Las palabras de Hurtson fue un disparo al corazón, ¿en serio pretendía hacerme luchar a su lado contra siete Demonios sueltos que parecen ser fuertes y de los que no tenemos casi tanta información?

Yo reí incrédulo de lo que escuché, él me miró confundido levantado frente a mí.

—¿En serio piensas luchar conmigo contra ellos? ¡Estás loco!

—El capitán dio la orden de retirada. Vine a buscarte para que eliminemos juntos a esos Demonios Puros.

—¿Dio la orden de irnos en plena misión? Tu capitán no está capacitado para luchar contra esos Demonios. Es un cobarde, eso es lo que es.

—No, vio que nadie estaba listo para arriesgarse en la misión —parecía un mensajero diciendo todo eso.

—¿Y tú crees que yo puedo hacerlo, contigo? —pregunté para ya acabar con esto, ya me había enojado.

—Sí, y más que eso. Destruiste un local entero y le hiciste frente a esos Demonios Puros sin miedo. El capitán siempre tiene la razón.

—Esta vez se equivocó.

—Yo nunca me equivoco, Tom.

En ese momento mi enojo se esfumó y sólo apareció una confusión maquinando dentro de mi cabeza.

—¿Q-Qué? —ya estaba confundido.

—Yo soy el capitán de la operación, yo dí la orden de la retirada para el resto del equipo y sólo te deje a ti, para que ambos pudiéramos ir por...

No le dejé terminar ya que me dio un ataque de risas confusas.

—Estás completamente loco. Era de esperarse, ya estás muy viejo para estas cosas... Primero tu predicción de una guerra, y ahora quieres matar a Demonios Puros sin el apoyo necesario. Es un suicidio.

Hurtson frunció el ceño, se acercó a mí, me tomó el cuello del chaquetón que tenía puesto y me alzó con fuerza poniéndome contra la pared, ya parecía cansado de escucharme.

—¡Escúchame bien, tú con tus poderes eres invencible, y no me has visto peleando! ¡Problemas como esos Demonios Puros amenazando la tierra es un paso adelante hacia la guerra!

Él tenía ansias de hacerlo pero yo me negaba, no estaba listo; esto no era una batalla de entrenamiento, es vivir protegiendo a las personas o morir en el intento. Todo es muy arriesgado. Por otro lado, no puedo dejarlo solo.

Suspiré rindiéndome.

—E-Está bien. ¿Cuál es el plan?

Fuimos a la residencia de Jenissia, ella estaba despierta, vestida esperando la hora de trabajo, ella se iba a las 2:00 pm, son las 10:00 am. El viejo quiso planear el ataque hacia ellos desde aquí.

—¿No pudiste llevarme a tu tierra para pensar en el plan? Se siente incómodo planear aquí —opino.

El viejo estaba de pie pensando mientras miraba la mesa del comedor.

—Señorita Jenissia, ¿está usted incómoda? —le preguntó con educación a Jenissia que estaba sentada en una de las sillas de la mesa mirándonos mientras comía palomitas de maíz.

Ella negó con la cabeza mientras masticaba palomitas.

—¿Qué haces comiendo eso? —le pregunté un poco envidioso.

—Ah, ¿esto? Las compré para cuando viéramos películas, pero verlos a ustedes dos planeando un asalto contra Demonios Puros es mejor —dijo como si nada, el viejo le contó  todo y ella le dio igual, ¡le dio igual!

—¿Lo ves? Ella es despreocupada, no como tú que tienes miedo de morir contra esos Demonios Puros.

—¡¿Y quién no lo tendría?!

(Ellos no entienden)

¡Hurtson es mucho mayor que yo y tiene más experiencia en batallas y de seguro ya no le importa morir!

—Tommy, no deberías tenerlo. Mírate, tienes poderes eléctricos y eres fuerte, de seguro puedes contra ellos, pero parece que sólo eres un miedoso —dijo ella irónica masticando otras palomitas.

—No me estas ayudando, ¿sabes? —ella se encogió de hombros inocentemente —. Y bien, ¿qué haremos? —es hora de ir en serio, ya no quiero más presión.

—Los tengo desde que te rescaté, cuando creé el tornado las cenizas quedaron en la piel roja de cada uno de ellos, son rastros de energía, mi energía. Ahora sé dónde se encuentran.

—Bien, ¿y qué esperamos? —ya quería acabar con esto y recostarme un poco.

—Vaya, de un cobarde pasaste a alguien ansioso —Jenisisa murmuró un poco sorprendida.

—Sí, no lo sé, como sea. Debemos ir de una vez para que... no hayan futuros problemas, ¿no? —con eso me referí a la profecía del viejo, aunque creía que era falsa también podría existir una pequeña posibilidad de que pasara, ¿y si esa posibilidad crecía? También quise que Hurtson entendiera a lo que me refería pero no lo hizo.

(No culpes a la vejez, a veces nadie puede captar indirectas)

—No sé qué tienes en mente, pero si quieres ir, entonces vamos, es mejor hacerlo ya que después.

***

—¡Debemos esperar! ¡Vámonos, no estoy listo!

—Ahg. Marica.

El viejo me llevó ahora a los inicios de una montaña que se supone que aquí están los Demonios Puros sueltos. El miedo no abandonaba mi cuerpo, ¿enfrentar siete Demonios acompañado de el loco Hurtson?

(Mala pero quizás impresionante combinación)

Habían árboles gigantes más altos que nosotros dejándonos una vista larga delante.

—Mierda... ¿Dónde están?

—Paciencia, deben estar cerca. No bajes la guardia, tal vez ya sepan que estamos aquí y quizás nos estén acechando —con el tono con que lo dijo solo hizo que tuviera más miedo de avanzar. Mire por arriba de los árboles a ver si no había un Demonio Puro trepador acosándome, hasta giré para ver si todo andaba bien.

Cada vez que Hurtson pisaba una rama me sobresaltaba, empecé a odiar el ruido de las ramas rompiéndose.

—¡Huelo a un Humano y a un Ángel Caídooo! —se oyó por arriba de los árboles, Hurtson se posicionó atento mirando a los lados y a los árboles.

—Cuidado, Tom —me avisó en un susurro.

De repente un Demonio Puro cayó de pie frente a nosotros de los árboles, era el líder de aquella vez, tenía solamente pantalones puestos y una sonrisa de lado arrogante.

—¡Es el Humano rojo! —informó y los demás Demonios Puros cayeron detrás de él.

Hurtson retrocedió y yo también lo hice.

—Y no vino solo. Mejor aún.

—¡En el nombre del Rey Ángel Caído, Azazel, vengo a eliminarlos y a mantener esta tierra en paz de ustedes! —Hurtson invocó una espada blanca en forma de anzuelo y la apuntó a ellos.

—"Rey Ángel Caído, Azazel" —repitió el Demonio Puro y todos rieron a carcajadas —, ay, basta de chistes. ¡Tengo hambre, matémoslos de una vez!

Creo que seremos defensivos contra ellos, Hurtson se ve valiente pero no para írseles de frente. Creé una espada eléctrica y ellos se sorprendieron.

Los Demonios Puros corrieron a nosotros, estaban fijos a mí, me quieren a mí, Hurtson se puso frente a mí y blandió su espada contra uno de ellos cortándole en su abdomen y separándolo del grupo. Se desangraba, su sangre negra y oscura salía y los Demonios Puros sólo lo ignoraron y siguieron.

—¡Tom, elimínalo! —pidió Hurtson, debía matar al Demonio Puro herido, ¿es malo atacarlo en esas circunstancias? —¡Hazlo!

Concentré energía eléctrica en mi puño derecho y le disparé al Demonio, éste explotó enseguida y sus partes se regaron por todos lados, incluso en mí.

(Eso fue asqueroso, pero no te sientas mal)

—¿Saben? Los fuertes son mejores comidas y mejores trofeos. Valdrá la pena degollarlos —decía el líder con una sonrisa maníaca.

—Ven y inténtalo —lo retó Hurtson. Los Demonios Puros vinieron de nuevo, pero el líder se fue por Hurtson y el resto por mí. Creé un hacha para despedazarlos rápidamente.

—¡Es mío! —uno de ellos saltó a mí pero lo esquivé y le corté un brazo a tiempo. Otro intentó golpearme pero le dí un puñetazo en su abdomen y lo separé con mis rayos electrocutándolo con fuerza, pero no murió.

Los Demonios Puros daban vueltas a mi alrededor, parecían temerme por mi poder, lo pensaban mucho y era difícil mantener la vista en uno solo con tantos dando vueltas en círculos.

(Deberían temerte, hasta el Infierno mismo. Obtuviste entrenamiento de Zeus y Atenea)

Correcto. Ya que no venían, decidí ir por uno, dí dos pasos largos y golpeé a uno en la cara, miré rápidamente a Hurtson, estaba luchando con el líder que también tenía una espada. Giré y le disparé a otro en su hombro derecho y le quité su brazo.

Al que le quité el brazo antes se levantaba pero le lancé un cuchillo eléctrico rápidamente y se enterró en él electrocutándolo y matándolo enseguida.

Son fáciles, no sé por qué me quejaba de hacerlo.

Decidí sacar a flote un poco de mi poder. Mis rayos salieron sin control de mi cuerpo rodeándome, los Demonios Puros tenían miedo y parecía que querían huir.

Escuché un grito de la nada, un grito de fuerza y dolor de Hurtson. Giré rápidamente y vi al viejo en el piso, con el brazo derecho cortado por completo, esa cosa le cortó un brazo. Usé mis rayos para tomar a Hurtson y separarlo de él y también tomé su espada en forma de anzuelo.

Lo llevé un poco lejos de ellos, todos ellos se reagruparon, ahora eran cuatro, pero fuertes.

—¡Hurtson! —su brazo fue cortado, se desangraba muy rápido y él hacía el intento de contener el dolor.

—S-Sigue sin mí, vete de aquí mientras puedas... —no se quería rendir, quería sacrificarse.

—No voy a dejarte, podemos... Puedo con ellos. Resiste, los eliminaré y buscaré ayuda —me dí la vuelta y encaré a los Demonios, tomé la espada del viejo, que a mi contacto, ésta se electrocutó rápidamente. Ahora era una espada eléctrica.

—¿Y bien? ¿Quién es el siguiente? —les pregunté seguro de que acabaría con ellos, pero temía que el viejo muriera aquí, sería una decepción personal.

—No serás fácil de eliminar, Humano —el líder se posicionó en su lugar, una energía tremenda apareció dentro de él y crecía rápidamente.

(Es muy fuerte, su energía es gigante)

—DISPARO MALDITO —disparó una esfera oscura pero rápidamente creé un escudo que me protegió a mí y a Hurtson.

Luego del impacto me lancé contra ellos, con un escudo en la mano y con la espada en la otra. Los Demonios me atacaban pero los retenía, el líder me golpeaba y sentía la misma fuerza que cuando luché contra Ares.

El líder destrozó mi escudo y me dio un fuerte puñetazo en mi abdomen haciéndome caer y soltar la espada, no podía concentrarme para irme lejos con mis rayos, la fuerza del líder era inmensa y me golpeó en el rostro. Sentí lo mismo que cuando Ares, era el infierno en un golpe que me mandó al suelo.

—DESTELLO DEL... —iba a teletransportarme pero el líder me pisoteó el pecho evitando que dijera algo, todos estaban viéndome, burlándose, regocijándose entre ellos.

—Ya no eres nada sin tus poderes. ¡Es nuestro! —me levantó con una sola mano y me lanzó contra un árbol, le disparé un rayo al líder pero no le hice nada, aumentaba mi poder y le seguía disparando pero seguía sin hacerle nada, hasta que llegó a mí y me golpeó de nuevo el abdomen dejándome sin aire, ya pedía la consciencia, no tenía aire para respirar y me seguía golpeando el rostro. Me alzó de nuevo y me lanzó a los Demonios, como una comida para gatos callejeros.

—Mátenlo.

—Nah, primero vamos a divertirnos —me levantaron dejándome de pie, electrocuté mi cuerpo en ese momento y les hice un fuerte daño a los tres que me sostenían, me levanté de nuevo y me dí vuelta para encarar al líder, pero el Demonio ya había llegado a mí y me apuñaló.

Vi mi zona abdominal, clavó sus uñas ahí, me salía sangre y el dolor agudo que sentí se incrementó en segundos a uno insoportable.

—Feliz viaje al Infierno —ríe maniáticamente, mis rayos reaccionaron y lo electrocutaron, lo mantuve pero después sentí fuertes dolores en mi espalda y algo afilado devorando mi cuello. Uno de los tres me mordió el cuello y me arrodillé por el dolor y por la intensidad que sentía en todos lados.

—¡Tom...!

Escuché el llamado de Hurtson pero era tarde, iba a morir aquí, intenté electrificar mi cuerpo otra vez pero no pude, estaba débil y no podía concentrarme y mis rayos tampoco para curarme, solamente me quedaba ahogarme a gritos y vomitar sangre.

El Demonio de atrás dejó de saborear mi sangre y me soltó dejándome caer en el suelo, veía el cielo azul que se hacía blanco, se me dificultaba respirar y sentía varios dolores en mi cuerpo y un dolor inmenso en mi cuello.

Lo siento, Jenissia...

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—¡No! ¡Hijos de perra!

Hurtson vio como su colega era masacrado por Demonios Puros, él no podía hacer nada, no tenía su brazo, estaba débil y poco a poco perdía la conciencia por tanta sangre que perdía.

—Se acabó, un Humano y un Ángel Caído... ¡Somos invencibles! —los Demonios Puros celebraban, pero lo que no sabían era que alguien inesperado llegaba al lugar.

Mientras ellos celebraban, alguien descendió del Cielo, llegó con sus alas blancas al lugar dejando atónitos a los Demonios Puros, era un nuevo rival para acabarlos, y mejor aún, era un Ángel. Los seres demoníacos lo vieron llegar, fue como ver un destello bajar de los cielos hasta ellos.

—Vaya... Parece que llegué tarde.

Dijo el Ángel, su cabello era castaño, largo y rizado hasta su cuello, con unos ojos color miel acompañado de una sonrisa encantadora aun así estando en problemas, las facciones de su rostro describían la belleza que podía portar un verdadero Ángel. Llevaba una armadura blanca con una capa blanca en su espalda.

—Oh, no, llegaste justo a tiempo, Ángel —le dijo el líder dando pasos al frente.

El Ángel miró a Hurtson casi muerto y a Tom, usó magia para analizarlos, Tom estaba vivo pero perdió mucha sangre y quedó inconsciente, estaba a punto de fallecer por la pérdida de sangre, sin embargo, había una especie de energía extraña curando su cuerpo lentamente y en ese momento el Ángel lo reconoció.

(Es el amigo de Jenissia... Gracias a Dios que está vivo) Adivinó en ese momento y curó desde donde estaba a ambos seres heridos gravemente, Tom era conocido ahora en el Cielo sin que él supiera. Miró a los Demonios Puros y se presentó inclinándose ante ellos como una persona noble con clase.

—Soy Santiago Delini, un Arcángel de Clase Baja, pero un Ángel de Clase Alta, enviado por el Rey Sebastián y honrado de poder derrotar a unos Demonios Puros en nombre de Dios.

Los Demonios Puros rieron a carcajadas por la presentación de parte del Ángel que sólo les molestó.

—¡Vaya, no esperamos una presentación así, pero de seguro valdrá la pena luchar contigo!

Santiago sacó una espada larga y estrecha de doble filo, similar a una espada de esgrima, larga y blanca, reluciente como su armadura, con una empuñadura blanquecina y un guardamanos dorado que llegaba hasta el pomo con forma de un león dorado, y les apuntó a los Demonios haciendo señal de que los esperaba.

Los Demonios Puros corrieron a él pero en instantes el Ángel recién ascendido a Arcángel eliminó a los Demonios Puros dejando solamente al líder que estaba muy asustado por la rapidez del Ángel al matar a sus amigos.

—¡¿Ah?!

—Para mí sí valió la pena venir, tengo muchas experiencias ahora. Aprecio tu soberbia, pero eso te dejó sin amigos, lamentablemente. En el nombre de Dios, te destierro adonde te arrepentirás por el resto de tu existencia, Demonio Puro.

—¡No, espera!

—ESPADA DE LUZ —el Ángel se movió hacia el líder con su espada, que ahora era más blanca que antes y más potenciada con magia; tan sólo lo tocó y el Demonio desapareció, espadas benditas y sagradas aniquilan a Demonios Puros.

El Ángel quizo celebrar pero se dirigió a Hurtson herido, estaba consciente y con su brazo ahora curado pero no regenerado.

—¿Está vivo? —eso fue lo primero que le preguntó Hurtson a Santiago al verlo de cerca, se refirió a Tom.

—Sí, es una bendición que lo esté. Siento llegar tarde —se disculpó por haber llegado tarde —, y tu brazo...

—No importa, tengo un plan para él —señaló su brazo —. Gracias.

Éste miró adonde estaban los Demonios Puros.

—Ahora se volvieron un caso importante, hay muchos ahí afuera y ya el Cielo se movilizó, no es tarde para que tu tierra y la mía trabajen juntos —Santiago le ofreció un apretón de manos y Hurtson lo aceptó con gusto.

En ese momento, se presenció la aparición de las tres Facciones, algo casi no ocurrido, y sólo fue en el Consejo Mundial donde se reunieron, pero sólo fue por ayuda y precaución, la amenaza demoníaca crece cada vez y ya Sebastián se moviliza. ¿La predicción de Hurtson se hará realidad?

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Oigan, con lo de las apuestas de ayer lo siento mucho por ustedes... ¡Ya que ninguno ganó! Bueno, justamente ganaron los Demonios Puros, ¡pero llegó un Arcángel y los eliminó como si nada!

Fue algo muy intenso, pareció fácil pero desde mi perspectiva fue algo difícil, hasta Hurtson perdió un brazo y tuvo que auxiliarlos un Arcángel hermoso llamado Santiago, denle cariño del bueno por ser un salvador.