—¡Harry Potter!

Todo el gran comedor se quedó en silencio durante un par de segundos antes de que comenzara el pequeño zumbido de los estudiantes que susurraban. La cabeza de Faith se volvió lentamente hacia Harry, que estaba sentado al otro lado de la larga mesa de Gryffindor. Él la miró fijamente, pero Faith no estaba segura de si sabía que ella estaba sentada allí, parecía como si estuviera dormido, con la boca abierta. Toda la mesa de Gryffindor lo miraba con la boca abierta.

—No puse mi nombre, —dijo Harry. Él miró fuera de ella. —Saben que no lo hice, —Ron y Hermione le devolvieron la mirada sin comprender, pero Faith asintió lentamente, sin saber qué más hacer en ese momento.

—¡Harry Potter! —Dumbledore lo llamó de nuevo.— ¡Harry! Aquí arriba, por favor.

—Anda, —Hermione empujó suavemente a Harry para que finalmente se pusiera de pie. Miró a sus amigos una vez más antes de caminar hacia Dumbledore. Todos los ojos de la gente en el gran comedor estaban puestos en él.

—Bueno, ve a través de la puerta, Harry, —murmuró Dumbledore con una expresión seria. Harry asintió y caminó a lo largo de la mesa de los profesores y entró en la habitación mientras los ojos de Faith lo seguían. ¿Su hermano y su amigo van a competir? Dumbledore no puede permitir eso, ¿verdad? No hay estudiantes menores de diecisiete años, Harry no tiene diecisiete.

Tan pronto como Harry cruzó la puerta, los estudiantes empezaron a hablar en voz alta ahora en lugar de susurrar. Dumbledore se aclaró la garganta para poder decir algo a los estudiantes nuevamente.

—¡Silencio por favor!— El parloteo se fue apagando lentamente hasta que todos pudieron escucharlo claramente. —Creo que es hora de que todos vayan a sus camas y tengan una buena noche de sueño, ¡descansen bien! —Inmediatamente después dijo que él y algunos de los maestros corrieron a la cámara y desaparecieron detrás de la puerta.

Los estudiantes hicieron lo que les dijo. Faith siguió a sus dos amigos a la sala común de Gryffindor y se sentó con ellas en el sofá. No dijeron nada. Faith no supo qué decir. Ellos no sabían más que ella. Finalmente, Ron se puso de pie.

—Me voy a ir a la cama, —les dijo, murmuró en realidad, y subió las escaleras de caracol hacia los dormitorios de los chicos. Hermione suspiró.

—Yo también, te veré mañana. —Sin mirarla, Hermione fue en la dirección opuesta a Ron, a los dormitorios de chicas. Y luego Faith se quedó sola. Ella solo miró fijamente a la chimenea mientras escuchaba cómo los Gryffindors estaban de fiesta por tener un campeón de Gryffindor. Unos quince minutos después, los gritos de la fiesta se hicieron más fuertes, así que Faith supuso que Harry acababa de regresar. Faith se dio la vuelta en el sofá y vio como Harry trataba desesperadamente de explicar cómo no quería nada de esto, pero Lee Jordan aún insistía en poner una pancarta de Gryffindor alrededor de sus hombros y escribir alrededor de su cuello. Sus ojos buscaron alrededor de la sala común una señal de sus amigos y se alegró de ver a Faith.

—No, solo necesito hablar un momento, ¿de acuerdo? —Harry le dijo a George irritado quien le preguntó si quería algo de comida. Rápidamente fue hacia Faith y se sentó junto a ella en el sofá. —¡No puse mi nombre, lo juro! —Dijo rápidamente.

—Te creo, no hay forma de que puedas, —le dijo Faith con una suave sonrisa. —Se necesitaría un Encantamiento Confundus excepcionalmente poderoso para engañar al Cáliz y hacer que se olvide de que solo hay tres escuelas en el Torneo.

—Eso fue lo que dijo Moody, —le dijo Harry.

—Está recitando las palabras exactas de la Historia de concursos y torneos —Eso hizo que Harry sonriera un poco. —Hice algunas investigaciones con Alex hoy, su hermano es Viktor Krum, decidimos ver en qué podrían meterse nuestros hermanos.

—¿El chico de Durmstrang? —Preguntó Harry y Faith asintió. No dijeron nada durante un par de segundos. Entonces Harry recordó algo. —Tu hermano, nos conocimos después de que nos dieran las instrucciones para la primera tarea, me dijo que te dijera que no te preocupes por él.

Faith resopló ante eso.

—Por supuesto, él diría eso, —suspiró. —Será mejor que gane para que yo consiga mis diez galeones, —ambos sonrieron. —¿Así que en realidad te están dejando competir por el contrato de Magical Binding? —Harry asintió.

—El señor Crouch dijo que la primera tarea es poner a prueba nuestro atrevimiento, que el coraje es una cualidad importante y que la tarea es el veinticuatro de noviembre.

—¡Eso es menos de un mes! —Faith exclamó. —No te dijeron nada sobre la tarea en sí, ¿verdad?

—No, lo descubriré una vez que esté dentro. Solo esa cosa atrevida, —Los dos reflexionaron un poco sobre cuál podría ser la tarea, pero luego decidieron que era hora de irse a la cama. Faith fue directamente a los dormitorios de chicas y Harry se fue, con dificultad, a los dormitorios de chicos.

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El día siguiente fue un día tranquilo ya que no tenían clases y Harry podía escapar de todas las miradas de los estudiantes. Faith descubrió en el desayuno que Ron pensó que Harry había puesto su nombre para poder obtener más fama o algo ridículo. Faith y Hermione pasan el día con los chicos por separado. Faith se quedó con Ron y Hermione con Harry porque Harry ahora también estaba enojado con Ron por pensar tal cosa.

Sin embargo, el lunes que siguió no fue tan pacífico. Todos pensaron que Harry había puesto su nombre en sí mismo, pero no estaban muy impresionados. Los Hufflepuff eran bastante fríos con Harry a pesar de que por lo general se llevaban muy bien. Faith también recibió algunas miradas groseras, probablemente porque estaba saliendo con Harry, quien se robó la fama de los Hufflepuff de tener al campeón en su casa, el hermano de Faith. Los Hufflepuff se rieron cuando uno de los Bombillas Rebotantes golpeó a Harry en la cara durante Herbología con Hufflepuff y el Jefe de la casa Hufflepuff, la Profesora Sprout.

—Oh, miren, muchachos, es el campeón, —dijo cuando los cuatro amigos escucharon los comentarios de Malfoy. —¿Tienes tus libros de autógrafos? Será mejor que consigas una firma ahora, porque dudo que esté por mucho más tiempo, —Crabbe, Goyle y un par de Slytherin fueron los únicos que se rieron. —La mitad de los campeones de los Tres Magos han muerto, ¿Cuánto tiempo crees que vas a durar, Potter? Diez minutos después de la primera prueba es mi apuesta.

Malfoy tuvo que detenerse allí porque Hagrid llegó desde la parte trasera de su cabaña, cargando una torre de cajas con cada una de ellas mucho más grande que antes de los escregutos con cola explosiva. Explicó que la nueva comida favorita de los escregutos de cola explosiva era el uno para el otro, por eso se volvieron tan grandes y como ahora tienen tanta energía reprimida, Hagrid le dijo a la clase que tenían que llevarlos a caminar.

—¿Llevar esta cosa a dar un paseo? —Malfoy repitió con una expresión de disgusto en su rostro. —¿Y dónde exactamente se supone que debemos arreglar la correa? ¿Alrededor de la picadura, el extremo explosivo o la ventosa?

—Por 'el medio'—, le dijo Hagrid mientras hacía una demostración. —Eh - quizás quieras ponerte tus guantes de piel de dragón, solo como una precaución adicional. Harry - puedes venir aquí y ayudarme con este grande ...

La siguiente hora, todos estuvieron ocupados evitando que los escregutos se mataran a ellos y entre ellos. Se habían vuelto mucho más fuertes que antes de convertirse en caníbales, por lo que algunos estudiantes fueron arrastrados boca abajo por el campo. Faith estaba la mayor parte del tiempo ocupada atando una cuerda nueva alrededor del medio de los escregutos, ya que seguía quemándola por la mitad.

La próxima semana no fue mucho mejor. Los Ravenclaw también habían elegido bando, y no era el de Harry. Faith notó que la concentración de Harry también se fue por el desagüe. Él y Neville fueron los únicos que recibieron tarea extra porque lo hicieron tan mal en Summoning Charms en la clase del profesor Flitwick. Tomaron pociones dobles por la tarde, lo cual fue una tortura para Harry porque tuvo que sentarse en las mazmorras durante una hora y media con Slytherin y Snape.

Faith fue con Ron a almorzar porque la arrastró con él y después de eso, también la arrastró con él a las Mazmorras. Aparentemente, quería mantenerse alejado de Harry lo más posible. Ella le había enviado a Harry una sonrisa de disculpa que él aceptó con una pequeña sonrisa y un asentimiento.

Cuando ella y Ron llegaron frente al salón de clases de Snape, notaron que Malfoy y sus amigos de Slytherin ya estaban allí, esperando.

—Oh, hola, pequeña Diggory, —la saludó Malfoy, ignorando por completo a Ron, quien fue a pararse con Dean y Seamus.

—¿Qué?— Faith tuvo suficiente de los juegos de Malfoy la semana pasada.

—Bueno, pensé que tal vez te gustaría una de estas insignias, —Malfoy señaló la insignia que había prendido en su túnica y Faith notó que todas tenían una. Esto no podría ser nada bueno. Dijeron 'APOYA A CEDRIC DIGGORY - EL VERDADERO CAMPEÓN DE HOGWARTS'.

—¿Cuál es el truco, Malfoy? —Faith preguntó con sospecha escrita en todo su rostro. —Me cuesta creer que te tomes la molestia de hacer insignias sobre lo genial que es mi hermano, —Malfoy arqueó una ceja y estaba a punto de decir algo cuando Harry y Hermione dieron la vuelta a la esquina y se pararon detrás de ella. . Inmediatamente notaron las insignias.

—¿Te gustan, Potter? —Malfoy preguntó en voz alta, sin hablar más con Faith. —Esto no es todo lo que hacen - ¡mira! —Presionó la placa y el mensaje anterior se convirtió en letras de color verde brillante que decían "POTTER APESTA". Los Slytherin se rieron y todos presionaron sus insignias hasta que todos brillaron en verde.

—Oh, muy gracioso, —dijo Hermione con sarcasmo. —Realmente ingenioso.

—¿Quieres uno, Granger? —Malfoy le tendió una de las insignias. —Tengo montones, pero no me toques la mano, ahora. Me la acabo de lavar, ya ves, no quiero que una sangre sucia la ensucie.

Tanto Harry como Faith sacaron sus varitas. Ambos tenían mucha ira reprimida de la última semana.

—¡Harry, Faith! —Hermione dijo en advertencia.

—Vamos, Potter, Diggory, —sonrió Malfoy mientras sacaba su propia varita también. —Hazlo, si tienes las agallas, —Malfoy miró de Faith, quien estaba lanzando muchas maldiciones que podía usar, a Harry. Tuvieron contacto visual por un segundo y luego ambos actuaron exactamente al mismo tiempo.

—¡Furnunculus! —Gritó Harry.

—¡Densaugeo! —Malfoy gritó. Los chorros de luz volaron por el aire y luego se golpearon entre sí, haciendo que cambiaran de dirección. La maldición de Harry golpeó a Goyle y Malfoy golpeó a Hermione. En la nariz de Goyle, de su piel brotaban furúnculos de aspecto feo. Hermione se estaba agarrando la boca, gimiendo de dolor.

—¡Hermione! —Ron rápidamente se acercó a ella para ver qué le pasaba. Él apartó su mano de su rostro y vieron que sus dientes delanteros estaban creciendo a una velocidad inquietante.

—¿Y de qué se trata todo este ruido? —Preguntó una voz suave pero aguda. Snape había llegado al salón de clases. Señaló a Malfoy. —¡Expliquen!

—Potter me atacó, señor...

—¡Nos atacamos al mismo tiempo! —Harry lo interrumpió gritando.

—... y le pegó a Goyle...¡Mire! —Snape echó un vistazo a Goyle.

—Ve a la enfermería, Goyle, —ordenó con calma.

—¡Malfoy golpeo a Hermione! —Faith dijo ahora. —¡Mire! —Ron obligó a Hermione a dejar que Snape viera la condición en la que se encontraba, a pesar de que era difícil de ocultar de todos modos. Sus dientes ya crecieron más allá de su cuello.

—No veo ninguna diferencia, — Hermione gritó y se dio la vuelta para irse. En ese momento, Harry, Ron y Faith comenzaron a gritarle a Snape por ser tan injusto. Estaban realmente furiosos con él. ¿Cómo podrían no hacerlo?

—Veamos,— comenzó con calma. —Cincuenta puntos de Gryffindor y una detención para Potter, Weasley y Diggory. Ahora entren o será una semana de detención.

Faith estaba furiosa. ¿Cómo pudo ser tan grosero? Se apresuró a pasar junto a Snape y arrojó su bolso en una de las mesas del fondo. Harry, también lívido, se dejó caer en la silla junto a ella. Por un segundo pareció que Ron también vino a sentarse con ellos, pero se volvió y se unió a la mesa de Dean y Seamus. Faith murmuró algunas malas palabras inapropiadas a la manera de Snape, lo que hizo que Harry sonriera un poco. Pero luego Snape comenzó a hablar.

—¡Antídotos! —Dijo con severidad. —Todos deberían haber preparado sus recetas ahora, —Faith sacó sus notas de su bolso y las colocó entre ella y Harry porque estaba segura de que él no las tendría. —Quiero que los prepares con cuidado, y luego seleccionaremos a alguien en quien probar uno.

Entonces alguien llamó a la puerta. Era Colin Creevey, se acercó al escritorio de Snape al frente de la clase.

—¿Sí? —Preguntó Snape brevemente.

—Por favor, señor, se supone que debo llevar a Harry Potter arriba.

Los ojos de Harry y Faith se agrandaron.

—Tuuuuu, eres un tipo afortunado, —dijo Faith en broma a lo que Harry sacó la lengua y sonrió.

—Potter tiene otra hora de pociones para completar, —Snape rompió las felices esperanzas de Harry. —Irá cuando termine esta clase,

—Señor... señor, el Sr. Bagman lo quiere, —protestó Colin nerviosamente contra el comentario de Snape. —Todos los campeones tienen que irse, creo que quieren tomar fotografías —Faith sabía que Harry le daría a Colin todo lo que tenía para evitar que dijera esas palabras.

—Muy bien, muy bien, —espetó Snape. —Potter, deja tus cosas aquí, quiero que vuelvas aquí más tarde para probar tu antídoto.

—Por favor, señor...tiene que llevarse sus cosas, —dijo Colin. —Todos los campeones ...

—¡Muy bien! —Dijo Snape. —¡Potter, toma tus maletas y sal de mi vista!— Harry se echó el bolso al hombro, le deseó buena suerte a Faith y salió de la habitación con Colin.

Y luego ella se quedó sola.