— Hobi, ¿está todo bien? — Preguntaba Jungkook mientras recobraba un poco el aliento perdido mientras bailaba y grababan su video. — Se veía todo muy sencillo cuando hiciste la demostración, creo que te descontaré de tu pago por daños ocasionados a tu jefe. — Los dos rieron en el suelo recibiendo las botellas de agua que el personal les estaba entregando.

— Sí, definitivamente no es lo mismo observar un baile o simples movimientos que tener que hacerlo por ti mismo. Sin embargo, lo has hecho bien, me sorprendiste desde los ensayos, se te da el baile tanto como el canto. ¿Por qué te dedicaste a los negocios?

— La verdad es que cuando niño y adolescente llegué a pensar en dedicarme al baile y no el canto, no consideré que se me diera muy bien la verdad. Un amigo me dijo siempre que cantaba bien y me animó para intentar algo en el pasado, pero viendo la carga de trabajo de mi padre y hermano decidí que sería mejor dedicarme a los negocios. No odio mi trabajo, todo lo contrario, terminó gustándome más de lo esperado.

— ¿No te gustaría dedicarte también a esto? No lo sé, parece que lo disfrutas mucho. — Hoseok observó al pelinegro levantarse con una toalla que secaba el sudar para buscar otras dos más secas, entregándole una a él. — Gracias.

— Prefiero que permanezca como un pasatiempo, algo que hago para desahogarme, liberarme y relajarme sin que se convierta en un trabajo. — Volviendo a sentarse al lado del pelirrojo, Jungkook se roció un poco de agua en la cabeza, salpicando sin querer al contrario. — Uy, disculpa. — El mayor rio negando, asegurándole con sus gestos que todo estaba bien. — Por el agua y por lo de aquella noche. — La confusión bañó el rostro de Hoseok dado que no creía que existiera algo por lo cual Jungkook tuviese que disculparse con él; ver su leve sonrojo ayudó a recordar. — No fue prudente de nuestra parte sabiendo que estabas presente.

— Ah, tranquilo, no te preocupes por eso que no es la primera vez. Siendo amigo de Tae yo... — Repentinamente, Hoseok se mordió ambos labios sintiendo que su frase debió omitirse. Hablar todos esos días con Jungkook de una manera tan relajada le hizo olvidar que él no era Taehyung. — Lo siento, de verdad no quise...

— Ey, no tranquilo, sería ciego o demasiado ingenuo si no tuviese en cuenta que Taehyung al igual que yo, tiene un pasado. Todos hemos hecho muchas cosas locas cuando jóvenes, algunos ya las hace de grandes porque no tuvieron oportunidad. Él y yo ni siquiera somos novios, así que no debo molestarme por algo así. Mientras mantenga el acuerdo que hicimos, me respete y no juegue conmigo creo que no tendremos problemas. Aunque existan cosas que no me guste, su esposo es mi padre, no yo.

— Cierto, el acuerdo. — Hoseok lo miró con una sonrisa y cierto pesar escondido.

Su mejor amigo era Taehyung, siempre lo protegería y cubriría, pero interactuar tanto con alguien y notar que no era un hijo de puta cualquiera le hacía difícil escucharlo hablar y esperar algo que Taehyung no le daría. No sabía durante cuánto tiempo su amigo estaría entusiasmado con él, pero exclusivo no era. Tal y como iban las cosas, podrían hacerse mucho daño. Asintiendo, Hobi bajó la mirada mientras jugaba con su toalla. Jungkook por un momento frunció el ceño por su inesperado cambio de semblante, no sabía si se debía al agotamiento físico o a su conversación, mas los murmullos captaron su atención. Sin poderlo evitar, en su cara una amplia sonrisa apareció al ver a Jaehyun llegar con su manager. Le entregó la nueva botella de agua que no abrió a Hoseok para que bebiera y palmeó su hombro.

— Descansa, tendremos quince minutos más para recargar energía y luego lo retomaremos a partir del penúltimo bloque de la coreografía. — Hoseok asintió con calma, el teléfono junto a él había comenzado a vibrar. — ¡Jae! — Exclamó con su sonrisa, chocando sus manos para luego abrazarse. — No pensé que lo lograrías, la verdad.

— Te dije que no me perdería por nada del mundo un momento como este, la primera vez que te tomas en serio tu lado artístico. — Él también estaba alegre admirando todo el lugar, saludó con un movimiento de manos a quienes lo miraron para terminar centrando su vista en el pelinegro frente a él. — Además, sabes que me urgía hablar contigo con respecto a las actividades de China. En Japón no hay problema, pero debido a los conflictos políticos entre Corea del Sur y China, estoy obligado a estar bajo una compañía nacional en otro territorio.

— Acompáñame a un sitio más tranquilo. — Inquirió acomodando la toalla en su cuello, sintiéndose inquieto con la presencia del contrario y sin poder evitar que sus pupilas lo recorrieran o miraran más de la cuenta.

Por supuesto, solo lo estaba observando, pero con muchos recuerdos y una nostalgia arremolinada en su pecho. Él ahora estaba en algo sin nombre con Taehyung y no podía negar el hecho de que se sentía bastante bien fuera de momentos en donde lo tenía que observar con su papá o en las noches cuando estaba solo y un poco de culpa lo atormentaba. Tal vez no era lo más correcto, no obstante quería darle una oportunidad real y ver qué tan lejos iba con Taehyung.

Si aceptaría ser eternamente su amante no era algo de lo que estaba muy seguro, se conocía, en algún momento iba a quererlo solo para él más allá de la exclusividad que tenían ahora porque todavía lo compartía con su padre. No obstante, para esto ambos todavía debían transitar por un camino, no quería apresurarse con alguien como Taehyung, además, la familia también estaba de por medio.

— Ahora mismo no puedo darte una respuesta, Jaehyun, tendría que mirar nuevamente los términos de nuestro contrato, sin embargo no creo que haya ningún problema siempre que se mantenga en claro temas obvios. Las regalías, prioridades de agenda, la empresa con la que estarás trabajando, acuerdos políticos y demás, ya sabes cómo funciona todo. Yo no te extraeré todo el zumo y lo sabes, seré condescendiente contigo, pero hay cosas que no dependen exclusivamente de mí.

— Lo sé, pero quería hablar de esto personalmente contigo, no me esperaba que estuvieses filmando. De hecho, si no me hubieses mandado las fotos y videos no te hubiera creído. Debiste contármelo antes así yo hubiese postergado o adelantado mi vuelo.

— ¿Cuánto tiempo estarás por Corea?

— ¿Es en serio? — Jungkook ensanchó los ojos y el otro pelinegro no pudo evitar reírse. — Jungie, debo estar aquí para el festival de Chuseok, además de que estaré sacando mi próximo álbum y tendré que hacer varias promociones aquí. Posiblemente esté unos cuatro meses, hasta enero que se acaben todas las premiaciones y eventos. Aprovecharé este tiempo para consolidar todos mis pendientes aquí, espero que para el nuevo año ya todos los acuerdos o permisos estén arreglados y yo pueda comenzar a promocionar en China también.

— ¿Con qué empresa estarás trabajando?

— A que no adivinas. — Habló sacando su teléfono para mostrarle una foto.

— ¿Firmarás con Sicheng? — Jaehyun asintió y Jungkook rio un poco más tranquilo. — Bueno si firmas con WinWin Entertainment no tendremos muchos problemas para los acuerdos o al menos eso espero. Si no te tratan bien ya se las verán conmigo.

— Tú siempre igual. — Sí, ese era Jeon Jungkook. Frotando sus muslos para dejar de observarlo y pensar en sin sentidos, se levantó de su asiento para caminar hacia los monitores. — Esa coreografía del coro me gusta, es pegajosa y fácil de hacer.

— ¿Quieres intentarlo?

— ¿Me estás ofreciendo un cameo en tu video? — Preguntó entre divertido e incrédulo Jaehyun.

— ¿Por qué no? Espera aquí... — Comentó girándose hasta encontrar al hombre de roja cabellera. — ¡Hobi! ¿Podrías venir un momento? — Lo llamó notando la forma en que Jaehyun lo observaba.

— Ah, es el mejor amigo de tu padrastro, ¿no?

— Es actualmente de los mejores, para no decir que el mejor coreógrafo de nuestra compañía. Es un excelente bailarín y con él aprenderás en dos segundos lo que necesitas.

Jaehyun asintió dándole una sonrisa a Hoseok, este también sonreía gracias a todos los halagos que Jungkook le había dado indirectamente. Que hablara así de su trabajo cuando no tenía toda la experiencia que tenía otros profesionales que se mantuvieron todos esos años activos dentro de grandes compañías, lo hizo sentir muy bien. Jungkook los observó alejarse, hablando con el director del video para ver cómo podrían agregar a Jaehyun como un cameo justo segundos antes de que empezara el coro para que se uniera a la coreografía con él.

Me, Patron and you...

Al ritmo de la música, con la falsa lluvia que caía sobre ellos Jaehyun se acercaba para brindar con Jungkook junto a un automóvil en el cual la protagonista del video aguardaba en su interior. Risas, complicidad, luces y baile llenaban el lugar cuando Kim Taehyung llegó junto a Taeil, su manager. Desde la posición en la que controlaba el baile, fue Hoseok quien primero advirtió a su mejor amigo. Este observaba todo con las manos en los bolsillos de su pantalón sin comprender muy bien la necesidad de que Jaehyun apareciera en el video cuando jamás se discutió su presencia.

Tal vez fue el peso de su mirada, la energía que expulsaba o la falta de comando del coreógrafo lo que logró que Jungkook elevara su cabeza y mirara a su alrededor tras el sonido de corte. Se estaba riendo, su mano pasaba por encima de los hombros de Jaehyun mientras este exponía a la cámara gran parte de su pecho y abdominales, ambos con dos botellas de Patron brindando.

El pelinegro no esperaba a Taehyung ahí, pero otra vez su rostro se iluminó, incluso más de lo que ya estaba si es que eso era posible. Trotando, Jungkook se dirigió hasta Taehyung, agitando su cabeza para sacudir un poco el agua que chorreaba de su cabello.

— Esto sí que es una sorpresa, no sabía que vendrías hoy. — Mencionó Jungkook apretando ligeramente su hombro para guiarlo hacia el camerino ambulante en el cual estuvo hablando con Jaehyun momento atrás. Asegurándose de que no los hubiese seguido nadie, se acercó a él para besar unos labios que no le correspondieron el beso y solo se quedaron tranquilos hasta que Jungkook por su cuenta se separó. — ¿Qué sucede?

— Nada, solamente que es gracioso el hecho de que te sorprenda y alegres de verme aquí cuando ni siquiera me facilitaste la ubicación de donde estarían grabando. Llamé a Somi, pero ella tampoco pudo darme la información. Soy parte del proyecto, supuestamente soy el protagonista de tu video, pero fui el único que no recibió la información. Incluso tu antiguo prometido está aquí. — Ladeando la cabeza por un momento y sin mirar a un lugar en específico Jungkook procesó sus palabras, sintiendo como lentamente unos ganchos invisibles tiraban de sus comisuras.

— Ah, Jaehyun... Él vino para conversar algunos asuntos de trabajo y lo invité para que hiciera un cameo porque sé que siempre quiso esto. Es uno de los artistas con más prestigio de mi compañía y Corea del Sur a nivel internacional junto con Jimin. Es algo bueno para mí e incluso para él que aparezca en mi video. Si no se te invitó a esta grabación fue porque hoy tenías programada varias cosas y, siguiendo tus propias peticiones, grabamos las escenas en donde no participarás. — Taehyung le dio una mirada casi por encima de su hombro y luego bufo con una sonrisa ladina. — ¿Qué?

— Un bailarín más supongo que estaría bien. Quizás yo no seré tan famoso como él, pero también es buena mi participación y, como salgo en otras escenas, no es nada extraño que me les una para bailar, ¿cierto? — Jungkook lo contempló durante algunos segundos. — Me conozco toda la coreografía, he estado ensayando con ustedes desde el comienzo.

— ¿Tenemos claro que esto no es un juego, sino mi trabajo? — El pelinegro lo observó calmado, buscando todo indicio de que el contrario realmente bailaría.

— Soy tan profesional como tú u otros, Jungkook.

Jaehyun se acercaba al lugar junto a Hoseok, el peligris que estaba de frente a la puerta pudo verlos, así que caminó hasta tomar al menor de su mentón para besarlo, caminando un poco más hasta pegarlo contra una pequeña mesa. Sus lenguas se enredaron con prisa pasional, las manos de su hijastro tiraban de su cabello, las suyas continuaban aferradas a la mandíbula y ahora también cadera de Jungkook. Había deseo, añoranza, celos y hambre en ese beso que quedó inconcluso cuando el pelirrojo carraspeó su garganta.

Sintiéndose increíblemente incómodo, como si todavía estuviera haciendo algo incorrecto, Jungkook procuró distanciarse de un peligris que se rehusaba a liberarlo, colocando ambas manos contra la mesa para atraparlo en su lugar. Jaehyun también sintió una ligera punzada de incomodidad porque ese momento le recordaba aquella noche en que los vio besarse y masturbarse en un evento en el que para él, se estaba reconciliando con su prometido y pareja de años.

Ya había superado la rabia y el dolor inicial, alejarse de todos ellos fue una buena opción, sabía que continuaban juntos porque simplemente conocía a Jungkook y cuando volvieron a hablar, su expareja simplemente le confesó todo en busca de un consejo. El propio Jaehyun le sugirió que siguiera a su corazón, que se terminara de dar una oportunidad de una vez por todas con Taehyung, pero seguía siendo incómodo observarlos a pesar de que creyó que nada ocurriría.

— Deberíamos retomar las grabaciones, lo que queda con los bailarines es muy poco y sería injusto e innecesario que se quedaran muchas más horas en el set. — Hoseok rompió con cautela aquel silencio, notando esa afilada tensión percibida en el lugar.

— Hola, Jaehyun, un gusto verte nuevamente. — Saludó Taehyung en una obvia provocación causante de que Hoseok sin más cerrara los ojos y se diera la vuelta porque simplemente no quería contemplar esa escena. — ¿Regresando a Corea después de todos los acontecimientos? ¿Te encuentras bien?

— Si te refieres a los últimos premios ganados, los proyectos que he realizado y todo lo que tiene que ver con mi vida profesional, entonces sí. Ahora, si tu preocupación es debido a la ruptura de mi relación, también me encuentro en perfecto estado. Nada mejor que terminar las cosas que no van para ningún lado. Eso es algo que yo tengo, sé cuando debo dar un paso atrás e irme de los sitios a los que no me apetece volver si todo continúa igual. De ser así, no me marcharía, para comenzar. Así que gracias por tu preocupación, me alegra saber que también estás de maravilla, muy bien por ti. — Sus palabras salieron sin esperar a que Taehyung comenzara a presionar teclas mucho más incómodas.

— Bueno, no es momento de ponernos al día, así que regresemos a trabajar. Ya escucharon a Hobi, los bailarines deben terminar todo ya. Con la participación de los dos en las últimas tomas culmina el cameo de Jae y nos quedaría solo las últimas filmaciones de la próxima semana.

— Yo me estaré adelantando. — Asintió Jaehyun ignorando la fija mirada de Taehyung.

— ¿Qué fue eso, Taehyung? ¿Había alguna necesidad? — Habló Jungkook cuando estuvieron finalmente solos.

— ¿De qué hablas? ¿Yo qué hice?

— Estabas provocando innecesariamente a Jaehyun y pese a la historia que tenemos, a todo lo que una vez nos unió, nosotros solamente somos amigos. Ni siquiera hablamos o nos vemos todos los días, no merece este tipo de tonterías infantiles. — Separándose finalmente de los brazos de Taehyung, el menor suspiró.

— Yo no dije o hice nada, no hay necesidad de que estés tomando partido o defendiendo a tu ex cuando nada ocurrió.

— ¿Tomar partido por quién? Aquí no hay bandos, esto no es una guerra. Jaehyun y yo terminamos, ahora estoy contigo y los dos tienen una importancia en mi vida. No tengo que tomar partido por ninguno porque son hombres mayores libres para defenderse sin intermediarios. Además, deja esa innecesaria escena de celos, aquí el que tiene esposo eres tú, no yo. Si alguien debería estar sintiendo celos porque sabe con certeza que estás follando con alguien más soy yo y no lo hago, así que no hay necesidad de todo esto cuando sabes perfectamente que entre él y yo ya no hay nada.

— Haber terminado una relación no significa que haya nada, Jungkook. Él está soltero nuevamente y de regreso a Corea del Sur por lo que veo, tú de igual forma estás soltero y solo había que ver la forma en la cual ustedes dos se estaban mirando cuando yo llegué. Únicamente te digo una cosa, si vas a enredarte con tu expareja será mejor que me lo digas ahora porque tú y yo tenemos un acuerdo donde ya tú sabías que yo continuaría con mi esposo.

— Tae... — Jungkook suspiraba mientras se acercaba a él para acariciar sus manos. — Tengo claro el acuerdo que hicimos, te dije que estoy exclusivamente contigo. No le mentí a Jaehyun cuando íbamos a casarnos y no te mentiré a ti, si llegase a interesarme alguien más, te lo haré saber. Ahora, mientras esté contigo, estaré únicamente contigo.

— Me imagino que eso mismo solías decirle a Jaehyun. — Cerrando su boca y dándole una mirada que poco tenía de agradable, Jungkook soltó sus manos.

— Cuando nos conocimos, yo estaba completamente soltero, ni siquiera follaba con alguien regularmente y Jaehyun estaba lejos de este continente. El día que tú y yo follamos en aquel bar, el propio Jaehyun había puesto en pausa nuestra relación para que yo resolviera mis cosas contigo. En el evento, si bien tenía pensado regresar con él, todavía no lo habíamos hecho. Sí, puedo tener culpa de que mi mente haya pensado en ti en más de una ocasión cuando no debería, pero jamás le falté físicamente a mi pareja cuando estaba con ella. Si te estoy diciendo que soy exclusivo tuyo es porque así es. Ahora, yo tengo un video que grabar, tengo trabajo por hacer así que si quieres unirte eres bienvenido y si no, nos veremos después.

Dándose la vuelta el pelinegro se alejó molesto del camerino dejando a un Taehyung de mandíbula tensada atrás. El peligris estaba molesto, pero él no se iría dejando el ambiente de esa manera para que Jaehyun llegase a hacerse el amigo ejemplar y tranquilizara a Jungkook. Él era profesional y mucho más inteligente que eso, ni siquiera sabía por qué abrió su boca dejando que sus pensamientos ganaran. Estaba cometiendo demasiados errores y eso no podía continuar de esa forma. Kim Taehyung debía recomponerse.

Se encontraba listo para salir cuando su teléfono sonó, para su mala suerte recordó una vez que escuchó la voz de su expareja que había quedado con él para comer y beber algo. Sin dar explicaciones y con escuetas palabras se disculpó por cancelar el encuentro y terminó aquella llamada con Johnny que no tenía que haber ocurrido en primer lugar. Colocando un pie en el exterior, el móvil de Taehyung volvió a sonar, mas esta vez permaneció mirando la pantalla en silencio, era la tercera vez en esa semana que veía ese número.

— ¡Taehyung! — El grito de Hoseok a varios metros suyos fue lo que sacó al aludido del trance. — Apresúrate, por favor y pasa por las estilistas que te están esperando.

— Ya voy, ya voy... — Agitó una mano para que se fuera y con la otra apagó por completo su teléfono. ¿Por qué después de tanto tiempo lo estaba llamando?

Hola, hola... ¿Ya lloraron con el primer día de PTD on Stage in LA? Vienes más... Espero queles haya gustado el capítulo.

LORED