Capítulo 197 El fin de la guerra del Sureste (1)

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El Ejército Móvil de Campo que había sido enredado por la estrategia del imoogi y la mantícora decidió apostar por romper el punto muerto.


Como los monstruos estaban usando la táctica de perder a algunos para ganar, entonces también tuvieron que usar una estrategia para liberarse de eso.


Sin embargo, a menos que estuvieran al mando, hacerlo tampoco fue una tarea fácil, ya que los monstruos tenían una movilidad mucho mayor. Para añadir a eso, los monstruos también tenían un mayor número.


En esta situación en la que todas las probabilidades estaban apiladas en su contra, lo único en lo que el Ejército Móvil de Campo tenía la ventaja era el poder a nivel maestro.


Y eso fue exactamente de lo que Iron decidió aprovecharse.


―Todos deben haber reconocido que continuar así no nos servirá de nada, así que tenemos que correr algunos riesgos ahora.


Iron habló tranquilamente a través del comunicador que estaba conectado con todo el ejército. Los soldados permanecieron en silencio mientras esperaban las próximas palabras de Iron.


―Actuaré como el señuelo.


―...


Los soldados quedaron sin palabras ante lo que había dicho, sólo podían apretar los dientes mientras veían a su comandante sacrificarse una vez más. Todos habían entrenado arriesgando su vida para ser útiles durante el combate.


Pero finalmente, cuando llegó el momento, sólo podían depender del comandante.


―Todo el mundo debería saber que el tiempo no está de nuestro lado.


Iron continuó con una mirada serena en su rostro, mientras miraba hacia el comando, seseaba que tuvieran un poco más de tiempo, pero desafortunadamente estaban al borde de la ruina. No pudieron seguir satisfechos con algunas victorias tácticas triviales mientras prolongaban la batalla. 


Tenía que asegurarse de que eran capaces de arreglar las cosas en el sureste y mudarse a otro lugar antes de que el Orbe de Dios se rompiera. Además, no le gustó cómo habían acumulado tanto daño de su lado.


Los soldados y oficiales comisionados que había entrenado con ese esfuerzo morían constantemente. Debido a la impactante tasa reproductiva de los monstruos, podrían compensar su número tan pronto como alguno de ellos muriera, pero los humanos no podían hacer lo mismo.


―Para atrapar al enemigo, tienes que correr un riesgo equivalente. Así que, al igual que damos todo durante las batallas a corto plazo, voy a penetrar en el campamento enemigo.


A esas palabras, los comandantes apretaron los dientes. 


―Por supuesto, esos bastardos astutos no aparecerán hasta que haya consumido muchas de mis fuerzas. Así que desde el principio, usaré todo mi poder para barrer a través de sus tropas.


Una operación de un solo hombre de entrar en una zona de peligro. Pero, a pesar de eso, Iron no vaciló.


―El punto principal de la operación es que debes exterminar completamente a todas las tropas enemigas antes de que el imoogi y la mantícora me maten.


Hasta este momento, Iron casi siempre había jugó el papel principal en la batalla. Había tomado la delantera y ganado la victoria en virtud de su propia fuerza en varias ocasiones.


Pero esta vez fue diferente, no sería una exageración decir que todo dependía de los soldados.


Si las cosas no se hubieran hecho de esta manera, los astutos de imoogi y la mantícora no tomarían el anacardo. Tenían que asegurarse de que esos dos peces grandes sólo pudieran abrir la boca de par en par y morder el cebo, ese fue exactamente el punto de la operación esta vez.


Por eso necesitaba absolutamente la ayuda de los soldados.


En el momento en que trataron de intervenir y ayudarlo porque parecía estar en cierto peligro, la operación se desmoronaba inmediatamente. Pero también sería un fracaso si Iron se absorbiera demasiado en su lucha con el enemigo y muriera.


―Sé que las condiciones son muy difíciles, pero debemos tener éxito.


Mientras él decía eso, Iron miró profundamente a su comunicador.


―¿Puedes hacer eso?


Los oficiales comisionados guardaron silencio. Iron les pidió otra vez.


―¿Puedes hacer eso?


―Sí, señor.


Al escuchar su respuesta, Iron tenía una expresión satisfecha en su rostro. Luego comenzó inmediatamente la reunión de operaciones.


―Todo el cuerpo se une en un solo lugar y se preparan para una guerra a gran escala contra el enemigo.


―Sí, señor.


Los tres líderes de la división respondieron simultáneamente al comando de Iron y los tres cuerpos más grandes comenzaron a unirse.


Esto significaba que estaban reuniendo a sus tropas para una guerra total y también significaba que dejaría a los tres cuerpos, con su gran escala, como una táctica de distracción, y elegiría una tropa diferente para la defensa.


―Orden de Caballeros, Tropas de asalto, Cuervo* y Guardabosques, apunten a la retaguardia de la fuerza enemiga.


―Sí.


A sus órdenes, respondieron los oficiales al mando a nivel de división que dirigirían la defensa. Ahora había aprovechado al máximo las tropas de defensa en una lanza que perforaría el final de la cola del ejército monstruoso, sin embargo, existía la posibilidad de que la  mantícora, por astuta que fuera, se daría cuenta.


Por eso tuvo que mirarlo.


―Seré la cabeza.


Iron miró fijamente al lejano ejército de monstruos mientras hablaba.


―Mientras estoy al frente, el imoogi y la mantícora intentarán golpear a cada división desde atrás. Cuando eso suceda, debes aguantar.


―Me encargaré del lado derecho―dijo Ariel, hablando primero.


Dado que su cuerpo era el más equilibrado, podían manejar a cualquiera que viniera, ya fuera la mantícora o el imoogi.


―Me tomaré la izquierda.


Saeriden se adelantó para liderar el costado izquierdo.


Entre los tres cuerpos, el 23º Cuerpo de Saeriden era el más especializado en defensa. Y además de eso, había una razón por la que los dos tomaban tales decisiones.


En el momento en que Iron corrió peligro, el equipo que pudo alcanzarlo más rápido fue la fuerza aérea, y el cuerpo con la fuerza aérea más fuerte en el Ejército de Campaña Móvil era el 22 Cuerpo de Cardro.


Al principio, el 22º Cuerpo había sido designado como defensa, pero ahora, como sería al menos dos veces mejor como fuerza aérea que como defensa, eran más confiables en ese papel que cualquier otro. Era una buena formación de batalla que permitiría a cualquiera de los dos cuerpos que estaban en la retaguardia brindar apoyo si hubiera algún peligro.


Y así, la operación se decidió.

Nota: No es tropa tormenta, es tropas de asalto XD pequeña confusión.


Si todo saliera exactamente como estaba planeado, podrían acabar con las fuerzas enemigas de una sola vez con esta formación.


Antes de que las fuerzas enemigas ataquen al cuerpo unido, Iron atravesaría el corazón de las fuerzas monstruosas usando su temible potencia de fuego. Y una vez que el imoogi y la mantícora vayan a capturar al cansado Iron, los Cuerpos 23 y 21 penetrarían en el campamento enemigo, mientras que el 22 Cuerpo se movería para ayudar a Iron. 


Mientras tanto, las tropas de defensa tenderían una emboscada al enemigo por la espalda.


Cuando luchaba batallas a gran escala, mantener las líneas de batalla y la moral siempre era crítico. Una vez que el ejército monstruoso se derrumbó en la línea, se verían obligados a retirarse. Y si también recibieran daños por la espalda, todos se dispersarían como dientes de león en el viento.


En ese punto, sería fácil como pastel para el Ejército Móvil de Campo limpiarlos.


(Brrrrrruuummm)


Mientras un gran cuerno trompeaba, el ejército monstruo comenzó a moverse, como si estuvieran comenzando una guerra a gran escala, con todas las estacas.


Excepto esta vez, cada miembro del Ejército de Campaña Móvil sabía que el gran movimiento esta vez también era una táctica de distracción.


Mientras los monstruos, incluidos los gusanos gigantes, se acercaban en masa, el gran gusano acorazado y los guardias de la mantícora que eran los objetivos principales comenzaron a moverse en otra dirección.


―Inicia la operación.


―Sí, señor.


Los comandantes comenzaron a moverse con un solo acuerdo, una vez que Iron dio su orden.


El cuerpo unido comenzó a preparar sus campamentos. El 22º Cuerpo y las tropas de defensa que estaban en primera línea avanzaron, mientras que los cuerpos 21º y 23º retrasaron a algunos mientras se extendían en dos alas. Al mismo tiempo, Iron se subió a Dos Lunas y voló hacia los monstruos que se acercaban.


―Trueno.


A la llamada de Iron, un trueno cayó desde lo alto del cielo, mientras una tormenta comenzaba a azotar. Después de eso, el fénix desató una tormenta de fuego para detener el avance de los monstruos.


―Búho, ábrete paso de una vez.


(Buu)


Siguiendo las intenciones de Iron, Dos Lunas lanzó dos rayos con todo su poder, mientras avanzaba.


Aún así, el ejército de monstruos, digno de ser llamado ola de monstruos, unió fuerzas para recibir los dos poderosos rayos. Independientemente de cuán fuertes fueran las bestias divinas, todavía les era imposible detener la ola por sí solos.


Pero Iron siguió cargando solo con los monstruos. Iron saltó de Dos Lunas, que volaba por encima de los monstruos, y creando una enorme espada de aura barrida por el centro de los monstruos.


(Kong)


Iron sonrió mientras observaba cómo se formaba un cráter y los monstruos a su alrededor caían y morían, aplastados en charcos de sangre.


―Vamos a divertirnos.


En el momento en que Iron habló, los monstruos que lo rodeaban reunieron todas sus fuerzas y corrieron hacia él. Los monstruos clase señor rugieron, dando órdenes a sus subordinados. Sin ninguna señal de miedo ante la aparición de un maestro como Iron, corrieron sin pensar.


Mientras Iron se enfrentaba a las tropas monstruas reunidas solas, como se predijo, el imoogi y la mantícora vinieron ardiendo desde dos direcciones.


―¡No retrocedas!


―Detenlos.


Como si hubieran estado esperando que esto sucediera, Ariel y Saeriden dieron sus órdenes y avanzaron para enfrentarse al imoogi y la mantícora de nivel maestro. Al mismo tiempo, el 22º Cuerpo y las tropas de defensa chocaron con el ejército de monstruos unidos, atacándolos continuamente.


Debido a la gran cantidad de monstruos, incluso después de que Iron hubiera matado a varios de ellos, todavía estaban luchando en igualdad de condiciones con las unidades principales del Ejército de Campaña Móvil. Al ver esto, algunas unidades de los Cuerpos 21 y 23 fueron a apoyarlos para mantener las líneas del frente.


Mientras tanto, la Orden de los Caballeros, las Tropas de Asalto, los guardabosques y Cuervo* que se habían movido detrás de los monstruos miraban. Miraron las imágenes en tiempo real a través del cristal de video del Cuervo, esperando el momento adecuado para hacer su entrada y esperando que el imoogi y la mantícora salieran pronto.


Pero los inteligentes hijos de un arma nunca serían atrapados tan fácilmente, porque sabían que, basándose únicamente en su abrumador número, mantener la situación actual era una ventaja para ellos. Pero había algo que nunca podrían haber esperado, y ese era el poder de Iron.


―Aún es sorprendente verlo de nuevo.


Rodem, el líder de la Orden de los Caballeros, se quedó sin palabras al ver el temible poder que exhibían las bestias divinas mientras se fusionaban. La fusión que se había vuelto mucho más fuerte que antes realmente estaba "barriendo" las filas de los monstruos que apenas aguantaban.


Sin embargo, debido a que Iron y las bestias divinas estaban dándolo todo, cuanto más duraba la fusión, más rápido se cansaban. Había un límite para su poder, incluso cuando Baepsae curaba continuamente su vitalidad. 


Podían ver a Iron cansarse a medida que pasaba el tiempo, mientras luchaba contra los monstruos con sus poderes sagrados al máximo.


Fue en ese momento que el suelo vibró y apareció una gigantesca figura negra.


―¡Finalmente!


Rodem apretó el puño al ver el imoogi que finalmente había aparecido. Antes de que se dieran cuenta, la mantícora llegó deslizándose por el cielo y se dirigió directamente hacia Iron.


―¿Vamos a entrar?


Rodem negó con la cabeza ante la pregunta del caballero.


―Aún no.


Constantemente en el lado receptor del ataque conjunto de la mantícora y el imoogi, Iron se estaba agotando aún más, pero aún podría resistirlo. Al ver esto, los monstruos alrededor comenzaron a reunirse en el centro para ayudar al imoogi y a la mantícora.


―Un poco más... sólo un poquito más...


Rodem, Ludem y Nyx Cole esperaron ansiosamente a que los monstruos abandonaran sus filas ordenadas.


Finalmente, cuando los monstruos se reunieron en el centro para formar un anillo apretado alrededor de Iron...


―Ahora.


Una vez que Rodem dio su orden, la Orden de los Caballeros atacó en formación de cuña, derribando a los monstruos que estaban en la retaguardia. Las tropas de asalto también comenzaron inmediatamente a atacar al ejército de monstruos desde una dirección diferente, mientras que los guardabosques acabaron con los monstruos restantes, limpiando efectivamente la retaguardia.


El pez gordo había mordido el anzuelo.


Todo lo que quedaba era una carrera contra el tiempo.


Traducción: Loren

Corrección: Loren

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