5 La silueta familiar (Velum y Elin)

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Velum

Tal como dijo el hombre en el iceberg había un camino por el que podías pisar pero eso sí, había que hacer un poco de parkour para pasar sin hacerse daño. En lo poco que llevamos en esta aventura me he dado cuenta que Ethan no es muy hábil que digamos y que Elin tiene demasiada experiencia, ella es toda una experta en la habilidad. Después de haber pasado ese "reto" llegamos en un momento al centro del iceberg, para nuestra sorpresa no había ni rastro del poder del restablecimiento.

-¿¡Ese viejo se ha atrevido a estafarnos!? Dijo Ethan muy enfadado.

-Pues tiene toda la pinta. Le respondió Elin despertando de su abstracción.

Salimos de la cueva de hielo se puede ver que al final del iceberg se habitaba un pequeño pueblo diferente al de Ethan. Elin fue para alla marcándose un salto de una atletista, Ethan la siguió y yo hice lo mismo después. Al llegar al pueblo todo el mundo no nos miraban como personas recién llegados, sino que nos miraban como un trío de huérfanos que no tienen ningún tipo de rumbo.

-¿Deberiamos decirles que es este sitio? Escuché que le susurraba una chica joven a otra chica.

Estoy seguro que podéis imaginaros vosotros mismos que tipo de comentarios escuché más, pero ellos no eran los importantes en esta aventura ni tampoco eran los más adecuados para susurrar cosas sobre nosotros mientras pasamos. Entre todas esas personas me pareció ver una silueta de alguien que me era bastante conocida, pero ahora mismo no caigo en quien puede ser, creo que era una chica de pelo entre rubio y moreno con coleta alta.

-Ya no está... Me dije a mi mismo bastante confuso, desapareció como si no fuese una persona real, ¿Una ilusión?

Parpadeo varias veces para aclarar la vista. No estaba, espero no estar loco ni nada parecido.

-Velum, ¿Porque te has parado? Preguntó Ethan que luego me dice que tenemos que ir rápido porque o sino vamos a perder a Elin de vista, cosa que nada más decirla pasa.

-Tendría que habermelo imaginado. Dijo Ethan llevandose la mano a la frente.

-Será mejor que vayamos a buscarla. Le dije a Ethan.

Y así fue, buscamos a Elin por todas partes de ese pueblo que desde lejos parecía pequeño pero por dentro era como un laberinto.

Elin

En medio de un marullo de personas ahí estaba yo, cuando quise darme cuenta ya me había perdido y eso no era lo peor de todo, nada más darme cuenta de mi despiste por perderme en un lugar que no conozco, una mano me coge el brazo y me mete dentro de una tienda muy iluminada pero desolada, estaba preparada para pelearme con quien me hubiera arrastrado.

-Calmate niña, te estoy intentando proteger. Escuche que dijo una chica pelirroja con pecas, ojos marrones y piel algo morena.

-¿No me vas a decir tu nombre? Le pregunté a la chica.

-Mia. Mia Nair. Dice después de un largo suspiro.

-Soy Elin Melen. Le respondí para compensarle que me lo haya dicho.
-Mia, tengo una pregunta: ¿De que o quien se supone que intentas protegerme? Le pregunté para retormar la situación en la que me había metido.

-De esas personas. ¿Acaso no lo sabes? Todos están CHALADOS, esta sociedad de idiotas han accedido a que la desesperación sea más fuerte que ellos. De eso te protego, eres una de las pocas personas que he notado que no están locas. Me responde de una manera muy exagerada y literal.

¿De verdad piensa que esto me va a dar miedo?

-Entonces si tu solo quieres salvar a los que no están "corruptos" por esa desesperación entonces tenemos que salir, conozco a dos personas que no están mal y seguramente me están buscando, así que lo más inteligente que podemos hacer es salir y buscarlos. Le dije para hacerle entender de una vez lo que estaba pasando.

Ella solo me miró y abrió la puerta por la que segundos después pasamos.

Tengo que encontrarlos antes de que pase algo malo.

Velum

-¡Hemos buscando por todas partes y no está! Afirmó Ethan frustrado por haber fallado en tantos intentos de encontrar a Elin.

Durante todo este rato me ha estado doliendo la cabeza como si la hubieran golpeado con unas panderetas. Curiosamente me ha empezado a doler la cabeza cuando ha desaparecido esa silueta tan familiar. Ahora mismo mi cabeza ya no puede aguantar más el dolor, tengo que irme de aqui.

Suelto la mano de Ethan con la que me había sujetado todo el rato.

-¡Velum! ¡¿A donde vas!? ¡Trnemos que encontrar a Elin! Empezó a gritar Ethan por la distancia tan grande que hay entre nosotros. No puedo ir con el, tengo que irme.

Elin

Al desolar por completo la tienda nos encontramos con que todos esos "corruptos" estan corriendo como si el mundo se fuera a acabar en pocos minutos.

-¿Lo ves? Están grillados. Me susurró Mia al oído y luego cambió de tema. -Bueno ¿Donde están tus amigos que esperemos que no estén como esta humanidad? Preguntó Mia dejándome claro que no se juntaria con ellos si estuviesen igual de mal que los demás.

-No tengo ni idea, vamos a buscarlos. Le respondí a Mia cogiendola del brazo, tirando de ella para que caminara.

Velum

Siento que en algún momento mi cabeza va a estallar. ¿¡Porque me está pasando esto!?

Todavía se escucha el eco de Ethan, llamandome, pidiendome que vuelva, pero eso ahora mismo es imposible. Ni siquiera yo se porque tengo esta necesidad de correr, esconderme y que no me encuentren.

¿Que se supone que tiene esa chica para que me deje así?

Después de correr mucho mi cuerpo me obliga a esconderme en una cafetería un poco rara, sus colores desteñidos hace que el local parezca de hace cuarenta años y ya no hablemos de las personas que hay dentro. Que mal rollo, pero mi cuerpo no hace caso a mi cerebro y literalmente hace lo que le da la gana.

Al entrar todos esos seres me miraban de una manera muy rara, el camarero me dedicó una siniestra sonrisa que me puso la piel de gallina, después todo estaba en negro, todos han desaparecido, pero aparece un pequeño destello que se convierte en una figura humana que se gira y por fin puedo reconocerla, era la chica de antes.

Elin

-¡Velum, Ethan! Empecé a gritar en medio de la calle por si alguno de los dos me escuchaba.

Después escuché una voz masculina y aguda decir mi nombre, era Ethan quien vino corriendo agitando los brazos como si esto fuera un simulacro.

-¡¡¡Elin. Tu hermano, no se donde está!!! Empezó a gritar y todo el mundo se lo quedaba mirando como si fuera otro loco más, al igual que ellos.

-¿¡No sabes donde está!? Afirmé muy nerviosa y palida mientras un par de chicos nos miran, yo les dedico la mirada asesina más penetrante que se hacer. Ellos me mirarón un poco asustados y después aceleraron el paso.

-Vale. Lo primero: Bajad el tono que hos están escuchando hasta en Narnia.
Lo segundo: Calmaros
Y lo tercero: Si esta "desaparecido" lo más lógico es poner carteles de búsqueda y de recompensa pues les daremos algo que le sirva a esa persona. Dijo Mia al ver que todo el mundo nos miraban como si estuviéramos completamente locos

-¿No se supone que cuando se hace un cartel de búsqueda se da como recompensa dinero? Le pregunté a Mia en un intento de corregirla.

-¿Dinero? ¿Que es eso? Preguntó muy confusa, yo abri la boca de la sorpresa y Ethan me miró pidiéndome que le explique lo que es el dinero.

-Olvidalo, les daremos algo útil de recompensa. Dije después de un pequeño silencio.

Un par de horas después...

-Ninguno lo a encontrado ¿No? Pregunté sin un grano de esperanza.

Ambos negaron con la cabeza, esto no pinta nada bien ¿Donde se ha metido este niño?

Velum

-Eres tu, Velum. Dijo la chica que sabía perfectamente quien era. Después me cogió de las mejillas con sus delicadas manos.

Antes de poder darme cuenta empecé a llorar como si no lo hubiera hecho en años. Sus dedos limpiaban mis lágrimas y mis mejillas húmedas.

-Tranquilo, estoy aquí a pesar de no poder estar donde tu estas. Yo estoy en tu corazón porque se que te acuerdas de todo lo que pasó y cuando recupere mis recuerdos seguro que yo también me acordaré y querré volver a verte todos los días. Dijo ella con esos brillantes ojos como el sol, después se acercó más a mi y cuando rozó mis labios abrí los ojos de golpe, un hombre me estaba chasqueando los dedos para hacerme reaccionar.

-¡Ey, por fin te despiertas! Exclamó el hombre de gorra azul y pelo corto. -Hay tres personas que preguntan por ti, así que no les hagas esperar más. Me dijo el hombre y después salió del baño de hombres, hago lo mismo cinco minutos después de la salida del hombre. Al salir de la cafetería me encuentro a Elin, Ethan y a una chica que me mira como si fuera un bicho.

-¡Dios Velum! ¿¡Por qué te fuistes corriendo!? Preguntó muy confundido Ethan.

-¡Eso! ¡No puedes hacer eso! ¿Me oyes? Me intento explicar Elin enfadada.

-Deberías desaparecer menos chico. Dijo la chica pelirroja.

-Bueno. ¿Nos vamos ya? Preguntó Ethan a todos.

-¿A donde quieres que vayamos? Le preguntó Elin como si le dijera que estábamos andando sin rumbo.

-Pues al edificio del cual tu y Mia salisteis antes. Yo empezaría a buscar algo que nos de alguna pista por ahí. Le respondió a Elin con sensatez, después empezó a andar hacia un edificio que parecía estar completamente desolado y los demás le seguimos.

Elin

Al entrar al edificio de antes Velum se quedó en la puerta con una mano en el pecho y con una respiración muy agitada.

-¿Velum? Le pregunté acercandome a el pero una mano cogió mi hombro me arrastró hacia atrás para retroceder.

-Elin. ¿No era que tus amigos no estaban infectados? Preguntó Mia, yo la miré extrañada.

-Pues si, ¿Porque preguntas eso? Le pregunté a Mia. Después miré hacia donde estaba Ethan quien miró a Velum muy asustado.

-El está desesperado. Actúa como uno. Dijo Mia de manera muy seca y miró seriamente a Velum.

-¿Nos ha infectado? Preguntó Ethan preocupado.

-Si no te empieza a doler la cabeza hasta reventar y no tienes visiones de la nada entonces no. Le explicó Mia a Ethan, después Ethan suspiró de alivio.

-¿No hay ninguna manera de curarlo? Pregunté con mucha preocupación, era mi hermano y aunque no me acuerde de todo puedo saber cuanto amor le tengo a mi hermano pequeño.

-No lo se. Me respondió Mia seria.

-No lo voy a dejar aquí. Le respondí a Mia segura de lo que haría.

-Elin. Me llamó a regañadientas Mia.

-¿No conocéis un sitio llamado enfermería? Les pregunté a Mia y a Ethan.

-De hecho si. Me dijo Ethan.

-Pues vamos allí, intentaremos encontrar algo. Les respondí.

Los dos asistieron y le pedimos a Velum que se quedara tumbado en uno de los sofás del edificio. Cerramos con la llave que Mia tenía y partimos hacia el hospital.
Al llegar comienzo a rebuscar por todos lados y eso también quiere decir que empezé a desmontar todo lo que habían en las estanterías es decir, otras medicinas.

-¿¡Podrias dejar de tirarlo todo!? Dijo Ethan enfadado porque le había caído en la cabeza alguna que otra botella que había por ahí.

-¡Para encontrar algo en concreto hay que desordenar las cosas! Exclamé perdiendo la paciencia.

-Ethan. ¿Cuando empezó a pasarle esto a Velum? Escuché que le preguntó Mia a Ethan.

-Cuando buscábamos a Elin por la calle. Le respondió Ethan.

-Alguno le debió contagiar. Lo raro es que tu no lo estes. Dijo Mia confundida.

-Eso es porque antes de todo esto en mi pueblo se predecia que esto iba a pasar y fuí la única persona a la que pudieron vacunar de esta enfermedad.

-¡Ey! ¡Mirad lo que he encontrado! Les dije a Mia y a Ethan enseñandoles con orgullo una botella que ponía "anti-enfermedades" en el papel que rodeaba la botella.

-Yo no me fio de eso. Comentó Mia con negatividad.

-Tiene pinta de ser una estafa al 100%. Respondió Ethan después.

-¿Y si la probamos con alguna persona que esté en la calle? Les propuse a Ethan y a Mia.

-Bueno, ¿Porque no? Así sacamos el beneficio de la duda. Dijo Ethan mirando a Mia que solo asintió soltando un suspiro muy pesimista.

Al salir de la enfermería nos encontramos con una situación que yo llamaría: El momento en el que la desesperación estalló y se convirtió en una enfermedad mucho más fuerte, en ese instante me da un dolor de cabeza como si hubiera sido un golpe, dejé de ver a esas personas para ver a mounstros terribles, uno de ellos lo reconozco porque ya lo he visto antes, no es ni más ni menos que la sirvienta que me desmayó en mi mundo para llevarme al castillo de mi padre. Se me entrecortaba un poco la respiración después de ver que todo se volvía loco a mi alrededor, luces encendiendose y apagandose y el retumbo de los pasos de las bestias que tenian sed de sangre. Empecé a respirar más fuerte, intentando no perder la respiración y tampoco la cordura. Las voces de Ethan y Mia sonaban como ecos que venían desde muy lejos. Sigo sin entender porque esta pasando todo esto ¿Acaso ya me estaba infectando?

-¡Elin! ¡Despierta! Escuché que decía Ethan y después sentí unos brazos cogiendome con fuerza para mantenerme de pie.
No quiero abrir los ojos...
No quiero ver más a esos mounstros...
Me quiero ir de aquí...

-Elin, abre los ojos. Escuché una voz calmada que me relajó al instante y que me resultaba familiar. Abrí los ojos despacio por miedo y me encontré con la mirada de un chico de ojos azules oscuros como el cielo de la noche, se quien es... Y se que lo extraño mucho...

-¿Por que no te has ido ya? Pregunté cerrando los ojos con fuerza para ya no mirarlo porque se que según la policía el está muerto.

-¿Quieres que me vaya? Preguntó el sorprendido por lo que le he dicho

No le respondo y el entiende que ese silencio es un si.

-Lamentablemente para ti no puedo irme. Dice tras un silencio incómodo.

-Tienes que recordarlo todo, y este es el mejor lugar para hacerte recordar. Después de decir eso me levantó el mentón con su dedo y se acerca mi tan lentamente que parecían eternidades, hasta que sus labios rozaron los mios. Al besarme empezaron a surgir un montón de recuerdos en mi mente, se acoplaron y luego esas piezas se juntaron para crear un solo recuerdo, uno que no volveré a olvidar nunca.

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