Jueves 1 de abril, 2021

La tarde se habia ido con apresuro, dejando así que la oscuridad invada las calles de Detroit.

La luz tenue de la luna iluminaba los balcones de todas las casas en aquella ciudad.

La mayoria de las personas dormían.

Pues era lo normal, ¿no?.

La noche era para descansar.

Sin embargo para aquella chica no parecía ser así.

Sentada en su escritorio, con una luz blanca iluminando los papeles, de los cuales estaba estudiando para su proximo examen se encontraba la pelicastaña.

Para Britney no había hora de descanso, se la pasaba día y noche, horas y horas de estudios.

¿Para qué?.

Para poder graduarse y por fin, adentrarse al mundo el cual tanto estaba anhelando.

La universidad.

A sus quince años ya tenía más de la mitad de su vida planeada.

Lastima que la vida no es como planeamos, y que esta misma se encarga de sorprendernos.

-Una progresión aritmética es una sucesión en la cual cada término, a partir del primero, se obtiene multiplicando x ...¡AHH!-

-¿Brit? ¿Qué pasó linda?-Cuestionó su amiga con preocupación, al otro lado del teléfono-

-Nada me entra, estoy en blanco, por más que leo y re-leo, nada se me queda en la cabeza-La frustración era más que evidente en su tono de voz. Y sus ojos estaban cristalizados gracias a la misma.-

-Tranquila...Respira...Deberías ir a dormir, probablemente tu cerebro no esté reteniendo nada por el cansancio.- Sentenció ganándose una respuesta negativa de parte de la contraria-

-Aún así debo seguir estudiando, el maestro dijo que el examen estaría difícil, quiero asegurarme de...

-Britney, son las dos de la madrugada, Estás con ese jodido libro desde las siete de la mañana...-Hizo una pausa breve y luego prosiguió- Comprendo que no quieres reprobar para no dañar tu índice escolar, sin embargo, tu salud física y mental también son importantes...-

-Pero...-La voz de la mencionada interrumpió las palabras de su amiga-

-Debes dormir las ocho horas indicadas.-Sentenció con su típico tono de madre regañona.-

-Caro, amiga, Ya entendí, me iré a dormir-Apesar de que su amiga no la pudiera ver, sonrió fugazmente.-

-¡Gracias!-Agradeció sonriendo de vuelta- Entoncss, hablamos mañana, descansa y sueña con los angelitos-Y sin más, colgó dejando a Britney hablando con la nada-

-Tu igual minion, descansa-Niega divertida. Deja su teléfono de lado y como era de esperar tomó el libro de Matemáticas financiera en manos-

No podía darse el lujo de dormir, sin si quiera asegurarse de que su memoria hubiese captado todo a la perfección.

Por más que le hablaran sobre el mismo tema, ella no accedía, era obstinada, demasiada terca y cabeza dura.

Y si decía que iba a hacer algo así lo hacía.

Hizo caso omiso a lo que Carolina le dijo y continuó estudiando.

Se forzaba a si misma, se sobreexigia únicamente para conseguir entrar a la universidad.

Conforme pasaron los segundos sus pestañas parecían más pesadas, sus ojos parecían tener vida propia cerrándose por si solos y ni hablar de su cuello; Este parecía no tener huesos ya que cabeceaba muy seguido. Hasta que no pudo más, y quedó profundamente dormida en la silla de su escritorio.

Sin saber lo que le esperaba al despertar.

[AL OTRO DIA]

Son las nueve de la mañana cuando Britney despierta, los latidos de su corazón por poco le ganaban a los de los roedores de tan veloz que latía.

Estaba sudando frío con una extraña calidez en su pecho.

¿Qué había pasado? ¿Por qué de pronto siente mariposas en el estómago?

Era realmente confuso, su mente no sabía una razón lógica para ello, sin embargo su corazón sí.

La sensación de conocer el lugar, la persona y el momento estaba presente en ella. Y al mismo tiempo, el sentimiento de desconocimiento absorbía otra gran parte de sí.

-Esto debe saberlo Carolina, ella seguro me dará una razón clara-Habló para mi misma intentando regular su respiración- Si, ella debe saber alguna razón para esto-

Y sin darse cuenta, su rostro yacía empapado de lágrimas.

No sabía si eran lágrimas de frustración o lágrimas de tristeza.

Estaba hecha un lío, un lío que espera resolver pronto.

Y como si sus mentes estuvieran conectadas, la notificación de llamada sonó en su celular. Era Carolina.

-Hola Bri...-No terminó bien de saludar cuando el sollozo de su amiga se hizo presente-¿Britney, ahora que tienes mi niña?¿No dormiste bien?-Vaciló esperando una respuesta de su parte-

-No caro, no es eso..-Respondió sorbiendo la nariz. Estabilizándose-

-¿Entonces?-

-Fue un sueño que tuve-

Por el silencio de Carolina, la chica dedujo que podía continuar.

-Me soñé con un chico, era muy bonito, y tierno. Estabamos en un parque por lo que eramos rodeados de naturaleza y uno que otro juego atractivo. En el sueño estamos jugando,al parecer eramos muy cercanos, como si fuésemos mejores amigos.

Estaba muy feliz, riendo y agarrando las grandes manos del chico mientras dábamos vueltas y vueltas.- Una risa media allantada se escapó de mis labios inconscientemente- Su agarre era fuerte pero no me hacia daño, era como si tuviera miedo de que me fuese a perder o como si fuera a desaparecer de su lado.

Lo sentí tan real Caro, tan dulce,me sentí...amada-Conté ventilando mis ojos cristalizados, con lágrimas traviesas escapándose por todo mi rostro.-

Era de esperarse su reacción, pues esta era la primera vez que sentía algo así de fuerte, si bien, había sentido cosas por otros chicos anteriormente, pero esta vez de alguna extraña manera era más fuerte aquel sentimiento de atracción que alguna vez tuvo.

-¿Y qué pasó después?-Cuestionó la chica del otro lado del teléfono. Intrigada sobre más y hambrienta de saber aún más referente al tema.-

-Luego él se me acerco y me tomo del cuello suavemente y dejó un ligero beso en mi cien.-

Al recordar aquel momento su corazón palpitó fuerte. Tan así que sentía que en cualquier momento se saldría de su cuenco. Al parecer no era la única que se emocionó por aquellas emotivas y adorables palabras dichas por la castaña pues, Carolina soltó un gran y estruendoso chillido al escuchar lo que su amiga le contaba.

-Cuéntame más amiga, ¿Cómo era el chico?¿Lo conoces?¿Lo haz visto antes? ¡Habla ya, joder!-Exclama insistente al no obtener ninguna respuesta a sus preguntas-

-Pues su tez era canela, tenía el cabello ni muy largo ni muy corto y era rizado, sus ojos eran castaños oscuros. Era de complexión alta, parecía ser el tipo de chico que se preocupa por ti y que siempre está al pendiente tuyo. Me hacía parecer una pequeña pulga a su lado.-Carolina soltó una pequeña risa que más tarde se le contagiará a Britney-De todo esto lo que más me intrigó en él.. -Hice una pausa pensando en que diría- ...Fue que aunque no dijo palabra alguna, aún así me transmitía calidez y confianza.-Suspiré pataleando como una chiquilla cuando sus padres aceptan comprarle un dulce.- Ese chico, siento que lo conozco pero al mismo tiempo no-

Sus sentimientos eran tan contradictorios que ella misma se enredaba con sus palabras.

-Ay Bri...Creo que te hicieron un amarre-Comentó en tono burlón hacia su amiga-

Britney sólo pensaba en las razones o motivos por este sueño. Podría ser un amarre como mencionó su amiga, o quizás un sueño sin importancia. Tal vez causa del destino, todavía no sabía la respuesta.

Tampoco quería prestarle mucha atención a esto, pues no quería ilusionarse y que al final del día haya sido un sueño más del montón.

-Carolina mejor dejemos el tema de lado, y arreglemonos, debemos ir a la escuela que se nos hace tarde.-

El suspiro exagerado de la mencionada se hizo escuchar atraves de la llamada, haciendo que Britney negara.

-Ah, ya quiero acabar los estudios para...

-La universidad es más estricta que la escuela-Interrumpe la castaña. Levantándose de su cómoda y arreglando su bolso en donde lleva sus útiles.-

-¿Crees que no lo sabía? Por eso englobe todo en la palabra estudios, estudios de la escuela y universitarios.-Finalizó orgullosa de si misma.-

-Chica, colgaré necesito ducharme y terminar de arreglarme, nos vemos donde siempre-Ambas terminan y cortan la llamada.-

Unos treinta minutos después ya la chica de cabellos castaños había finalizado su ducha y su rutina de la mañana.

Salió de su hogar dirigiéndose al lugar en donde siempre se juntaba con Carolina para ir a la escuela juntas.

-¿Has pensando algo más sobre él?- Habló Carolina tras unos minutos en completo silencio.

Ambas sabían muy bien de quien hablaban, era más que obvio.

-No-La atmósfera se había vuelto un poco incómoda,más bien tensa, tanto que podía cortarse con filosos cuchillos.

Carolina sabía muy bien que no era así, su amiga estaba demasiado extraña, incluso más de lo que ya era.Caminaba mirando sus pies, agarrando los lazos sobrantes de su mochila, sumida en sus propios pensamientos.

Era más que obvio que no paraba de darle mente al asunto. Como un rompecabezas, pronto iría descubriendo las otras piezas y ordenandolas minuciosamente en su cerebro.

Lo único que, aún no estaban todas las fichas. Le faltaba mucho por recorrer para poder hallarlas.

-Por cierto, ya llegamos a la escuela-La contraria al escuchar aquello levanta la mirada, y en efecto, estaban paradas enfrente a la gran entrada de la escuela.-

-Gracias-Le dedicó una sonrisa y sin más se adentró al establecimiento.-

[...]

Para este chico todo parecía ir con normalidad, o eso creía el, solo era cuestión de esperar para que todo esta tranquilidad que lo rodeaba se esfumara como agua en manos.

Quizás, pasen días, meses o años, como también puede que pasen horas.

-Jayden, préstame atención cuando te hablo niño-Regaña su madre, al notar lo ido que estaba su hijo.-

-Lo siento mamá ¿Qué decías?- Cuestionó agitando su cabeza, alejando todos sus pensamientos y preocupaciones de la misma.-

-Te preguntaba como dormiste, pero creo saber la respuesta.- Vaciló la mayor tomando un sorbo de su preciado café con leche.-

-No pude dormir bien, no logré conciliar el sueño.-Habló el castaño recostando su cabeza sobre sus brazos ya cruzados.-

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HOLIII
Aquí les traigo su primer capítulo.

Espero que les guste mis queridxs honeybears 🐾🍯