienen muy merecido ambos. Deja que yo me encargo de arreglar las cosas con Dominic para que deje esa actitud contigo y gracias por todos los momentos buenos que me permitiste vivir a tu lado.>>

Cuelga la llamada antes de que pueda darme tiempo de reaccionar y contestarle, Clari se acerca a mí y limpia una lágrima que comienza a salir sin permiso de mis ojos.

— Emms... ¿qué te dijo?—Me acerca a ella y me envuelve en sus brazos tiernamente.

— Ya terminó todo Clari—Digo entre sollozos—. Me siento una pésima persona, al fin y al cabo no tengo mucho que criticar de Kyla porque de alguna manera, hice lo mismo que ella.

— Shhh no digas eso, no tienes porqué compararte con esa... ahg, el caso es que no eres como ella, eres mucho mejor... una increíble chica con un gran corazón que cometió un error como todos lo hemos hecho en algún momento. Lo bueno es que no lo hiciste intencionalmente y si Liam no te culpa por ello, no veo porqué tu te tiras tan duro a ti misma.

— Liam es demasiado buena persona como para hacerlo, pero tienes razón. Es solo que Dominic con lo que dijo me hizo sentir como la peor persona del mundo.

— No le prestes atención a mi novio, ya tú lo conoces bien. Mas bien deja que Liam y yo nos encargamos de él, ahora seca esas lágrimas y sonríe, ni James, ni mucho menos yo queremos verte mal, sino como la simpática y encantadora Emma por la que siempre te caracterizas—Su comentario logra hacerme reír y ella se une a mí terminando de limpiar mis lágrimas.

— ¿Y dónde está Abi?.

— Pues... ¡estoy aquí!—Me responde desde los asientos detrás de nuestra posición.

— Ab lo siento, no te había visto. Con toda esta situación...

— No te preocupes Emms, créeme que te entiendo.

— Gracias por estar aquí chicas, no debieron molestarse pero significa mucho para mí y estoy segura que James piensa igual—Le sonrío sinceramente.

— Eres nuestra amiga y es lo menos que podemos hacer.

Los siguientes minutos hablamos de cosas triviales y no volvemos a tocar el tema de Dominic y Liam, tiempo después Samuel aparece por la puerta de la sala de espera.

— Hace bastante que no veíamos tu rostro Samiel—Le saluda Clarisse.

— El trabajo me ha tenido bastante ocupado, además de los preparativos para la llegada de los bebés.

— Por supuesto... pero siempre hay que sacar tiempo para los amigos—Agrega Abi, quien se levanta con dificultad de su asiento para depositar un beso en los labios de su novio.

— Tienes razón amor, por eso estoy aquí...—Se inclina hasta quedar a la altura del vientre de Abigail y comienza a hablarle a los bebés. La pareja parece sumida en su propio mundo donde solo existe su reciente familia, se ven hermosos juntos.

— Emma... ¿ha estado llorando?—Samuel se separa levemente de Abi, pero la mantiene cerca rodeándola por la cintura con uno de sus brazos.

— Pues algo así—Le respondo a medias.

— ¿James está mejor?—Interroga el chico.

— No lo sabemos, aún no han dado ninguna noticia—La preocupación vuelve a invadirme y retomo mi caminar nervioso de un lado a otro por la pequeña sala.

— Tranquila, él debe estar bien—Me tranquiliza—. Solo trata de calmarte.

— No solo la preocupa eso—Oigo como le susurra suavemente Abi.

Samuel se aparta de su lado delicadamente y viene a darme un espontáneo abrazo.

— ¿Y esto?—Pregunta al separarnos.

— Nuestra amistad es algo así como "cariño y raras discusiones", pero quiero que sepa que tiene mi apoyo—Sus palabras me dejan sorprendida por lo que únicamente le sonrío agradecida.

Pasada media hora finalmente nos dan noticias de James, el médico que lo atendió fue el padre de Clarisse, quien nos informa que por poco tienen que operarlo. Afortunadamente la radiografía mostró que no fue una total fractura sino una fisura que se sanará en algunas semanas y que el gran dolor se siente es causado por la inflamación producida por el uso excesivo de la extremidad a pesar de la fisura.

También agrego que con un buen cuidado no tendrá problemas en el futuro para ejercer su profesión y que espera que los analgésicos recetados le ayudan a que el dolor mejore.

— Chicos, quiero agradecerles nuevamente por estar aquí y por brindarme su apoyo incondicional. Esta tarde y parte de noche ha sido algo dura, pero con su presencia me han ayudado a sobrellevarla mejor.

Le doy un abrazo a cada uno y vuelvo a agradecerles por lo que han hecho por mí hoy, estoy por entrar a ver a James cuando Abi se inclina repentinamente hacia delante retorciéndose de dolor.

— No se preocupen—Nos dice todavía con expresión dolorida—. Solo es una contracción.

— Será mejor irnos a casa—Le sugiere Samuel.

— Concuerdo con Samuel, debes descansar Ab y más en tu estado—Le digo.

— Pero es que ustedes también me necesitan y quiero estar con ustedes—Insiste la pelirroja.

— Abi... tú y los bebés necesitan descansar y ya fue suficiente, yo como futura médica exijo que guardes reposo por hoy.

— Clari, pero...

— Nada de poner restricciones señorita, mejor ve a descansar con su esposo y hablamos mañana—Nos despedimos de los chicos y Samuel también le da un cariñoso abrazo a la castaña, el cual la deja algo sorprendida.

— Wow, ¿para mí también hay abrazo?—Le cuestiona.

— Claro que sí, usted también ha sido una excelente amiga para Abi y para mi y cabe resaltarlo. Por mucho que no se lo diga, yo la quiero mucho y aprecio su amistad; usted y Emma fueron las primeras personas que conocí recién llegado y me acogieron con mucho cariño, por eso estoy muy agradecido.

— Nunca olvidaré cuando Chloe se te orinó encima.

— Como siempre... Emma arruinando los momentos sentimentales—Dice Samuel bromeando—. Espero que esa rata esté bien.

— Ya deja de decirle rata si no quieres que te mate.

— Bueno señoritas... me voy con mi increíble esposa para que descanse, cualquier cosa nos avisan por favor.

Ambos se marchan unidos en un medio abrazo y un pensamiento aparece de repente: me encantaría algún día estar así con James, disfrutando nuestra relación y comenzando a formar una familia. Pero, aunque sé que sería feliz con él, siento que nuestro noviazgo es algo extraño para ser considerado uno oficial.

— ¿Emma? ¡tierra llamando a Emms!—Clarisse chasquea sus dedos en mi cara tratando de sacarme de mi trance.

— ¿Estás bien amiga?—Ella parece preocupada.

— Si... lo siento, solo me distraje pensando.

— Como siempre... vives soñando—Se ríe y me da un amistoso golpe en el brazo.

— ¿Vamos a ver a James?

— Si... ¿sabes? a veces pienso que tendremos algún tipo de telepatía, ¿no lo crees?.

— De hecho también lo he pensado muchas veces, casi siempre coincidimos y eso es genial, a parte tenemos algunos gustos mas o menos similares.

— Si y la verdad es muy goals, pero entre nos, porque si Sakura se llega a enterar de esto nos asesina—Clarisse ríe ante mi comentario.

— Nah... con ella también tengo cosas goals y ella ya está empezando a aceptar nuestra amistad, así que no te preocupes.

Caminamos por los largos pasillos con camillas, pacientes, familiares y doctores que van de un lado a otro con ajetreo. Entramos a la habitación en la que se encuentra James, el papá de Clari se encuentra firmando lo que parece el historial de James y cuando se percata de nuestra presencia nos sonríe ampliamente y se acerca a su hija para estrecharla en sus brazos.

— ¿Así que este chico tan amable y simpático es uno de tus amigos de los que tanto me has hablado?.

— Así es y el novio de Emma.

— Eso me estuvo contando, por cierto... Emma, un gusto verte de nuevo y tienes suerte. Ese chico de verdad te ama.

Yo me sonrojo y el señor Matthew se burla un poco, la verdad es que es muy simpático y buena gente cuando lo llegas a conocer y es como si los amigos de su hija fuesen sus amigos también.

— Matthew, le agradezco mucho por tomar el caso de mi novio, está en buenas muy manos.

— No hay de qué Emma, estoy para lo que necesiten... ya lo saben y llámame Mat.

— Okay Mat, se lo agradezco mucho.

Clarisse se queda hablando un momento con su padre y yo aprovecho para acercarme a la camilla donde está James, el me observa con sus preciosos ojos celestes y me sonríe. Tomo asiento en una silla que se encuentra a su lado y agarro su mano entrelazando nuestros dedos.

— ¿Cómo te sientes?—Paso mis dedos libres por su sedosa cabellera rubia.

— Mucho mejor ahora que estás aquí—No puedo contenerme ante la dulzura de sus palabras por lo que me inclino hasta él y beso cariñosamente sus labios.

El me devuelve el beso gustoso y así permanecemos algunos segundos hasta que finalmente rompe el beso.

— ¿No te duele nada? ¿estás cómodo? ¿tienes hambre?—Lo bombardeo con preguntas a pesar de que hace un momento me dijo que se encontraba bien. No puedo ignorar el hecho de que se encuentra en el hospital con una mano enyesada y que en cierta parte es mi culpa, si el no me hubiese defendido no habría caído sobre su mano.

— Ángel... amor, estoy bien. Tu sola presencia me ayuda a sentirme mejor.

— ¿Puedes ser mas dulce?—Vuelvo a inclinarme sobre él y reparto pequeños besitos por todo su rostro, él se ríe nervioso y yo me uno a él.

— Awww pero que ternura de pareja—Dice Clarisse y ambos sonreímos ampliamente.

— ¿Todo este tiempo has estado ahí Clarita?.

— Por supuesto Jamesito, me preocupé mucho por ti.

— Tu amistad vale oro—Exclama mi novio fingiendo una lágrima.

— Su amistad también lo vale todo... al parecer hoy todos estamos muy sentimentales.

— Los hospitales suelen provocar ese efecto y ya que estamos en confianza, permítanme decirles que odio la comida de acá, es un asco—Se queja haciendo muchas graciosas con su boca. Aún debilitado, no deja de charlar y eso es otra de las cosas que amo de él.

— Si quieres puedo ir a comprarte algo del restaurante que quieras.

— Ah claro, como eres la hija del médico y director de este hospital se te permite traficar comida, ¿no es cierto?.

— Algo así. ¿Lo ves?, beneficios de tenerme como amiga.

— Si, por eso mismos digo que nuestra amistad hay que cuidarla... justo eso le decía a Emma cuando peleó contigo: "Ni se te ocurra dejar la amistad con Clarita, porque no podemos dejar ir los beneficios que conlleva".

— Ya sospechaba yo, tanta amabilidad me parecía extraña—Bromea.

— Sabes que no es así, eres una genial amiga y como persona vales oro. Tu carisma, compasión, naturalidad y amabilidad te caracterizan y resaltan a donde quiera que vayas, has sido una increíble amiga y valoro mucho eso.

— ¡Awww Jamesito me vas a hace llorar...! tu igual has sido un excelente amigo y valoro mucho tu amistad tuya y de Emma, ambos lo saben. Pueden contar conmigo para lo que necesiten.

— Bueno vamos a terminar llorando todos por lo que parece. ¿Que les parece una foto para recordar este momento?—Propongo.

— ¡Claro!—Responden ambos al unisono, le entrego mi celular al padre de Clarisse y él toma la fotografía.

— Chicos, espero que su amistad dure por muchos años a pesar de lo que se pueda presentar. La verdadera amistad debe ser siempre una prioridad en sus vidas—Mat devuelve el celular y posteriormente se despide saliendo de la habitación con la excusa de que debe ir a atender otros pacientes.

Finalmente nos quedamos solos Clarisse, James y yo.

— Iré a reclamar la orden de salida de James, vuelvo en un momento—Informa la castaña y sale sin más de allí.

Observo a mi chico que tiene los ojos cansado y débiles, definitivamente hoy ha sido un día bastante largo y si antes de ir a casa de Clari lucía cansado, ahora no puedo ni imaginar lo agotado que debe estar.

— Vamos héroe, te ayudaré a levantar.

— Bien—Al ponerse de pie, su rostro queda a algunos centímetros del mío y me observa con atención.

— ¿Ángel, estuviste llorando?—Quedo asombrada por su pregunta, ¿cómo es posible que sepa que estuve llorando?

— Bueno sí, es que me preocupé mucho por ti.

— No creo que solo eso, te conozco bien.

— No te preocupes, no es nada importante.

— ¿Dominic siguió a Clari hasta aquí?.

— Si, estuvo un rato aquí pero ya se ido.

— ¿Te causó problemas?.

— Un poco, pero ya todo está solucionado. Hablé con Liam—Al escuchar aquel nombre me sorprende ver que su rostro es totalmente neutro, no se asoma ni un atisbo de celos.

— ¿Y qué te dijo? ¿también está en tu contra?.

— No, al contrario, está en contra de lo que Dominic ha dicho y ha arreglado de una vez las cosas. Todo ha quedado claro de una vez por todas.

— ¿Estás tranquila con eso?.

— Si...—No puedo decir que en este momento estoy al cien por ciento segura, pero lo importante es que en este instante estoy tranquila con la decisión que he tomado.

— Eso es lo importante. No tienes que preocuparte por Dominic, lo más seguro es que después cambie de opinión y venga a pedir perdón.

— El caso es que no volvería a ser lo mismo, ya no puedo ver a Dominic como un buen amigo, esta vez ha sido suficiente.

La verdad es que este asunto me tiene algo frustrada, no me gusta para nada discutir con las personas que son importantes para mi vida.
Después de haberlo integrado al grupo y ser amable, a el parece no importarle y tomar mi amistad como si no valiera nada; entiendo el punto de que quiera proteger a su hermano, pero Liam y yo en ningún momento terminamos en malos términos... de hecho, él ni siquiera me culpa a mi por lo sucedido, a pesar de que yo misma acepto haber tenido la culpa.

Dejo de pensar en esto y ayudo a James para que se vista y salgamos del hospital, en la recepción me encuentro con la chica castaña que nos entrega la ficha de salida y la fórmula de los medicamentos que tiene que tomar por aproximadamente quince días.

— Chicos si quieren yo puedo encargarme de los medicamentos, a mi padre todos los meses le distribuyen medicamentos las farmacias, así que si quieren puedo hablar con él.

— No te preocupes, si es posible está bien, si no yo me encargo—Responde James.

Nos despedimos de Clarisse y nosotros seguimos nuestro camino de vuelta. Necesito algo de descanso después de tantas discusiones y mi novio igual, así que le sugiero pasar el resto de la noche viendo películas, comiendo palomitas acarameladas acompañándolas con un rico café de Starbucks.

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