Capítulo 6

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Cuando Jimin y Yoongi volvieron a la sala de estar, el ambiente entre ambos había vuelto a ser el mismo de siempre; igual de incómodo que al principio, e incluso aún más.

Pero todo empeoró cuando vieron que alguien en la habitación faltaba: Kim Taehyung.

Jimin tragó duro, golpeándose internamente en la frente.

No quería preocuparse en vano, pero muy en el fondo sabía que algo había pasado en su ausencia. Mil y un preguntas arremolinándose en su cabeza, le advertían que aquello no podía significar nada bueno.

Sin dudar, alzó la voz, la principal pregunta formulada en su mente saliendo con rapidez de sus labios.

—¿Dónde está Taehyung?

Todos los presentes le miraron, con una mezcla de diversión en la mirada, aquello le hizo apretar los puños con fuerza.

—Se fue en cuanto supo que realmente cumplirían el reto. —Respondió Mark Tuan, otro de los jugadores del equipo de baloncesto.

Y aquello fue suficiente para que Jimin saliera del lugar, sintiendo que el alma se le caía a los pies.

Había besado al novio de su mejor amigo, ¿En qué estaba pensando? Relamió sus labios, sintiendo que la culpa realmente sería capaz de hundirle.

Podía imaginar que Taehyung probablemente se encontraba enojado con él, pero Jimin sabía también que no iba bajo ninguna circunstancia a desistir de hablar con él, definitivamente debía arreglar las cosas.

A toda costa.

El fin de semana se alejó a pasos agigantados, de pronto era lunes, y para su pesar, Jimin no había podido comunicarse con Taehyung. Intentó llamarle, incluso más veces de la cuenta, pero si la operadora no le mandaba a buzón o le daba anuncio de que el número se encontraba fuera de servicio, Taehyung directamente rechazaba sus llamadas

Y aquello le estaba matando.

Todo empeoraba en sobre manera cuando caminaba por los pasillos de la institución y se topaba con varios grupos de gente que murmuraban cada que le veían.

En el receso, al entrar a la cafetería, su corazón latió con ímpetu cuando visualizó una mata de cabello rojo, en definitiva podía tratarse únicamente de su amigo.

Se acercó a pasos apresurados, quería desesperadamente arreglar las cosas con él, y esperaba que el pelirrojo estuviese dispuesto a escuchar.

Cuando estuvo frente al menor, mordió su labio al verlo levantar la mirada.

Taehyung le miró con recelo, mientras observaba al mayor descolgarse la mochila y sentarse en el sitio frente a él.

No dijo ni una palabra.

—Taehyung, yo... Quisiera disculparme, si es que estás dispuesto a escuchar lo que tengo para decir...

Taehyung relamió sus labios, soltó un suspiro con pesadez y asintió con desgano. Realmente no tenía ganas de hablar, ni con Jimin ni con Yoongi, pero debía hacerlo. Necesitaba saber lo que había pasado. Necesitaba saber que había una explicación para aquellos rumores que habían estado pasando de boca en boca entre cada estudiante de la institución.

—Yoongi me gusta. —Soltó finalmente Jimin, sintiendo su cuerpo temblar. Colocó las manos sobre su vientre, tratando de mantenerse sereno— Siempre me ha gustado, incluso antes de que ustedes comenzaran a salir. Estoy enamorado, pero siempre negué sentir algo por alguien, intenté salir con más chicos pero no lo logré porque Yoongi no puede compararse a nadie, Taehyung. Intenté fijarme en alguien más, forzarme a enamorarme y olvidarle, pero no lo logré. Y nunca confesé esto porque sé lo feliz que te hace, y sé que nunca haría nada por separarlos, porque aun cuando mi corazón duele mientras les veo, me gusta saber lo felices que son. Pero yo soy infeliz, y aún así trato de mantenerme firme. En la fiesta, en ese estúpido juego me preguntó lo que tú sueles preguntarme; que si nunca había estado enamorado. —Hizo una pausa, soltando un breve suspiro— Y no pude resistirme; así que le conté lo que sentía, porque cada día que transcurría los sentimientos que tanto luchaba por ocultar continuaban matándome. Asfixiándome. La tristeza parecía nunca acabar. Y, me dejé llevar; lo besé. —Agachó la mirada, sintiendo que confesaba un crimen, no podía con la culpa— Se sintió tan bien, pero tan incorrecto al mismo tiempo, porque sentía que te estaba traicionando, a ti que siempre habías estado para mí, y en definitiva no lo merecías. Así que pido disculpas, aún cuando sé que no merezco tu perdón... Sólo necesitaba explicártelo, no volveré a acercarme a ustedes si es lo que quieres...

Taehyung escuchó atentamente cada palabra de Jimin, sin saber realmente como reaccionar. El dolor apresándole el corazón.
Había obtenido respuestas, pero se sentía perdido. Su mente estaba hecha un lío.

Antes de que pudiese darle una respuesta, Jimin tomó su mochila, se la colgó al hombro y huyó. Dejándole sumamente confundido.

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